tag:blogger.com,1999:blog-65860155643519800622024-03-13T07:04:23.563-03:00Santa María Destello CelestialDel Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.comBlogger1007125tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-40232809927309572602023-12-12T11:52:00.002-03:002023-12-12T12:38:31.391-03:0012 de diciembre: Nuestra Señora de Guadalupe<div class="separator"><p style="margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-align: center;"> <img height="35" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/titulo_pagina2.png" style="color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: center;" width="428" /></p></div><p style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: center;"><img border="0" height="373" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/titulo_pagina8.png" width="409" /></p><p class="virgen" style="background-color: white; color: #24486c; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 14px; font-style: italic; font-weight: bold; text-align: center;">recopilado por SCTJM<br /></p><p align="justify" style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif;"><strong><span class="ti" face="Verdana, Geneva, sans-serif" style="color: #003300; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; text-transform: capitalize;">Historicidad</span></strong></p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;"><span class="parr">La Virgen Santísima se apareció en el Tepeyac, México, a Juan Diego el martes <b>12 de diciembre de 15<span lang="en-us" xml:lang="en-us">3</span>1</b>, apenas diez años después de la conquista de México. La madre de Dios viene para dar a conocer el evangelio a sus hijos nativos del nuevo continente y para "mostrar y dar" todo su "amor y compasión, auxilio y defensa, pues yo soy vuestra piadosa madre".</span></p><p align="justify" style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif;"><span class="parr" style="color: #483324; font-weight: bold;">Como prueba de su visita la Virgen milagrosamente hizo que en aquel lugar aparecieran preciosas rosas de Castilla y que su imagen se quedara permanentemente en la tilma de su siervo. </span></p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;"><span style="font-family: Arial;"><span style="color: #004040;"> </span></span>Durante cuatro días la Virgen se había comunicado con Juan Diego hablándole en su propia lengua, el náhualtl. Al identificarse, María usó la palabra "coatlallope"; un sustantivo compuesto formado por "coatl" o sea, serpiente, la preposición "a" y "llope", aplastar; es decir, se definió como <span class="virgen" style="color: #24486c; font-style: italic; text-align: center;">"la que aplasta la serpiente". </span>Otros reconstruyen el nombre como "Tlecuauhtlapcupeuh" que significa: "La que precede de la región de la luz como el Aguila de fuego". De todas formas el vocablo náhualtl sonó a los oídos de los frailes españoles como el extremeño "Guadalupe", relacionando el prodigio del Tepeyac con la muy querida advocación que los conquistadores conocían y veneraban en la Basílica construida por Alfonso XI en 1340. En España existían dos advocaciones a la Virgen de Guadalupe, en Cáceres y en La Gomera. Sin embargo la Guadalupe Mexicana es original. ¡La Virgen se comunicó de manera que la entendiesen tanto los indios como los españoles!.</p><p align="justify" style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif;"><span class="parr" style="color: #483324; font-weight: bold;">La Virgen de Guadalupe dio al indio Juan Diego un delicado <b>trato de nobleza elevando proféticamente la condición de todo su pueblo</b>. El Señor "derriba del trono a los poderosos y enaltece a los humildes". Al mismo tiempo, <b>La Virgen trajo reconciliación</b> y no división entre los nativos y los españoles. Les ayudó a ambos a comprender que la fe cristiana no es propiedad de nadie sino un don de amor para todos. La Virgen pide a Juan Diego que vaya al obispo. El obispo de México era<b> Fray Juan De Zumárraga</b>, franciscano. De esta manera la Virgen enseña que se debe someter a la autoridad legítima que Jesús estableció en la Iglesia.</span></p><p align="justify" style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif;"><span class="parr" style="color: #483324; font-weight: bold;">Cuatrocientos años debieron pasar para que la cultura occidental reconociera admirada que la imagen impresa sobre el ayate indígena era un verdadero códice mexicano, un mensaje del cielo cargado de símbolos. Helen Behrens, una antropóloga norteamericana descubrió en 1945 lo que los ojos de los indios habían "leído" en la pintura de la "Madre del verdadero Dios por quien se vive" aquel diciembre de 1531.</span></p><p align="justify" style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif;"><b><span class="ti" face="Verdana, Geneva, sans-serif" style="color: #003300; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; text-transform: capitalize;">La Virgen De Guadalupe Propicia La Evangelización Del Continente</span></b></p><p align="justify" style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif;"><span class="parr" style="color: #483324; font-weight: bold;">Los misioneros tenían poco éxito a pesar de su intensa labor, en gran parte por el mal ejemplo de muchos que llamándose cristianos, abusaban de ellos. Pero la Virgen de Guadalupe se presenta como mujer nativa y les enseñó que el regalo de la fe es para todos sin distinción. La imagen de la tilma es toda una catequesis (ver abajo). Resultado: <b>En los 7 años después de las apariciones 8 millones de nativos se convirtieron a la fe católica.</b> Esto representa un promedio de 3000 conversiones diarias. Si recordamos que por la predicación de San Pedro el día de Pentecostés se convirtieron 3000 hombres, podemos apreciar que la Virgen inició un verdadero Pentecostés que duró 7 años.</span></p><p align="justify" style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif;"><span class="parr" style="color: #483324; font-weight: bold;">La Virgen de Guadalupe continúa guiándonos a Jesús. Los milagros obtenidos por la Virgen son tan extraordinarios que no se puede menos que exclamar: "El poder divino está aquí". Dios Todopoderoso se complace en derramar sus dones por medio de aquella a quien El escogió para ser su madre.</span></p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;">El Santuario, Tepeyac El Tepeyac es el santuario mariano mas visitado del mundo, superando en visitas a Lourdes y Fátima. Cada año 20 millones de fieles se acercan a la venerada imagen para expresar a la Madre del Cielo el testimonio de su cariño y veneración. El día de la fiesta, el doce de diciembre, se calcula que casi tres millones de personas acuden al santuario. En la actualidad la imagen milagrosa está en la nueva basílica construida junto a la antigua que se ha hundido notablemente. Los fieles pueden contemplar el cuadro desde una estera móvil que a sus pies se desliza para movilizar a los fieles y dar cabida a las multitudes que desean venerarla. Como en todo santuario mariano, la basílica de Guadalupe cuenta con una capilla del Santísimo donde los fieles constantemente adoran al Señor. La Basílica nueva tiene forma redonda que simboliza la tienda que albergaba el Arca de la Alianza en su marcha por el desierto; las lámparas interiores que cuelgan del techo recuerdan la nube que guiaba al pueblo de Dios día a día y la refulgente pared de oro que sostiene el cuadro, representa la columna de fuego y luz que indicaba el camino durante la noche.</p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;">Durante el proceso de estudio para para canonización de Juan Diego se estableció una comisión para estudiar su historicidad. El padre Fidel González fue asistido en esta labor por Eduardo Chávez Sánchez y José Luis Guerrero Rosado (Cf. «El encuentro de la Virgen de Guadalupe y Juan Diego», Editorial Porrúa, México 1999, 564 pp.). Presentaron 27 documentos o testimonios indígenas guadalupanos y 8 de procedencia mixta indo-española. Entre todos ellos, destaca el «El Nican Mopohua» y el llamado Códice «Escalada». No se pueden explicar con elementos históricos algunos aspectos decisivos de la historia de México sin tener en cuenta el milagro de Guadalupe. Como, por ejemplo, el que, después una conquista dramática y tras dolorosas divisiones y contraposiciones en el seno del mundo político nahuatl, en un lugar significativo para el mundo indígena, en el cerro del Tepeyac, se levantara en seguida una ermita dedicada a la Virgen María bajo el nombre de Guadalupe. No explican tampoco cómo Guadalupe se convirtió en señal de una nueva historia religiosa y de encuentro entre dos mundos hasta ese momento en dramática contraposición. .... Existen otras muchas pruebas históricas sobre la existencia de Juan Diego, como, por ejemplo, la tradición oral, fuente decisiva al estudiar a los pueblos mexicanos, cuya cultura era principalmente oral. Esta tradición, en esos casos suele obedecer a cánones bien precisos y, en el caso de Guadalupe, siempre confirma la figura histórica y espiritual de Juan Diego. Quien quiera profundizar en el aspecto histórico del vidente de Guadalupe, puede leer a continuación el artículo inédito escrito por una de las personalidades más competentes en la materia, Fidel González, presidente de la Comisión histórica sobre Juan Diego constituida por la Santa Sede.</p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;"> </p><p align="justify" class="dorad" style="background-color: white; color: #24486c; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: center; text-decoration-line: underline;">APARICIONES DE LA VIRGEN A JUAN DIEGO</p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;"><img align="right" border="0" height="202" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/imagesCAG6N1WQ.jpg" vspace="8" width="209" /></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><img alt="" border="0" height="56" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/rosa_rrrr.gif" width="59" />PRIMERA APARICIÓN</p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">6.- Era Sábado, Muy De Madrugada, Lo Movía Su Interés Por Dios [Respondiendo A] Su Insistente Llamada.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">7.- Y Cuando Vino A Llegar Al Costado Del Cerrito, En El Sitio Llamado Tepeyac, Despuntaba Ya El Alba.</span></p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;">8.- Oyó claramente sobre el cerrito cantar, como cantan diversos pájaros preciosos. Al interrumpir su gorjeo, como que les coreaba el cerro, sobremanera suave, agradabilísimo, su trino sobrepujaba al del coyoltótotl y del tzinitzcan y al de otras preciosas aves canoras.</p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;">9.- Se detuvo a ver Juan Diego. Se dijo: ¿Por ventura es mi mérito, mi merecimiento lo que ahora oigo? ¿Quizá solamente estoy soñando? ¿Acaso estoy dormido y sólo me lo estoy imaginando?</p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;">10.- ¿Dónde estoy? ¿Dónde me veo? ¿Acaso ya en el sitio del que siempre nos hablaron los ancianos, nuestros antepasados, todos nuestros abuelos: en su tierra florida, en su tierra de nuestro sustento, en su patria celestial?</p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;">11.- Tenía fija la mirada en la cumbre del cerrito, hacia el rumbo por donde sale el sol, porque desde allí algo hacía prorrumpir el maravilloso canto celestial.</p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;">12.- Y tan pronto como cesó el canto, cuando todo quedó en calma, entonces oye que lo llaman de arriba del cerrito, le convocan: <span class="virgen" style="color: #24486c; font-style: italic; text-align: center;">"Mi Juanito, mi Juan Dieguito".</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">13.- En Seguida, Pero Al Momento, Se Animó A Ir Allá A Donde Era Llamado. En Su Corazón No Se Agitaba Turbación Alguna, Ni En Modo Alguno Nada Lo Perturbaba, Antes Se Sentía Muy Feliz, Rebosante De Dicha. Fue Pues A</span> <span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">Subir Al Montecito, Fue A Ver De Dónde Era Llamado.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">14.- Y Al Llegar A La Cumbre Del Cerrito, Tuvo La Dicha De Ver A Una Doncella, Que Por Amor A Él Estaba Allí De Pie, 15.- La Cual Tuvo La Delicadeza De Invitarlo A Que Viniera 'Juntito' A Ella. 16.- Y Cuando Llegó A Su Adorable Presencia, Mucho Se Sorprendió Por La Manera Que, Sobre Toda Ponderación, Destacaba Su Maravillosa Majestad: 17.- Sus Vestiduras Resplandecían Como El Sol, Como Que Reverberaban, 18.- Y La Piedra, El Risco En Que Estaba De Pie, Como Que Lanzaba Flechas De Luz; 19.- Su Excelsa Aureola Semejaba Al Jade Más Precioso, A Una Joya, 20.- La Tierra Como Que Bullía De Resplandores, Cual El Arco Iris En La Niebla. 21.- Y Los Mezquites Y Nopales, Y Las Otras Varias Yerbezuelas Que Ahí Se Dan, Parecían Esmeraldas. Cual La Más Fina Turquesa Su Follaje, Y Sus Troncos, Espinas Y Ahuates Deslumbraban Como El Oro. 22.- </span><span class="caafe" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324; font-style: italic; font-weight: bolder;">Ante Su Presencia Se Postró. Escuchó Su Venerable Aliento, Su Amada Palabra, Infinitamente Grata, Aunque Al Mismo Tiempo Majestuosa, Fascinante, Como De Un Amor Que Del Todo Se Entrega</span><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">23.- Se Dignó Decirle: <<</span><span class="virgen" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #24486c; font-style: italic; text-align: center;">-Escucha Bien, Hijito Mío El Más Pequeño, Mi Juanito: ¿A Dónde Te Diriges?</span><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">>> 24.- Y Él Le Contestó: <<-</span><span class="caafe" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324; font-style: italic; font-weight: bolder;">Mi Señora, Mi Reina, Mi Muchachita, Allá Llegaré A Tu Casita De México Tlatelolco. Voy En Pos De Las Cosas De Dios Que Se Dignan Darnos, Enseñarnos, Quienes Son Imágenes Del Señor, Nuestro Dueño, Nuestros Sacerdotes</span><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">>>.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">25.- Actocontinuo Con Él Dialoga, Le Hace El Favor De Descubrirle Su Preciosa Y Santa Voluntad, 26.- Le Comunica: <<-</span><span class="virgen" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #24486c; font-style: italic; text-align: center;">Ten La Bondad De Enterarte, Por Favor Pon En Tu Corazón, Hijito Mío El Más Amado, Que Yo Soy La Per<span class="parr" style="color: #483324; font-style: normal; text-align: justify;"><img align="left" border="0" height="263" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/imagesCAO7BCAJ.jpg" vspace="8" width="191" /></span>Fecta Siempre Virgen Santa María, Y Tengo El Privilegio De Ser Madre Del Verdaderísimo Dios, De Ipalnemohuani, (Aquel Por Quien Se Vive), De Teyocoyani (Del Creador De Las Personas), De Tloque Nahuaque (Del Dueño Del Estar Junto A Todo Y Del Abarcarlo Todo), De Ilhuicahua Tlaltipaque (Del Señor Del Cielo Y De La Tierra). Mucho Quiero, Ardo En Deseos De Que Aquí Tengan La Bondad De Construirme Mi Templecito, 27.- Para Allí Mostrárselo A Ustedes, Engrandecerlo, 28.- Entregárselo A Él, A Él Que Es Todo Mi Amor, A Él Que Es Mi Mirada Compasiva, A Él Que Es Mi Auxilio, A Él Que Es Mi Salvación. 29.- Porque En Verdad Yo Me Honro En Ser Madre Compasiva De Todos Ustedes, 30.- Tuya Y De Todas Las Gentes Que Aquí En Esta Tierra Están En Uno, 31.- Y De Los Demás Variados Linajes De Hombres, Mis Amadores, Los Que A Mí Clamen, Los Que Me Busquen, Los Que Me Honren Confiando En Mi Intercesión. 32.- Porque Allí Estaré Siempre Dispuesta A Escuchar Su Llanto, Su Tristeza, Para Purificar, Para Curar Todas Sus Diferentes Miserias, Sus Penas, Sus Dolores.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="virgen" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #24486c; font-style: italic; text-align: center;">33.- Y Para Realizar Con Toda Certeza Lo Que Pretende Él, Mi Mirada Misericordiosa, Ojalá Aceptes Ir A Al Palacio Del Obispo De México, Y Le Narres Cómo Nada Menos Que Yo Te Envío De Embajador Para Que Le Manifiestes Cuan Grande Y Ardiente Deseo Tengo De Que Aquí Me Provea De Una Casa, De Que Me Levante En El Llano Mi Templo. Absolutamente Todo, Con Todos Sus Detalles, Le Contarás: Cuanto Has Visto Y Admirado, Y Lo Que Has Oído. 34.- Y Quédate Seguro De Que Mucho Te Lo Voy A Agradecer Y A Pagártelo, 35.- Pues Te Enriqueceré, Te Glorificaré, 36.- Y Mucho Merecerás Con Esto Que Yo Recompense Tu Cansancio, Tu Molestia De Ir A Ejecutar La Embajada Que Te Confiero.37.- Ya Has Oído, Hijo Mío El Más Amado, Mi Aliento, Mi Palabra: ¡Ojalá Aceptes Ir Y Tengas La Bondad De Poner Todo Tu Esfuerzo!>></span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;"><span class="ti" face="Verdana, Geneva, sans-serif" style="color: #003300; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal;">ENTREVISTA CON ZUMARRAGA</span></span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">38.- E Inmediatamente En Su Presencia Se Postró, Respetuosamente Le Dijo: <</span><span class="caafe" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324; font-style: italic; font-weight: bolder;"><-Señora Mía, Mi Niña, Por Supuesto Que Ya Voy Para Poner Por Obra Tu Venerable Aliento, Tu Amada Palabra. Por Ahora De Ti Me Despido, Yo, Tu Humilde Servidor</span><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">.>></span><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;"><img align="right" border="0" height="267" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/zumarraga.png" vspace="8" width="188" /></span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">39.- En Seguida Bajó Para Ir A Poner Por Obra Su Encargo: Vino A Tomar La Calzada Que Viene Derecho A México. 40.- Y Cuando Hubo Llegado Al Interior De La Ciudad, De Inmediato Y Directo Se Fue Al Palacio Del Obispo Que Muy Recientemente Había Llegado De Jefe De Sacerdotes, Cuyo Reverendo Nombre Era D. Fray Juan De Zumárraga, Sacerdote De San Francisco. </span><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">41.- Y Al Llegar, De Inmediato Hace El Intento De Verlo, Rogando A Sus Servidores, Sus Domésticos, Que Vayan A Anunciarlo. 42.- Al Cabo De Una Espera Un Tanto Excesiva, Vienen A Llamarlo Cuando El Señor Obispo Tuvo A Bien Convocarlo Para Que Pasara.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">43.- Y En Cuanto Entró, En Seguida En Su Presencia Se Arrodilló, Se Postró. Luego Ya Le Declara, Le Narra El Venerable Aliento, La Preciosa Palabra De La Reina Del Cielo, Su Mensaje, Y También Le Refirió Respetuosamente Todas Las Cosas Que Admiró, Que Miró, Que Escuchó. 44.- Y Cuando Hubo Escuchado Todas Sus Palabras, Su Mensaje, Como Que No Del Todo Le Dio Crédito. 45.- Le Respondió, Se Dignó Decirle: <<-</span><span class="zum" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #336633; font-style: italic;">Hijito Mío, Otra Vez Vendrás, Aún Con Calma Te Oiré, Muy Aun Desde El Principio Lo Miraré, Pensaré Lo Que Te Hizo Venir Acá, Tu Voluntad, Tu Deseo.></span><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">></span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="ti" style="font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal;"><img border="0" height="56" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/rosa_rrrr.gif" width="59" />SEGUNDA APARICIÓN</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">46.- Salió, Pues, Abatido De Tristeza Porque Su Encomienda No Se Realizó De Inmediato. 47.- En Seguida Se Regresó. Poco Después, Ya Al Acabar El Día, Se Vino Luego En Derechura A La Cumbre Del Cerrito, 48.- Y Allí Tuvo La Grande Suerte De Reencontrar A La Reina Del Cielo, Allí Precisamente Donde Por Primera Vez La Había Visto. Lo Estaba Esperando Bondadosamente. 49.- Y Apenas La Miró, Se Postró En Su Presencia, Se Arrojó Por Tierra, Tuvo El Honor De Decirle: 50.- </span><span class="caafe" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324; font-style: italic; font-weight: bolder;"><<Dueña Mía, Señora, Reina, Hijita Mía La Más Amada, Mi Virgencita, Fui Allá Donde Tú Me Enviaste Como Mensajero, Fui A Cumplir Tu Venerable Aliento, Tu Amable Palabra. Aunque Muy Difícilmente, Entré Al Lugar Del Estrado Del Jefe De Los Sacerdotes. Lo Vi, En Su Presencia Expuse Tu Venerable Aliento, Tu Amada Palabra, Como Tuviste La Bondad De Mandármelo>>. 51.- <<Me Recibió Amablemente Y Me Escuchó Bondadosamente, Pero, Por La Manera Como Me Respondió, Su Corazón No Quedó Satisfecho, No Lo Estima Cierto. 52.- Me Dijo: Otra Vez Vendrás, Aún Con Más Calma Te Oiré, Muy Aun Desde El Principio Examinaré La Razón Por La Que Has Venido, Tu Deseo, Tu Voluntad.>></span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="caafe" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324; font-style: italic; font-weight: bolder;">53.- <<Me Di Perfecta Cuenta, Por La Forma Cómo Me Contestó, Que Piensa Que El Templo Que Tú Te Dignas Concedernos El Privilegio De Edificarte Aquí, Quizá Es Mera Invención Mía, Que Tal Vez No Es De Tus Venerados Labios. 54.-Por Lo Cual, Mucho Te Ruego, Señora Mía, Mi Reina, Mi Virgencita, Que Ojalá A Alguno De Los Ilustres Nobles, Que Sea Conocido, Respetado, Honrado, A Él Le Concedas Que Se Haga Cargo De Tu Venerable Aliento, De Tu Preciosa Palabra Para Que Sea Creído.>> 55.- <<Porque Yo En Verdad No Valgo Nada, Soy Mecapal, Soy Cacaxtle, Soy Cola, Soy Ala, Sometido A Hombros Y A Cargo Ajeno, No Es Mi Paradero Ni Mi Paso Allá Donde Te Dignas Enviarme, Virgencita Mía, Hijita Mía La Más Amada, Señora, Reina. 56.- Por Favor, Perdóname: Afligiré Tu Venerado Rostro, Tu Amado Corazón. Iré A Caer En Tu Justo Enojo, En Tu Digna Cólera, Señora, Dueña Mía></span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">57.- Y La Siempre Gloriosa Virgen Tuvo La Afabilidad De Responderle: 58.-</span> <span class="virgen" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #24486c; font-style: italic; text-align: center;"><<-Escucha, Hijito Mío El Más Pequeño, Ten Por Seguro Que No Son Pocos Mis Servidores, Mis Embajadores Mensajeros A Quienes Podría Confiar Que Llevaran Mi Aliento, Mi Palabra, Que Ejecutaran Mi Voluntad; 59.- Mas Es Indispensable Que Seas Precisamente Tú Quien Negocie Y Gestione, Que Sea Totalmente Por Tu Intervención Que Se Verifique, Que Se Lleve A Cabo Mi Voluntad, Mi Deseo. 60.- Y Muchísimo Te Ruego, Hijito Mi Consentido, Y Con Rigor Te Mando, Que Mañana Vayas Otra Vez A Ver Al Obispo. 61.- Y De Mi Parte Adviértele, Hazle Oír Muy Claro Mi Voluntad, Mi Deseo Para Que Realice, Para Que Haga Mi Templo Que Le Pido. 62.- Y De Nuevo Comunícale De Que Manera Nada Menos Que Yo, Yo La Siempre Virgen María, La Venerable Madre De Dios, Allá Te Envío De Mensajero.></span><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">></span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">63.- Y Juan Diego Le Respondió Respetuosamente, Le Dijo Reverentemente: <</span><span class="caafe" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324; font-style: italic; font-weight: bolder;"><-Señora Mía, Reina, Virgencita Mía, Ojalá Que No Aflija Yo Tu Venerable Rostro, Tu Amado Corazón; Con El Mayor Gusto Iré, Voy Ciertamente A Poner En Obra Tu Venerable Aliento, Tu Amada Palabra; De Ninguna Manera Me Permitiré Dejar De Hacerlo, Ni Considero Penoso El Camino. 64.- Iré, Pues, Desde Luego, A Poner En Obra Tu Venerable Voluntad, Pero Bien Puede Suceder Que No Sea Favorablemente Oído, O, Si Fuere Oído, Quizá No Seré Creído; Pero 65.- Mañana, Por La Tarde, Cuando Se Ponga El Sol, Vendré A Devolver A Tu Venerable Aliento, A Tu Amada Palabra Lo Que Me Responda El Jefe De Los Sacerdotes>> 66.- <<Ya Me Despido, Hijita Mía La Más Amada, Virgencita Mía, Señora, Reina. Por Favor, Quédate Tranquila></span><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">>.</span><br /><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">67.- Y, Acto Continuo, Él Se Fue A Su Casa A Descansar.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;"><span class="ti" face="Verdana, Geneva, sans-serif" style="color: #003300; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal;">SEGUNDA ENTREVISTA CON ZUMARRAGA</span></span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">68.- Al Día Siguiente, Domingo, Muy De Madrugada, Cuando Todo Estaba Aún Muy Oscuro, De Allá Salió De Su Casa Hacia Acá, A Tlaltelolco: Viene A Aprender Las Cosas Divinas, A Ser Pasado En Lista; Luego A Ver Al Gran Sacerdote.69.- Y Como A Las Diez De La Mañana Estuvo Dispuesto: Se Había Oído Misa, Se Había Pasado Lista, Se Había Dispersado Toda La Gente. 70.- Y Él, Juan Diego, Luego Fue Al Palacio Del Señor Obispo. 71.- Y Tan Pronto Como Llegó, Hizo Todo Lo Posible Para Tener El Privilegio De Verlo, Y Con Mucha Dificultad Otra Vez Tuvo Ese Honor.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">72.- A Sus Pies Hincó Las Rodillas, Llora, Se Pone Triste, En Tanto Que Dialoga, Mientras Le Expone El Venerable Aliento, La Amada Palabra De La Reina Del Cielo, 73.- Para Ver Si Al Fin Era Creída La Embajada, La Voluntad De La Perfecta Virgen, Tocante A Que Le Hagan, Le Edifiquen, Le Levanten, Su Templo Donde Se Dignó Indicarlo, En Donde Se Digna Quererlo. 74.- Y El Señor Obispo Muchísimas Cosas Le Preguntó, Le E<img align="right" border="0" height="354" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/encounters_image006.jpg" vspace="8" width="242" />Xaminó, Para Que Bien En Su Corazón Constase (Para Cerciorarse) Dónde Fue A Verla, Qué Aspecto Tenía. Todo Lo Narró Al Señor Obispo, Con Todos Sus Detalles, 75.- Pero, Pese A Que Todo Absolutamente Se Lo Pormenorizó, Hasta En Los Más Menudos Detalles, Y Que En Todas Las Cosas Vio, Se Asombró Porque Clarísimamente Aparecía Que Ella Era La Perfecta Virgen, La Venerable, Gloriosa Y Preciosa Madre De Nuestro Salvador Jesucristo, 76.- A Fin De Cuentas, No Estuvo De Acuerdo De Inmediato, 77.- Sino Que Le Dijo Que No Nada Más Por Su Palabra, Su Petición, Se Haría, Se Ejecutaría Lo Que Solicitaba, 78.- </span><span class="zum" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #336633; font-style: italic;">Que Era Todavía Indispensable Algo Como Señal Para Que Poder Creerle Que Era Precisamente Ella, La Reina Del Cielo, Quien Se Dignaba Enviarlo De Mensajero.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">79.- Y Tan Pronto Como Lo Oyó, Juan Diego Dijo Respetuosamente Al Obispo: 80.- </span><span class="caafe" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324; font-style: italic; font-weight: bolder;"><<-Señor Gobernante, Por Favor Sírvete Ver Cuál Será La Señal Que Tienes A Bien Pedirle, Pues En Seguida Me Pondré En Camino Para Solicitársela A La Reina Del Cielo, Que Se Dignó Enviarme Acá De Mensajero></span><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">>.81.- Y Cuando Vio El Obispo Que Todo Lo Confirmaba, Que Desde Su Primera Reacción En Nada Titubeaba O Dudaba, Luego Lo Despidió; Pero 82.- Apenas Hubo Salido, Luego Ordenó A Algunos Criados, En Quienes Tenía Gran Confianza, Que Fueran Detrás De Él, Que Cuidadosamente Lo Espiaran A Dónde Iba, Y A Quién Veía O Hablaba. 83.- Y Así Se Hizo. Y Juan Diego En Seguida Se Vino Derecho, Enfiló La Calzada.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">84.- Y Lo Siguieron, Pero Allí Donde Sale La Barranca, Cerca Del Tepeyac, Por El Puente De Madera, Lo Perdieron De Vista, Y Por Más Que Por Todas Partes Lo Buscaron, Ya En Ningún Lugar Lo Vieron, 85.- Por Lo Que Se Regresaron. Y Con Eso No Sólo Se Vinieron A Enfadar Grandemente, Sino También Porque Los Frustró, Los Dejó Furiosos, 86.- De Manera Que Le Fueron A Insistir Al Señor Obispo, Le Metieron En La Cabeza Que No Le Creyera, Le Inventaron Que Lo Que Hacía Era Sólo Engañarlo Deliberadamente, Que Era Mera Ficción Lo Que Forjaba, O Bien Que Sólo Lo Había Soñado, Sólo Imaginado En Sueños Lo Que Decía, Lo Que Solicitaba. 87.- Y En Este Sentido Se Confabularon Unos Con Otros, Que Si Llegaba A Volver, A Regresar, Allí Lo Habían De Agarrar Y Castigar Duramente Para Que Otra Vez Ya No Ande Contando Mentiras, Ni Alborotando A La Gente. 88.- Entre Tanto Juan Diego Estaba En La Presencia De La Santísima Virgen, Comunicándole La Respuesta Que Venía A Traerle De Parte Del Señor Obispo. 89.- Y Cuando Se Lo Hubo Notificado, La Gran Señora Y Reina Le Respondió: 90.- </span><span class="virgen" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #24486c; font-style: italic; text-align: center;"><<-Así Está Bien, Hijito Mío El Más Amado, Mañana De Nuevo Vendrás Aquí Para Que Lleves Al Gran Sacerdote La Prueba, La Señal Que Te Pide. 91.- Con Eso En Seguida Te Creerá, Y Ya, A Ese Respecto, Para Nada Desconfiará De Ti Ni De Ti Sospechará. 92.- Y Ten Plena Seguridad, Hijito Mío Predilecto, Que Yo Te Pagaré Tu Cuidado, Tu Servicio, Tu Cansancio Que Por Amor A Mí Has Prodigado. 93.- ¡Animo, Mi Muchachito! Que Mañana Aquí Con Sumo Interés Habré De Esperarte></span><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">>.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;"><img alt="" border="0" height="56" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/rosa_rrrr.gif" width="59" /></span>TERCERA APARICIÓN</p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">EL TIO MORIBUNDO 94.- Pero A La Mañana Siguiente, Lunes, Cuando Juan Diego Debería <img align="right" alt="" border="0" height="247" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/virgen_juandiego.jpg" vspace="8" width="195" />Llevarle Alguna Señal Suya Para Ser Creído, Ya No Regresó, 95.- Porque Cuando Fue A Llegar A Su Casa, A Un Tío Suyo, De Nombre Juan Bernardino, Se Le Había Asentado La Enfermedad, Estaba En Las Últimas, 96.- Por Lo Que Se Pasó El Día Buscando Médicos, Todavía Hizo Cuanto Pudo Al Respecto; Pero Ya No Era Tiempo, Ya Estaba Muy Muy Grave. 97.- Y Al Anochecer, Le Rogó Instantemente Su Tío Que, Todavía De Noche, Antes Del Alba, Le Hiciera El Favor De Ir A Tlaltelolco A Llamar A Algún Sacerdote Para Que Viniera, Para Que Se Dignara Confesarlo, Se Sirviera Disponerlo, 98.- Porque Estaba Del Todo Seguro Que Ya Era El Ahora, Ya Era El Aquí Para Morir, Que Ya No Habría De Levantarse, Que Ya No Sanaría. 99.- Y El Martes, Todavía En Plena Noche, De Allá Salió, De Su Casa, Juan Diego, A Llamar Al Sacerdote, Allá En Tlatelolco. 100.- Y Cuando Ya Vino A Llegar A La Cercanía Del Cerrito Tepeyac, A Su Pie, Donde Sale El Camino, Hacia El Lugar Donde Se Pone El Sol, Donde Antes Él Pasara, Se Dijo: 101.- <<-</span><span class="caafe" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324; font-style: italic; font-weight: bolder;">Si Sigo De Frente Por El Camino, No Vaya A Ser Que Me Vea La Noble Señora, Porque Como Antes Me Hará El Honor De Detenerme Para Que Lleve La Señal Al Jefe De Los Sacerdotes, Conforme A Lo Que Se Dignó Mandarme. </span><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">102.- Que Por Favor Primero Nos Deje Nuestra Aflicción, Que Pueda Yo Ir Rápido A Llamar Respetuosamente El Sacerdote Religioso. Mi Venerable Tío No Hace Sino Estar Aguardándolo>>.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">103.- En Seguida Le Dio La Vuelta Al Monte Por La Falda, Subió A La Otra Parte, Por Un Lado, Hacia Donde Sale El Sol, Para Ir A Llegar Rápido A México, Para Que No Lo Demorara La Reina Del Cielo. 104.- Se Imaginaba Que Por Dar Allí La Vuelta, De Plano No Iba A Verlo Aquella Cuyo Amor Hace Que Absolutamente Y Siempre Nos Esté Mirando. 105.- Pero La Vio Como Hacia Acá Bajaba De Lo Alto Del Montecito, Desde Donde Se Había Dignado Estarlo Observando, Allá Donde Desde Antes Lo Estuvo Mirando Atentamente. 106.- Le Vino A Salir Al Encuentro De Lado Del Monte, Vino A Cerrarle El Paso, Se Dignó Decirle: 107.- <<-</span><span class="virgen" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #24486c; font-style: italic; text-align: center;">¿Qué Hay, Hijo Mío El Más Pequeño? ¿A Dónde Vas? ¿A Dónde Vas A Ver?>>.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">108.- Y Él, ¿Acaso Un Poco Por Eso Se Apenó, Tal Vez Se Avergonzó, O Acaso Por Eso Se Alteró, Se Atemorizó? 109.- En Su Presencia Se Postró, Con Gran Respeto La Saludó, Tuvo El Honor De Decirle: 110.- <</span><span class="caafe" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324; font-style: italic; font-weight: bolder;"><-Mi Virgencita, Hija Mía La Más Amada, Mi Reina, Ojalá Estés Contenta; ¿Cómo Amaneciste? ¿Estás Bien De Salud?, Señora Mía, Mi Niñita Adorada? </span><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">1</span><span class="caafe" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324; font-style: italic; font-weight: bolder;">11.- Causaré Pena A Tu Venerado Rostro, A Tu Amado Corazón: Por Favor, Toma En Cuenta, Virgencita Mía, Que Está Gravísimo Un Criadito Tuyo, Tío Mío. 112.- Una Gran Enfermedad En Él Se Ha Asentado, Por Lo Que No Tardará En Morir. 113.- Así Que Ahora Tengo Que Ir Urgentemente A Tu Casita De México, A Llamar A Alguno De Los Amados De Nuestro Señor, De Nuestros Sacerdotes, Para Que Tenga La Bondad De Confesarlo, De Prepararlo. 114.- Puesto Que En Verdad Para Esto Hemos Nacido: Vinimos A Esperar El Tributo De Nuestra Muerte. 115.- Pero, Aunque Voy A Ejecutar Esto, Apenas Termine, De Inmediato Regresaré Aquí Para Ir A Llevar Tu Venerable Aliento, Tu Amada Palabra, Señora, Virgencita Mía. 116.- Por Favor, Ten La Bondad De Perdonarme, De Tenerme Toda Paciencia. De Ninguna Manera En Esto Te Engaño, Hija Mía La Más Pequeña, Mi Adorada Princesita, Porque Lo Primero Que Haré Mañana Será Venir A Toda Prisa>></span><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">117.- Y Tan Pronto Como Hubo Escuchado La Palabra De Juan Diego, Tuvo La Gentileza De Resp<img align="right" border="0" height="188" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/imagesCAZQKH5I.jpg" vspace="8" width="231" />Onderle La Venerable Y Piadosísima Virgen: 118.- <</span><span class="virgen" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #24486c; font-style: italic; text-align: center;"><-Por Favor Presta Atención A Esto, Ojalá Que Quede Muy Grabado En Tu Corazón, Hijo Mío El Más Querido: No Es Nada Lo Que Te Espantó, Te Afligió, Que No Se Altere Tu Rostro, Tu Corazón. Por Favor No Temas Esta Enfermedad, Ni En Ningún Modo A Enfermedad Otra Alguna O Dolor Entristecedor. 119.- ¿Acaso No Estoy Yo Aquí, Yo Que Tengo El Honor De Ser Tu Madre? ¿Acaso No Estás Bajo Mi Sombra, Bajo Mi Amparo? ¿Acaso No Soy Yo La Fuente De Tu Alegría? ¿Qué No Estás En Mi Regazo, En El Cruce De Mis Brazos? ¿Por Ventura Aun Tienes Necesidad De Cosa Otra Alguna? 120.- Por Favor, Que Ya Ninguna Otra Cosa Te Angustie, Te Perturbe, Ojalá Que No Te Angustie La Enfermedad De Tu Honorable Tío, De Ninguna Manera Morirá Ahora Por Ella. Te Doy La Plena Seguridad De Que Ya Sanó</span><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">>>.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">121.- (Y Luego, Exactamente Entonces, Sanó Su Honorable Tío, Como Después Se Supo).</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;"><img alt="" border="0" height="56" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/rosa_rrrr.gif" width="59" /></span>LAS FLORES</p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">122.- Y Juan Diego, Apenas Oyó El Venerable Aliento, La Amada Palabra De La Reina Del Cielo, Muchísimo Con Ello Se Consoló, Mucho Con Ello Quedó Satisfecho Su Corazón. 123.- Y Le Suplicó Instantemente Que De Inmediato Tuviera A Bien Enviarlo De Mensajero Para Ver Al Gobernante Obispo, Para Llevarle La Señal, Su Comprobación, Para Que Le Crea. 124.- Y La Reina Del Cielo De Inmediato Se Sirvió Mandarle Que Subiera Arriba Del Cerrito, Allí Donde Antes Había Tenido El Honor De Verla. 125.- Se Dignó Decirle: <</span><span class="virgen" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #24486c; font-style: italic; text-align: center;"><-Sube, Hijito Mío Queridísimo, Arriba Del Cerrito, Donde Me Viste Y Te Di Órdenes. 126.- Allí Verás Que Están Sembradas Diversas Flores: Córtalas, Reúnelas, Ponlas Juntas. Luego Bájalas Acá, Aquí Ante Mí Tráemelas></span><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">>.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">127.- Y Acto Continuo, Juan Diego Subió Al Cerrito. 128.- </span><span class="IMPO" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #8d5078; font-style: italic;">Y Al Alcanzar La Cumbre, Quedó Mudo De Asombro Ante Las Variadas, Excelentes, Maravillosas Flores, Todas Extendidas, Cuajadas De Capullos Reventones, Cuando Todavía No Era Su Tiempo De Darse. 129.- Porque En Verdad Entonces Las Heladasson Muy Fuertes. 130.- Su Perfume Era Intenso, Y El Rocío De La Noche Como Que Las Cuajaba De Perlas Preciosas. 131.- En Seguida Se Puso A Cortarlas, Todas Absolutamente Las Juntó, Llenó Con Ellas El Hueco De Su Tilma. 132.- Y Conste Que La Cúspide Del Cerrito Para Nada Es Lugar Donde Se Den Flores, Porque Lo Que Hay En Abundancia Son Riscos, Abrojos, Gran Cantidad De Espinas, De Nopales, De Mezquite</span><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">s. 133.- Y Si Algunas Hierbezuelas Se Dan, Entonces Era El Mes De Diciemb<span class="virgen" style="color: #24486c; font-style: italic; text-align: center;"><img align="left" border="0" height="239" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/imagesCALNHTHJ.jpg" vspace="8" width="211" /></span>Re, En Que Todo Lo Devora, Lo Aniquila El Hielo.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">134.- Bajó En Seguida Trayendo A La Reina Del Cielo Las Diversas Flores Que Le Había Ido A Cortar, 135.- Y Ella, Al Verlas, Tuvo La Afabilidad De Tomarlas En Sus Manecitas, 136.- Y Volvió Amablemente A Colocárselas En El Hueco De Su Tilma. Se Dignó Decirle:137.- <<</span><span class="virgen" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #24486c; font-style: italic; text-align: center;">-Hijito Queridísimo, Estas Diferentes Flores Son La Prueba, La Señal Que Le Llevarás Al Obispo. 138.- De Parte Mía Le Dirás Que Por Favor Vea En Ella Mi Deseo, Y Con Eso Ejecute Mi Deseo, Mi Voluntad. 139.- Y Tú... Tú Eres Mi Plenipotenciario, Puesto Que En Ti Pongo Toda Mi Confianza. 140.- Y Con Todo Rigor Te Ordeno Que Sólo Exclusivamente Frente Al Obispo Despliegues Tu Tilma Y Le Muestres Lo Que Llevas. 141.- Y Le Contarás Con Todo Detalle Cómo Yo Te Mandé Que Subieras Al Cerrito Para Cortar Las Flores, Y Todo Lo Que Viste Y Admiraste. 142.- Y Con Esto Le Conmoverás El Corazón Al Gran Sacerdote Para Que Interceda Y Se Haga, Se Erija Mi Templo Que He Pedido"</span><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">143.- Y Al Dignarse Despedirlo La Reina Del Cielo, Vino A Tomar La Calzada, Viene Derecho A México, Viene Feliz, Rebosante De Alegría, 144.- Ya Así Viene, Rebosante De Dicha Su Corazón, Porque Esta Vez Todo Saldrá Bien, Lo Desempeñará Bien. 145.- Pone Exquisito Cuidado En Lo Que Trae En El Hueco De Su Tilma, No Vaya A Ser Que Algo Se Le Caiga. 146.- Viene Extasiado Por El Perfume De Las Flores, Tan Diferentes Y Maravillosas.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;"><span class="ti" face="Verdana, Geneva, sans-serif" style="color: #003300; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal;"><img alt="" border="0" height="56" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/rosa_rrrr.gif" width="59" />CUARTA APARICIÓN TERCERA ENTREVISTA CON ZUMÁRRAGA</span></span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">147.- Y Al Llegar Al Palacio Episcopal Le Salió Al Encuentro El Mayordomo E Incluso Otros Criados Del Señor Obispo. 148.- Y Les Rogó Que Por Favor Le Dijeran Que Quería Verlo; Pero Ninguno Accedió, No Querían Hacerle Caso, Quizá Porque Aún No Amanecía, 149.- O Quizá Porque Ya Lo Conocen, Que Sólo Los Fastidia, Que Les Es Insoportable, 150.- Y Porque Ya Les Habían Hablado De Él Sus Compañeros Que Lo Habían Perdido De Vista Cuando Pretendieron Seguirlo. 151.- Muy Largo Tiempo Estuvo Esperando La Respuesta, 152.- Y Cuando Vieron Que Llevaba Ahí Tan Largo Tiempo, Cabizbajo, Sin Hacer Nada, A Ver Si Era Llamado, Notaron Que Al Parecer Traía Algo En Su Tilma, Y Se Le Acercaron Para Ver Lo Que Traía, Para Dar Gusto A Su Corazón. 153.- Y Al Ver Juan Diego Que Era Imposible Ocultarles Lo Que Llevaba, Y Que Por Eso Lo Molestarían, Lo Expulsarían A Empellones O Lo Maltratarían, Un Poquito Les Mostró Que Eran Flores. 154.- Y Al Ver Que Se Trataba De Diversas Y Finísimas Flores, Siendo Que No Era Su Tiempo, Se Asombraron Muchísimo, Y Más Al Ver Cuán Frescas Estaban, Cuán Abiertas, Cuán Exquisito Su Perfume, Cuán Preciosas, 155.- Y Ansiaron Coger Unas Cuantas, Arrebatárselas. 156.- Y No Una, Sino Tres Veces Se Atrevieron A Agarrarlas, Pero Fracasaron, 157.- Porque Cuando Pretendían Tomarlas, Ya No Podían Ver Flores, Sino Las Veían Como Pinturas, Como Bordados O Aplicaciones En La Tilma.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">158.- Con Eso, En Seguida Fueron A Decirle Respetuosamente Al Señor Obispo L<img align="right" border="0" height="246" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/imagesCA8YPX7K.jpg" vspace="8" width="205" />O Que Habían Visto, 159.- Y Que Pretendía Verlo El Indito Que Ya Tantas Veces Había Venido, Quien Tenía Mucho Esperando El Recado, Porque Suplicaba Permiso Para Verlo. 160.- Y Tan Pronto Como El Señor Obispo Escuchó Eso, Captó Su Corazón Que Esa Era La Prueba Para Que Aceptara Lo Que Ese Hombre Había Estado Gestionando. 161.- De Inmediato Se Sirvió Llamarlo, Que En Seguida Entrara A Casa Para Verlo.162.- Y Cuando Entró, Se Prosternó En Su Presencia, Como Toda Persona Bien Educada. 163.- Y De Nueva Cuenta, Y Con Todo Respeto, Le Narró Todo Lo Que Había Visto, Admirado, Y Su Mensaje.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">- Le Dijo Con Gran Respeto: <<</span><span class="caafe" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324; font-style: italic; font-weight: bolder;">-Mi Señor, Gobernante, Ya Hice, Ya Cumplí Lo Que Tuviste A Bien Mandarme, 165.- Y Así Tuve El Honor De Ir A Comunicarle A La Señora, Mi Ama, La Reina Del Cielo, Venerable Y Preciosa Madre De Dios, Que Tú Respetuosamente Pedías Una Señal Para Creerme, Y Para Hacerle Su Templecito, Allí Donde Tiene La Bondad De Solicitarte Que Se Lo Levantes. 166.- Y También Tuve El Honor De Decirle Que Me Había Permitido Darte Mi Palabra De Que Tendría El Privilegio De Traerte Algo Como Señal, Como Prueba De Su Venerable Voluntad, Conforme A Lo Que Tú Te Dignaste Indicarme>></span><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">. 167.- <</span><span class="caafe" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324; font-style: italic; font-weight: bolder;"><Y Tuvo A Bien Oír Tu Venerable Aliento, Tu Venerable Palabra Y Se Prestó Gustosa A Tu Solicitud De Alguna Cosa Como Prueba, Como Señal, Para Que Se Haga, Se Ejecute Su Amada Voluntad. 168.- Y Hoy, Siendo Aún Noche Cerrada, Se Sirvió Mandarme Que Tuviera El Honor De Venir De Nuevo A Verte. 169.- Y Yo Me Honré Pidiéndole Algo Como Su Señal Para Que Fuera Creído, Conforme A Lo Que Me Había Dicho Que Me Daría, Y De Inmediato, Pero Al Instante, Condescendió En Realizarlo, 170.- Y Se Sirvió Enviarme A La Cumbre Del Cerrito, Donde Antes Había Tenido El Honor De Verla, Para Que Fuera A Cortar Flores Diferentes Y Preciosas>>. 171.- <<Y Luego Que Tuve El Privilegio De Ir A Cortarlas, Se Las Llevé Abajo. 172.- Y Se Dignó Tomarlas En Sus Manecitas, 173.- Para De Nuevo Dignarse Ponerlas En El Hueco De Mi Tilma, 174.- Para Que Tuviera El Honor De Traértelas Y Sólo A Ti Te Las Entregara>>.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">175.- <<P</span><span class="caafe" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324; font-style: italic; font-weight: bolder;">ese A Que Yo Sabía Muy Bien Que La Cumbre Del Cerrito No Es Lugar Donde Se Den Flores, Puesto Que Sólo Abundan Los Riscos, Abrojos, Espinas, Nopales Escuálidos, Mezquites, No Por Ello Dudé, No Por Eso Vacilé. 176.- Cuando Fui A Alcanzar La Cumbre Del Montecito, Quedé Sobrecogido: ¡Estaba En El Paraíso!. 177.- Allí Estaban Reunidas Todas Las Flores Preciosas Imaginables, De Suprema Calidad, Cuajadas De Rocío, Resplandecientes, De Manera Que Yo -Emocionado- Me Puse En Seguida A Cortarlas. 178.- Y Se Dignó Concederme El Honor De Venir A Entregártelas, Que Es Lo Que Ahora Hago, Para Que En Ellas Te Sirvas Ver La Señal Que Pedías, Para Que Te Sirvas Poner Todo En Ejecución. 179.- Y Para Que Quede Patente La Verdad De Mi Palabra, De Mi Embajada, 180.- ¡Aquí Las Tienes, Hazme El Honor De Recibirlas!>></span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><br /><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;"><span class="ti" face="Verdana, Geneva, sans-serif" style="color: #003300; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal;"><img alt="" border="0" height="56" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/rosa_rrrr.gif" width="59" />LA IMA<span class="TILMA" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #3d4f58; font-style: italic; font-variant-alternates: normal; font-variant-caps: small-caps; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal;"><img align="left" border="0" height="201" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/images.jpg" vspace="8" width="251" /></span>GEN EN LA TILMA</span></span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">181.-</span><span class="TILMA" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #3d4f58; font-style: italic; font-variant-alternates: normal; font-variant-caps: small-caps; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal;"> Y Enese Momento Desplegó Su Blanca Tilma, En Cuyo Hueco, Estando De Pie, Llevaba Las Flores. 182.- Y Así, Al Tiempo Que Se Esparcieron Las Diferentes Flores Preciosas, 183.- En Ese Mismo Instante Se Convirtió En Señal, Apareció De Improviso La Venerada Imagen De La Siempre Virgen María, Madre De Dios, Tal Como Ahora Tenemos La Dicha De Conservarla, 184.- Guardada Ahí En Lo Que Es Su Hogar Predilecto, Su Templo Del Tepeyac, Que Llamamos Guadalupe</span><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">. 185.- Y Tan Pronto Como La Vio El Señor Obispo, Y Todos Los Que Allí Estaban, Se Arrodillaron Pasmados De Asombro, 186.- Se Levantaron Para Verla, Profundamente Conmovidos Y Convertidos, Suspensos Su Corazón, Su Pensamiento. 187.- Y El Señor Obispo, Con Lágrimas De Compunción Le Rogó Y Suplicó Le Perdonara Por No Haber Ejecutado De Inmediato Su Santa Voluntad, Su Venerable Aliento, Su Amada Palabra.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">188.- Y Poniéndose De Pie, Desató Del Cuello La Vestidura, El Manto De Juan Diego, 189.- En Donde Se Dignó Aparecer, En Donde Está Estampada La Señora Del Cielo, 190.- Y En Seguida, Con Gran Respeto, La Llevó Y La Dejó Instalada En Su Oratorio. 191.- Y Todavía Un Día Entero Pasó Juan Diego En Casa Del Obispo, Él Tuvo A Bien Retenerlo. 192.- Y Al Día Siguiente Le Dijo: <<-¡Vamos! Para Que Muestres Dónde Es La Voluntad De La Reina Del Cielo Que Le Erijan Su Templecito>>. 193.- De Inmediato Se Convidó Gente Para Hacerlo, Para Levantarlo.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">194.- Y Juan Diego, Una Vez Que Les Hubo Mostrado Dónde Se Había Dignado Mandarle La Señora Del Cielo Que Se Levantara Su Templecito, Luego Les Pidió Permiso. 195.- Aun Quería Ir A Su Casa Para Ver A Su Honorable Tío Juan Bernardino, Que Estaba En Cama Gravísimo Cuando Lo Había Dejado Y Venido Para Llamar A Algún Sacerdote, Allá En Tlatelolco, Para Que Lo Confesara Y Dispusiera, De Quien La Reina Del Cielo Se Había Dignado Decirle Que Ya Estaba Sano. 196.- Y No Solamente No Lo Dejaron Ir Solo, Sino Que Lo Escoltaron Hasta Su Casa. 197.- Y Al Llegar Vieron A Su Venerable Tío Que Estaba Muy Contento, Ya Nada Le Dolía. 198.- Y Él Quedó Muy Sorprendido De Ver A Su Sobrino Tan Escoltado Y Tan Honrado. 199.- Y Le Preguntó A Su Sobrino Por Qué Ocurría Aquello, Por Qué Tanto Lo Honraran.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;"><img alt="" border="0" height="56" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/rosa_rrrr.gif" width="59" /><span class="ti" face="Verdana, Geneva, sans-serif" style="color: #003300; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal;">QUINTA APARICIÓN: EL NOMBRE DE GUADALUPE</span></span><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;"><img align="right" border="0" height="272" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/guadalupe_azul.jpg" vspace="8" width="185" /></span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">200.- Y Él Le Dijo Cómo Cuando Salió A Llamar Al Sacerdote Para Que Lo Confesara Y Preparara, Allá En El Tepeyac Bondadosamente Se Le Apareció La Señora Del Cielo, 201.- Y Lo Mandó Como Su Mensajero A Ver Al Señor Obispo Para Que Se Sirviera Hacerle Una Casa En El Tepeyac, 202.- Y Tuvo La Bondad De Decirle Que No Se Afligiera, Que Ya Estaba Bien, Con Lo Que Quedó Totalmente Tranquilo. 203.- Y Le Dijo Su Venerable Tío Que Era Verdad, Que Precisamente En Ese Momento Se Dignó Curarlo. 204.- Y Que La Había Visto Ni Más Ni Menos Que En La Forma Exacta Como Se Había Dignado Aparecérsele A Su Sobrino. 205.- Y Le Dijo Cómo A Él También Se Dignó Enviarlo A México Para Ver Al Obispo. 206.- Y Que, Cuando Fuera A Verlo, Que Por Favor Le Manifestara, Le Informara Con Todo Detalle Lo Que Había Visto, 207.- Y Cuán Maravillosamente Se Había Dignado Sanarlo, 208.- Y Que Condescendía A Solicitar Como Un Favor Que A Su Preciosa Imagen Precisamente Se Le Llame, Se Le Conozca Como La SIEMPRE VIRGEN SANTA MARÍA DE GUADALUPE.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;"><span class="ti" face="Verdana, Geneva, sans-serif" style="color: #003300; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal;">INICIO DEL CULTO</span></span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">209.- Y En Seguida Traen A Juan Bernardino A La Presencia Del Señor Obispo, Para Rendir Su Informe Y Dar Fe Ante Él. 210.- Y A Ambos, A Él Y A Su Sobrino, Los Hospedó El Obispo En Su Casa Unos Cuantos Días, 211.- Durante Todo El Tiempo Que Se Erigió El Templecito De La Soberana Señora Allá En El Tepeyac, Donde Se Dignó Dejarse Ver De Juan Diego. 212.- Y El Señor Obispo Trasladó A La Iglesia Mayor La Preciosa Y Venerada Imagen De La Preciosa Niña Del Cielo. 213.- Tuvo A Bien Sacarla De Su Palacio, De Su Oratorio, Donde Estaba, Para Que Toda La Gente Pudiera Ver Y Admirar Su Maravillosa Imagen. 214.- Absolutamente Toda La Ciudad Se Puso En Movimiento Ante La Oportunidad De Ver Y Admirar Su Preciosa Y Amada Imagen.</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="ti" style="font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal;">LA CONVERSIÓN DE MÉXICO</span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="parr" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #483324;">215.- Venían A Reconocer Su Carácter Divino, 216.- A Tener La Honra De Presentarle Sus Plegarias, 217.- Y Mucho Admiraban Todos La Forma Tan Manifiestamente Divina Que Había Elegido Para Hacerles La Gracia De Aparecerse, 218.- Como Que Es Un Hecho Que A Ninguna Persona De Este Mundo Le Cupo El Privilegio De Pintar Lo Esencial De Su Preciosa Y Amada Imagen.</span></p><table border="0" cellpadding="0" cellspacing="0" style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: center; width: 35%;"><tbody><tr><td><span class="ti" face="Verdana, Geneva, sans-serif" style="color: #003300; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><img border="0" height="194" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/guadalupe_bandera.jpg" width="259" /></span></td></tr></tbody></table><p align="justify" style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif;"> </p><p align="justify" style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif;"><span class="dorad" style="color: #24486c; font-weight: bold; text-align: center; text-decoration-line: underline;">DESCRIPCION DE LA IMAGEN</span></p><p align="justify" class="dorad" style="background-color: white; color: #24486c; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: center; text-decoration-line: underline;"><span class="parr" style="color: #483324; text-align: justify; text-decoration-line: none;">La imagen de Nuestra Señora de Guadalupe quedó impresa en un tosco tejido hecho con fibras de maguey. Se trata del ayate, usado por los indios para acarrear cosas y no de una tilma, que usualmente era de tejido más fino de algodón. La trama del ayate es tan burda y sencilla, que se puede ver claramente a través de ella, y la fibra del maguey es un material tan inadecuado que ningún pintor lo hubiera escogido para pintar sobre el.</span></p><p align="justify" style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif;"><span class="parr" style="color: #483324; font-weight: bold;">La imagen de Nuestra Señora de Guadalupe es una maravillosa síntesis cultural, una obra maestra que presentó la nueva fe de manera tal que pudo ser entendida y aceptada inmediatamente por los indios mexicanos. Es imposible de describir aquí la rica y complicada simbología que contiene este cuadro-códice porque cada detalle de color y de forma es portador de un mensaje teológico.</span></p><p align="justify" style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif;"><span class="parr" style="color: #483324; font-weight: bold;">El rostro impreso en el ayate es el de una joven mestiza; una anticipación, pues en aquel momento todavía no habían mestizos de esa edad en México.</span></p><p align="justify" style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif;"><span class="parr" style="color: #483324; font-weight: bold;">María asume así el dolor de miles de niños, los primeros de una nueva raza, rechazados entonces tanto por los indios como por los conquistadores. El cuadro que se conserva en la moderna Basílica del Tepeyac mide aproximadamente 66 x 41 pulgadas y la imagen de la Virgen ocupa unas 56 pulgadas del mismo. La Virgen está de pié y su rostro se inclina delicadamente recordando un poco las tradicionales "Inmaculadas". Esta oportuna inclinación evita que el empate que une las dos piezas del tejido caiga dentro de la faz de la Virgen. El manto azul salpicado de estrellas es la "Tilma de Turquesa" con que se revestían los grandes señores, e indica la nobleza y la importancia del portador. Los rayos del sol circundan totalmente a la Guadalupana como para indicar que ella es su aurora. Esta joven doncella mexicana está embarazada de pocos meses, así lo indican el lazo negro que ajusta su cintura, el ligero abultamiento debajo de este y la intensidad de los resplandores solares que aumenta a la altura del vientre. Su pie esta apoyado sobre una luna negra, (símbolo del mal para los mexicanos) y el ángel que la sostiene con gesto severo, lleva abiertas sus alas de águila.</span></p><p align="justify" style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif;"><span class="parr" style="color: #483324; font-weight: bold;">La Virgen de Guadalupe se presentó ante sus hijos como la Madre del Creador y conservador de todo el universo; que viene a su pueblo porque quiere acogerlos a todos, indios y españoles, con un mismo amor de Madre. Con la prodigiosa impresión en el ayate comenzaba un nuevo mundo, la aurora del sexto sol que esperaban los mexicanos.</span></p><p align="justify" style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif;"><span class="parr" style="color: #483324; font-weight: bold;">La image<span class="parr"><span class="parr">n ha sufrido<strong> serios atentados</strong> y ha salido incólume de ácidos corrosivos y hasta de una bomba de gran tamaño que, en 1921, un desconocido escondió entre flores que malvadamente le ofrecía. Al explotar la <span class="parr">bomba, causó gran destrucción. El crucifijo de metal que estaba cerca de la Virgen quedó retorcido y sin embargo la imagen de la Virgen quedó intacta. El cristal del marco de su imagen no se rompió. </span></span></span></span></p><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><span class="dorad" face=""Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif" style="color: #24486c; text-align: center; text-decoration-line: underline;">ESTUDIOS HECHOS A LA IMAGEN DE NUESTRA SEÑORA</span></p><p align="justify" class="virgen" style="background-color: white; color: #24486c; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-style: italic; font-weight: bold; text-align: center;"><a class="virgen" href="http://virgendeguadalupe.org.mx/Estudios.htm" style="color: #24486c; text-decoration-line: none;" target="_blank">ver estudios de la Basílica de Guadalupe>>></a></p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;"><span class="encabezado" style="color: #2d4431;">Los ojos</span><br />Estudios oftalmológicos realizados a los ojos de María han detectado que al acercarl<img align="right" border="0" height="176" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/imagesCAJINMJD.jpg" vspace="8" width="287" />es luz, la pupila se contrae, y al retirar la luz, se vuelve a dilatar, tal cual como ocurre en un ojo vivo. ¡Los ojos de María están vivos en la tilma!.</p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;">También se descubre que los ojos poseen los tres efectos de refracción de la imagen que un ojo humano normalmente posee. Lograr estos efectos a pincel es absolutamente imposible, aún en la actualidad.</p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;"><span class="encabezado" style="color: #2d4431;">Temperatura</span><br />Al tomarse la temperatura de la fibra de maguey con que está construida la tilma, se descubre que milagrosamente la misma mantiene una temperatura constante de 36.6 grados, la misma que el cuerpo de una persona viva.</p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;"><span class="encabezado" style="color: #2d4431;">Incorruptibilidad de la tela</span><br />La fibra de maguey que constituye la tela de la imagen, no puede en condiciones normales perdurar más que 20 ó 30 años. De hecho, hace varios siglos se pintó una réplica de la imagen en una tela de fibra de maguey similar, y la misma se desintegró después de varias décadas. Mientras tanto, a casi quinientos años del milagro, la imagen de María sigue tan firme como el primer día. Se han hecho estudios científicos a este hecho, sin poder descubrirse el origen de la incorruptibilidad de la tela. No se ha descubierto ningún rastro de pintura en la tela. De hecho, al acercarse uno a menos de 10 centímetros de la imagen, sólo se ve la tela de maguey en crudo. Los colores desaparecen.</p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;"><span class="encabezado" style="color: #2d4431;">Coloración</span><br />Estudios científicos de diverso tipo no logran descubrir el origen de la coloración que forma la imagen, ni la forma en que la misma fue pintada. No se detectan rastros de pinceladas ni de otra técnica de pintura conocida. El Dr. Phillip S. Callaghan, del equipo científico de la NASA americana, biofísico de la Universidad de Kansas (EE.UU.), investigador, científico y técnico en pintura, y el Profesor Jody Brant Smith, «Master of Arts», de la Universidad de Miami, Catedrático de Filosofía de la Ciencia en la Universidad de Pensacolla, afirmaron que el material que origina los colores no es ninguno de los elementos conocidos en la tierra. En su libro «La tilma de Juan Diego» exponen el estudio realizado por ellos a nivel particular. Se ha hecho pasar un rayo láser en forma lateral sobre la tela, detectándose que la coloración de la misma no está ni en el anverso ni en el reverso, sino que los colores flotan a una distancia de tres décimas de milímetro sobre el tejido, sin tocarlo.<img align="right" border="0" height="291" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/images3.jpg" vspace="8" width="173" /></p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;">Los colores flotan en el aire, sobre la superficie de la tilma. Varias veces, a lo largo de los siglos, los hombres han pintado agregados a la tela. Milagrosamente estos agregados han desaparecido, quedando nuevamente el diseño original, con sus colores vivos. En el año 1791 se vuelca accidentalmente ácido muriático en el lado superior derecho de la tela. En un lapso de 30 días, sin tratamiento alguno, se reconstituye milagrosamente el tejido dañado. Actualmente apenas se advierte este hecho como una breve decoloración en ese lugar, que testimonia lo ocurrido.</p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;"><span class="encabezado" style="color: #2d4431;">Las estrellas</span><br />Las estrellas visibles en el Manto de María responden a la exacta configuración y posición que el cielo de México presentaba en el día en que se produjo el milagro, según revelan estudios astronómicos realizados sobre la imagen.</p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;"><span class="encabezado" style="color: #2d4431;">Preservación milagrosa ante ataque con bomba</span><br />El 14 de noviembre de 1921, Luciano Pérez, un anarquista español, depositó un arreglo floral al lado de la Tilma de Juan Diego que contenía una bomba de alto poder. La explosión destruyó todo alrededor, menos la tilma, que permaneció en perfecto estado de conservación. Una Cruz de pesado metal que se encontraba en las proximidades fue totalmente doblada por la explosión, y se guarda como testimonio en el templo. Sin embargo, el cristal que protegía la Tilma no se rompió, teniendo en cuenta que en aquella época no había cristales antibala.</p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;"><span class="encabezado" style="color: #2d4431;">Conclusiones de un estudio basado en tecnología digital</span><br />El Dr. Enrique Graue, oftalmólogo de fama internacional, director de un hospital oftalmológico en México, afirma: «Examiné los ojos con oftalmoscopio de alta potencia, y pude apreciar en ellos profundidad de ojo como al estar viendo un ojo vivo». En estos ojos aparece el efecto Púrkinje-Sánsom: se triplica la imagen en la córnea y en las dos caras del cristalino. Este efecto fue estudiado por el Dr. Púrkinje de Breslau y Sánsom de París, y en oftalmología se conoce por el fenómeno Púrkinje-Sánsom. Este fenómeno, exclusivo del ojo vivo, fue observado también en el ojo de la Virgen de Guadalupe, por el Dr. Rafael Torija con la ayuda de un oftalmoscopio. Él lo certifica con estas palabras: «Los ojos de la Virgen de Guadalupe dan la impresión de vitalidad». Lo mismo afirman los doctores Guillermo Silva Ribera, Ismael Ugalde, Jaime Palacio, etc. Desde el año 1950, los ojos de la Virgen de Guadalupe han sido examinados por una veintena de oftalmólogos. 3ª parte: Conclusiones de un estudio basado en tecnología digital La tecnología digital da nueva luz a uno de los fenómenos que es todavía una incógnita para la ciencia: el misterio de los ojos de la Virgen de Guadalupe. Los resultados de esta investigación fueron revelados por el ingeniero José Aste Tonsman, del Centro de Estudios Guadalupanos de México, en el Ateneo pontificio "Regina Apostolorum", de Roma.</p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;">El doctor Aste, graduado en ingeniería en sistemas ambientales por la Universidad de Cornell, ha estudiado durante más de veinte años la imagen impresa de la Virgen en el burdo tejido hecho con fibras de maguey -una especie de cactus- de la tilma del beato Juan Diego, el indígena que recibió las apariciones que cambiaron decisivamente la historia de México. Se trata de una tela que no dura más de veinte años, pero la imagen se mantiene intacta como el primer día desde hace casi cinco siglos, después de haber permanecido más de un siglo sobre una pared húmeda, entre el humo de miles de velas, y manoseada por muchedumbres de indios.</p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;">En su conferencia, el doctor Aste insistió en que nos encontramos ante una imagen "que no ha sido pintada por mano de hombre". Ya en el siglo XVIII varios científicos realizaron pruebas científicas que mostraban cómo era imposible pintar una imagen así en un tejido de tal textura. Richard Jun, premio Nobel de Química -recordó el doctor Aste Tonsman-, hizo análisis químicos en los que se pudo constatar que la imagen no tiene colorantes naturales, ni animales, ni mucho menos minerales. Dado que en aquella época no existían los colorantes sintéticos, la imagen, en este aspecto, es inexplicable.</p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;">En 1979 los estadounidenses Philip Callahan y Jody B. Smith estudiaron la imagen con rayos infrarrojos y descubrieron con sorpresa que no había huella de pintura y que el tejido no había sido tratado con ningún tipo de técnica. Aste se pregunta: "¿Cómo es posible explicar esta imagen y su consistencia en el tiempo sin colores y con un tejido que no ha sido tratado? Es más, ¿cómo es posible que, a pesar de que no haya pintura, los colores mantengan su luminosidad y brillantez?". El ingeniero peruano añadió que "Callahan y Smith han mostrado cómo la imagen cambia ligeramente de color según el ángulo de visión, un fenómeno que se conoce con el término de iridiscencia, una técnica que no se puede reproducir con manos humanas". Pero, en particular, este prestigioso científico investigó el enigma de los ojos.´</p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;">El reflejo transmitido por los ojos de la Virgen de Guadalupe, es la escena en la que Juan Diego mostraba al obispo fray Juan de Zumárraga y a los presentes en la estancia, el manto con la misteriosa imagen el 9 de diciembre de 1531. Comenzó a desarrollar su estudio en 1979. Aumentó los iris de los ojos de la Virgen hasta alcanzar una escala 2.500 veces superior al tamaño real y, a través de procedimientos matemáticos y ópticos, logró identificar doce personajes impresos en los ojos de la Virgen. En los ojos de la Virgen -revela- se encuentran reflejados los testigos del milagro guadalupano, el momento en que Juan Diego mostraba el ayate al obispo.</p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;">Los ojos de la Virgen tienen así el reflejo que hubiera quedado impreso en los ojos de cualquier persona en esa posición. Se puede distinguir un indio sentado, que mira hacia lo alto; el perfil de un hombre anciano, con la barba blanca y la cabeza con calvicie avanzada, como el retrato de Juan de Zumárraga realizado por Miguel Cabrera para representar el milagro; un hombre más joven, con toda probabilidad el intérprete Juan González; un indio de rasgos marcados, con barba y bigote, que abre su propio <img align="right" border="0" height="247" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/ojos.png" vspace="8" width="204" />manto ante el obispo, sin duda Juan Diego; una mujer de rostro oscuro, una sierva negra que estaba al servicio del obispo; un hombre de rasgos españoles que mira pensativo acariciándose la barba con la mano. En definitiva, en los ojos de la imagen de la Virgen de Guadalupe está impresa una especie de instantánea de lo que sucedió en el momento en que tuvo lugar el milagro.</p><p align="justify" class="parr" style="background-color: white; color: #483324; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; text-align: justify;">En el centro de las pupilas, además, a escala mucho más reducida, se puede ver otra escena, totalmente independiente a la primera. Se trata de una familia indígena compuesta por una mujer, un hombre y algunos niños. En el ojo derecho, aparecen otras personas de pie detrás de la mujer. Hasta aquí llega la ciencia, fue la conclusión de Aste Tönsmann. El cómo se ha realizado algo tan maravilloso no es posible descifrarlo con métodos científicos. El investigador peruano, sin embargo, se aventura a ofrecer un por qué: considera que en los ojos de la Virgen hay un mensaje "escondido" reservado para nuestro tiempo en el que la tecnología es apta para descubrirlo, y cuando este mensaje es más necesario.<span class="caafe" style="font-style: italic; font-weight: bolder;"> "Este puede ser el caso de la imagen de la familia en el centro del ojo de la Virgen, en una época en que la familia está bajo un serio ataque en nuestro mundo moderno" .</span></p><table align="center" border="0" cellpadding="0" cellspacing="0" style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: center; width: 8%;"><tbody><tr><td><span class="parr" style="color: #483324; font-weight: bold; text-align: justify;"><img height="194" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/basilica.jpg" width="259" /><img border="0" height="194" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/basilica2.jpg" width="259" /></span></td></tr><tr><td class="virgen" style="color: #24486c; font-style: italic; font-weight: bold;">Basilica de la Virgen de Guadalupe, México</td></tr></tbody></table><p style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: center;"><strong><span class="ti" face="Verdana, Geneva, sans-serif" style="color: #003300; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; text-transform: capitalize;">Ver Tambien:</span></strong><br /><span class="caafe" style="color: #483324; font-style: italic; font-weight: bolder;"><span class="center" style="color: #6f3324; font-style: normal;"><a href="https://virgendeguadalupe.org.mx/en/">Página de la Bas<span lang="es" xml:lang="es">í</span>lica Nra. Sra. de Guadalupe</a><a href="https://www.corazones.org/santos/juan_diego.htm"><br />Nuestra página sobre San Juan Diego<br /></a></span></span><span style="font-family: Verdana;"><span style="color: #483324;"><a href="https://www.corazones.org/lugares/latino_a/mexico/ciudad_mexico/tepeyac/a_tepeyac.htm">Tour Virtual del Santuario de Guadalupe<br /></a></span></span><span style="font-family: Verdana;"><span style="color: #483324;"><a href="https://www.corazones.org/oraciones/oraciones_maria/guadalupe_novena.htm">Novena a Nuestra Señora de Guadalupe</a></span></span></p><table align="center" border="0" cellpadding="0" cellspacing="0" style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: center; width: 70%;"><tbody><tr><td align="center"><p><span class="dorad" style="color: #24486c; font-weight: bold; text-decoration-line: underline;">B. JUAN PABLO II Y LA VIRGEN DE GUADALUPE</span><br /><span class="center" style="color: #6f3324; font-weight: bold;">Ella es la Estrella de la Primera y la Nueva Evangelización!</span></p></td></tr></tbody></table><p align="justify" class="ti" style="background-color: white; color: #003300; font-family: Verdana, Geneva, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"> </p><table align="center" border="0" cellpadding="0" cellspacing="0" style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: center; width: 35%;"><tbody><tr><td align="center"><span class="ti" face="Verdana, Geneva, sans-serif" style="color: #003300; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variant-position: normal; font-weight: bold; text-transform: capitalize;"><img height="259" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/imagesCACUXZLQ.jpg" width="194" /></span></td></tr></tbody></table><p align="justify" style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif;"><span class="center" style="color: #6f3324; font-weight: bold;">Homilías del B. Juan Pablo II en México</span></p><p align="justify" style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif;"><span class="zum" style="color: #336633; font-style: italic; font-weight: bold;">1979<br /><img alt="" border="0" height="24" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/star1.png" width="27" /></span><span class="virgen" style="color: #24486c; font-style: italic; font-weight: bold; text-align: center;"><a class="virgen" href="http://www.vatican.va/holy_father/john_paul_ii/homilies/1979/documents/hf_jp-ii_hom_19790127_messico-guadalupe_sp.html" style="color: #24486c; text-decoration-line: none;" target="_blank">Santuario de la Virgen de Guadalupe, 27 de enero de 1979: "Deseamos poner en tus manos el porvenir de la Evangelización de América"</a></span><br /><span class="zum" style="color: #336633; font-style: italic; font-weight: bold;"><img alt="" border="0" height="24" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/star1.png" width="27" /></span><span class="virgen" style="color: #24486c; font-style: italic; font-weight: bold; text-align: center;"><a class="virgen" href="http://www.vatican.va/holy_father/john_paul_ii/speeches/1979/january/documents/hf_jp-ii_spe_19790127_messico-guadalupe-sac-relig_sp.html" style="color: #24486c; text-decoration-line: none;" target="_blank">Encuentro con los sacerdotes y religiosos, en la Bas. de Nuestra Señora de Guadalupe Sábado 27 de enero de 1979: "bajo la mirada materna de la Virgen".</a></span><br /><span class="zum" style="color: #336633; font-style: italic; font-weight: bold;"><img alt="" border="0" height="24" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/star1.png" width="27" /></span><span class="virgen" style="color: #24486c; font-style: italic; font-weight: bold; text-align: center;"><a class="virgen" href="http://www.vatican.va/holy_father/john_paul_ii/speeches/1979/january/documents/hf_jp-ii_spe_19790127_messico-guadalupe-religiose_sp.html" style="color: #24486c; text-decoration-line: none;" target="_blank">Encuentro con las religiosas en la Basilica de Guadalupe, Enero 1979: "Ante ella, modelo perfecto de mujer, el ejemplo mejor de vida dedicada enteramente a su Hijo"</a></span><br /><span class="virgen" style="color: #24486c; font-style: italic; font-weight: bold; text-align: center;"><span class="zum" style="color: #336633;"><img alt="" border="0" height="24" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/star1.png" width="27" /></span><a class="virgen" href="http://www.vatican.va/holy_father/john_paul_ii/speeches/1979/january/documents/hf_jp-ii_spe_19790128_messico-puebla-episc-latam_sp.html" style="color: #24486c; text-decoration-line: none;" target="_blank">Discurso a la III Conferencia General del Episcopado Latinoamericano, Puebla, México Domingo 28 de enero de 1979: "Que la estrella de la Nueva Evangelización, sea vuestra guía"</a></span><br /></p><table align="center" border="0" cellpadding="0" cellspacing="0" style="background-color: white; color: #a08768; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: center; width: 35%;"><tbody><tr><td align="center"><span class="zum" style="color: #336633; font-size: 14px; font-style: italic; font-weight: bold;"><img alt="" border="0" height="24" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/star1.png" width="27" /><br /><br /><img height="212" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/guadalupe/imagesCAC6KSQX.jpg" width="172" /><br /><br />Fuente: <a href="https://www.corazones.org/maria/america/mexico/pagina_principal_guadalupe.html" target="_blank">Corazones.org</a></span></td></tr></tbody></table>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-29317815236998119062023-11-27T12:11:00.002-03:002023-12-12T12:35:47.868-03:0027 de noviembre: Solemnidad de Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhnsquG7CsWTqvF6zvzqpE__Nypy8HyWbpZYrnQvBMqeMq4AtWkcVAk4Sw-pvV4u5ZjYKZ0bpx466SeWBx43-FfoIxu6JfXEH6dozmHzftKG8H3DyCWvzukjVjfv52wQDxy6IWDCxYT2inRpOn48mjec9eNKwCWi4v1C-2VR0_f7pIW-xG4Hif70FunwnJE/s378/Virgen-de-la-medalla-milagrosa.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="378" data-original-width="223" height="413" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhnsquG7CsWTqvF6zvzqpE__Nypy8HyWbpZYrnQvBMqeMq4AtWkcVAk4Sw-pvV4u5ZjYKZ0bpx466SeWBx43-FfoIxu6JfXEH6dozmHzftKG8H3DyCWvzukjVjfv52wQDxy6IWDCxYT2inRpOn48mjec9eNKwCWi4v1C-2VR0_f7pIW-xG4Hif70FunwnJE/w244-h413/Virgen-de-la-medalla-milagrosa.jpg" width="244" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><br /><p></p><h2><center><span style="font-family: Times New Roman;">NUESTRA SEÑORA DE LA MEDALLA MILAGROSA<br />7. HISTORIA</span><span style="font-family: Verdana;"> <a href="https://www.devocionario.com/maria/medalla_3.html#N1">[1]</a></span><a name="P1"></a></center></h2><p></p><center><span style="color: black; font-family: Times New Roman;">Páginas: 1. </span><span style="font-family: Times New Roman;"><a href="https://www.devocionario.com/maria/medalla_1.html">Oraciones</a></span><span style="color: black; font-family: Times New Roman;"> | 2. </span><span style="font-family: Times New Roman;"><a href="https://www.devocionario.com/maria/medalla_2.html">Triduo</a></span><span style="color: black; font-family: Times New Roman;"> | </span><span style="font-family: Times New Roman;">3. <a href="https://www.devocionario.com/maria/medalla_8.html">Novena breve</a><br />4. <a href="https://www.devocionario.com/maria/medalla_5.html">Novena (1/3)</a> | 5. <a href="https://www.devocionario.com/maria/medalla_6.html">Novena (2/3)</a> | 6. <a href="https://www.devocionario.com/maria/medalla_7.html">Novena (3/3)</a></span><br /><span style="color: black; font-family: Times New Roman;">7. </span><span style="font-family: Times New Roman;">Historia | 8. <a href="https://www.devocionario.com/maria/medalla_4.html">La medalla</a></span><br /><br /><br /><table border="0" cellpadding="0" cellspacing="2" style="width: 96%;"><tbody><tr><td width="100%"><p><img align="LEFT" alt="[Estampa de Santa Catalina Labouré]" border="1" height="300" hspace="10" naturalsizeflag="3" src="https://www.devocionario.com/imagenes/medalla1.jpg" vspace="5" width="147" /><b></b></p><div style="text-align: justify;"><b><b><span style="font-family: Verdana;">PRIMEROS DÍAS DE SOR CATALINA</span></b></b></div><p></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Nacida Sor Catalina Labouré, con lo mejor del año (mayo) de 1806, fue toda su vida sencilla y aromosa flor: galardonada en sus días con abundante rocío del Cielo.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Tierna devoción a María, su aliento de toda hora. Muy niña (9 años) perdió a su madre. Fue entonces, cuando una criada de la granja la sorprendió encaramada sobre una mesa, y abrazando con todo el poder de sus, aún débiles brazos, a una imagen de la Señora.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">La iglesia parroquial de Moutiers -Saint Jean- fue testigo de sus anhelos eucarísticos. Desde el día de su primera Comunión (1818) se hizo "mística de todo en todo", -cual decía con donaire su buena hermana Tonina.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Y se le echaba de ver su inclinación a las cosas de Dios por su afán de visitar a las Hijas de la Caridad; y más que en otra cosa alguna, en su diligencia por acudir a los oficios divinos.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Por un sueño vino en conocimiento de su particular vocación. Consistió éste en la aparición de un anciano sacerdote que le habló en estos términos: <i>"ahora huyes de mí, hija mía; día vendrá, cuando tengas a gran contento, ser mía. Sus designios tiene Dios sobre ti. No lo olvides".</i></span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">El párroco de Chatillón la descifró el sueño de este modo: <i>"no abrigues la menor duda; no era otro ese anciano, sino S. Vicente de Paúl, quien te quiere para Hija de la Caridad". </i>Ella misma así lo confirmó, reconociendo al anciano del sueño en un cuadro, que del Santo tenían las Hermanas de Chatillón.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Por dos años hubo de luchar con el ingenuo rigor de su padre; para, al fin, ingresar el 21 del mes de abril de 1830 en el Noviciado de las Hijas de la Caridad en París.</span></p><p style="text-align: justify;"> </p><p style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: Verdana;">SOR CATALINA HIJA DE LA CARIDAD</span></b></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Ya en el Noviciado, comenzó a gozar favores extraordinarios del Cielo. Se le ponía el Señor a ojos vistas en el Sacramento del Amor. Una sola vez se le ocultó; cuando ella pensó engañarse en aquello que veía.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Se celebraban por aquellos días las solemnidades que precedieron a la apoteosis del humilde S. Vicente de Paúl por las calles de París con motivo de la translación de sus gloriosas reliquias; y dice la Hermana que halló en todo tanta dicha y contento, que para ella ya no quedaba mas que pedir ni esperar en este mundo. Recibió del Santo Patriarca certeras enseñanzas y seguridades muy completas para sus dos Comunidades.</span></p><p style="text-align: justify;"> </p><p style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: Verdana;">APARICIONES</span></b></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Mas, entre todos estos favores, llevan la primacía en el conocimiento del pueblo cristiano, aquellos que le hizo la Reina del Cielo, y que vamos a referir.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">La noche del 18 de junio del dicho año, 1830, fue la escogida por la Virgen Santísima para hacer entrega de sus cartas credenciales a la Venerable Hermana.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Para detalles, nadie como la propia Sor Catalina, quién así lo describe: <i>Era tanto mi deseo de ver a la Virgen, que me acosté con la confianza de que San Vicente había de conseguírmelo de la Señora. Serían no más que las once y media de la noche. cuando oí que me llamaban: "Hermana. Hermana, Hermana". Desperté; miré del lado por donde la voz venía. Corrí la cortina; y vi a un niño, como de cinco años que vestía de blanco; y así me dijo: "Ven a la capilla, que allí te espera la Virgen". Tranquilizada por él, dime prisa en vestirme; y le seguí… No pequeña fue mi sorpresa, viéndolo todo iluminado; mas esta mi sorpresa creció de punto ante la claridad de la capilla. Recordábame ésta la misa de Navidad. Sin embargo, por ningún lado se echaba de ver la presencia de la Virgen.</i></span></p><p><i><span style="font-family: Verdana;"><img alt="[La virgen se ofrece sentada a Catalina]" border="1" height="205" naturalsizeflag="3" src="https://www.devocionario.com/imagenes/milagro2.jpg" style="text-align: right;" width="120" /></span></i></p><div style="text-align: justify;"><i><span style="font-family: Verdana;"><i><span style="font-family: Verdana;">Arrodillada, hacíaseme largo el tiempo de espera. Acrecíalo el temor de verme descubierta. Llegó la hora. Y el niño me previno con estas palabras: "Mira, ahí tienes a la Virgen Santísima". Noté como un roce de sedas que se dirigía al lado del Evangelio, a un sillón que allí había. Era la Virgen, quien se me ofrecía sentada. Creo imposible describir cuanto veía y ocurría en mi: algo así como un temor de verme engañada; y de que aquella a quien yo veía, no fuera la Santísima Virgen. Mas, el ángel de mi guarda -que no era otro el niño- me increpó un tanto severo y sin más dudar, me arrodillé junta a Ella y puse mis manos en su regazo"</span></i></span></i></div><p></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Y allí, mano a mano, como de Madre a ja, <i>"quiero, hija mía, me dijo, nombrarte por mi embajadora. Sufrirás no poco; mas vencerás, pensando ser todo para la gloria de Dios. Con sencillez y confianza di cuanto entiendas y veas"</i>. Prudente la Hermana, pidió prendas de cuanto había visto y oído. Prenda que la Señora le dio cumplidas. Profetizó la Hermana. Presto y cuando menos se esperaba, tuvieron sus profecías cabal cumplimiento.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">En estas se hallaba el asunto, que acreditaba la misión de Sor Catalina Labouré, cuando la Virgen María tuvo por bien dejarse ver otra vez en la tarde del 27 de noviembre del mismo año.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Demos la palabra a Sor Catalina: <i>Vi a la Virgen Santísima en todo el esplendor de su belleza. Indecible al labio humano. . . . Bañada de luz su figura. Asentaba los pies sobre una media esfera... En sus manos, a la altura del pecho, otra esfera más pequeña. Alzados los ojos al Cielo, noté cómo sus dedos tenían anillos, de los cuales brotaban pequeños haces de luz.... Viendo lo cual, oí una voz que así me dijo: "Figura el globo al mundo entero y a todos y cada uno de los mortales." "Son los rayos símbolo de cuantas gracias concedo a quienes me las piden".</i></span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Gozaba la Hermana con lo ya visto, cuando<i> al punto </i>- prosigue la misma- <i>hízose en torno de la Virgen Santísima a modo de óvalo con estas palabras, en caracteres de oro: "¡Oh María sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos!"</i></span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Volvióse la visión y notó la Hermana una letra M y sobre ésta una Cruz descansando en una barra. Debajo de lo anterior, el Corazón de Jesús coronado de espinas y el de María atravesado con una espada, Y todo ello, circundado con doce estrellas. Se dejó oír al mismo tiempo una voz, que así decía: <i>"Acuñad una medalla según el modelo. Cuantos la lleven consigo, recibirán gracias sin cuento… Llevadla con entera confianza."</i></span></p><p style="text-align: justify;"> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh73gr7mKJ61jy5Rb2dlwOOpMQoiFYav-W2n9b1ijlGXZNpXEoZLwMA5SM7HC4HLDSHHEw1UdSSkaaakjuPMR8etGbKuaui2n0cO588wgMvymIG6LZgbHyw4j_R-Tav4qLkrZPht7hecCbPDt89F2eS0SR7WpHVANCze6QyNc_ZVvJcCKuAHtqBGaKlISuA/s279/descarga%20(15).jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="180" data-original-width="279" height="180" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh73gr7mKJ61jy5Rb2dlwOOpMQoiFYav-W2n9b1ijlGXZNpXEoZLwMA5SM7HC4HLDSHHEw1UdSSkaaakjuPMR8etGbKuaui2n0cO588wgMvymIG6LZgbHyw4j_R-Tav4qLkrZPht7hecCbPDt89F2eS0SR7WpHVANCze6QyNc_ZVvJcCKuAHtqBGaKlISuA/s1600/descarga%20(15).jpg" width="279" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><br /><p></p><p style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: Verdana;">DIFUSIÓN PRODIGIOSA</span></b></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">A toda luz resulta claro que Sor Labouré, no de menguados ánimos, sintiera vivos deseos de ver acuñada la medalla. Le salió al paso la fría prudencia de su director, el P. Aladel, C.M. Y ésta, junto con otras circunstancias, dieron no poco que sufrir a la Hermana. Acuñada, por fin, la Medalla en 1832, hízose luego dueña del mundo entero. El pueblo cristiano, a vista de tanta enfermedad ahuyentada, de tanto mal hábito quebrantado, y virtudes adquiridas; de tanto peligro alejado y bendiciones obtenidas por la Santa Medalla, dio en llamarla Milagrosa. Nombre que ostenta con primacía sobre todo otro objeto de devoción.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Papas y reyes; grandes y pequeños de todas las edades, la proclaman de entonces acá la Medalla de María Milagrosa. Se cumplió así el anhelo de Sor Catalina: <i>"Por la Medalla será María la Reina del universo.</i></span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;"><i>Fuente: <a href="https://www.devocionario.com/maria/medalla_3.html" target="_blank">Devocionario.com</a></i></span></p></td></tr></tbody></table></center>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-13897516659966528812023-11-26T11:53:00.017-03:002023-12-12T12:11:09.268-03:0026 de noviembre: Solemnidad de Cristo Rey del Universo<p style="text-align: center;"><span style="font-size: medium;"> </span></p><p style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjmrs6O5CTTWh8bBxKP6PovL9xs88bLYqRqHLrXrWC6ECAbjDaAlP6O_67N6LC0_XowJGK88by3QA7fBmDJuI_s7OazJAH1uSlKi8kxv3RWhhHT9VM-LZZnCn2DLfGXAd9RM9ZRAuKzk_pQF4m553DBMHdP16kN3k549eCwJjb1AdsnfTly9F5UNIlhvRz3/s1010/Cristo-re.jpeg" style="background-color: white; font-family: Roboto, Verdana, Arial, sans-serif; font-size: x-large; font-weight: bold; margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1010" data-original-width="768" height="368" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjmrs6O5CTTWh8bBxKP6PovL9xs88bLYqRqHLrXrWC6ECAbjDaAlP6O_67N6LC0_XowJGK88by3QA7fBmDJuI_s7OazJAH1uSlKi8kxv3RWhhHT9VM-LZZnCn2DLfGXAd9RM9ZRAuKzk_pQF4m553DBMHdP16kN3k549eCwJjb1AdsnfTly9F5UNIlhvRz3/w279-h368/Cristo-re.jpeg" width="279" /></a></p><p style="text-align: center;"><span face="Roboto, Verdana, Arial, sans-serif" style="background-color: white; text-align: justify;"><span style="color: #990000; font-size: large;"><b><br />Solemnidad de Cristo Rey</b></span></span></p><p style="text-align: justify;"><span face="Roboto, Verdana, Arial, sans-serif" style="color: #990000; font-size: medium;">¿Cuál es el significado de Cristo Rey?</span></p><p style="text-align: justify;"><span face="Roboto, Verdana, Arial, sans-serif" style="color: #990000; font-size: medium;">Cristo Rey es uno de los títulos más importantes de Jesús. Aunque Jesucristo no fue un rey en el sentido terrenal, es el Divino Rey del Universo, que une a toda la creación con el Padre. Como nos dice San Pablo,</span></p><p style="text-align: justify;"><span face="Roboto, Verdana, Arial, sans-serif" style="font-size: large;"><span style="color: #990000;">1 Cor. 15: 25-28 Porque es necesario que [Cristo] reine hasta que haya puesto a todos sus enemigos debajo de sus pies. El último enemigo en ser destruido es la muerte. Porque Dios ha sometido todas las cosas bajo sus pies. . .. Cuando todas las cosas le estén sujetas, entonces también el Hijo mismo se sujetará al que le sujetó a él todas las cosas, para que Dios sea todo en todos.</span></span></p><p><span face="Roboto, Verdana, Arial, sans-serif" style="background-color: white; color: #38393a; font-size: 26px; text-align: justify;"><br /></span></p><div id="articulo" style="background-color: white; box-sizing: border-box; direction: ltr; font-family: "Helvetica Neue", Helvetica, Helvetica, Arial, sans-serif; margin: 0px; padding: 0px;"><span class="art_descripcion" face="Roboto, Verdana, Arial, sans-serif" style="box-sizing: border-box; color: #38393a; font-size: 16px; line-height: 1.1; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;">Celebración que cierra el Año Litúrgico en el que se ha meditado el misterio de su vida y predicación</span><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><span class="art_autor" face="Roboto, Verdana, Arial, sans-serif" style="box-sizing: border-box; color: #4f5053; font-size: 14px; line-height: 1.3; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;">Por: Redacción | Fuente: ACI Prensa</span><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><span style="color: #989898; font-size: 12px; height: auto;"><img height="279" src="https://imagenes.catholic.net/imagenes_db/316f71_cristo-rey-1.jpg" style="box-sizing: border-box; clear: left; float: left; height: auto; margin: 0px; max-width: 100%; padding: 0px 10px 0px 0px;" width="280" /></span><div align="justify" id="art_texto" style="box-sizing: border-box; direction: ltr; font-family: Roboto, Verdana, Arial, sans-serif; line-height: 1.3; margin: 0px; padding: 0px;"><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;">La celebración de la Solemnidad de Nuestro Señor Jesucristo, Rey del Universo, cierra el Año Litúrgico en el que se ha meditado sobre todo el misterio de su vida, su predicación y el anuncio del Reino de Dios.</span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;">La fiesta de Cristo Rey fue instaurada por el Papa Pío XI el 11 de diciembre de 1925. El Papa quiso motivar a los católicos a reconocer en público que el mandatario de la Iglesia es Cristo Rey.</span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;">Durante el anuncio del Reino, Jesús nos muestra lo que éste significa para nosotros como Salvación, Revelación y Reconciliación ante la mentira mortal del pecado que existe en el mundo. Jesús responde a Pilatos cuando le pregunta si en verdad Él es el Rey de los judíos: "Mi Reino no es de este mundo. Si mi Reino fuese de este mundo mi gente habría combatido para que no fuese entregado a los judíos; pero mi Reino no es de aquí" (Jn 18, 36). Jesús no es el Rey de un mundo de miedo, mentira y pecado, Él es el Rey del Reino de Dios que trae y al que nos conduce.</span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"> </p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; color: red; margin: 0px; padding: 0px;"><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">LA FIESTA</strong></span></span></span></p><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><div align="center" style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-size: 12px; margin: 0px; padding: 0px;"></div><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;">Cristo Rey anuncia la Verdad y esa Verdad es la luz que ilumina el camino amoroso que Él ha trazado, con su Vía Crucis, hacia el Reino de Dios. "Si, como dices, soy Rey. Yo para esto he nacido y para esto he venido al mundo: para dar testimonio de la verdad. Todo el que es de la verdad escucha mi voz."(Jn 18, 37) Jesús nos revela su misión reconciliadora de anunciar la verdad ante el engaño del pecado. Así como el demonio tentó a Eva con engaños y mentiras para que fuera desterrada, ahora Dios mismo se hace hombre y devuelve a la humanidad la posibilidad de regresar al Reino, cuando cual cordero se sacrifica amorosamente en la cruz.</span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;">Esta fiesta celebra a Cristo como el Rey bondadoso y sencillo que como pastor guía a su Iglesia peregrina hacia el Reino Celestial y le otorga la comunión con este Reino para que pueda transformar el mundo en el cual peregrina.</span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;">La posibilidad de alcanzar el Reino de Dios fue establecida por Jesucristo, al dejarnos el Espíritu Santo que nos concede las gracias necesarias para lograr la Santidad y transformar el mundo en el amor. Ésa es la misión que le dejo Jesús a la Iglesia al establecer su Reino.</span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;">Se puede pensar que solo se llegará al Reino de Dios luego de pasar por la muerte pero la verdad es que el Reino ya está instalado en el mundo a través de la Iglesia que peregrina al Reino Celestial. Justamente con la obra de Jesucristo, las dos realidades de la Iglesia -peregrina y celestial- se enlazan de manera definitiva, y así se fortalece el peregrinaje con la oración de los peregrinos y la gracia que reciben por medio de los sacramentos. "Todo el que es de la verdad escucha mi voz."(Jn 18, 37) Todos los que se encuentran con el Señor, escuchan su llamado a la Santidad y emprenden ese camino se convierten en miembros del Reino de Dios.</span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;">"Por ellos ruego; no ruego por el mundo, sino por los que tu me has dado, porque son tuyos; y todo lo mío es tuyo y todo lo tuyo es mío; y yo he sido glorificado en ellos. Yo ya no estoy en el mundo, pero ellos si están en el mundo, y yo voy a ti. Padre santo, cuida en tu nombre a los que me has dado, para que sean uno como nosotros. ...No te pido que los retires del mundo, sino que los guarde del Maligno. Ellos no son del mundo, como yo no soy del mundo. Santifícalos en la verdad: tu palabra es verdad." (Jn 17, 9-11.15-17)</span></span></p><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><div align="center" style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-size: 12px; margin: 0px; padding: 0px;"><span id="separadorpublicidad" style="box-sizing: border-box; color: black; font-size: 13px; line-height: 1.3; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;">|</span><a href="https://es.catholic.net/op/contacto/" style="box-sizing: border-box; color: #376d9b; font-family: Roboto, Arial, sans-serif; font-size: 16px; line-height: 1.2; margin: 0px; padding: 0px; text-decoration-line: none;"></a><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /></div><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;">Ésta es la oración que recita Jesús antes de ser entregado y manifiesta su deseo de que el Padre nos guarde y proteja. En esta oración llena de amor hacia nosotros, Jesús pide al Padre para que lleguemos a la vida divina por la cual se ha sacrificado: "Padre santo, cuida en tu nombre a los que me has dado, para que sean uno como nosotros." Y pide que a pesar de estar en el mundo vivamos bajo la luz de la verdad de la Palabra de Dios.</span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;">Así Jesucristo es el Rey y el Pastor del Reino de Dios, que sacándonos de las tinieblas, nos guía y cuida en nuestro camino hacia la comunión plena con Dios Amor.</span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"> </p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; color: red; margin: 0px; padding: 0px;"><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">CAMPO DE LA REALIZA DE CRISTO</strong></span></span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;"><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">a) En lo espiritual</strong></span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;">Sin embargo, los textos que hemos citado de la Escritura demuestran, y el mismo Jesucristo lo confirma con su modo de obrar, que este reino es principalmente espiritual y se refiere a las cosas espirituales. En efecto, en varias ocasiones, cuando los judíos, y aun los mismos apóstoles, imaginaron erróneamente que el Mesías devolvería la libertad al pueblo y restablecería el reino de Israel, Cristo les quitó y arrancó esa vana imaginación y esperanza. Asimismo, cuando iba a ser proclamado Rey por la muchedumbre, que, llena de admiración, le rodeaba, El rehusó tal título de honor huyendo y escondiéndose en la soledad. Finalmente, en presencia del gobernador romano manifestó que su reino no era de este mundo. Este reino se nos muestra en los evangelios con tales características, que los hombres, para entrar en él, deben prepararse haciendo penitencia y no pueden entrar sino por la fe y el bautismo, el cual, aunque sea un rito externo, significa y produce la regeneración interior. Este reino únicamente se opone al reino de Satanás y a la potestad de las tinieblas; y exige de sus súbditos no sólo que, despegadas sus almas de las cosas y riquezas terrenas, guarden ordenadas costumbres y tengan hambre y sed de justicia, sino también que se nieguen a sí mismos y tomen su cruz.</span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;"><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">b) En lo temporal</strong></span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;">Se cometería un grave error el negársele a Cristo-Hombre el poder sobre todas las cosas humanas y temporales, puesto que el Padre le confió un derecho absolutísimo sobre las cosas creadas, de tal manera que todas están sometidas a su arbitrio. Sin embargo, mientras él vivió sobre la tierra se abstuvo enteramente de ejercitar este poder, despreciando la posesión y el cuidado de las cosas humanas, así también permitió, y sigue permitiendo, que los poseedores de ellas las utilicen.</span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"> </p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; color: red; margin: 0px; padding: 0px;"><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">LOS MEJORES FRUTOS</strong></span></span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;"><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">a) Para la Iglesia</strong></span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;">En efecto: tríbutando estos honores a la soberanía real de Jesucristo, recordarán necesariamente los hombres que la Iglesia, como sociedad perfecta instituida por Cristo, exige —por derecho propio e imposible de renunciar— plena libertad e independencia del poder civil; y que en el cumplimiento del oficio encomendado a ella por Dios, de enseñar, regir y conducir a la eterna felicidad a cuantos pertenecen al Reino de Cristo, no pueden depender del arbitrio de nadie.</span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;">Más aún: el Estado debe también conceder la misma libertad a las órdenes y congregaciones religiosas de ambos sexos, las cuales, siendo como son valiosísimos auxiliares de los pastores de la Iglesia, cooperan grandemente al establecimiento y propagación del reino de Cristo, ya combatiendo con la observación de los tres votos la triple concupiscencia del mundo, ya profesando una vida más perfecta, merced a la cual aquella santidad que el divino Fundador de la Iglesia quiso dar a ésta como nota característica de ella, resplandece y alumbra, cada día con perpetuo y más vivo esplendor, delante de los ojos de todos.</span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;"><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">b) Para la sociedad civil</strong></span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;">La celebración de esta fiesta, que se renovará cada año, enseñará también a las naciones que el deber de adorar públicamente y obedecer a Jesucristo no sólo obliga a los particulares, sino también a los magistrados y gobernantes.</span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;">A éstos les traerá a la memoria el pensamiento del juicio final, cuando Cristo, no tanto por haber sido arrojado de la gobernación del Estado cuanto también aun por sólo haber sido ignorado o menospreciado, vengará terriblemente todas estas injurias; pues su regia dignidad exige que la sociedad entera se ajuste a los mandamientos divinos y a los principios cristianos, ora al establecer las leyes, ora al administrar justicia, ora finalmente al formar las almas de los jóvenes en la sana doctrina y en la rectítud de costumbres. Es, además, maravillosa la fuerza y la virtud que de la meditación de estas cosas podrán sacar los fieles para modelar su espíritu según las verdaderas normas de la vida cristiana.</span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 16px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;"><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">c) Para los fieles</strong></span></span></p><p style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;">Porque si a Cristo nuestro Señor le ha sido dado todo poder en el cielo y en la tierra; si los hombres, por haber sido redimidos con su sangre, están sujetos por un nuevo título a su autoridad; si, en fin, esta potestad abraza a toda la naturaleza humana, claramente se ve que no hay en nosotros ninguna facultad que se sustraiga a tan alta soberanía. Es, pues, necesario que Cristo reine en la inteligencia del hombre, la cual, con perfecto acatamiento, ha de asentir firme y constantemente a las verdades reveladas y a la doctrina de Cristo; es necesario que reine en la voluntad, la cual ha de obedecer a las leyes y preceptos divinos; es necesario que reine en el corazón, el cual, posponiendo los efectos naturales, ha de amar a Dios sobre todas las cosas, y sólo a El estar unido; es necesario que reine en el cuerpo y en sus miembros, que como instrumentos, o en frase del apóstol San Pablo, <em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">como armas de justicia para Dios</em>(35), deben servir para la interna santificación del alma. Todo lo cual, si se propone a la meditación y profunda consideración de los fieles, no hay duda que éstos se inclinarán más fácilmente a la perfección.</span></span></p><h2 style="box-sizing: border-box; direction: ltr; font-family: "Helvetica Neue", Helvetica, Helvetica, Arial, sans-serif; font-size: 27px; line-height: 1.1; margin: 12px 0px; padding: 0px; text-align: center; text-rendering: optimizelegibility;"><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;"><span style="color: #cc0000;">¡Viva Cristo Rey!</span></strong></h2><div style="color: #36383d; font-size: 18px;"><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;"><br /></strong></div></div></div>
<div style="text-align: center;"><iframe allow="accelerometer; autoplay; clipboard-write; encrypted-media; gyroscope; picture-in-picture; web-share" allowfullscreen="" frameborder="0" height="290" src="https://www.youtube.com/embed/geFpYnS2pg8?si=6TQfTWwJysEhKSxW" title="YouTube video player" width="500"></iframe></div>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-29835798537974111902023-10-13T16:11:00.004-03:002023-10-13T16:11:53.335-03:0013 de octubre: Nuestra Señora de Fátima y el Milagro del Sol<p style="text-align: justify;"> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEj2KLkuQgLuZQpoafUwfCpcjXmMfn4ZUby3WJqBszkFTiaAI3Awn_Tw2-r_5kK6anN5GYAFNnBZENfEowWpUO3ZVLNMm62aiy6OELCZHQFJ2vMPAN1U8N7J8skxBpHrIRHIxx38d1nSqymA5zIQC1zajSc20nq0Z5B-tbDVGnaikttoFgTMwB_9mh7wcRMb" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="1044" data-original-width="1067" height="350" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEj2KLkuQgLuZQpoafUwfCpcjXmMfn4ZUby3WJqBszkFTiaAI3Awn_Tw2-r_5kK6anN5GYAFNnBZENfEowWpUO3ZVLNMm62aiy6OELCZHQFJ2vMPAN1U8N7J8skxBpHrIRHIxx38d1nSqymA5zIQC1zajSc20nq0Z5B-tbDVGnaikttoFgTMwB_9mh7wcRMb=w357-h350" width="357" /></a></div><br /><br /></div><p></p><p style="text-align: center;"><span style="font-size: large;">El 1</span><span style="font-family: "Droid Serif", serif; font-size: x-large;">3 de octubre de 1917, la Santa Madre de Dios suplicó, hace exactamente 106 años:</span><span style="font-family: "Droid Serif", serif; font-size: x-large;"> </span></p><p style="text-align: center;"><span style="font-size: x-large;"><em style="box-sizing: inherit; font-family: "Droid Serif", serif;">“No ofendan más a Dios Nuestro Señor </em></span></p><p style="text-align: center;"><span style="font-size: x-large;"><em style="box-sizing: inherit; font-family: "Droid Serif", serif;">que ya está muy ofendido”</em><span style="font-family: "Droid Serif", serif;">.</span></span></p><p style="text-align: center;"><span style="background-color: #eff3f1; color: #242c37; font-family: "Patua One", cursive; font-size: 2.5em;"><br /></span></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: #eff3f1; color: #242c37; font-family: "Patua One", cursive; font-size: 2.5em;">El Milagro del Sol</span></p><table style="box-sizing: inherit; color: black; font-family: "Droid Serif", serif; font-size: 15px; text-align: justify; width: 100%;"><tbody style="box-sizing: inherit;"><tr style="box-sizing: inherit;"><td class="artcontent" style="box-sizing: inherit; padding: 10px;" valign="top" width="*"><table class="tablacen" style="background-color: white; border-radius: 3px; box-shadow: rgb(222, 230, 230) 0px 0px 5px 5px; box-sizing: inherit; clear: both; margin: 20px auto;"><tbody style="box-sizing: inherit;"><tr style="box-sizing: inherit;"><td style="box-sizing: inherit; font-family: "Patua One", cursive; padding: 6px; text-align: center;"><img alt="" height="272" src="https://www.fatima.pe/images/new/2022/tm250a.jpg" style="border-style: none; box-sizing: inherit; height: auto; vertical-align: middle; width: 580px;" width="580" /></td></tr></tbody></table><p class="nariz" style="box-sizing: inherit; color: #787b80; line-height: 1.7em; text-align: center;"><em style="box-sizing: inherit;"><span style="font-size: medium;">El 13 de octubre de 1917 la Virgen de Fátima operó </span></em></p><p class="nariz" style="box-sizing: inherit; color: #787b80; line-height: 1.7em; text-align: center;"><em style="box-sizing: inherit;"><span style="font-size: medium;">uno de los mayores milagros de la historia</span></em></p><p class="autor" style="box-sizing: inherit; color: #566666; line-height: 1.7em; margin-bottom: 2em; text-align: right;"><span style="font-size: small;">Paulo Roberto Campos</span></p><p class="text1" style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">Los cielos de Portugal sirvieron de “púlpito” para que la Divina Providencia predicara al mundo entero. ¡El premio y el castigo! Promesas y advertencias de la Santa Madre de Dios, mediante signos portentosos del Cielo, para tocar el corazón de los fieles, aunque también a los corazones endurecidos.</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">No deja de ser sintomático y simbólico que en Fátima, el 13 de octubre de 1917, la Santísima Virgen haya elegido al “astro rey” para realizar el <em style="box-sizing: inherit;">Milagro del Sol</em>.</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">Un portentoso prodigio sobrenatural que la Virgen operó para confirmar a los ojos de todos, incluso de los incrédulos, la grandeza y la veracidad de sus revelaciones, así como la sinceridad de los tres pequeños pastores de Fátima, Lucía, Francisco y Jacinta.</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">Lucía, al describir a la Virgen de Fátima en sus Memorias, registró de una manera inspirada: Era <em style="box-sizing: inherit;">“una Señora vestida toda de blanco, más brillante que el sol y esparciendo luz más clara e intensa que un vaso de cristal lleno de agua cristalina atravesado por los rayos del sol más ardiente”</em>.<span style="box-sizing: inherit; line-height: 0; position: relative; top: -0.5em; vertical-align: baseline;">1</span></span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">En las Sagradas Escrituras hay una referencia muy sugestiva a la Santa Madre de Dios: <em style="box-sizing: inherit;">Quae est ista quae ascendit sicut aurora consurgens pulchra ut luna electa ut sol terribilis ut castrorum acies ordinata? – “¿Quién es ésta que avanza como la aurora, hermosa como la luna, brillante como el sol, terrible como un ejército en orden de batalla?”</em> (Cant 6, 10). La luna simboliza su misericordia, mientras que el sol es el símbolo de la justicia de aquella que es <em style="box-sizing: inherit;">“terrible como un ejército en orden de batalla”</em>. Veremos cómo en el <em style="box-sizing: inherit;">Milagro del Sol</em> la justicia y la misericordia se manifestaron en la Virgen María.</span></p><p class="subtitulo" style="box-sizing: inherit; color: #566666; font-family: "Patua One", cursive; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">“En octubre haré un milagro para que todos crean”</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">El <em style="box-sizing: inherit;">Milagro del Sol</em>, que ocurrió durante la sexta y última aparición de la Virgen de Fátima en 1917, fue presenciado por aproximadamente 60 mil personas en la Cova da Iría, en el preciso lugar en que hoy se encuentra la famosa “capelinha” de las apariciones. La deslumbrante señal del cielo no fue vista únicamente por los habitantes de aquella región portuguesa, sino también por personas provenientes de diversas partes del país, pertenecientes a todas las clases sociales, creyentes y no creyentes, y de todas las edades. La gran mayoría llegó a pie, muchos andando descalzos en medio del barro, ya que llovía constantemente; otros llegaron a caballo, en carruajes y automóviles, algunos inclusive de lujo. En la víspera del 13 de octubre, fueron tantas las personas que se dirigían a Fátima que algunos editores de periódicos locales, aunque escépticos, decidieron enviar reporteros para que informasen de lo que iba a ocurrir.</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">Y se produjo el gran milagro que, además de ser presenciado por la multitud presente en la Cova da Iría, fue visto por otros innumerables portugueses, pues la manifestación del fenómeno solar alcanzó un radio de más de treinta kilómetros a partir del lugar de las apariciones.</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">Este hecho desmintió de forma irrefutable tanto a los ateos como a la prensa anticlerical de la época, que, pese a tomar conocimiento de aquella extraordinaria comprobación de la existencia de Dios, intentaron esparcir la idea de que el “accidente” era apenas una “sugestión colectiva” o algún “efecto hipnótico”, pues no había sido registrado por ningún observatorio astronómico. Pero justamente el hecho de que no haya sido registrado por los astrónomos comprueba el milagro, porque lo ocurrido no fue un mero fenómeno natural…</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">En aquel histórico día, la Santa Madre de Dios cumplió lo que había prometido a los pastorcitos de Fátima en tres de sus apariciones, cuando dijo: <em style="box-sizing: inherit;">“En octubre haré un milagro para que todos crean”</em>.<span style="box-sizing: inherit; line-height: 0; position: relative; top: -0.5em; vertical-align: baseline;">2</span></span></p><table class="tablacen" style="background-color: white; border-radius: 3px; box-shadow: rgb(222, 230, 230) 0px 0px 5px 5px; box-sizing: inherit; clear: both; margin: 20px auto;"><tbody style="box-sizing: inherit;"><tr style="box-sizing: inherit;"><td style="box-sizing: inherit; font-family: "Patua One", cursive; padding: 6px; text-align: center;"><img alt="" height="276" src="https://www.fatima.pe/images/new/2022/tm250b.jpg" style="border-style: none; box-sizing: inherit; height: auto; vertical-align: middle; width: 580px;" width="580" /></td></tr></tbody></table><p class="subtitulo" style="box-sizing: inherit; color: #566666; font-family: "Patua One", cursive; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">Innumerables testigos fidedignos</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">Las personas que recibieron la gracia de presenciar el <em style="box-sizing: inherit;">Milagro del Sol</em> lo describieron como apocalíptico. Muchos tuvieron la impresión de que estaba llegando el fin del mundo; rezaban el acto de contrición o el Credo; se confesaban en voz alta pidiendo perdón por sus pecados. Hasta los impíos que fueron a Fátima tan solo para mofarse y burlarse, <em style="box-sizing: inherit;">“se postraron, bajando sus cabezas, y prorrumpieron en sollozos y rezos”</em> que daban lástima.<span style="box-sizing: inherit; line-height: 0; position: relative; top: -0.5em; vertical-align: baseline;">3</span></span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">Lo que los ateos pretendieron calificar como un “fenómeno de sugestión colectiva” fue un verdadero y deslumbrante milagro presenciado por miles de personas. Numerosos testimonios han sido publicados en cientos de libros y periódicos. Como resulta imposible reproducirlos aquí, transcribimos extractos de algunos testimonios. Incluso porque se repiten, constituyen una prueba más de su veracidad, ya que todos vieron la misma manifestación en el Sol.</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">En este sentido, empezamos con un documento de gran valor, que constituye uno de los primeros reconocimientos oficiales de la Iglesia a las revelaciones hechas por la Santísima Virgen a los pastorcitos en Fátima. Fue redactado por la autoridad eclesiástica de la región, el obispo de Leiría, Mons. José Alves Correia da Silva, que lo recogió en la página 11 de su Carta Pastoral sobre el culto a Nuestra Señora de Fátima (1930):</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><em style="box-sizing: inherit;"><span style="font-size: small;">“El fenómeno solar del 13 de octubre de 1917, descrito en los periódicos de la época, fue el más maravilloso y el que mayor impresión causó a los que tuvieron la felicidad de presenciarlo.</span></em></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;"><em style="box-sizing: inherit;">“Los tres niños fijaron con antelación el día y la hora en que tendría lugar. La noticia corrió velozmente por todo Portugal y, aunque el día fue inusualmente frío y llovió copiosamente, miles y miles de personas se reunieron en el momento de la última aparición para presenciar todas las manifestaciones del astro rey, rindiendo homenaje a la Reina del Cielo y de la Tierra, más brillante que el Sol en el apogeo de sus luces”</em>.</span></p><p class="subtitulo" style="box-sizing: inherit; color: #566666; font-family: "Patua One", cursive; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">“El Sol bailó al mediodía en Fátima”</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">En su espléndida obra <em style="box-sizing: inherit;">Nossa Senhora de Fátima – Aparições, Culto, Milagres</em>, el padre Luis Gonzaga Ayres da Fonseca SJ, profesor del Pontificio Instituto Bíblico de Roma, después de transcribir declaraciones de testigos, inclusive de la prensa liberal y masónica de la época, consignó lo siguiente:</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;"><em style="box-sizing: inherit;">“Toda la prensa periódica se ocupó ampliamente de los acontecimientos de aquel día, en particular del ‘Milagro del Sol’. Tuvieron mayor resonancia los artículos de ‘O Século’ (13 y 15 de octubre de 1917): ‘En pleno sobrenatural: las Apariciones de Fátima’ y ‘Cosas espantosas: como el Sol bailó al mediodía en Fátima’, porque el autor, Avelino de Almeida, principal redactor del periódico, a pesar de su ostentada incredulidad y sectarismo, prestó lealmente homenaje a la verdad: lo que luego le atrajo las iras del ‘Libre Pensamiento’”</em>.<span style="box-sizing: inherit; line-height: 0; position: relative; top: -0.5em; vertical-align: baseline;">4</span></span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">El libro, que lleva el inspirado título de <em style="box-sizing: inherit;">Era una Señora más brillante que el Sol</em> —un clásico para conocer a fondo la historia de Fátima—, del padre Juan de Marchi IMC, reproduce una noticia del periódico “O Dia”, del 19 de octubre de 1917, de la que extraímos un fragmento sobre el momento de la manifestación solar:</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;"><em style="box-sizing: inherit;">“… Todos lloraban, todos rezaban sombrero en mano con la impresión grandiosa del milagro esperado. Fueron segundos, fueron instantes que parecieron horas ¡de tanta viveza fueron!”</em>.<span style="box-sizing: inherit; line-height: 0; position: relative; top: -0.5em; vertical-align: baseline;">5</span></span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">El padre De Marchi transcribe también un hermoso relato del Dr. Almeida Garrett, entonces catedrático de la célebre Universidad de Coimbra, escrito a petición del canónigo Dr. Manuel Nunes Formigão:</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;"><em style="box-sizing: inherit;">“… De repente se oyó un clamor, como un grito de angustia de toda aquella gente. El Sol, conservando la celeridad de su rotación, se destaca del firmamento, y avanza sanguíneo sobre la tierra amenazando aplastarnos con el peso de su ígnea e ingente mole. Fueron momentos de terrífica impresión”</em>.<span style="box-sizing: inherit; line-height: 0; position: relative; top: -0.5em; vertical-align: baseline;">6</span></span></p><p class="subtitulo" style="box-sizing: inherit; color: #566666; font-family: "Patua One", cursive; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">“Hijo mío, ¿aún dudas de la existencia de Dios?”</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">El mismo 13 de octubre de 1917, el padre Manuel Pereira da Silva escribió a su colega de la región de la Guarda, el canónigo Antonio Pereira de Almeida:</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;"><em style="box-sizing: inherit;">“… En un coche de lujo, junto al cual se encontraba el Dr. Formigão, una señora de mediana edad, elegantemente vestida, se volvió a un muchacho, y le preguntó, presa de indecible conmoción: —‘Hijo mío, ¿aún dudas de la existencia de Dios?’ —‘No, madre —respondió el joven con los ojos arrasados en lágrimas—. No, ¡ya es imposible dudar!’”</em>.<span style="box-sizing: inherit; line-height: 0; position: relative; top: -0.5em; vertical-align: baseline;">7</span></span></p><table class="tablacen" style="background-color: white; border-radius: 3px; box-shadow: rgb(222, 230, 230) 0px 0px 5px 5px; box-sizing: inherit; clear: both; margin: 20px auto;"><tbody style="box-sizing: inherit;"><tr style="box-sizing: inherit;"><td style="box-sizing: inherit; font-family: "Patua One", cursive; padding: 6px; text-align: center;"><img alt="" height="211" src="https://www.fatima.pe/images/new/2022/tm250c.jpg" style="border-style: none; box-sizing: inherit; height: auto; vertical-align: middle; width: 580px;" width="580" /></td></tr></tbody></table><p class="subtitulo" style="box-sizing: inherit; color: #566666; font-family: "Patua One", cursive; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">“Caí de rodillas. Pensé que había llegado el fin del mundo”</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;"><em style="box-sizing: inherit;">Nuestra Señora de Fátima</em> es otro libro imprescindible sobre los magnos acontecimientos en la Cova da Iría, redactado por el historiador y escritor norteamericano William Thomas Walsh, que viajó a Portugal con el propósito de entrevistar a testigos oculares. En sus interrogatorios, entrevistó a personas que le dijeron que con motivo de la milagrosa señal celestial habían exclamado: <em style="box-sizing: inherit;">“¡Ay, Jesús, todos vamos a morir aquí!”</em>; <em style="box-sizing: inherit;">“¡Señora nuestra, sálvanos!”</em>; <em style="box-sizing: inherit;">“¡Oh Dios mío, me arrepiento!”</em>; <em style="box-sizing: inherit;">“¡Oh Dios mío, cuán grande es tu poderío!”</em>; <em style="box-sizing: inherit;">“¡Milagro! ¡Maravilla!”</em>; <em style="box-sizing: inherit;">“¡Los niños tenían razón!”</em>. Muchas otras exclamaciones resonaron en toda la región, de personas que rezaron el acto de contrición imaginando que aquel sería su último instante en este mundo. Todos querían besar las manos de los tres niños, a los que llamaban “santitos”, o al menos tocarlos.</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">Después de reproducir testimonios y entrevistas que había recogido personalmente, Walsh relata: <em style="box-sizing: inherit;">“Viven aún en la vecindad muchos testigos. Hablé con ellos el último verano, incluyendo a tío Marto y su Olimpia </em>[padres de Jacinta y Francisco]<em style="box-sizing: inherit;">, María Carreira, dos de las hermanas de Lucía (María de los Ángeles y Gloria) y otros varios de la población campesina, todos los cuales relataron la misma historia con sinceridad evidente, y cuando mencionaban la caída del Sol se reflejaba siempre un matiz de terror en sus voces. El reverendo padre Manuel Pereira da Silva me dio en esencia los mismos detalles: ‘Cuando vi al Sol descender en zigzag —dijo—, caí de rodillas. Pensé que había llegado el fin del mundo’”</em>.<span style="box-sizing: inherit; line-height: 0; position: relative; top: -0.5em; vertical-align: baseline;">8</span></span></p><p class="subtitulo" style="box-sizing: inherit; color: #566666; font-family: "Patua One", cursive; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">El Sol pareció amenazar y caer sobre la Tierra</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">El renombrado escritor norteamericano, además de recoger testimonios de personas que presenciaron in situ el <em style="box-sizing: inherit;">Milagro del Sol</em>, reproduce también declaraciones de quienes atestiguaron el milagro estando bien lejos de la Cova da Iría. Aquí están algunos de ellos: <em style="box-sizing: inherit;">“El poeta Alfonso Lopes Vieria lo vio desde su casa, en San Pedro de Moel, a 40 kilómetros de Fátima. El padre Ignacio Lourenço dijo más tarde que lo había presenciado desde Alburita, a unos 18 o 19 kilómetros de distancia, cuando era niño de nueve años. Él y algunos compañeros suyos oyeron gritar a personas en la calle próxima. Salieron corriendo de la escuela con su profesora, doña Delfina Pereira Lopes, para ver con asombro el giro y descenso del Sol.</em> […] <em style="box-sizing: inherit;">‘Repentinamente, pareció venirse hacia abajo en zigzag, amenazando caer sobre la tierra. Asustado, corrí a guarecerme entre la multitud. Todos estaban llorando, esperando de un momento a otro el fin del mundo’</em>.</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;"><em style="box-sizing: inherit;">‘Cerca de nosotros había un incrédulo sin religión, que se había pasado la mañana burlándose de los tontos que habían hecho todo aquel viaje hasta Fátima para ir a ver a una niña. Me fijé en él. Aparecía como paralizado, como herido por el rayo, con sus ojos fijos en el Sol. Después le vi temblar de pies a cabeza, y elevando sus manos al cielo cayó de rodillas en el fango, gritando: ¡Nossa Senhora! ¡Nossa Senhora!’”</em>.<span style="box-sizing: inherit; line-height: 0; position: relative; top: -0.5em; vertical-align: baseline;">9</span></span></p><p class="subtitulo" style="box-sizing: inherit; color: #566666; font-family: "Patua One", cursive; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">Fátima: manifestación de la justicia y de la misericordia de Dios</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">Algunos testigos que tuvieron la gracia de presenciar el milagro contaron que, superado el miedo de ser castigados por el Sol y de que fuera el fin del mundo, una vez terminada aquella portentosa manifestación, se encontraron de rodillas, pero sintiendo una alegría indecible por haber sobrevivido. Durante el fenómeno muchos lloraron de miedo; luego de alegría, y abrazaron a sus parientes. Lo cual puede interpretarse como un símbolo de justicia y misericordia, de los castigos y premios anunciados en Fátima. Castigo, por ejemplo, cuando la Santísima Virgen reveló, en la tercera aparición (13 de julio de 1917), que <em style="box-sizing: inherit;">“varias naciones serán aniquiladas”</em>. Premio, cuando profetizó <em style="box-sizing: inherit;">“Por fin, mi Inmaculado Corazón triunfará”</em>.</span></p><table class="tablader" style="background-color: white; border-radius: 3px; box-shadow: rgb(222, 230, 230) 0px 0px 5px 5px; box-sizing: inherit; float: right; margin: 20px;"><tbody style="box-sizing: inherit;"><tr style="box-sizing: inherit;"><td style="box-sizing: inherit; font-family: "Patua One", cursive; padding: 6px; text-align: center;"><img alt="" height="279" src="https://www.fatima.pe/images/new/2022/tm250d.jpg" style="border-style: none; box-sizing: inherit; height: auto; vertical-align: middle; width: 400px;" width="400" /></td></tr></tbody></table><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">El <em style="box-sizing: inherit;">Milagro del Sol</em> nos muestra un avance de la magnitud del anunciado castigo que caerá sobre el mundo por orden de la justicia divina, puesto que la humanidad no se convirtió como había pedido la Virgen de Fátima. Pero también es una manifestación de la misericordia divina, un prenuncio de la alegría de los que se mantuviesen fieles a Ella, con la instauración en la tierra del Reino de María.</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">En nuestros convulsionados días, cargados de amenazas de todo tipo, hasta de bombas atómicas que se ciernen sobre nuestras cabezas como modernísimas “espadas de Damocles”, Fátima representa, además de la justicia, la esperanza y la solución a los graves problemas que afligen a la humanidad. En la aparición que comentamos en este artículo, la del 13 de octubre de 1917, la Santa Madre de Dios suplicó hace exactamente 105 años: <em style="box-sizing: inherit;">“No ofendan más a Dios Nuestro Señor que ya está muy ofendido”</em>.</span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;">Con estas conmovedoras palabras, a las que nuestros oídos no pueden permanecer sordos, la Santísima Virgen dio por concluidas las maravillosas y apocalípticas apariciones de Fátima. Con ellas también terminamos estas consideraciones, permitiéndonos apenas agregar: <em style="box-sizing: inherit;">Si vocem ejus hodie audieritis, nolite obdurare corda vestra – “Si hoy oyereis su voz, no endurezcáis vuestros corazones”</em> (Sal 94, 8). <span style="box-sizing: inherit; font-weight: bolder;"><em style="box-sizing: inherit;"><img alt="" height="12" src="https://www.fatima.pe/images/new/2017/romborojo.gif" style="border-style: none; box-sizing: inherit; vertical-align: middle;" width="12" /></em></span></span></p><p style="box-sizing: inherit; line-height: 1.7em;"><span style="font-size: small;"> Fuente: <a href="https://www.tesorosdelafe.com/articulo-1745-el-milagro-del-sol" target="_blank">Tesoros de la Fe</a></span></p></td></tr></tbody></table>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-3889648150478750502023-09-25T07:12:00.003-03:002023-09-25T07:12:59.809-03:0025 de septiembre: María del Rosario de San Nicolás <p> <img border="0" height="16" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_bars_dividers/rayas_sctjm.jpg" style="background-color: #ebdad3; font-family: Verdana;" width="601" /></p><table align="left" border="0" bordercolor="#111111" cellpadding="10" cellspacing="0" id="table2" style="background-color: #ebdad3; border-collapse: collapse;"><tbody><tr><td width="100%"><p align="center"><b><span lang="es"><span style="color: navy; font-family: Verdana; font-size: medium;"><img alt="Nra. Señora del Rosario de S. Nicolás" border="0" height="396" src="https://www.corazones.org/maria/z_nicolas.jpg" width="261" /><br /></span></span><span style="color: navy; font-family: Verdana; font-size: xx-small;"><span lang="es">Foto de la estatua original del Santuario<br /></span></span></b><i><span style="color: navy; font-family: Verdana; font-size: xx-small;"><span lang="es">corazones.org, Feb. 2002</span></span></i></p><p align="center"><span lang="es"><span style="font-family: Verdana; font-size: x-small;"><img border="0" height="342" src="https://www.corazones.org/lugares/latino_a/argentina/nicolas/z_nicolas_madela.jpg" width="226" /><br /></span></span><span style="font-family: Verdana; font-size: xx-small;"><span lang="es">Madre Adela frente al santuario<br /><br /></span></span><span style="font-size: x-small;"><span style="font-family: Verdana;"><span lang="es"><img border="0" height="297" src="https://www.corazones.org/lugares/latino_a/argentina/nicolas/z_construccion.jpg" width="197" /></span></span><b><span style="font-family: Verdana; font-size: xx-small;"><span lang="es"><br />Santuario esta en construcción (feb 2002)</span></span></b></span></p><p align="center"> </p></td></tr></tbody></table><p style="text-align: center;"><span lang="es"><b><span style="background-color: #ebdad3; color: maroon; font-family: Verdana; font-size: medium;">MARIA DEL ROSARIO DE SAN NICOLAS</span><span style="background-color: #ebdad3; color: maroon; font-family: Verdana; font-size: x-small;"><br /></span><span style="color: maroon; font-family: Verdana;"><span style="background-color: #ebdad3;">Argentina</span><br /></span></b></span></p><div style="text-align: justify;"><b><span style="color: maroon; font-family: Verdana;"><strong style="text-align: left;"><em><span style="color: maroon;"><span lang="es" style="background-color: white;">Un llamando a la oración, a la conversión y a la consagración</span></span></em></strong></span></b></div><span style="font-family: Verdana;"><div style="text-align: justify;"><strong style="text-align: left;"><em><span style="color: maroon;"><span lang="es" style="background-color: white;">1983</span></span></em></strong></div></span><p></p><p style="text-align: left;"></p><div style="text-align: justify;"><span style="background-color: white;"><span lang="es" style="font-family: Verdana;"> </span><span style="color: navy; font-family: Verdana;"><strong><span lang="es">Ver también:</span></strong></span></span></div><span style="background-color: white;"><span style="font-family: Verdana;"><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;"><span style="color: navy;"><strong><span lang="es"> </span></strong></span></span><span style="font-family: Verdana;"><small><small><small><img height="10" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/b_cadena.jpg" width="21" /></small></small></small></span><span style="color: navy; font-family: Verdana;"><strong><span lang="es"><a href="http://www.virgen-de-san-nicolas.org/">Página del Santuario</a></span></strong></span></div></span><span style="color: navy; font-family: Verdana;"><div style="text-align: justify;"><span style="font-weight: 700;"><br /></span></div><strong><div style="text-align: justify;"><span style="color: navy; font-family: Verdana;"><strong><span lang="es"> </span></strong></span><span lang="es"><span style="font-family: Verdana;"><b><a href="https://www.corazones.org/maria/america/argentina_lujan.htm">Virgen de Luján</a></b></span></span></div></strong></span><span lang="es"><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;"> </span><b style="font-family: Verdana;"><a href="https://www.corazones.org/maria/pampa_maria.htm">Santa María de la Pampa</a></b></div></span></span><p></p><p></p><div style="text-align: justify;"><strong style="font-family: Verdana;"><span style="background-color: white; color: navy;">Reseña Histórica</span></strong></div><span lang="es"><div style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">Desde los orígenes de la parroquia de la ciudad de San Nicolás de los Arroyos, Prov. de Buenos Aires, República Argentina, existió una profunda devoción a la Santísima Virgen, honrada bajo la advocación de Nuestra Señora del Rosario, siendo ella la Primera Patrona del Curato de los Arroyos.</span></div></span><p></p><span style="background-color: white;"><p style="text-align: justify;"><span lang="es"><span style="font-family: Verdana;">En el año 1884, se inauguró el actual templo parroquial de San Nicolás de Bari, y para dicha oportunidad fue donada una hermosa imagen de la Virgen del Rosario, que fue traída desde Roma donde el Papa León XIII la bendijo con una especial bendición para la feligresía de San Nicolás, En esos años se había creado en la Parroquia la Cofradía del Rosario, y se celebraba anualmente esta fiesta de la Virgen con su correspondiente novena preparatoria.</span></span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;"><span lang="es">Ya en nuestros días, el 25 de Setiembre de 1983, en la ciudad de San Nicolás se comienza a asistir a un hecho de características particulares: Una sencilla mujer</span><span lang="en-us"> llamada Gladys Quiroga de Motta</span><span lang="es">, esposa y madre de dos hijas, que solamente había podido cursar el cuarto grado y sin conocimientos teológicos ni bíblicos, manifiesta ver y oír a la Santísima Virgen</span><span lang="en-us">. Mas tarde descubre que la </span><span lang="es">Virgen se le aparece como la Virgen del Rosario, cuya imagen estaba relegada al campanario por su deterioro.</span></span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;"><span lang="es">La Santísima Virgen, según la </span><span lang="en-us">vidente</span><span lang="es">, le había pedido la construcción de un templo en su honor, en el lugar de las apariciones.</span><span lang="en-us"> L</span><span lang="es">a Virgen comienza a darle una serie de mensajes, mayormente exhortativos</span><span lang="en-us">,</span><span lang="es"> juntamente con citas bíblicas, <strong>llamando a la oración, a la conversión y a la consagración.</strong></span></span></p><p style="text-align: center;"></p><div style="text-align: justify;"><span lang="es" style="text-align: left;"><span style="font-family: Verdana;"> </span></span><span style="font-family: Verdana; text-align: left;"><b><img border="0" height="196" src="https://www.corazones.org/lugares/latino_a/argentina/nicolas/z_nicolas_oracion.jpg" width="297" /></b></span></div><span style="color: maroon; font-family: Verdana;"><div style="text-align: justify;"><span lang="es" style="text-align: left;"> </span><span lang="en-us" style="text-align: left;">Interior del Santuari</span><span lang="es" style="text-align: left;">o: Oración ante Nra. Sra. del Rosario</span></div></span><p></p></span><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white;"><b><span style="font-family: Verdana;"><span lang="es"> </span><span lang="en-us"> </span></span></b><b><span style="font-family: Verdana;"><a href="https://www.corazones.org/lugares/latino_a/argentina/nicolas/nicolas2.htm"><span lang="es">Más imágenes y oraciones </span></a></span><span lang="en-us"><a href="https://www.corazones.org/lugares/latino_a/argentina/nicolas/nicolas2.htm"><span style="font-family: Verdana;">>>></span></a></span></b></span></p><span style="background-color: white;"><span style="font-size: small;"><b><p style="text-align: justify;"><span style="color: navy; font-family: Verdana;">CRONOLOGIA DE <span lang="en-us">LAS APARICIONES EN </span>SAN NICOLAS</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Seguidamente, se detallan cronológicamente, los hechos de San Nicolás.</span></p></b><p></p><div style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: Verdana;">AÑO 1983</span></b></div><b><div style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: Verdana;">25 de Se<span lang="es">p</span>tiembre </span></b><span style="font-family: Verdana;">Primera aparición de la Virgen a Gladys Quiroga de Motta.</span></div></b><span style="font-family: Verdana;"><div style="text-align: justify;"><b>28 de Se<span lang="es">p</span>tiembre </b>Segunda aparición.</div><b><div style="text-align: justify;"><b>7 de Octubre</b> Gladys pregunta a la Virgen que desea, y recibe la visión de una capilla.</div></b><b><div style="text-align: justify;"><b>12 de Octubre</b> Gladys se confía a un sacerdote.</div></b><b><div style="text-align: justify;"><b>13 de Octubre</b> La Virgen le habla por primera vez.</div></b><b><div style="text-align: justify;"><b><strong>Octubre</strong> </b>Audiencia con el entonces Obispo Diocesano, Mons. Antonio Rossi.</div></b><b><div style="text-align: justify;"><b>15 de Noviembre</b> Gladys recibe el mensaje: <i>"Soy Patrona de esta región. Haced valer Mis derechos".</i></div></b><b><div style="text-align: justify;"><b>Primer mensaje de Cristo. </b>En el futuro Él aparecerá una vez por mes con un mensaje, que prolonga el de la Virgen.</div></b><b><div style="text-align: justify;"><b>19 de Noviembre</b> La Virgen hace conocer a Gladys su misión<i>: "Eres puente de unión". "Predicad mi Palabra".</i></div></b><b><div style="text-align: justify;"><b>24 de Noviembre</b> Un rayo de luz indica a Gladys el emplazamiento del futuro Templo.</div></b><b><div style="text-align: justify;"><b>27 de Noviembre</b> Reconoce la aparición al ver la Imagen de la Virgen del Rosario, relegada en el campanario a consecuencia de su deterioro. La Virgen le dice:"Quiero estar en la ribera del Paraná".</div></b></span><p></p><span style="font-size: small;"><b></b><p style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: Verdana;">AÑO 1984</span></b></p><b></b><p></p><div style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: Verdana;">30 de Octubre</span></b><span style="font-family: Verdana;"> 10,30 horas. Primera Comunión del pequeño Gonzalo y comienzo de su curación.</span></div><span style="font-family: Verdana;"><div style="text-align: justify;"><b>Noviembre</b> Gladys es recibida por el nuevo Obispo de San Nicolás, Mons. Domingo Salvador Castagna (nacido en 1931, consagrado Obispo el 4 de Diciembre de 1978 y trasladado a San Nicolás el 20 de Octubre de 1984.) Audiencia del nuevo Obispo de San Nicolás con el Papa Juan Pablo II.</div></span><p></p><b></b><p></p><div style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: Verdana;">AÑO 1985</span></b></div><b><div style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: Verdana;">Abril Nombramiento de la Comisión de Estudios.</span></b></div><span style="font-family: Verdana;"><div style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: Verdana;">25 de Agosto</span></b><span style="font-family: Verdana;"> Donación de EL CAMPITO por parte del Municipio de San Nicolás.</span></div></span></b><span style="font-family: Verdana;"><div style="text-align: justify;"><b>25 de Octubre</b> Declaración de la Comisión de Estudios.</div></span><p></p><span style="font-size: small;"><b></b><p></p><div style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: Verdana;">AÑO 1986</span></b></div><b><div style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: Verdana;">25 de Febrero </span></b><span style="font-family: Verdana;">Primera Procesión y celebración de la Santa Misa en EL CAMPITO. Presidida por el Vicario General Monseñor Roberto Mancuso.</span></div></b><span style="font-family: Verdana;"><div style="text-align: justify;"><b>25 de Marzo</b> Segunda Procesión y Santa Misa presidida, por primera vez, por el Obispo Diocesano, Monseñor Domingo Castagna.</div><b><div style="text-align: justify;"><b>25 de Mayo</b> Divulgación de la Medalla ( Día de la "Santísima Trinidad")</div></b><b><div style="text-align: justify;"><b>25 de Agosto</b> Mons. Castagna anuncia en su homilía la colocación de la Piedra Fundamental del Santuario.</div></b><strong><div style="text-align: justify;"><strong>1</strong><b>0 de Se<span lang="es">p</span>tiembre</b> Elección del anteproyecto.</div></strong><b><div style="text-align: justify;"><b>23 de Se<span lang="es">p</span>tiembre</b> Nombramiento y constitución de la Comisión "Pro Templo".</div></b><b><div style="text-align: justify;"><b>25 de Se<span lang="es">p</span>tiembre</b> Colocación de la Piedra Fundamental.</div></b><b><div style="text-align: justify;"><b>Setiembre </b>Aparece el primer número de la revista del Santuario: "María del Rosario de San Nicolás".</div></b><strong><div style="text-align: justify;"><strong>2</strong><b>5 de Octubre</b> Inauguración de la Casa del Peregrino y del nuevo edificio propio del Centro de Difusión del Movimiento Mariano.</div></strong></span><p></p><p></p><div style="text-align: justify;"><b style="font-family: Verdana;">AÑO 1987</b></div><span style="font-family: Verdana;"><div style="text-align: justify;"><b>11 de Abril </b>Audiencia de Monseñor Castagna con el Santo Padre en Rosario, con ocasión de la visita del Papa a la Argentina. El Obispo promete al Papa los estudios de San Nicolás.</div><b><div style="text-align: justify;"><b>14 de Agosto</b> Inauguración de la Imprenta del Centro de Difusión del Movimiento Mariano<strong> "San</strong> <b>Maximiliano Kolbe".</b></div></b><b><div style="text-align: justify;"><b>8 de Octubre </b>Firma del contrato con la Empresa constructora "Geriach & Campbell " para la construcción del Templo.</div></b><b><div style="text-align: justify;"><b>13 de Octubre</b> Inicio de las obras de construcción del Santuario.</div></b></span><p></p><span style="font-size: small;"><b></b><p></p><div style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: Verdana;">AÑO 1988</span></b></div><b><div style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: Verdana;">25 de Octubre Fin del trabajo de estructura del Santuario en su primera etapa,</span></b></div></b><p></p><b></b><p></p><div style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: Verdana;">AÑO 1989</span></b></div><b><div style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: Verdana;">19 de Marzo</span></b><span style="font-family: Verdana;"> Traslado de la Imagen y bendición e inauguración del Santuario ( la primera parte construida hasta ese momento). Nombramiento del primer Rector del Santuario, Pbro. Carlos Perez <b>25 de Setiembre</b> Mons. Castagna ordena sacerdote al diácono Carlos Coolican, el cual conjuntamente con el padre Carlos Pérez, el P. Pablo Montero (osb) y el P.Hugo Detto, forma parte de los sacerdotes del Santuario.</span></div></b><span style="font-family: Verdana;"><div style="text-align: justify;"><b>Noviembre </b>Mons. Castagna tiene una nueva audiencia con el Papa Juan Pablo II y lo informa detalladamente sobre la acción pastoral asumida con respecto a esta manifestación de Dios en su Diócesis.</div></span><p></p><b></b><p></p><div style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: Verdana;">AÑO 1990</span></b></div><b><div style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: Verdana;">2 de Febrero </span></b><span style="font-family: Verdana;">Inicio de la segunda etapa de la construcción del Santuario</span></div></b><span style="font-family: Verdana;"><div style="text-align: justify;"><b>11 de Febrero</b> Fin de la catequesis de Nuestra Señora de San Nicolás.</div><b><div style="text-align: justify;"><b>Marzo</b> Aparece el primer número del Boletín del Santuario <b>"María del Rosario de San Nicolás".</b></div></b><b><div style="text-align: justify;"><b>2 de Abril </b>Peregrinación del Padre Gobbi, fundador del Movimiento Sacerdotal Mariano que reúne cerca de 60,000 sacerdotes en todo el mundo.</div></b><b><div style="text-align: justify;"><b>25 de Agosto</b> Monseñor Castagna consagra el Santuario, San Nicolás y los Peregrinos a Dios, por intermedio del Corazón Inmaculado de María.</div></b><b><div style="text-align: justify;"><b>Octubre </b>Monseñor Castagna, elegido por la Conferencia Episcopal, representa a la Iglesia Argentina en el Sínodo de Obispos en Roma.</div></b></span><p></p><b><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Mensajes sobre la medalla</span></p></b><p style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: Verdana;">2/12/84</span></b><span style="font-family: Verdana;"> Me dice: Debéis hacer acuñar una medalla, con mi imagen de la advocación del Rosario de san Nicolás y en el reverso, la Santísima Trinidad con siete estrellas.</span></p><b></b><p style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: Verdana;">25-9-85</span></b><span style="font-family: Verdana;"> Hija mía: te diré el significado de las Siete estrella: son siete gracias, que mi hijo Jesucristo concederá, a quien la lleve sobre su pecho. Alabado sea el Señor.</span></p><b><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Mensaje del escapulario</span></p></b><p style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: Verdana;">5-3-86</span></b><span style="font-family: Verdana;"> "Hija mía: Encárgate para que se haga un escapulario. Que sea de color blanco ya que el blanco es el símbolo de la pureza. Mi imagen llevará los colores celeste y rosado. Este escapulario deberá ser destinado a los enfermos del cuerpo y del alma y lo llevará aquel que realmente sienta esa necesidad en su corazón, porque con el escapulario, ira el compromiso de orar a María del Rosario. Este pedido mío apremia. Amén"<b> </b></span></p></span></span></span></span><span><b></b><p style="text-align: justify;"><b><span style="color: navy; font-family: Verdana;">"MENSAJES REFERIDOS A JESUS </span></b><span style="color: navy; font-family: Verdana;">"</span></p></span></span><span style="font-size: small;"><span style="background-color: white;"><b></b></span><p style="text-align: justify;"><b><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">2-2-87 1089</span></b></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">(Festividad de la Presentación del Señor)</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">Hijos míos: vivid conmigo este día, experimentad en vuestros corazones, el gozo de sentiros muy cerca de Jesús, sentid vosotros también el amor a Jesús.<br />Id como El, en brazos de su Madre cuando fue llevado al templo.<br />Dejaos encontrar por Mí, dejaos conducir por Mí dejaos purificar por Mí.<br />Bendito sea el Santísimo.</span></p><span style="background-color: white;"><b></b></span><p style="text-align: justify;"><b><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">3-2-85 465</span></b></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">Hija: Quiero que sepáis, el por qué de mi Imagen con el Niño y el Rosario.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">El Niño, significa pureza y nueva vida, ya que Jesús Niño es el renacer a la vida, es la fuente salvadora de todo alma sedienta.<br />El Rosario os lo estoy ofreciendo como consuelo, para que, rezando el Santo Rosario, volquéis todos vuestros dolores, vuestras necesidades y súplicas.<br />Como Madre, os escucho queridos hijos, grande es mi amor por vosotros.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">Hoy me dice la Virgen cómo era Jesús desde que era pequeño. Te diré: A los tres años tenía ya una gran inteligencia, tenía el entendimiento que Dios Padre le daba. Creció sabiendo que El era el Hijo de Dios. Fue siempre muy callado, siempre estaba meditando, mas cuando hablaba, lo hacía con humildad y una gran sabiduría, la gran sabiduría de Dios.<br />Hija, así era mi amado Hijo en la tierra. Fue el más fiel predicador y pastor del Rebaño de su Padre. Amén.</span></p><span style="background-color: white;"><b></b></span><p style="text-align: justify;"><b><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">6-8-85 634</span></b></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">Hija mía: Quiero contarte algo más sobre Jesús y esta Madre que tanto padeció por El, algo de su niñez. Hija, mis pechos lo amamantaron, mis brazos lo acunaron, mis labios pronunciaban palabras, que contenían mucho amor a Dios, Su Padre. Mi esposo José, le tenía un entrañable amor, te diría que lo quería como a su verdadero hijo. Los dos amábamos y respetábamos a nuestro querido Jesús, mas, mí temor crecía a medida que pasaba el tiempo. El me consolaba diciendo: "Madre, estoy en el camino que me trazó mi Padre, pasaré por aquello que El me mande y se hará Su Voluntad". Hija, Jesús se entregó por el mundo para salvarlo. Ahora El llama al mundo para que medite, para que no se condene y en Dios halle la Vida que Dios promete. Amén.</span></p><span style="background-color: white;"><b></b></span><p style="text-align: justify;"><b><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">11-9-86 964</span></b></p><p></p><div style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">Hija: Hoy te diré algo de Jesús cuando tenía doce años de edad, edad en que fue presentado en él Templo. Tenía lo Inocencio de niño y ya se reflejaba el amor hacía todo lo creado por el Todopoderoso.</span></div><span style="background-color: white; font-family: Verdana;"><div style="text-align: justify;">En sus sensatos y sabios palabras, se podía percibir la sabiduría.</div><div style="text-align: justify;">Con José mi esposo, solíamos quedarnos horas escuchándolo hablar lo que El con mucho amor nos decía.</div><div style="text-align: justify;">Uno de las tantas frases que nos dijo: Jesús, vida nueva para el alma nueva, mucha sangre correrá para que esto se haga realidad.</div><div style="text-align: justify;">Mi Hijo supo siempre el padecimiento que le esperaba. Que él cristiano sepa reflexionar cuanto<b> </b>te he dicho, son palabras de lo Madre de Jesucristo. Amén, amén.</div></span><p></p><span style="background-color: white;"><b></b></span><p style="text-align: justify;"><b><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">17-2-87 1102</span></b></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">¡Es tan hermoso hija mía, todo lo que se refiere a mi Hijo, Cristo el Salvador! muy despacio te lo he de ir revelando.<br />¡Cuántas maravillas encierra su Vida Espiritual!<br />Porque así vivió, en oración, en continua comunicación con su Padre. Aunque El era Dios mismo, se sacrificaba por su Padre.<br />Jesús hacía grandes ayunos y pasaba largas horas en oración, en sucesivos meditaciones. Otros momentos los dedicaba con gran Amor al prójimo.<br />Hija, El desde siempre amó o los almas, tanto, que se dio por ellas y me encargó para siempre el cuidado de sus queridas almas.<br />Alabado sea mi amado Hijo.</span></p><span style="background-color: white;"><b></b></span><p style="text-align: justify;"><b><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">12-5-87 1171</span></b></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">Gladys, nuevamente te hablaré de Jesús. Mí Hijo, estando en la tierra, vivió solamente las cosas del Cielo; nada material lo apegó a los cosas de la tierra. Sabía, sí, que tenía que vivir su tiempo junto a los hombres y fueron sus últimos años, los que dedicó enteramente a ser pastor a juntar el rebaño de Dios, su Padre.<br />Es necesario que aquellos, los que no han comprendido todavía lo importancia que tiene el rebaño del Señor, comprendan el valor de lo unión de ese rebaño tan querido por mi Hijo.<br />Cada vez deberá ser más numeroso y más fuerte; de esta manera, nada podrá debilitarlo. Hablo claramente a mis hijos, el Señor quiere recobrar a su rebaño. Amén, amén.</span></p><span style="background-color: white;"><b></b></span><p style="text-align: justify;"><b><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">5-8-88 1480</span></b></p><p></p><div style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">Mi amado hija, codo hora que posa, más necesaria es Mi presencia para los hombres.</span></div><span style="background-color: white; font-family: Verdana;"><div style="text-align: justify;">Esto Madre, mucho se preocupo por sus hijos. Así fue Mi preocupación cuando Jesús era pequeño. Era por Mí, cuidado en extremo, no me separaba de El, y no se separaba El, de Mí.</div><div style="text-align: justify;">Era amado por José y por Mí, con dulcísimo Amor, Ya siendo grande, mucho tiempo pasaba sin regresar a Mi lado, su techo eran las estrellas, sus rodillas, su almohada. No le importaban las persecuciones, nada le preocupaba, excepto transmitir la promesa del Padre.</div><div style="text-align: justify;">El mismo Jesús, recorría caminos, tratando de llegar a los corazones, de convertir almas.</div><div style="text-align: justify;">Hoy es la Madre, que desciende del Cielo, para convertir a las almas; hoy es el corazón de la Madre, el que protege a los hijos; es el corazón de la Madre, El que amó y quiere ser amado, junto al Corazón del Hijo.</div><div style="text-align: justify;">Bendito sea el Salvador.,</div></span><p></p><span style="background-color: white;"><b></b></span><p style="text-align: justify;"><b><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">7-1-90 1784</span></b></p><p></p><div style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">Gladys, tu alma vive de mi sustento, te alimentas de lo que te doy.</span></div><span style="background-color: white; font-family: Verdana;"><div style="text-align: justify;">Te diré: Cuando nació Jesús, tiempo después vinieron a adorarlo los reyes.</div><div style="text-align: justify;">Luego sucedió la huida a Egipto. Mucho padecimos, ya que estábamos carentes de alimentos y de abrigos.</div><div style="text-align: justify;">Mí Niño contaba con sólo 14 meses de edad y mucho cuidábamos de El, José y Yo, porque sabíamos que atentaban contra Jesús.</div><div style="text-align: justify;">Nunca dejó de reinar la Paz en nuestros corazones, pero sólo volvió la tranquilidad, cuando volvimos a Nazaret.</div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Nada nos pesaba ya que la gracia de Dios, estaba con nosotros. Bendito y alabado sea</span><span style="font-size: small;"><span style="font-family: Verdana;"> El.</span></span></div></span><p></p><span style="background-color: #ebdad3;"><span style="font-size: small;"></span></span></span><span style="background-color: #ebdad3;"></span><span style="background-color: #ebdad3; font-family: Verdana; font-size: x-small;"></span><p style="background-color: #ebdad3;"><span style="font-family: Verdana; font-size: x-small;"><b><span lang="es"><a href="https://www.corazones.org/lugares/latino_a/argentina/nicolas/nicolas2.htm">CONTINUACION</a></span></b></span></p><div><span style="font-family: Verdana; font-size: x-small;"><b><br /></b></span></div>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-37619733514403297872023-08-28T23:46:00.002-03:002023-08-28T23:46:14.077-03:0028 de agosto: San Agustín doctor de la Iglesia<p> </p><center style="background-color: #816e67; font-family: Arial;"><i><b><span style="font-family: Tahoma;"><div align="center"></div></span></b></i><span style="font-family: Tahoma;"><img border="0" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/personas/agusti10.gif" /><br /><img border="0" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/personas/agusti9.gif" /><br /><span style="color: white;">Obispo de Hipona y Doctor de la iglesia (354-430)<br />Uno de los cuatro doctores mas reconocidos de la Iglesia Latina.<br />Llamado "Doctor de la Gracia".<br /></span><span style="color: #5e0000;">Fiesta: 28 de Agosto</span><span style="color: white;"><br /></span><br /><img alt="San Agustín" border="0" height="193" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/santos/saint-augustine3.jpg" width="132" /><p><i><b><span style="color: white; font-family: Verdana;">"Nos has hecho para ti, Señor, y nuestro corazón estará insatisfecho hasta que descanse en ti" -</span></b><span style="color: white; font-family: Verdana;">San Agustín</span></i></p><hr color="#5E0000" width="86%" /><p><a href="https://www.corazones.org/santos/agustin.htm#SAN_AGUST%C3%8DN_"><img alt="Biografía" border="0" fp-style="fp-btn: Glass Rectangle 5; fp-font-size: 7; fp-font-color-normal: #5E0000; fp-font-color-hover: #5E0000; fp-font-color-press: #5E0000; fp-transparent: 1; fp-proportional: 0" fp-title="Biografía" height="15" id="img54" src="https://www.corazones.org/santos/10.gif" width="79" /></a> <a href="https://www.corazones.org/santos/agustin.htm#ESCRITOS_DE_SAN_AGUST%C3%8DN_"><img alt="Escritos" border="0" fp-style="fp-btn: Glass Rectangle 5; fp-font-size: 7; fp-font-color-normal: #5E0000; fp-font-color-hover: #5E0000; fp-font-color-press: #5E0000; fp-transparent: 1; fp-proportional: 0" fp-title="Escritos" height="15" id="img60" src="https://www.corazones.org/santos/31.gif" width="79" /></a> <a href="https://www.corazones.org/santos/agustin.htm#ALGUNOS_LIBROS_"><img alt="Libros" border="0" fp-style="fp-btn: Glass Rectangle 5; fp-font-size: 7; fp-font-color-normal: #5E0000; fp-font-color-hover: #5E0000; fp-font-color-press: #5E0000; fp-transparent: 1; fp-proportional: 0" fp-title="Libros" height="15" id="img61" src="https://www.corazones.org/santos/12.gif" width="79" /></a> <a href="https://www.corazones.org/santos/agustin.htm#TARDE_TE_AM%C3%89_"><img alt="Oraciones" border="0" fp-style="fp-btn: Glass Rectangle 5; fp-font-size: 7; fp-font-color-normal: #5E0000; fp-font-color-hover: #5E0000; fp-font-color-press: #5E0000; fp-transparent: 1; fp-proportional: 0; fp-orig: 0" fp-title="Oraciones" height="15" id="img63" src="https://www.corazones.org/santos/17.gif" width="58" /></a><br /><a href="https://www.corazones.org/santos/agustin.htm#AUDIENCIA_GENERAL_"><img alt="Audiencias y Homilías de SS Benedicto XVI" border="0" fp-style="fp-btn: Glass Rectangle 5; fp-font-size: 7; fp-font-color-normal: #5E0000; fp-font-color-hover: #5E0000; fp-font-color-press: #5E0000; fp-transparent: 1; fp-proportional: 0" fp-title="Audiencias y Homilías de SS Benedicto XVI" height="15" id="img62" src="https://www.corazones.org/santos/18.gif" width="187" /></a> <a href="https://www.corazones.org/santos/agustin1.htm#CARTA_APOST%C3%93LICA__AGUSTINUM_HIPPONENSEM_"><img alt="Carta Apostólica de JPII" border="0" fp-style="fp-btn: Glass Rectangle 5; fp-font-size: 7; fp-font-color-normal: #5E0000; fp-font-color-hover: #5E0000; fp-font-color-press: #5E0000; fp-transparent: 1; fp-proportional: 0" fp-title="Carta Apostólica de JPII" height="15" id="img64" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/personas/7C.gif" width="115" /></a></p><hr color="#5E0000" width="59%" /><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="color: white;"><span lang="ES"> </span></span></p><p align="center" class="MsoNormal"><span style="color: #5e0000;"><b>BIOGRAFÍA DE </b></span><b><span lang="ES" style="color: #5e0000;"><a name="SAN_AGUSTÍN_">SAN AGUSTÍN</a><br />354-430 AD</span><i><span lang="ES"><span style="color: #5e0000;"><br /> </span></span></i></b></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="color: white;"><span lang="ES"><img align="left" border="0" height="222" hspace="8" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/personas/809sanagustin.jpg" vspace="5" width="150" />Una de las autobiografías más famosas del mundo, las <i>Confesiones </i>de San Agustín, comienza de esta manera: “Grande eres Tu, Oh Señor, digno de alabanza … Tu nos has creado para Ti, Oh Señor, y nuestros corazones estarán errantes hasta que descansen en Ti” (<i>Confesiones, </i>Capítulo 1). Durante mil años, antes de la publicación de la <i>Imitación de Cristo, </i> <i>Confesiones</i> fue el manual más común de la vida espiritual. Dicho libro ha tenido más lectores que cualquiera de las otras obras de San Agustín. El mismo escribió sus <i>Confesiones</i> diez años después de su conversión, y luego de ser sacerdote durante ocho años. En el libro, San Agustín se confiesa con Dios, narrando el escrito dirigido al Señor. San Agustín le admite a Dios: “Tarde te amé, Oh Belleza siempre antigua, siempre nueva. Tarde te amé” (<i>Confesiones, </i>Capítulo 10). Muchos aprenden a través de su autobiografía a acercar sus corazones al corazón de Dios, el único lugar en donde encontrar la verdadera felicidad … ¿Quién fue este ‘pecador que llegó a ser un santo’ en la Iglesia? </span></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="color: white;"><span lang="ES"> </span></span><b><span lang="ES" style="color: #5e0000;">Los primeros años</span></b></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="color: white;"><span lang="ES">San Agustin nació en Africa del Norte en 354, hijo de Patricio y Santa Mónica. El tuvo un hermano y una hermana, y todos ellos recibieron una educación cristiana. Su hermana llegó a ser abadesa de un convento y poco después de su muerte San Agustín escribió una carta dirigida a su sucesora incluyendo consejos acerca de la futura dirección de la congregación. Esta carta llego a ser posteriormente la base para la “Regla de San Agustín”, en la cual San Agustín es uno de los grandes fundadores de la vida religiosa.</span></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="color: white;"><span lang="ES"> Patricio, el padre de San Agustín fue pagano hasta poco antes de su muerte, lo cual fue una respuesta a las fervientes oraciones de su esposa, Santa Mónica, por su conversión. Ella también oró mucho por la conversión de su entonces caprichoso hijo, San Agustín. San Agustín dejó la escuela cuando tenía diez y seis años, y mientras se encontraba en esta situación se sumergió en ideas paganas, en el teatro, en su propio orgullo y en varios pecados de impureza. Cuando tenía diez y siete años inició una relación con una joven con quien vivió fuera del matrimonio durante aproximadamente catorce años. Aunque no estaban casados, ellos se guardaban mutua fidelidad. Un niño llamado Adeodatus nació de su unión, quien falleció cuando estaba próximo a los veinte años. San Agustín enseñaba gramática y retórica en ese entonces, y era muy admirado y exitoso. Desde los 19 hasta los 28 años, para el profundo pesar de su madre, San Agustín perteneció a la secta herética de los Maniqueos. Entre otras cosas, ellos creían en un Dios del bien y en un Dios del mal, y que solo el espíritu del hombre era bueno, no el cuerpo, ni nada proveniente del mundo material. </span></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><b><span lang="ES" style="color: #5e0000;">La conversión de San Agustín</span></b></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="color: white;"><span lang="ES">A través de la poderosa intercesión de su madre Santa Mónica, la gracia triunfó en la vida de San Agustín. El mismo comenzó a asistir y a ser profundamente impactado por los sermones de San Ambrosio en el Cristianismo. Asimismo, leyó la historia de la conversión de un gran orador pagano, además de leer las epístolas de San Pablo, lo cual tuvo un gran efecto en el para orientar su corazón hacia la verdad de la fe Católica. Durante un largo tiempo, San Agustín deseó ser puro, pero el mismo le manifestó a Dios, “Hazme puro … pero aún no” (<i>Confesiones, </i>Capítulo 8). Un día cuando San Agustín estaba en el jardín orando a Dios para que lo ayudara con la pureza, escuchó la voz de un niño cantándole: “Toma y lee; toma y lee” (<i>Confesiones, </i>Capítulo 8). Con ello, el se sintió inspirado a abrir su Biblia al azar, y leyó lo primero que llego a su vista. San Agustín leyó las palabras de la carta de San Pablo a los Romanos capítulo 13:13-14: “nada de comilonas y borracheras; nada de lujurias y desenfrenos … revestíos más bien del Señor Jesucristo y no os preocupéis de la carne para satisfacer sus concupiscencias.” Este acontecimiento marcó su vida, y a partir de ese momento en adelante el estuvo firme en su resolución y pudo permanecer casto por el resto de su vida. Esto sucedió en el año 386. Al año siguiente, 387, San Agustín fue bautizado en la fe Católica. Poco después de su bautismo, su madre cayó muy enferma y falleció poco después de cumplir 56 años, cuando San Agustín tenía 33. Ella le manifestó a su hijo que no se preocupara acerca del lugar en donde sería enterrada, sino que solo la recordara siempre que acudiera al altar de Dios. Estas fueron unas palabras preciosas evocadas desde el corazón de una madre que tenía una profunda fe y convicción. </span></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><b><span lang="ES" style="color: #5e0000;">Obispo de Hipona</span></b></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="color: white;"><span lang="ES"><img align="right" border="0" height="214" hspace="8" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/personas/000101930.png" vspace="5" width="150" />Luego de la muerte de su madre, San Agustín regresó al Africa. El no deseaba otra cosa sino la vida de un monje – vivir un estilo de vida silencioso y monástico. Sin embargo, el Señor tenía otros planes para el. Un día San Agustín fue a la ciudad de Hipona en Africa, y asistió a una misa. El Obispo, Valerio, quien vio a San Agustín allí y tuvo conocimiento de su reputación por su santidad, habló fervientemente sobre la necesidad de un sacerdote que lo asistiera. La congregación comenzó de esa manera a clamar por la ordenación de San Agustín. Sus plegarias pronto fueron escuchadas. A pesar de las lágrimas de San Agustín, de su resistencia y de sus ruegos en oposición a dicho pedido, el vio en todo esto la voluntad de Dios. Luego dio lugar a su ordenación. Cinco años después fue nombrado Obispo, y durante 34 años dirigió esta diócesis. San Agustín brindó generosamente su tiempo y su talento para las necesidades espirituales y temporales de su rebaño, muchos de los cuales eran gente sencilla e ignorante. El mismo escribió constantemente para refutar las enseñanzas de ese entonces, acudió a varios consejos de obispos en Africa y viajó mucho a fin de predicar el Evangelio. Pronto surgió como una figura destacada del Cristianismo. </span></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="color: white;"><span lang="ES">El amor de San Agustín hacia la verdad a menudo lo llevo a controversias con diversas herejías. Por ejemplo, las principales herejías contra las cuales habló y escribió fueron las de los Maniqueos, de cuya secta había pertenecido anteriormente; de los cismáticos Donatistas que se habían apartado de la iglesia; y, durante los veinte años restantes de su vida, contra los Pelagianos, que exageraban la función del libre albedrío para hacer caso omiso a la función de la gracia en la salvación de la humanidad. San Agustín escribió mucho acerca de la función de la gracia en nuestra salvación, y más adelante obtuvo el título de doctor de la Iglesia especialmente debido a sus intervenciones con los Pelagianos. En esta línea, el mismo escribió mucho también acerca del pecado original y sus efectos, del bautismo de niños pequeños y de la predestinación. </span></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><b><span lang="ES" style="color: #5e0000;">Escritos</span></b></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="color: white;"><span lang="ES"><img align="left" border="0" height="211" hspace="8" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/personas/escrito.jpg" vspace="5" width="150" />San Agustín fue un escritor prolífico, que escribió más de cien títulos separados. Según lo mencionado anteriormente, San Agustín escribió su famosa autobiografía titulada <i>Confesiones</i>. El mismo escribió además un gran tratado durante un período de 16 años titulado <i>Sobre la Trinidad,</i> meditando sobre este gran misterio de Dios casi diariamente. San Agustín escribió además la <i>Ciudad de Dios</i>, que comenzaba como una simple y breve respuesta a la acusación de los paganos de que el Cristianismo era el responsable de la caída de Roma.</span></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="color: white;"><span lang="ES"> Dicha obra fue escrita entre los años 413-426, y es una de las mejores obras de apologética con respecto a las verdades de la fe Católica. En ella, la ‘ciudad de Dios’ es la Iglesia Católica. La premisa es que los planes de Dios tendrán resultado en la historia en la medida en que las fuerzas organizadas del bien en esta ciudad derroten gradualmente a las fuerzas del orden temporal que hacen la guerra a la voluntad de Dios. Una línea de este libro se puede apreciar a continuación: “Por tanto dos ciudades han sido construidas por dos amores: la ciudad terrenal por el amor del ego hasta la exclusión de Dios; la ciudad celestial por el amor de Dios hasta la exclusión del ego. Una se vanagloria en si mismo, la otra se gloría en el Señor. Una busca la gloria del hombre, la otra encuentra su mayor gloria en el testimonio de la conciencia de Dios” (<i>Ciudad de Dios, Libro</i> 14).<br /><br /></span></span><img align="right" height="171" hspace="8" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/personas/4.jpg" vspace="5" width="180" /><b><span lang="ES" style="color: #5e0000;"><br />Conclusión de su vida</span></b></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="color: white;"><span lang="ES">En 430 San Agustín se enfermó y falleció el 28 de agosto de ese mismo año. Su cuerpo fue enterrado en Hipona, y fue trasladado posteriormente a Pavia, Italia. San Agustín ha sido uno de los más grandes colaboradores de las nuevas ideas en la historia de la Iglesia Católica. El es un ejemplo para todos nosotros – un pecador que se hizo santo y que nos da esperanza a todos. San Agustín es actualmente uno de los treinta y tres doctores de la Iglesia. Su fiesta se celebra el 28 de agosto.<br /> </span></span></p><hr color="#5E0000" width="59%" /><p align="center" class="MsoNormal"><b><span lang="ES" style="color: #5e0000; text-transform: uppercase;">BASILICA DE SAN PIETRO EN EL CIEL D’ORO<br /></span><span style="color: #5e0000;">(donde se encuentran los restos de San Agustín)</span></b></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="color: white;"><span lang="ES"><img align="left" border="0" hspace="8" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/personas/agusti1.jpg" vspace="5" />San Pietro en el Ciel d'Oro ("San Pedro en el cielo de oro” en italiano) es una basílica católica romana de los Agustinos en Pavía, Italia. El Papa Benedicto XVI la visito en abril del año 2007. Las primeras novedades que tenemos acerca de esta Basílica datan del año 604. La Basílica no es el edificio original. Sigue a otro que era del estilo cristiano de los principios, con columnas simples y techo de madera. La Basílica actual, de forma Románica-Lombarda, data del siglo doce. La misma fue consagrada por el Papa Inocente II en 1132. Dicha Basílica heredó el nombre de “ciel d’oro” (cielo de oro) debido a que el techo de Madera de la iglesia Cristiana de los principios era decorada con pintura de color dorado. El exterior es simplemente de ladrillos. La Basílica es mencionada por Dante, Petrarca y Boccaccio. </span></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="color: white;"><span lang="ES">La Basílica cuenta con tres naves. Al final de la nave derecha, el piso del ábside muestra los restos de un mosaico del siglo doce. En la nave izquierda, que aún constituye la construcción original, existen rastros de frescos de los siglos quince y diez y seis. La bóveda majestuosa de la nave central fue reconstruida en 1487 por el arquitecto Giacomo Da Candia de Pavia. </span></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="color: white;"><span lang="ES">La Iglesia es el lugar de reposo para los restos de San Agustín de Hipona. El presbiterio es dominado por el Arco de mármol de San Agustín, erigido sobre una cripta. Esta es una obra de arte de la escultura Lombarda del siglo catorce. La misma se encuentra decorada con 95 estatuas. En el año 1327, el Papa Juan XXII expidió la bula papal <i>Veneranda Santorum Patrum</i>, en la cual nombra a los Agustinos custodios de la tumba de San Agustín, que fue erigida nuevamente en 1362 y tallada de manera elaborada con escenas de la vida de San Agustín. Dichas escenas incluyen la conversión de San Agustín, su bautismo, los milagros luego de su muerte y el traslado de sus reliquias a Pavia. </span></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="color: white;"><span lang="ES">Existe además una cripta en la cual se encuentra enterrado Severino Boezio. El alma de su gran cónsul, senador y filósofo es mencionado por Dante en el décimo canto de “il Paradiso.” A la derecha de la cripta yace el cuerpo de Liutprando, rey de los Lombardos. Se lo considero por siempre merecedor del esplendor que aseguró a esta Basílica por transferir las santas reliquias de San Agustín desde Sardinia en el año 724.</span></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="color: white;"><span lang="ES">Estas reliquias, descubiertas en la cripta en el año 1695, actualmente yacen en una urna de plata al pie del Arco de mármol. </span></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="color: white;"><span lang="ES">La sacristía de la Basílica es imponente. Con una bóveda acanalada, la misma es rica en decoraciones “grotescas”, atribuidas al siglo diez y seis. Existe también un lienzo del siglo diez y seis que ilustra a San Agustín conversando con San Jerónimo. Los dos altares de mármol son obras del escultor Giovanni Scapolla, oriundo de Pavia. Uno de ellos esta dedicado a Santa Rita, y data del año 1940. El otro, esta dedicado al Sagrado Corazón, y data del año 1963. </span></span><img align="right" border="0" height="198" hspace="8" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/personas/agusti6.jpg" vspace="5" width="140" /></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><b><span style="color: #5e0000;">El Arca de San Agustín</span></b><span style="color: white;"><br />Se trata de una pequeña descripción enciclopédica de la fe de las virtudes teologales, cardinales y monásticas. Se encuentran representados también algunos episo</span><span style="color: white;">dios de la </span><span style="color: white;">vida de S. Agustín, el Gran Doctor de la Iglesia: su conversión, bautismo por S. Ambrosio, los milagros, muerte.. 430 d. C. – y el traslado de sus reliquias a Pavía. Detrás del Arca, aparece una porción de mosaico octagonal, de la Catedral de la antigua Hipona, donde Agustín fue Obispo - 395 / 430 d. C. El fresco que cubre la bóveda del ábside remonta al año 1900. En un fondo de falso mosaico dorado domina la figura del Redentor sentado en trono y flanqueado por el Apóstol San Pedro y S. Agustín con su madre Mónica.<br /> </span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"> </p><p class="MsoNormal"><span style="color: white;"><span lang="ES"> </span></span></p><hr color="#5E0000" width="59%" /><p class="MsoNormal"><b><span lang="ES" style="color: #5e0000;">PENSAMIENTOS DE SAN AGUSTÍN<br /> </span></b></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="color: white;"><span lang="ES"><i>“Ama a Dios, y haz lo que quieras.” –Sermón acerca de Juan 1, 7:8.</i></span></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="color: white;"><span lang="ES"><i>“Nada conquista excepto la verdad y la victoria de la verdad es el amor.” -Sermones 358, 1. “Victoria veritatis est caritas.”</i></span></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="color: white;"><span lang="ES"><i>“El amor es la belleza del alma.”</i></span></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="color: white;"><i><span lang="ES">“Tarde te amé, Oh Belleza siempre antigua, siempre nueva. Tarde te amé. Tú me has llamado, y me has llamado insistentemente, y has suprimido mi sordera. Tu has brillado con luz y has puesto mi ceguera a volar! Tu has emanado fragancia, y me he quedado sin aliento, y he suspirado por ti. Te he conocido, y he tenido hambre y sed de Ti. Tú me has tocado, y he sido encendido por tu paz.” </span></i><span lang="ES"><i>-Confesiones, Capítulo 1.</i></span></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i><span style="color: white;">"¡Oh verdad, verdad, cómo suspiraba ya entonces por ti desde las fibras más íntimas de mi corazón!".</span></i></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i><span style="color: white;">¡Pobre de mí, que me creí apto para el vuelo, abandoné el nido y caí antes de poder volar!".<br /><br />"La medida del amor es el amor sin medid<span lang="en-us">a"</span><br /><br />"¿Los hombres salen a hacer turismo para admirar las crestas de los montes, el oleaje de los mares, el copioso curso de los ríos, los movimientos de los astros.Y, sin embargo, pasan de largo de sí mismos".<br /><br />"No busques que dar. Date a ti mismo".<br /><br />"Conocerse de verdad a uno mismo no es otra cosa que oir de Dios lo que el piensa de nosotros".<br /><br />"El hombre bueno es libre, incluso cuando es esclavo".<br /><br />"Si queréis recibir la vida del Espíritu Santo, conservad la caridad, amad la verdad y desead la unidad para llegar a la eternidad<span lang="en-us">".</span><br /><br /> </span></i></p><hr color="#5E0000" width="59%" /><p><b><span style="color: #5e0000;"><a name="ESCRITOS_DE_SAN_AGUSTÍN_">ESCRITOS DE SAN AGUST<span lang="es">ÍN</span></a></span></b></p><span style="font-family: Verdana;"><p align="justify" style="line-height: 24px;"><span style="color: white;"><br /></span><span style="color: #5e0000;"><b>Confesiones (segmentos):</b></span><span style="color: white;"><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><b><span style="color: white;"><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/fechas/agosto_28.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">¡Tarde te amé, Oh eterna verdad, verdadera caridad y cara eternidad!</span></a></span></b><span style="color: white;"><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/8martes_ordinario.htm" style="text-decoration-line: none;"><b><span style="color: white;">A ti, Señor</span></b><span style="color: white;">, me manifiesto tal como soy</span></a><span style="color: white;"><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><b><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/16viernes_ordinario.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Cristo murió por todos</span></a><span style="color: white;"><br /></span></b><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/fechas/agosto_27.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Alcancemos la <b>sabiduría</b> eterna</span></a><b><span style="color: white;"><br /><br /></span><span style="color: #5e0000;">Vida Espiritual<br /></span></b><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><span style="color: white;"><a href="https://www.corazones.org/santos/agustin2.htm#LAS_VIRTUDES_MORALES-CARDINALES" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Virtudes Cardinales/morales</span></a></span><b><span style="color: #5e0000;"><br /></span></b><span style="color: white;"><br /></span><span style="color: #5e0000;"><b>De sus sermones</b></span><span style="color: white;"><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/pascua/2%20domingo%20pascua%20oficio.htm" style="text-decoration-line: none;"><b><span style="color: white;">Nueva Creación</span></b><span style="color: white;"> </span><b><span style="color: white;">en Cristo</span></b></a><span style="color: white;"> Sermón 8<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/fechas/mayo_15.htm" style="text-decoration-line: none;"><b><span style="color: white;">Sembrad</span></b><span style="color: white;"> siempre buenas obras</span></a><span style="color: white;"> Sermón 11<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><b><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/14domingo_ordinario.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Mi sacrificio es un espíritu quebrantado</span></a></b><span style="color: white;"> Sermón 19<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/33miercoles_ordinario.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">El corazón del justo se gozará en el Seño</span></a><span style="color: white;">r Sermón 21,1-4<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/22domingo_ordinario.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">El Señor se ha <b>compadecido</b> de nosotros</span></a><span style="color: white;"> Sermón 23<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/fechas/febrero_3.htm" style="text-decoration-line: none;"><b><span style="color: white;">Sufre</span></b><span style="color: white;"> por mis ovejas</span></a><span style="color: white;"> Sermón 32<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/fechas/julio_29.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Dichosos los que pudieron hospedar al Señor en su propia casa</span></a><span style="color: white;"> -Sermón 103<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/fechas/mayo_26.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Estad <b>siempre alegres</b> en el Señor</span></a><span style="color: white;"> Sermón 171<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/adviento/adviento_dic24.htm#San_Agust%C3%ADn" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">La <b>fidelidad</b> brota de la tierra y la justicia mira desde el cielo</span></a><span style="color: white;"> Sermón 185<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/fechas/enero_5.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Seremos saciados con la </span><b><span style="color: white;">visión de la Palabra</span></b></a><span style="color: white;"><b> </b>-Serm<span lang="es">ó</span>n 194<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/adviento/adviento_domingo3.htm#agustin" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Juan era <b>la voz</b>, Cristo es la Palabra</span></a><span style="color: white;"> Sermón 293<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/fechas/junio_24.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">La voz del que clama en el desierto</span></a><span style="color: white;"> (Sobre la Natividad de S. Juan Bautista)<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/fechas/noviembre_21.htm" style="text-decoration-line: none;"><b><span style="color: white;">María</span></b><span style="color: white;"> dio fe al mensaje divino y concibió por su fe</span></a><span style="color: white;"><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/34sabado_ordinario.htm" style="text-decoration-line: none;"><b><span style="color: white;">Cantemos </span></b><span style="color: white;">aleluya al Dios bueno que nos libra del mal</span></a></p><p align="justify" style="line-height: 24px;"><span style="color: #5e0000;"><b><a name="Sobre_la_oración">Sobre la oración</a> </b>(Carta a Proba)</span><span style="color: white;"><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/29domingo_ordinario.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Que nuestro deseo de la vida eterna se ejercite en la oración</span></a><span style="color: white;"><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/29domingo_ordinario.htm#lunes29" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Debemos, en ciertos momentos, amonestarnos a nosotros mismos con la oración vocal</span></a><span style="color: white;"><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/29domingo_ordinario.htm#29jueves" style="text-decoration-line: none;"><b><span style="color: white;">No sabemos pedir</span></b><span style="color: white;"> lo que nos conviene</span></a><span style="color: white;"><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/29domingo_ordinario.htm#viernes29" style="text-decoration-line: none;"><b><span style="color: white;">El Espíritu intercede </span></b><span style="color: white;">por nosotros</span></a></p><p align="justify" style="line-height: 24px;"><b><span style="color: #5e0000;">Sobre la Ciudad de Dios</span><span style="color: white;"><br /></span></b><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/28viernes_ordinario.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">En todo lugar ofrecerán incienso a mi nombre y una ofrenda pura</span></a><span style="color: white;"><br /><br /></span><span style="color: #5e0000;"><b>Sobre los mártires</b></span><span style="color: white;"><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/fechas/agosto_10.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Administró la sangre sagrada de Cristo</span></a><span style="color: white;"> (Sobre S. Lorenzo)<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/fechas/junio_29.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Estos mártires, en su predicación, daban testimonio de lo que habían visto</span></a><span style="color: white;"> (San Pedro y San Pablo)<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/fechas/septiembre_26.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Preciosa es la muerte de los mártires, comprada con el precio de la muerte de Cristo</span></a><span style="color: white;"><br /><br /></span><b><span style="color: #5e0000;">A los <a name="pastores">pastores</a>:</span><span style="color: white;"><br /></span></b><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/24domingo_ordinario.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Somos cristianos y somos obispos</span></a><span style="color: white;"><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/24domingo_ordinario.htm#24lunes_ordinario" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Los pastores que se apacientan a sí mismos</span></a><span style="color: white;"><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><span style="color: maroon;"><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/24domingo_ordinario.htm#24martes_ordinario" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">El ejemplo de Pablo</span></a></span><span style="color: white;"><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><span style="color: maroon;"><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/24domingo_ordinario.htm#24miercoles_ordinario" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Que nadie busque su interés, sino el de Jesucristo</span></a><span style="color: white;"><br /></span></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/24domingo_ordinario.htm#24viernes_ordinario" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Prepárate para las pruebas</span></a><span style="color: white;"><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/24domingo_ordinario.htm#24sabado_ordinario" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Ofrece el alivio de la consolación</span></a><span style="color: white;"><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/24domingo_ordinario.htm#25domingo_ordinario" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Los cristianos débiles</span></a><span style="color: white;"><b><br /></b></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/24domingo_ordinario.htm#25lunes_ordinario" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Insiste a tiempo y a destiempo</span></a><span style="color: white;"><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/fechas/septiembre_19.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Soy obispo para vosotros, soy cristiano con vosotros</span></a><span style="color: white;"><br /><br /></span><b><span style="color: #5e0000;">De sus comentarios sobre los salmos:</span><span style="color: white;"><br /></span></b><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/fechas/noviembre_22.htm" style="text-decoration-line: none;"><b><span style="color: white;">Cantad</span></b><span style="color: white;"> a Dios con maestría y con júbilo</span></a><span style="color: white;"> Salmo 32<b><br /></b></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><b><span lang="es" style="color: white;"><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/cuaresma/cuaresma_i_domingo.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">En Cristo </span></a></span></b><span lang="es" style="color: white;"><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/cuaresma/cuaresma_i_domingo.htm" style="text-decoration-line: none;"><b><span style="color: white;">fuimos tentados</span></b><span style="color: white;">, en Él vencimos al diablo</span></a></span><span style="color: white;"><span lang="es"> Salmo 60</span><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/14martes_ordinario.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Los de fuera, lo quieran o no, </span><b><span style="color: white;">son hermanos nuestros</span></b></a><span style="color: white;"> (sobre los cristianos separados)<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/13lunes_ordinario.htm" style="text-decoration-line: none;"><b><span style="color: white;">El Señor es nuestro Dios</span></b><span style="color: white;">, y nosotros su pueblo, el rebaño que él guía</span></a><span style="color: white;"> Salmo 47<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/33domingo_ordinario.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">No pongamos resistencia a su primera venida, y no temeremos la segunda</span></a><span style="color: white;"> Salmo 95,14.15<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/adviento/adviento_miercoles2.htm#agustin" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Las <b>promesas</b> de Dios se nos conceden por su Hijo</span></a><span style="color: white;"> Salmo 109<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/14sabado_ordinario.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">El Señor J<strong>esucristo es el verdadero Salomón</strong></span><o:p><span style="color: white;"> </span></o:p></a><span style="color: white;">Salmo 126<br /></span><span style="color: white;"><br /></span><b><span style="color: #5e0000;">Comentario sobre Gálatas:</span><span style="color: white;"><br /></span></b><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/5domingo_ordinario.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Entendamos la <b>gracia</b> de Dios.</span></a><span style="color: white;"><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/5jueves_ordinario.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Hasta ver a </span><b><span style="color: white;">Cristo formado en vosotros</span></b></a><span style="color: white;"><br /><br /></span><b><span style="color: #5e0000;">Sobre el Evangelio de Juan:</span><span style="color: white;"><br /></span></b><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><span style="color: maroon;"><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/cuaresma/cuaresma_iii_domingo.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Llega una mujer de Samaria a sacar agua</span></a></span><span style="color: white;"> #15<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><span style="color: maroon;"><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/fechas/enero_3.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">El doble precepto de la </span><b><span style="color: white;">caridad</span></b></a></span><span style="color: white;"><b> </b>#17<b><br /></b></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><span style="color: maroon;"><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/cuaresma/cuaresma_iv_domingo.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Cristo es el camino hacia la luz, la verdad y la vida</span></a></span><span style="color: white;"> #34<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/34martes_ordinario.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Llegarás a la fuente, verás la luz</span></a><span style="color: white;"> <span lang="en-us">#</span>35<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/pascua/4_jueves_pascua.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">El mandamiento nuevo</span></a><span style="color: white;"> #65<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/fechas/diciembre_6.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Que la fuerza del <b>amor </b>supere el pesar por la </span><b><span style="color: white;">muerte</span></b></a><span style="color: white;"><b> </b>#123<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/pascua/6_viernes_pascua.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Dos vidas</span></a><span style="color: white;"> #124<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/fechas/abril_30.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">La Iglesia está fundada sobre la piedra que confesó Pedro</span></a><span style="color: white;"> <span lang="en-us">#124,5</span><br /></span><span style="color: white;"><br /></span><b><span style="color: #5e0000;">Otras obras:</span><span style="color: white;"><br /></span></b><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><span style="color: maroon;"><a href="https://www.corazones.org/santos/agustin.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">La misma vida se ha manifestado en la carne</span></a></span><span style="color: white;"> Tratado sobre la 1 carta de S. Juan<br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/biblia/santos/agustin_biblia_iglesia.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Creer en las <b>Escrituras</b> por la </span><b><span style="color: white;">autoridad de la Iglesia Católica</span></b></a><span style="color: white;"><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><span style="color: white;">En su libro <i>De Doctrina Christiana </i>expone los <b>principios para la interpretación Bíblica.</b><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/tiempo_ordinario/13viernes_ordinario.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Jesucristo es del linaje de David según la carne. </span><b><span style="color: white;">Sobre la predestinación</span></b></a><span style="color: white;"><b><br /></b></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><span style="color: maroon;"><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/fechas/diciembre_11.htm" style="text-decoration-line: none;"><b><span style="color: white;">Damos culto</span></b><span style="color: white;"> a los mártires con un culto de amor y participación</span></a></span><span style="color: white;"><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><span style="color: maroon;"><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/fechas/enero_22.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: white;">Vicente venció en aquel por quien había sido vencido el mundo</span></a></span><span style="color: white;"><br /> </span></p><span style="font-family: Verdana;"><hr color="#5E0000" width="59%" /></span><p style="line-height: 24px;"><b><span style="color: #5e0000;"><a name="ALGUNOS_LIBROS_">ALGUNOS LIBROS</a></span></b></p></span></span></center><span style="background-color: #816e67; font-family: Tahoma;"><span style="color: #073763; font-family: Verdana;"><p align="justify" style="line-height: 24px;"><span style="font-family: Verdana;"><br /></span><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/santos/santos_temas/confesiones_san_agustin/San%20Agustin%20Confesiones%20encuentra.pdf" style="text-decoration-line: none;">Confesiones</a><br /><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/santos/el_espejo_de_las_sagradas_escrituras_sanagustin.pdf" style="text-decoration-line: none;">El espejo de las Sagradas Escrituras</a><br /><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/santos/el_matrimonio_y_la_concupiscencia_san_agustin.pdf" style="text-decoration-line: none;">El matrimonio y la concupiscencia</a><br /><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="https://www.corazones.org/santos/el_unico_bautismo_san_agustin.pdf" style="text-decoration-line: none;">El único Bautismo</a><br /><img border="0" height="5" hspace="2" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/boton.gif" width="5" /><a href="http://www.mercaba.org/TESORO/Agustin/la_inmortalidad_del_alma.htm" style="text-decoration-line: none;">La Immortalidad del Alma</a></p><p align="justify" style="line-height: 24px;"><br /> </p><span style="font-family: Verdana;"><center><hr color="#5E0000" width="59%" /><p class="MsoNormal"><img align="right" height="239" hspace="8" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/personas/340x.jpg" vspace="5" width="200" /><br /><span lang="ES">BENEDICTO XVI</span><span lang="ES"><br /><b><a name="AUDIENCIA_GENERAL_">AUDIENCIA GENERAL</a></b><br />Miércoles 9 de enero de 2008<br /></span><b><span lang="ES">San Agustín (1)<br /> </span></b></p><p style="text-align: justify;"><i><span lang="ES">Queridos hermanos y hermanas: </span></i><span lang="ES">Después de las grandes festividades navideñas, quiero volver a las meditaciones sobre los Padres de la Iglesia y hablar hoy del Padre más grande de la Iglesia latina, san Agustín: hombre de pasión y de fe, de altísima inteligencia y de incansable solicitud pastoral. Este gran santo y doctor de la Iglesia a menudo es conocido, al menos de fama, incluso por quienes ignoran el cristianismo o no tienen familiaridad con él, porque dejó una huella profundísima en la vida cultural de Occidente y de todo el mundo.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Por su singular relevancia, san Agustín ejerció una influencia enorme y podría afirmarse, por una parte, que todos los caminos de la literatura latina cristiana llevan a Hipona (hoy Anaba, en la costa de Argelia), lugar donde era obispo; y, por otra, que de esta ciudad del África romana, de la que san Agustín fue obispo desde el año 395 hasta su muerte, en el año 430, parten muchas otras sendas del cristianismo sucesivo y de la misma cultura occidental.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Pocas veces una civilización ha encontrado un espíritu tan grande, capaz de acoger sus valores y de exaltar su riqueza intrínseca, inventando ideas y formas de las que se alimentarían las generaciones posteriores, como subrayó también Pablo VI: «Se puede afirmar que todo el pensamiento de la antigüedad confluye en su obra y que de ella derivan corrientes de pensamiento que empapan toda la tradición doctrinal de los siglos posteriores» (<i>AAS, </i>62, 1970, p. 426: <i>L'Osservatore Romano, </i>edición en lengua española, 31 de mayo de 1970, p. 10).</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">San Agustín es, además, el Padre de la Iglesia que ha dejado el mayor número de obras. Su biógrafo, Posidio, dice: parecía imposible que un hombre pudiera escribir tanto durante su vida. En un próximo encuentro hablaremos de estas diversas obras. Hoy nuestra atención se centrará en su vida, que puede reconstruirse a través de sus escritos, y en particular de las <i>Confesiones</i>, su extraordinaria autobiografía espiritual, escrita para alabanza de Dios, que es su obra más famosa. Las <i>Confesiones, </i>precisamente por su atención a la interioridad y a la psicología, constituyen un modelo único en la literatura occidental, y no sólo occidental, incluida la no religiosa, hasta la modernidad. Esta atención a la vida espiritual, al misterio del yo, al misterio de Dios que se esconde en el yo, es algo extraordinario, sin precedentes, y permanece para siempre, por decirlo así, como una "cumbre" espiritual.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Pero, volvamos a su vida. San Agustín nació en Tagaste, en la provincia de Numidia, en el África romana, el 13 de noviembre del año 354. Era hijo de Patricio, un pagano que después fue catecúmeno, y de Mónica, cristiana fervorosa. Esta mujer apasionada, venerada como santa, ejerció en su hijo una enorme influencia y lo educó en la fe cristiana. San Agustín había recibido también la sal, como signo de la acogida en el catecumenado. Y siempre quedó fascinado por la figura de Jesucristo; más aún, dice que siempre amó a Jesús, pero que se alejó cada vez más de la fe eclesial, de la práctica eclesial, como sucede también hoy a muchos jóvenes.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">San Agustín tenía también un hermano, Navigio, y una hermana, cuyo nombre desconocemos, la cual, tras quedar viuda, fue superiora de un monasterio femenino. El muchacho, de agudísima inteligencia, recibió una buena educación, aunque no siempre fue un estudiante ejemplar. En cualquier caso, estudió bien la gramática, primero en su ciudad natal y después en Madaura y, a partir del año 370, retórica en Cartago, capital del África romana: llegó a dominar perfectamente el latín, pero no alcanzó el mismo dominio en griego, ni aprendió el púnico, la lengua de sus paisanos.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Precisamente en Cartago san Agustín leyó por primera vez el <i>Hortensius</i>, obra de Cicerón que después se perdió y que se sitúa en el inicio de su camino hacia la conversión. Ese texto ciceroniano despertó en él el amor por la sabiduría, como escribirá, siendo ya obispo, en las <i>Confesiones</i>: «Aquel libro cambió mis aficiones» hasta el punto de que «de repente me pareció vil toda vana esperanza, y con increíble ardor de corazón deseaba la inmortalidad de la sabiduría» (III, 4, 7).</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Pero, dado que estaba convencido de que sin Jesús no puede decirse que se ha encontrado efectivamente la verdad, y dado que en ese libro apasionante faltaba ese nombre, al acabar de leerlo comenzó a leer la Escritura, la Biblia. Pero quedó decepcionado, no sólo porque el estilo latino de la traducción de la sagrada Escritura era deficiente, sino también porque el mismo contenido no le pareció satisfactorio. En las narraciones de la Escritura sobre guerras y otras vicisitudes humanas no encontraba la altura de la filosofía, el esplendor de la búsqueda de la verdad, propio de la filosofía. Sin embargo, no quería vivir sin Dios; buscaba una religión que respondiera a su deseo de verdad y también a su deseo de acercarse a Jesús.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">De esta manera, cayó en la red de los maniqueos, que se presentaban como cristianos y prometían una religión totalmente racional. Afirmaban que el mundo se divide en dos principios: el bien y el mal. Así se explicaría toda la complejidad de la historia humana. También la moral dualista atraía a san Agustín, pues implicaba una moral muy elevada para los elegidos; quienes, como él, se adherían a esa moral podían llevar una vida mucho más adecuada a la situación de la época, especialmente los jóvenes.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Por tanto, se hizo maniqueo, convencido en ese momento de que había encontrado la síntesis entre racionalidad, búsqueda de la verdad y amor a Jesucristo. Y sacó también una ventaja concreta para su vida: la adhesión a los maniqueos abría fáciles perspectivas de carrera. Adherirse a esa religión, que contaba con muchas personalidades influyentes, le permitía seguir su relación con una mujer y progresar en su carrera. De esa mujer tuvo un hijo, Adeodato, al que quería mucho, muy inteligente, que después estaría presente en su preparación para el bautismo junto al lago de Como, participando en los <i>Diálogos</i> que san Agustín nos dejó. Por desgracia, el muchacho falleció prematuramente.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Cuando tenía alrededor de veinte años, fue profesor de gramática en su ciudad natal, pero pronto regresó a Cartago, donde se convirtió en un brillante y famoso maestro de retórica. Con el paso del tiempo, sin embargo, comenzó a alejarse de la fe de los maniqueos, que le decepcionaron precisamente desde el punto de vista intelectual, pues eran incapaces de resolver sus dudas; se trasladó a Roma y después a Milán, donde residía entonces la corte imperial y donde había obtenido un puesto de prestigio, por recomendación del prefecto de Roma, el pagano Simaco, que era hostil al obispo de Milán, san Ambrosio.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">En Milán, san Agustín adquirió la costumbre de escuchar, al inicio con el fin de enriquecer su bagaje retórico, las bellísimas predicaciones del obispo san Ambrosio, que había sido representante del emperador para el norte de Italia. El retórico africano quedó fascinado por la palabra del gran prelado milanés; y no sólo por su retórica. Sobre todo el contenido fue tocando cada vez más su corazón.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">El gran problema del Antiguo Testamento, de la falta de belleza retórica y de altura filosófica, se resolvió con las predicaciones de san Ambrosio, gracias a la interpretación tipológica del Antiguo Testamento: san Agustín comprendió que todo el Antiguo Testamento es un camino hacia Jesucristo. De este modo, encontró la clave para comprender la belleza, la profundidad, incluso filosófica, del Antiguo Testamento; y comprendió toda la unidad del misterio de Cristo en la historia, así como la síntesis entre filosofía, racionalidad y fe en el <i>Logos</i>, en Cristo, Verbo eterno, que se hizo carne.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Pronto san Agustín se dio cuenta de que la interpretación alegórica de la Escritura y la filosofía neoplatónica del obispo de Milán le permitían resolver las dificultades intelectuales que, cuando era más joven, en su primer contacto con los textos bíblicos, le habían parecido insuperables.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Así, tras la lectura de los escritos de los filósofos, san Agustín se dedicó a hacer una nueva lectura de la Escritura y sobre todo de las cartas de san Pablo. Por tanto, la conversión al cristianismo, el 15 de agosto del año 386, llegó al final de un largo y agitado camino interior, del que hablaremos en otra catequesis. Se trasladó al campo, al norte de Milán, junto al lago de Como, con su madre Mónica, su hijo Adeodato y un pequeño grupo de amigos, para prepararse al bautismo. Así, a los 32 años, san Agustín fue bautizado por san Ambrosio el 24 de abril del año 387, durante la Vigilia pascual, en la catedral de Milán.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Después del bautismo, san Agustín decidió regresar a África con sus amigos, con la idea de llevar vida en común, al estilo monástico, al servicio de Dios. Pero en Ostia, mientras esperaba para embarcarse, su madre repentinamente se enfermó y poco más tarde murió, destrozando el corazón de su hijo.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Tras regresar finalmente a su patria, el convertido se estableció en Hipona para fundar allí un monasterio. En esa ciudad de la costa africana, a pesar de resistirse, fue ordenado presbítero en el año 391 y comenzó con algunos compañeros la vida monástica en la que pensaba desde hacía bastante tiempo, repartiendo su tiempo entre la oración, el estudio y la predicación. Quería dedicarse sólo al servicio de la verdad; no se sentía llamado a la vida pastoral, pero después comprendió que la llamada de Dios significaba ser pastor entre los demás y así ofrecerles el don de la verdad. En Hipona, cuatro años después, en el año 395, fue consagrado obispo.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Al seguir profundizando en el estudio de las Escrituras y de los textos de la tradición cristiana, san Agustín se convirtió en un obispo ejemplar por su incansable compromiso pastoral: predicaba varias veces a la semana a sus fieles, ayudaba a los pobres y a los huérfanos, cuidaba la formación del clero y la organización de monasterios femeninos y masculinos.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">En poco tiempo, el antiguo retórico se convirtió en uno de los exponentes más importantes del cristianismo de esa época: muy activo en el gobierno de su diócesis, también con notables implicaciones civiles, en sus más de 35 años de episcopado, el obispo de Hipona influyó notablemente en la dirección de la Iglesia católica del África romana y, más en general, en el cristianismo de su tiempo, afrontando tendencias religiosas y herejías tenaces y disgregadoras, como el maniqueísmo, el donatismo y el pelagianismo, que ponían en peligro la fe cristiana en el Dios único y rico en misericordia.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Y san Agustín se encomendó a Dios cada día, hasta el final de su vida: afectado por la fiebre mientras la ciudad de Hipona se encontraba asediada desde hacía casi tres meses por los vándalos invasores, como cuenta su amigo Posidio en la <i>Vita Augustini</i>, el obispo pidió que le transcribieran con letras grandes los salmos penitenciales "y pidió que colgaran las hojas en la pared de enfrente, de manera que desde la cama, durante su enfermedad, los podía ver y leer, y lloraba intensamente sin interrupción" (31, 2). Así pasaron los últimos días de la vida de san Agustín, que falleció el 28 de agosto del año 430, sin haber cumplido los 76 años. A sus obras, a su mensaje y a su experiencia interior dedicaremos los próximos encuentros.<br /> </span></p><hr color="#5E0000" width="59%" /><p align="center"><span lang="ES">BENEDICTO XVI<br /><b>AUDIENCIA GENERAL</b><br />Miércoles 16 de enero de 2008<br /></span><b><span lang="ES">San Agustín (2)</span></b></p><p style="text-align: justify;"><i><span lang="ES">Queridos hermanos y hermanas:</span></i><span lang="ES"> Hoy, al igual que el miércoles pasado, quiero hablar del gran obispo de Hipona, san Agustín. Cuatro años antes de morir, quiso nombrar a su sucesor. Por eso, el 26 de septiembre del año 426, reunió al pueblo en la basílica de la Paz, en Hipona, para presentar a los fieles a quien había designado para esa misión. Dijo: «En esta vida todos somos mortales, pero para cada persona el último día de esta vida es siempre incierto. Sin embargo, en la infancia se espera llegar a la adolescencia; en la adolescencia, a la juventud; en la juventud, a la edad adulta; en la edad adulta, a la edad madura; en la edad madura, a la vejez. Nadie está seguro de que llegará, pero lo espera. La vejez, por el contrario, no tiene ante sí otro período en el que poder esperar; su misma duración es incierta... Yo, por voluntad de Dios, llegué a esta ciudad en el vigor de mi vida; pero ahora mi juventud ha pasado y ya soy viejo» (<i>Ep.</i> 213, 1).</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">En ese momento, san Agustín dio el nombre de su sucesor designado, el sacerdote Heraclio. La asamblea estalló en un aplauso de aprobación repitiendo veintitrés veces: «¡Demos gracias a Dios! ¡Alabemos a Cristo!». Con otras aclamaciones, los fieles aprobaron, además, lo que después dijo san Agustín sobre sus propósitos para su futuro: quería dedicar los años que le quedaban a un estudio más intenso de las sagradas Escrituras (cf. <i>Ep.</i> 213, 6).</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">De hecho, en los cuatro años siguientes llevó a cabo una extraordinaria actividad intelectual: escribió obras importantes, emprendió otras no menos relevantes, mantuvo debates públicos con los herejes —siempre buscaba el diálogo—, promovió la paz en las provincias africanas amenazadas por las tribus bárbaras del sur.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">En este sentido escribió al conde Darío, que había ido a África para tratar de solucionar la disputa entre el conde Bonifacio y la corte imperial, de la que se estaban aprovechando las tribus de los moros para sus correrías: «Acabar con la guerra mediante la palabra, y buscar o mantener la paz con la paz y no con la guerra, es un título de gloria mucho mayor que matar a los hombres con la espada. Ciertamente, incluso quienes combaten, si son buenos, buscan sin duda la paz, pero a costa de derramar sangre. Tú, por el contrario, has sido enviado precisamente para impedir que haya derramamiento de sangre» (<i>Ep</i>. 229, 2).</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Por desgracia, la esperanza de una pacificación de los territorios africanos quedó defraudada: en mayo del año 429 los vándalos, invitados a África como venganza por el mismo Bonifacio, pasaron el estrecho de Gibraltar y penetraron en Mauritania. La invasión se extendió rápidamente por las otras ricas provincias africanas. En mayo o junio del año 430, «los destructores del imperio romano», como califica Posidio a esos bárbaros (<i>Vida</i>, 30, 1), ya rodeaban Hipona, asediándola.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">En la ciudad se había refugiado también Bonifacio, el cual, habiéndose reconciliado demasiado tarde con la corte, trataba en vano de bloquear el paso a los invasores. El biógrafo Posidio describe el dolor de san Agustín: «Las lágrimas eran, más que de costumbre, su pan día y noche y, habiendo llegado ya al final de su vida, vivía su vejez en la amargura y en el luto más que los demás» (<i>Vida</i>, 28, 6). Y explica: «Ese hombre de Dios veía las matanzas y las destrucciones de las ciudades; las casas destruidas en los campos y a los habitantes asesinados por los enemigos o desplazados; las iglesias sin sacerdotes y ministros; las vírgenes consagradas y los religiosos dispersos por doquier; entre ellos, algunos habían desfallecido en las torturas, otros habían sido asesinados con la espada, otros habían sido hechos prisioneros, perdida la integridad del alma y del cuerpo e incluso la fe, reducidos a una dolorosa y larga esclavitud por los enemigos» (<i>ib.</i>, 28, 8).</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Aunque era anciano y estaba cansado, san Agustín permaneció en la brecha, confortándose a sí mismo y a los demás con la oración y con la meditación de los misteriosos designios de la Providencia. Al respecto, hablaba de la "vejez del mundo" —y en realidad ese mundo romano era viejo—; hablaba de esta vejez como lo había hecho ya algunos años antes para consolar a los refugiados procedentes de Italia, cuando en el año 410 los godos de Alarico invadieron la ciudad de Roma.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">En la vejez —decía— abundan los achaques: tos, catarro, legañas, ansiedad, agotamiento. Pero si el mundo envejece, Cristo es siempre joven. Por eso, hacía la invitación: «No rechaces rejuvenecer con Cristo, incluso en un mundo envejecido. Él te dice: "No temas, tu juventud se renovará como la del águila"» (cf. <i>Serm.</i> 81, 8). Por eso el cristiano no debe abatirse, incluso en situaciones difíciles, sino que ha de esforzarse por ayudar a los necesitados.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Es lo que el gran doctor sugiere respondiendo al obispo de Tiabe, Honorato, el cual le había preguntado si, ante la amenaza de las invasiones bárbaras, un obispo o un sacerdote o cualquier hombre de Iglesia podía huir para salvar la vida: «Cuando el peligro es común a todos, es decir, para obispos, clérigos y laicos, quienes tienen necesidad de los demás no deben ser abandonados por aquellos de quienes tienen necesidad. En este caso, todos deben refugiarse en lugares seguros; pero si algunos necesitan quedarse, no los han de abandonar quienes tienen el deber de asistirles con el ministerio sagrado, de manera que o se salven juntos o juntos soporten las calamidades que el Padre de familia quiera que sufran» (<i>Ep.</i> 228, 2). Y concluía: «Esta es la prueba suprema de la caridad» (<i>ib.</i>, 3). ¿Cómo no reconocer en estas palabras el heroico mensaje que tantos sacerdotes, a lo largo de los siglos, han acogido y hecho propio?</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Mientras tanto la ciudad de Hipona resistía. La casa-monasterio de san Agustín había abierto sus puertas para acoger a sus hermanos en el episcopado que pedían hospitalidad. Entre estos se encontraba también Posidio, que había sido su discípulo, el cual de este modo pudo dejarnos el testimonio directo de aquellos últimos y dramáticos días.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">«En el tercer mes de aquel asedio —narra— se acostó con fiebre: era su última enfermedad» (<i>Vida, </i>29, 3). El santo anciano aprovechó aquel momento, finalmente libre, para dedicarse con más intensidad a la oración. Solía decir que nadie, obispo, religioso o laico, por más irreprensible que pudiera parecer su conducta, puede afrontar la muerte sin una adecuada penitencia. Por este motivo, repetía continuamente entre lágrimas los salmos penitenciales, que tantas veces había recitado con el pueblo (cf. <i>ib., </i>31, 2).</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Cuanto más se agravaba su enfermedad, más necesidad sentía el obispo moribundo de soledad y de oración: «Para que nadie le molestara en su recogimiento, unos diez días antes de abandonar el cuerpo nos pidió a los presentes que no dejáramos entrar a nadie en su habitación, a excepción de los momentos en los que los médicos iban a visitarlo o cuando le llevaban la comida. Su voluntad se cumplió escrupulosamente y durante todo ese tiempo él se dedicaba a la oración» (<i>ib.</i>, 31, 3). Murió el 28 de agosto del año 430: su gran corazón finalmente pudo descansar en Dios.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">«Para la inhumación de su cuerpo —informa Posidio— se ofreció a Dios el sacrificio, al que asistimos, y después fue sepultado» (<i>Vida</i>, 31, 5). Su cuerpo, en fecha incierta, fue trasladado a Cerdeña y, hacia el año 725, a Pavía, a la basílica de San Pedro en el Cielo de Oro, donde descansa en la actualidad. Su primer biógrafo da de él este juicio conclusivo: «Dejó a la Iglesia un clero muy numeroso, así como monasterios de hombres y de mujeres llenos de personas con voto de continencia bajo la obediencia de sus superiores, además de bibliotecas que contenían los libros y discursos suyos y de otros santos, gracias a los cuales se conoce cuál ha sido por gracia de Dios su mérito y su grandeza en la Iglesia, y en los cuales los fieles siempre lo encuentran vivo» (Posidio, <i>Vida, </i>31, 8).</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Es un juicio que podemos compartir: en sus escritos también nosotros lo «encontramos vivo». Cuando leo los escritos de san Agustín no tengo la impresión de que se trate de un hombre que murió hace más o menos mil seiscientos años, sino que lo siento como un hombre de hoy: un amigo, un contemporáneo que me habla, que nos habla con su fe lozana y actual.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">En san Agustín, que nos habla, que me habla a mí en sus escritos, vemos la actualidad permanente de su fe, de la fe que viene de Cristo, Verbo eterno encarnado, Hijo de Dios e Hijo del hombre. Y podemos ver que esta fe no es de ayer, aunque haya sido predicada ayer; es siempre actual, porque Cristo es realmente ayer, hoy y para siempre. Él es el camino, la verdad y la vida. De este modo san Agustín nos impulsa a confiar en este Cristo siempre vivo y a encontrar así el camino de la vida.<br /> </span></p><hr color="#5E0000" width="59%" /><p align="center"><span lang="ES">BENEDICTO XVI<br /><b>AUDIENCIA GENERAL</b><br />Miércoles 30 de enero de 2008<br /></span><b><span lang="ES">San Agustín<br />Armonía entre fe y razón</span></b></p><p style="text-align: justify;"><i><span lang="ES">Queridos amigos:</span></i><span lang="ES"> Después de la Semana de oración por la unidad de los cristianos volvemos hoy a hablar de la gran figura de san Agustín. Mi querido predecesor Juan Pablo II le dedicó, en 1986, es decir, en el decimosexto centenario de su conversión, un largo y denso documento, la carta apostólica </span><i><a href="http://www.vatican.va/holy_father/john_paul_ii/apost_letters/documents/hf_jp-ii_apl_26081986_augustinum-hipponensem_sp.html"><span lang="ES">Augustinum Hipponensem</span></a> </i><span lang="ES">(cf. <i>L'Osservatore Romano, </i>edición en lengua española, 14 de septiembre de 1986, pp. 15-21). El mismo Papa definió ese texto como «una acción de gracias a Dios por el don que hizo a la Iglesia, y mediante ella a la humanidad entera, gracias a aquella admirable conversión» (n. 1).</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Sobre el tema de la conversión hablaré en una próxima audiencia. Es un tema fundamental, no sólo para su vida personal, sino también para la nuestra. En el evangelio del domingo pasado el Señor mismo resumió su predicación con la palabra: "Convertíos". Siguiendo el camino de san Agustín, podríamos meditar en lo que significa esta conversión: es algo definitivo, decisivo, pero la decisión fundamental debe desarrollarse, debe realizarse en toda nuestra vida.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">La catequesis de hoy está dedicada, en cambio, al tema de la fe y la razón, un tema determinante, o mejor, el tema determinante de la biografía de san Agustín. De niño había aprendido de su madre, santa Mónica, la fe católica. Pero siendo adolescente había abandonado esta fe porque ya no lograba ver su racionalidad y no quería una religión que no fuera también para él expresión de la razón, es decir, de la verdad. Su sed de verdad era radical y lo llevó a alejarse de la fe católica. Pero era tan radical que no podía contentarse con filosofías que no llegaran a la verdad misma, que no llegaran hasta Dios. Y a un Dios que no fuera sólo una hipótesis cosmológica última, sino que fuera el verdadero Dios, el Dios que da la vida y que entra en nuestra misma vida. De este modo, todo el itinerario intelectual y espiritual de san Agustín constituye un modelo válido también hoy en la relación entre fe y razón, tema no sólo para hombres creyentes, sino también para todo hombre que busca la verdad, tema central para el equilibrio y el destino de todo ser humano.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Estas dos dimensiones, fe y razón, no deben separarse ni contraponerse, sino que deben estar siempre unidas. Como escribió san Agustín tras su conversión, fe y razón son "las dos fuerzas que nos llevan a conocer" (<i>Contra academicos</i>, III, 20, 43). A este respecto, son justamente célebres sus dos fórmulas (cf. <i>Sermones, </i>43, 9) con las que expresa esta síntesis coherente entre fe y razón: <i>crede ut intelligas </i>("cree para comprender") —creer abre el camino para cruzar la puerta de la verdad—, pero también y de manera inseparable, <i>intellige ut credas </i>("comprende para creer"), escruta la verdad para poder encontrar a Dios y creer.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Las dos afirmaciones de san Agustín expresan con gran eficacia y profundidad la síntesis de este problema, en la que la Iglesia católica ve manifestado su camino. Históricamente esta síntesis se fue formando, ya antes de la venida de Cristo, en el encuentro entre la fe judía y el pensamiento griego en el judaísmo helenístico. Sucesivamente, en la historia, esta síntesis fue retomada y desarrollada por muchos pensadores cristianos. La armonía entre fe y razón significa sobre todo que Dios no está lejos: no está lejos de nuestra razón y de nuestra vida; está cerca de todo ser humano, cerca de nuestro corazón y de nuestra razón, si realmente nos ponemos en camino.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">San Agustín experimentó con extraordinaria intensidad esta cercanía de Dios al hombre. La presencia de Dios en el hombre es profunda y al mismo tiempo misteriosa, pero puede reconocerse y descubrirse en la propia intimidad: no hay que salir fuera —afirma el convertido—; "vuelve a ti mismo. La verdad habita en lo más íntimo del hombre. Y si encuentras que tu naturaleza es mudable, trasciéndete a ti mismo. Pero, al hacerlo, recuerda que trasciendes un alma que razona. Así pues, dirígete adonde se enciende la luz misma de la razón" (<i>De vera religione, </i>39, 72). Con una afirmación famosísima del inicio de las <i>Confesiones, </i>autobiografía espiritual escrita en alabanza de Dios, él mismo subraya: "Nos hiciste, Señor, para ti, y nuestro corazón está inquieto, hasta que descanse en ti" (I, 1, 1).</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">La lejanía de Dios equivale, por tanto, a la lejanía de sí mismos. "Porque tú —reconoce san Agustín (<i>Confesiones</i>, III, 6, 11)— estabas más dentro de mí que lo más íntimo de mí, y más alto que lo supremo de mi ser" ("<i>interior intimo meo et superior summo meo</i>"), hasta el punto de que, como añade en otro pasaje recordando el tiempo precedente a su conversión, "tú estabas, ciertamente, delante de mí, mas yo me había alejado también de mí, y no acertaba a hallarme, ¡cuánto menos a ti!" (<i>Confesiones, </i>V, 2, 2).</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Precisamente porque san Agustín vivió a fondo este itinerario intelectual y espiritual, supo presentarlo en sus obras con tanta claridad, profundidad y sabiduría, reconociendo en otros dos famosos pasajes de las <i>Confesiones </i>(IV, 4, 9 y 14, 22) que el hombre es "un gran enigma" (<i>magna quaestio</i>) y "un gran abismo" (<i>grande profundum</i>), enigma y abismo que sólo Cristo ilumina y colma. Esto es importante: quien está lejos de Dios también está lejos de sí mismo, alienado de sí mismo, y sólo puede encontrarse a sí mismo si se encuentra con Dios. De este modo logra llegar a sí mismo, a su verdadero yo, a su verdadera identidad.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">El ser humano —subraya después san Agustín en el <i>De civitate Dei</i> (XII, 27)— es sociable por naturaleza pero antisocial por vicio, y quien lo salva es Cristo, único mediador entre Dios y la humanidad, y "camino universal de la libertad y de la salvación", como repitió mi predecesor Juan Pablo II (</span><i><a href="http://www.vatican.va/holy_father/john_paul_ii/apost_letters/documents/hf_jp-ii_apl_26081986_augustinum-hipponensem_sp.html"><span lang="ES">Augustinum Hipponensem</span></a><span lang="ES">, </span></i><span lang="ES">21). Fuera de este camino, que nunca le ha faltado al género humano —afirma también san Agustín en esa misma obra— "nadie ha sido liberado nunca, nadie es liberado y nadie será liberado" (<i>De civitate Dei </i>X, 32, 2). Como único mediador de la salvación, Cristo es cabeza de la Iglesia y está unido místicamente a ella, hasta el punto de que san Agustín puede afirmar: "Nos hemos convertido en Cristo. En efecto, si él es la cabeza, nosotros somos sus miembros; el hombre total es él y nosotros" (<i>In Iohannis evangelium tractatus, </i>21, 8).</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Según la concepción de san Agustín, la Iglesia, pueblo de Dios y casa de Dios, está por tanto íntimamente vinculada al concepto de Cuerpo de Cristo, fundamentada en la relectura cristológica del Antiguo Testamento y en la vida sacramental centrada en la Eucaristía, en la que el Señor nos da su Cuerpo y nos transforma en su Cuerpo. Por tanto, es fundamental que la Iglesia, pueblo de Dios, en sentido cristológico y no en sentido sociológico, esté verdaderamente insertada en Cristo, el cual, como afirma san Agustín en una página hermosísima, "ora por nosotros, ora en nosotros; nosotros oramos a él; él ora por nosotros como sacerdote; ora en nosotros como nuestra cabeza; y nosotros oramos a él como a nuestro Dios; por tanto, reconocemos en él nuestra voz y la suya en nosotros" (<i>Enarrationes in Psalmos, </i>85, 1).</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">En la conclusión de la carta apostólica </span><i><a href="http://www.vatican.va/holy_father/john_paul_ii/apost_letters/documents/hf_jp-ii_apl_26081986_augustinum-hipponensem_sp.html"><span lang="ES">Augustinum Hipponensem</span></a><span lang="ES">, </span></i><span lang="ES">Juan Pablo II pregunta al mismo santo qué quería decir a los hombres de hoy y responde, ante todo, con las palabras que san Agustín escribió en una carta dictada poco después de su conversión: "A mí me parece que hay que conducir de nuevo a los hombres... a la esperanza de encontrar la verdad" (<i>Ep.</i>, 1, 1), la verdad que es Cristo mismo, Dios verdadero, a quien se dirige una de las oraciones más hermosas y famosas de las <i>Confesiones </i>(X, 27, 38): "Tarde te amé, hermosura tan antigua, y tan nueva, tarde te amé. Y he aquí que tú estabas dentro de mí, y yo fuera, y fuera te buscaba yo, y me arrojaba sobre esas hermosuras que tú creaste. Tú estabas conmigo, mas yo no estaba contigo. Me mantenían lejos de ti aquellas cosas que, si no estuviesen en ti, no existirían. Llamaste y gritaste, y rompiste mi sordera; brillaste y resplandeciste, y ahuyentaste mi ceguera; exhalaste tu fragancia, la respiré y suspiro por ti; te gusté y tengo hambre y sed de ti; me tocaste y me abrasé en tu paz".</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">San Agustín encontró a Dios y durante toda su vida lo experimentó hasta el punto de que esta realidad —que es ante todo el encuentro con una Persona, Jesús— cambió su vida, como cambia la de cuantos, hombres y mujeres, en cualquier tiempo, tienen la gracia de encontrarse con él. Pidamos al Señor que nos dé esta gracia y nos haga encontrar así su paz.<br /> </span></p><hr color="#5E0000" width="59%" /><p><span lang="ES">BENEDICTO XVI<br /><b><i>AUDIENCIA GENERAL</i></b><br /><i>Miércoles 20 de febrero de 2008</i><br /></span><b><span lang="ES">San Agustín (4)</span></b><span lang="ES"><br /><b>Las Obras de san Agustín<br /> </b></span></p><p style="text-align: justify;"><i><span lang="ES">Queridos hermanos y hermanas: </span></i><span lang="ES">Tras la pausa de los ejercicios espirituales de la semana pasada, hoy volvemos a presentar la gran figura de san Agustín, sobre el que ya he hablado varias veces en las catequesis del miércoles. Es el Padre de la Iglesia que ha dejado el mayor número de obras, y de ellas quiero hablar hoy brevemente. Algunos de los escritos de san Agustín son de fundamental importancia, no sólo para la historia del cristianismo, sino también para la formación de toda la cultura occidental: el ejemplo más claro son las <i>Confesiones</i>, sin duda uno de los libros de la antigüedad cristiana más leídos todavía hoy. Al igual que varios Padres de la Iglesia de los primeros siglos, aunque en una medida incomparablemente más amplia, también el obispo de Hipona ejerció una influencia amplia y persistente, como lo demuestra la sobreabundante tradición manuscrita de sus obras, que son realmente numerosas.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Él mismo las revisó algunos años antes de morir en las <i>Retractationes</i> y poco después de su muerte fueron cuidadosamente registradas en el <i>Indiculus</i> ("índice") añadido por su fiel amigo Posidio a la biografía de san Agustín, <i>Vita Augustini</i>. La lista de las obras de san Agustín fue realizada con el objetivo explícito de salvaguardar su memoria mientras la invasión de los vándalos se extendía por toda el África romana y contabiliza mil treinta escritos numerados por su autor, junto con otros "que no pueden numerarse porque no les puso ningún número".</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Posidio, obispo de una ciudad cercana, dictaba estas palabras precisamente en Hipona, donde se había refugiado y donde había asistido a la muerte de su amigo, y casi seguramente se basaba en el catálogo de la biblioteca personal de san Agustín. Hoy han sobrevivido más de trescientas cartas del obispo de Hipona, y casi seiscientas homilías, pero estas originalmente eran muchas más, quizá entre tres mil y cuatro mil, fruto de cuatro décadas de predicación del antiguo retórico, que había decidido seguir a Jesús, dejando de hablar a los grandes de la corte imperial para dirigirse a la población sencilla de Hipona.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">En años recientes, el descubrimiento de un grupo de cartas y de algunas homilías ha enriquecido nuestro conocimiento de este gran Padre de la Iglesia. "Muchos libros —escribe Posidio— fueron redactados y publicados por él, muchas predicaciones fueron pronunciadas en la iglesia, transcritas y corregidas, ya sea para confutar a herejes ya sea para interpretar las sagradas Escrituras para edificación de los santos hijos de la Iglesia. Estas obras —subraya el obispo amigo— son tan numerosas que a duras penas un estudioso tiene la posibilidad de leerlas y aprender a conocerlas" (<i>Vita Augustini</i>, 18, 9).</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Entre la producción literaria de san Agustín —por tanto, más de mil publicaciones subdivididas en escritos filosóficos, apologéticos, doctrinales, morales, monásticos, exegéticos y contra los herejes, además de las cartas y homilías— destacan algunas obras excepcionales de gran importancia teológica y filosófica. Ante todo, hay que recordar las <i>Confesiones</i>, antes mencionadas, escritas en trece libros entre los años 397 y 400 para alabanza de Dios. Son una especie de autobiografía en forma de diálogo con Dios. Este género literario refleja precisamente la vida de san Agustín, que no estaba cerrada en sí misma, dispersa en muchas cosas, sino vivida esencialmente como un diálogo con Dios y, de este modo, una vida con los demás.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">El título <i>Confesiones</i> indica ya lo específico de esta autobiografía. En el latín cristiano desarrollado por la tradición de los Salmos, la palabra <i>confessiones</i> tiene dos significados, que se entrecruzan. <i>Confessiones</i> indica, en primer lugar, la confesión de las propias debilidades, de la miseria de los pecados; pero al mismo tiempo, <i>confessiones</i> significa alabanza a Dios, reconocimiento de Dios. Ver la propia miseria a la luz de Dios se convierte en alabanza a Dios y en acción de gracias porque Dios nos ama y nos acepta, nos transforma y nos eleva hacia sí mismo.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Sobre estas <i>Confesiones</i>, que tuvieron gran éxito ya en vida de san Agustín, escribió él mismo: "Han ejercido sobre mí un gran influjo mientras las escribía y lo siguen ejerciendo todavía cuando las vuelvo a leer. Hay muchos hermanos a quienes gustan estas obras" (<i>Retractationes</i>, II, 6): y tengo que reconocer que yo también soy uno de estos "hermanos". Gracias a las <i>Confesiones</i> podemos seguir, paso a paso, el camino interior de este hombre extraordinario y apasionado por Dios.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Menos difundidas, aunque igualmente originales y muy importantes son, también, las <i>Retractationes</i>, redactadas en dos libros en torno al año 427, en las que san Agustín, ya anciano, realiza una labor de "revisión" (<i>retractatio</i>) de toda su obra escrita, dejando así un documento literario singular y sumamente precioso, pero también una enseñanza de sinceridad y de humildad intelectual.</span></p><p style="text-align: justify;"><i><span lang="ES">De civitate Dei</span></i><span lang="ES">, obra imponente y decisiva para el desarrollo del pensamiento político occidental y para la teología cristiana de la historia, fue escrita entre los años 413 y 426 en veintidós libros. La ocasión fue el saqueo de Roma por parte de los godos en el año 410. Muchos paganos de entonces, y también muchos cristianos, habían dicho: Roma ha caído, ahora el Dios cristiano y los apóstoles ya no pueden proteger la ciudad. Durante la presencia de las divinidades paganas, Roma era <i>caput mundi</i>, la gran capital, y nadie podía imaginar que caería en manos de los enemigos. Ahora, con el Dios cristiano, esta gran ciudad ya no parecía segura. Por tanto, el Dios de los cristianos no protegía, no podía ser el Dios a quien convenía encomendarse. A esta objeción, que también tocaba profundamente el corazón de los cristianos, responde san Agustín con esta grandiosa obra, <i>De civitate Dei</i>, aclarando qué es lo que debían esperarse de Dios y qué es lo que no podían esperar de él, cuál es la relación entre la esfera política y la esfera de la fe, de la Iglesia. Este libro sigue siendo una fuente para definir bien la auténtica laicidad y la competencia de la Iglesia, la grande y verdadera esperanza que nos da la fe.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Este gran libro es una presentación de la historia de la humanidad gobernada por la divina Providencia, pero actualmente dividida en dos amores. Y este es el designio fundamental, su interpretación de la historia, la lucha entre dos amores: el amor a sí mismo "hasta el desprecio de Dios" y el amor a Dios "hasta el desprecio de sí mismo", (<i>De civitate Dei</i>, XIV, 28), hasta la plena libertad de sí mismo para los demás a la luz de Dios. Este es, tal vez, el mayor libro de san Agustín, de una importancia permanente.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Igualmente importante es el <i>De Trinitate</i>, obra en quince libros sobre el núcleo principal de la fe cristiana, la fe en el Dios trino, escrita en dos tiempos: entre los años 399 y 412 los primeros doce libros, publicados sin saberlo san Agustín, el cual hacia el año 420 los completó y revisó toda la obra. En ella reflexiona sobre el rostro de Dios y trata de comprender este misterio de Dios, que es único, el único creador del mundo, de todos nosotros: precisamente este Dios único es trinitario, un círculo de amor. Trata de comprender el misterio insondable: precisamente su ser trinitario, en tres Personas, es la unidad más real y profunda del único Dios.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">El libro <i>De doctrina christiana</i> es, en cambio, una auténtica introducción cultural a la interpretación de la Biblia y, en definitiva, al cristianismo mismo, y tuvo una importancia decisiva en la formación de la cultura occidental.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Con gran humildad, san Agustín fue ciertamente consciente de su propia talla intelectual. Pero para él era más importante llevar el mensaje cristiano a los sencillos que redactar grandes obras de elevado nivel teológico. Esta intención profunda, que le guió durante toda su vida, se manifiesta en una carta escrita a su colega Evodio, en la que le comunica la decisión de dejar de dictar por el momento los libros del <i>De Trinitate</i>, "pues son demasiado densos y creo que son pocos los que los pueden entender; urgen más textos que esperamos sean útiles a muchos" (<i>Epistulae</i>, 169, 1, 1). Por tanto, para él era más útil comunicar la fe de manera comprensible para todos, que escribir grandes obras teológicas.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">La gran responsabilidad que sentía por la divulgación del mensaje cristiano se encuentra en el origen de escritos como el <i>De catechizandis rudibus</i>, una teoría y también una práctica de la catequesis, o el <i>Psalmus contra partem Donati</i>. Los donatistas eran el gran problema del África de san Agustín, un cisma específicamente africano. Los donatistas afirmaban: la auténtica cristiandad es la africana. Se oponían a la unidad de la Iglesia. Contra este cisma el gran obispo luchó durante toda su vida, tratando de convencer a los donatistas de que incluso la africanidad sólo puede ser verdadera en la unidad. Y para que le entendieran los sencillos, los que no podían comprender el gran latín del retórico, dijo: tengo que escribir incluso con errores gramaticales, en un latín muy simplificado. Y lo hizo, sobre todo en este <i>Psalmus</i>, una especie de poesía sencilla contra los donatistas para ayudar a toda la gente a comprender que sólo en la unidad de la Iglesia se realiza realmente para todos nuestra relación con Dios y crece la paz en el mundo.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">En esta producción destinada a un público más amplio reviste particular importancia su gran número de homilías, con frecuencia improvisadas, transcritas por taquígrafos durante la predicación e inmediatamente puestas en circulación. Entre estas destacan las bellísimas <i>Enarrationes in Psalmos</i>, muy leídas en la Edad Media. La publicación de las miles de homilías de san Agustín —con frecuencia sin el control del autor— explica su amplia difusión y su dispersión sucesiva, así como su vitalidad. Inmediatamente las predicaciones del obispo de Hipona, por la fama del autor, se convirtieron en textos sumamente requeridos. Para los demás obispos y sacerdotes servían también de modelos, adaptados a contextos siempre nuevos.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">En la tradición iconográfica, un fresco de Letrán que se remonta al siglo VI, representa a san Agustín con un libro en la mano (véase la foto), no sólo para expresar su producción literaria, que tanta influencia ejerció en la mentalidad y en el pensamiento cristianos, sino también para expresar su amor por los libros, por la lectura y el conocimiento de la gran cultura precedente. A su muerte, cuenta Posidio, no dejó nada, pero "recomendaba siempre que se conservara diligentemente para las futuras generaciones la biblioteca de la iglesia con todos sus códices", sobre todo los de sus obras. En estas, subraya Posidio, san Agustín está "siempre vivo" y es muy útil para quien lee sus escritos, aunque —concluye— "creo que pudieron sacar más provecho de su contacto los que lo pudieron ver y escuchar cuando hablaba personalmente en la iglesia, y sobre todo los que fueron testigos de su vida cotidiana entre la gente" (<i>Vita Augustini</i>, 31).</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Sí, también a nosotros nos hubiera gustado poderlo escuchar vivo. Pero sigue realmente vivo en sus escritos, está presente en nosotros y de este modo vemos también la permanente vitalidad de la fe por la que dio toda su vida.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES"> </span></p><hr color="#5E0000" width="59%" /><p><span lang="ES">BENEDICTO XVI<br /><b>AUDIENCIA GENERAL</b><br />Miércoles 27 de febrero de 2008<br /></span><b><span lang="ES">Las conversiones de san Agustín (5)<br /> </span></b></p><p style="text-align: justify;"><i><span lang="ES">Queridos hermanos y hermanas: </span></i><span lang="ES">Con el encuentro de hoy quiero concluir la presentación de la figura de san Agustín. Después de comentar su vida, sus obras, y algunos aspectos de su pensamiento, hoy quiero volver a hablar de su experiencia interior, que hizo de él uno de los más grandes convertidos de la historia cristiana. A esta experiencia dediqué en particular mi reflexión durante la </span><a href="http://www.vatican.va/holy_father/benedict_xvi/travels/2007/index_vigevano-pavia_sp.htm"><span lang="ES">peregrinación que realicé a Pavía</span></a><span lang="ES">, el año pasado, para venerar los restos mortales de este Padre de la Iglesia. De ese modo le expresé el homenaje de toda la Iglesia católica, y al mismo tiempo manifesté mi personal devoción y reconocimiento con respecto a una figura a la que me siento muy unido por el influjo que ha tenido en mi vida de teólogo, de sacerdote y de pastor.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Todavía hoy es posible revivir la historia de san Agustín sobre todo gracias a las <i>Confesiones</i>, escritas para alabanza de Dios, que constituyen el origen de una de las formas literarias más específicas de Occidente, la autobiografía, es decir, la expresión personal de la propia conciencia. Pues bien, cualquiera que se acerque a este extraordinario y fascinante libro, muy leído todavía hoy, fácilmente se da cuenta de que la conversión de san Agustín no fue repentina ni se realizó plenamente desde el inicio, sino que puede definirse más bien como un auténtico camino, que sigue siendo un modelo para cada uno de nosotros.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Ciertamente, este itinerario culminó con la conversión y después con el bautismo, pero no se concluyó en aquella Vigilia pascual del año 387, cuando en Milán el retórico africano fue bautizado por el obispo san Ambrosio. El camino de conversión de san Agustín continuó humildemente hasta el final de su vida, y se puede decir con verdad que sus diferentes etapas —se pueden distinguir fácilmente tres— son una única y gran conversión.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">San Agustín buscó apasionadamente la verdad: lo hizo desde el inicio y después durante toda su vida. La primera etapa en su camino de conversión se realizó precisamente en el acercamiento progresivo al cristianismo. En realidad, había recibido de su madre, santa Mónica, a la que siempre estuvo muy unido, una educación cristiana y, a pesar de que en su juventud había llevado una vida desordenada, siempre sintió una profunda atracción por Cristo, habiendo bebido con la leche materna, como él mismo subraya (cf. <i>Confesiones</i>, III, 4, 8), el amor al nombre del Señor.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Pero también la filosofía, sobre todo la platónica, había contribuido a acercarlo más a Cristo, manifestándole la existencia del <i>Logos</i>, la razón creadora. Los libros de los filósofos le indicaban que existe la razón, de la que procede todo el mundo, pero no le decían cómo alcanzar este <i>Logos</i>, que parecía tan lejano. Sólo la lectura de las cartas de san Pablo, en la fe de la Iglesia católica, le reveló plenamente la verdad. San Agustín sintetizó esta experiencia en una de las páginas más famosas de las <i>Confesiones</i>: cuenta que, en el tormento de sus reflexiones, habiéndose retirado a un jardín, escuchó de repente una voz infantil que repetía una cantilena que nunca antes había escuchado: «tolle, lege; tolle, lege», «toma, lee; toma, lee» (VIII, 12, 29). Entonces se acordó de la conversión de san Antonio, padre del monaquismo, y solícitamente volvió a tomar el códice de san Pablo que poco antes tenía en sus manos: lo abrió y la mirada se fijó en el pasaje de la carta a los Romanos donde el Apóstol exhorta a abandonar las obras de la carne y a revestirse de Cristo (<i>Rm</i> 13, 13-14).</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Había comprendido que esas palabras, en aquel momento, se dirigían personalmente a él, procedían de Dios a través del Apóstol y le indicaban qué debía hacer en ese momento. Así sintió cómo se disipaban las tinieblas de la duda y quedaba libre para entregarse totalmente a Cristo: «Habías convertido a ti mi ser», comenta (<i>Confesiones</i>, VIII, 12, 30). Esta fue la conversión primera y decisiva.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">El retórico africano llegó a esta etapa fundamental de su largo camino gracias a su pasión por el hombre y por la verdad, pasión que lo llevó a buscar a Dios, grande e inaccesible. La fe en Cristo le hizo comprender que en realidad Dios no estaba tan lejos como parecía. Se había hecho cercano a nosotros, convirtiéndose en uno de nosotros. En este sentido, la fe en Cristo llevó a cumplimiento la larga búsqueda de san Agustín en el camino de la verdad. Sólo un Dios que se ha hecho «tocable», uno de nosotros, era realmente un Dios al que se podía rezar, por el cual y en el cual se podía vivir.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Es un camino que hay que recorrer con valentía y al mismo tiempo con humildad, abiertos a una purificación permanente, que todos necesitamos siempre. Pero, como hemos dicho, el camino de san Agustín no había concluido con aquella Vigilia pascual del año 387. Al regresar a África, fundó un pequeño monasterio y se retiró a él, junto a unos pocos amigos, para dedicarse a la vida contemplativa y al estudio. Este era el sueño de su vida. Ahora estaba llamado a vivir totalmente para la verdad, con la verdad, en la amistad de Cristo, que es la verdad. Un hermoso sueño que duró tres años, hasta que, contra su voluntad, fue consagrado sacerdote en Hipona y destinado a servir a los fieles. Ciertamente siguió viviendo con Cristo y por Cristo, pero al servicio de todos. Esto le resultaba muy difícil, pero desde el inicio comprendió que sólo podía realmente vivir con Cristo y por Cristo viviendo para los demás, y no simplemente para su contemplación privada.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Así, renunciando a una vida consagrada sólo a la meditación, san Agustín aprendió, a menudo con dificultad, a poner a disposición el fruto de su inteligencia para beneficio de los demás. Aprendió a comunicar su fe a la gente sencilla y a vivir así para ella en aquella ciudad que se convirtió en su ciudad, desempeñando incansablemente una actividad generosa y pesada, que describe con estas palabras en uno de sus bellísimos sermones: «Continuamente predicar, discutir, reprender, edificar, estar a disposición de todos, es una gran carga y un gran peso, una enorme fatiga» (<i>Serm.</i> 339, 4). Pero cargó con este peso, comprendiendo que precisamente así podía estar más cerca de Cristo. Su segunda conversión consistió en comprender que se llega a los demás con sencillez y humildad.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Pero hay una última etapa en el camino de san Agustín, una tercera conversión: la que lo llevó a pedir perdón a Dios cada día de su vida. Al inicio, había pensado que una vez bautizado, en la vida de comunión con Cristo, en los sacramentos, en la celebración de la Eucaristía, iba a llegar a la vida propuesta en el Sermón de la montaña: a la perfección donada en el bautismo y reconfirmada en la Eucaristía. En la última parte de su vida comprendió que no era verdad lo que había dicho en sus primeras predicaciones sobre el Sermón de la montaña: es decir, que nosotros, como cristianos, vivimos ahora permanentemente este ideal. Sólo Cristo mismo realiza verdadera y completamente el Sermón de la montaña. Nosotros siempre tenemos necesidad de ser lavados por Cristo, que nos lava los pies, y de ser renovados por él. Tenemos necesidad de una conversión permanente. Hasta el final necesitamos esta humildad que reconoce que somos pecadores en camino, hasta que el Señor nos da la mano definitivamente y nos introduce en la vida eterna. San Agustín murió con esta última actitud de humildad, vivida día tras día.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Esta actitud de humildad profunda ante el único Señor Jesús lo introdujo en la experiencia de una humildad también intelectual. San Agustín, que es una de las figuras más grandes en la historia del pensamiento, en los últimos años de su vida quiso someter a un lúcido examen crítico sus numerosísimas obras. Surgieron así las <i>Retractationes</i> («Revisiones»), que de este modo introducen su pensamiento teológico, verdaderamente grande, en la fe humilde y santa de aquella a la que llama sencillamente con el nombre de <i>Catholica, </i>es decir, la Iglesia. «He comprendido —escribe precisamente en este originalísimo libro (I, 19, 1-3)— que uno sólo es verdaderamente perfecto y que las palabras del Sermón de la montaña sólo se realizan totalmente en uno solo: en Jesucristo mismo. Toda la Iglesia, por el contrario —todos nosotros, incluidos los Apóstoles—, debemos rezar cada día: Perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden».</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">San Agustín, convertido a Cristo, que es verdad y amor, lo siguió durante toda la vida y se transformó en un modelo para todo ser humano, para todos nosotros, en la búsqueda de Dios. Por eso quise concluir mi peregrinación a Pavía volviendo a entregar espiritualmente a la Iglesia y al mundo, ante la tumba de este gran enamorado de Dios, mi primera encíclica, </span><i><a href="http://www.vatican.va/holy_father/benedict_xvi/encyclicals/documents/hf_ben-xvi_enc_20051225_deus-caritas-est_sp.html"><span lang="ES">Deus caritas est</span></a></i><span lang="ES">, la cual, en efecto, debe mucho, sobre todo en su primera parte, al pensamiento de san Agustín.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">También hoy, como en su época, la humanidad necesita conocer y sobre todo vivir esta realidad fundamental: Dios es amor y el encuentro con él es la única respuesta a las inquietudes del corazón humano, un corazón en el que vive la esperanza —quizá todavía oscura e inconsciente en muchos de nuestros contemporáneos—, pero que para nosotros los cristianos abre ya hoy al futuro, hasta el punto de que san Pablo escribió que «en esperanza fuimos salvados» (<i>Rm</i> 8, 24). A la esperanza he dedicado mi segunda encíclica, </span><i><a href="http://www.vatican.va/holy_father/benedict_xvi/encyclicals/documents/hf_ben-xvi_enc_20071130_spe-salvi_sp.html"><span lang="ES">Spe salvi</span></a><span lang="ES">, </span></i><span lang="ES">la cual también debe mucho a san Agustín y a su encuentro con Dios.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">En un escrito sumamente hermoso, san Agustín define la oración como expresión del deseo y afirma que Dios responde ensanchando hacia él nuestro corazón. Por nuestra parte, debemos purificar nuestros deseos y nuestras esperanzas para acoger la dulzura de Dios (cf. <i>In I Ioannis, </i>4, 6). Sólo ella nos salva, abriéndonos también a los demás. Pidamos, por tanto, para que en nuestra vida se nos conceda cada día seguir el ejemplo de este gran convertido, encontrando como él en cada momento de nuestra vida al Señor Jesús, el único que nos salva, nos purifica y nos da la verdadera alegría, la verdadera vida.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES"> </span></p><hr color="#5E0000" width="59%" /><p><span lang="ES" style="font-weight: 700;">VISITA PASTORAL A VIGÉVANO Y PAVÍA<br />CELEBRACIÓN DE VÍSPERAS<br /><a name="HOMILÍA_DEL_SANTO_PADRE_BENEDICTO_XVI_">HOMILÍA DEL SANTO PADRE BENEDICTO XVI</a><br />Pavía, domingo 22 de abril de 2007</span></p><p><span lang="ES" style="font-weight: 700;"><br />“El Amor es el alma de la Vida de la Iglesia”</span></p><p style="text-align: justify;"><img align="right" border="0" height="161" hspace="8" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/personas/agusti2.jpg" vspace="5" width="150" /><span lang="ES"><br />Queridos hermanos y hermanas: En su momento conclusivo, mi visita a Pavía toma la forma de una peregrinación. Es la forma en que yo la había concebido al inicio, pues deseaba v</span><span lang="ES">enir a venerar los</span><span lang="ES"> restos mortales de san Agustín, para rendir el homenaje de toda la Iglesia católica a uno de sus "padres" más destacados, así como para manifestar mi devoción y mi gratitud personal hacia quien ha desempeñado un papel tan importante en mi vida de teólogo y pastor, pero antes aún de hombre y sacerdote.</span></p><p style="text-align: justify;"><span lang="ES">Con afecto renuevo mi saludo al obispo Giovanni Giudici y lo extiendo en particular al prior general de los agustinos, padre Robert Francis Prevost, al padre provincial y a toda la comunidad agustina. Con alegría os saludo a todos vosotros, queridos sacerdotes, religiosos y religiosas, laicos consagrados y seminaristas. La Providencia ha querido que mi viaje asumiera el carácter de una auténtica visita pastoral; por eso, en esta etapa de oración quisiera recoger aquí, junto al sepulcro del Doctor gratiae, un mensaje significativo para el camino de la Iglesia. Este mensaje nos viene del encuentro entre la palabra de Dios y la experiencia personal del gran obispo de Hipona.<br /><br />Hemos escuchado la breve lectura bíblica de las segundas Vísperas del tercer domingo de Pascua (Hb 10, 12-14): la carta a los Hebreos nos ha presentado a Cristo, sumo y eterno sacerdote, exaltado a la gloria del Padre después de haberse ofrecido a sí mismo como único y perfecto sacrificio de la nueva alianza, con el que se llevó a cabo la obra de la Redención. San Agustín fijó su mirada en este misterio y en él encontró la Verdad que tanto buscaba: Jesucristo, el Verbo encarnado, el Cordero inmolado y resucitado, es la revelación del rostro de Dios Amor a todo ser humano en camino por las sendas del tiempo hacia la eternidad.<br /><br />En un pasaje que se puede considerar paralelo al que se acaba de proclamar de la carta a los Hebreos, el apóstol san Juan escribe: "En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó y nos envió a su Hijo como propiciación por nuestros pecados" (1 Jn 4, 10). Aquí radica el corazón del Evangelio, el núcleo central del cristianismo. La luz de este amor abrió los ojos de san Agustín, le hizo encontrar la "belleza antigua y siempre nueva" (Las Confesiones, X, 27), en la cual únicamente encuentra paz el corazón del hombre.<br />Queridos hermanos y hermanas, aquí, ante la tumba de san Agustín, quisiera volver a entregar idealmente a la Iglesia y al mundo mi primera encíclica, que contiene precisamente este mensaje central del Evangelio: Deus caritas est, "Dios es amor" (1 Jn 4, 8. 16). Esta encíclica, y sobre todo su primera parte, debe mucho al pensamiento de san Agustín, que fue un enamorado del amor de Dios, y lo cantó, meditó, predicó en todos sus escritos, y sobre todo lo testimonió en su ministerio pastoral.<br /><br />Siguiendo las enseñanzas del concilio Vaticano II y de mis venerados predecesores Juan XXIII, Pablo VI, Juan Pablo I y Juan Pablo II, estoy convencido de que la humanidad contemporánea necesita este mensaje esencial, encarnado en Cristo Jesús: Dios es amor. Todo debe partir de esto y todo debe llevar a esto: toda actividad pastoral, todo tratado teológico. Como dice san Pablo: "Si no tengo caridad, nada me aprovecha" (cf. 1 Co 13, 3). Todos los carismas carecen de sentido y de valor sin el amor; en cambio, gracias al amor todos ellos contribuyen a edificar el Cuerpo místico de Cristo.<br />El mensaje que repite también hoy san Agustín a toda la Iglesia, y en particular a esta comunidad diocesana que con tanta veneración conserva sus reliquias, es el siguiente: el Amor es el alma de la vida de la Iglesia y de su actividad pastoral. Lo hemos escuchado esta mañana en el diálogo entre Jesús y Simón Pedro: "¿Me amas?... Apacienta mis ovejas" (cf. Jn 21, 15-17). Sólo quien vive en la experiencia personal del amor del Señor es capaz de cumplir la tarea de guiar y acompañar a los demás en el camino del seguimiento de Cristo. Al igual que san Agustín, os repito esta verdad a vosotros como Obispo de Roma, mientras con alegría siempre nueva la acojo juntamente con vosotros como cristiano.<br /><br />Servir a Cristo es ante todo una cuestión de amor. Queridos hermanos y hermanas, vuestra pertenencia a la Iglesia y vuestro apostolado deben brillar siempre por la ausencia de cualquier interés individual y por la adhesión sin reservas al amor de Cristo. Los jóvenes, en especial, necesitan recibir el anuncio de la libertad y la alegría, cuyo secreto radica en Cristo. Él es la respuesta más verdadera a las expectativas de sus corazones inquietos por los numerosos interrogantes que llevan en su interior. Sólo en él, Palabra pronunciada por el Padre para nosotros, se encuentra la unión entre la verdad y el amor, en la que se encuentra el sentido pleno de la vida. San Agustín vivió personalmente y analizó a fondo los interrogantes que el hombre alberga en su corazón y sondeó la capacidad que tiene de abrirse al infinito de Dios.<br /><br />Siguiendo las huellas de san Agustín, también vosotros debéis ser una Iglesia que anuncie con valentía la "buena nueva" de Cristo, su propuesta de vida, su mensaje de reconciliación y perdón. He visto que vuestro primer objetivo pastoral consiste en llevar a las personas a la madurez cristiana. Aprecio esta prioridad que otorgáis a la formación personal, porque la Iglesia no es una simple organización de manifestaciones colectivas, ni lo opuesto, la suma de individuos que viven una religiosidad privada. La Iglesia es una comunidad de personas que creen en el Dios de Jesucristo y se comprometen a vivir en el mundo el mandamiento de la caridad que él nos dejó. Por tanto, es una comunidad en la que se nos educa en el amor, y esta educación se lleva a cabo no a pesar de los acontecimientos de la vida, sino a través de ellos. Así fue para san Pedro, para san Agustín y para todos los santos. Y así es también para nosotros.<br /><br />La maduración personal, animada por la caridad eclesial, permite también crecer en el discernimiento comunitario, es decir, en la capacidad de leer e interpretar el tiempo presente a la luz del Evangelio, para responder a la llamada del Señor. Os exhorto a progresar en el testimonio personal y comunitario del amor con obras. El servicio de la caridad, que con razón concebís siempre unido al anuncio de la Palabra y a la celebración de los sacramentos, os llama y a la vez os estimula a estar atentos a las necesidades materiales y espirituales de los hermanos.<br /><br />Os aliento a tratar de alcanzar el "alto grado" de la vida cristiana, que encuentra en la caridad el vínculo de la perfección y que debe traducirse también en un estilo de vida moral inspirado en el Evangelio, inevitablemente contra corriente con respecto a los criterios del mundo, pero que es preciso testimoniar siempre de modo humilde, respetuoso y cordial.<br /><br />Queridos hermanos y hermanas, para mí ha sido un don, realmente un don, compartir con vosotros esta visita a la tumba de san Agustín; vuestra presencia ha dado a mi peregrinación un sentido eclesial más concreto. Recomencemos desde aquí llevando en nuestro corazón la alegría de ser discípulos del Amor.<br />Que nos acompañe siempre la Virgen María, a cuya maternal protección os encomiendo a cada uno de vosotros y a vuestros seres queridos, a la vez que con gran afecto os imparto la bendición apostólica.<br /> </span></p><hr color="#5E0000" width="59%" /><p align="center"><a name="TARDE_TE_AMÉ_"><img align="left" height="252" hspace="8" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/personas/sa02.jpg" vspace="5" width="175" /><b>TARDE TE AMÉ</b></a><b><br /></b>San Agustín</p><p align="center"><br />Tarde te amé, belleza infinita tarde te amé,<br />Tarde te ame belleza siempre antigua y siempre nueva!<br /><br />Y supe, Señor que estabas en mi alma y yo estaba fuera, así te buscaba mirando la belleza de lo creado.<br /><br />¡Tarde te amé belleza infinita, tarde te ame, tarde te ame, belleza siempre antigua y siempre nueva!.<br />Señor tu me llamaste, tu voz a mi llegó, curando mi sordera con tu luz brillaste cambiando mi ceguera en un resplandor,<br />¡Tarde te amé belleza infinita,<br />tarde te ame, tarde te ame, belleza siempre antigua y siempre nueva!.<br /><br />Tu estabas conmigo, mas yo buscaba fuera y no te encontraba, era un prisionero de tus criaturas, lejos de Ti.<br />¡Tarde te amé belleza infinita, tarde te ame, tarde te ame, belleza siempre antigua y siempre nueva!.<br /> Hasta mí, ha llegado el aroma de tu gracia, por fin respiré, Señor yo te he buscado, siento hambre y sed, ansío tu paz.<br />¡Tarde te amé belleza infinita, tarde te ame, tarde te ame, belleza siempre antigua y siempre nueva!.<br /> </p><hr color="#FFFFFF" size="1" width="50%" /><p align="center"><span lang="ES">1650° ANIVERSARIO DEL NACIMIENTO<br />DE SAN AGUSTÍN, OBISPO DE HIPONA</span></p><p><b><span lang="ES"><a name="ORACIÓN_A_SAN_AGUSTÍN__COMPUESTA_POR_JUAN_PABLO_II_">ORACIÓN A SAN AGUSTÍN<br />COMPUESTA POR JUAN PABLO II</a><br /><br /><br /><img align="center" border="0" height="171" hspace="8" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/personas/000101930.png" vspace="5" width="120" /></span><i><span lang="ES"><br /></span></i></b><span lang="ES"><br /><br />¡Oh gran Agustín,<br />nuestro padre y maestro!,<br />conocedor de los luminosos caminos de Dios,<br />y también de las tortuosas<br />sendas de los hombres,<br />admiramos las maravillas que la gracia divina<br />obró en ti, convirtiéndote en testigo apasionado<br />de la verdad y del bien,<br />al servicio de los hermanos.<br /><br />Al inicio de un nuevo milenio,<br />marcado por la cruz de Cristo,<br />enséñanos a leer la historia<br />a la luz de la Providencia divina,<br />que guía los acontecimientos<br />hacia el encuentro definitivo con el Padre.<br /><br />Oriéntanos hacia metas de paz,<br />alimentando en nuestro corazón<br />tu mismo anhelo por aquellos valores<br />sobre los que es posible construir,<br />con la fuerza que viene de Dios,<br />la "ciudad" a medida del hombre.<br /><br />La profunda doctrina<br />que con estudio amoroso y paciente<br />sacaste de los manantiales<br />siempre vivos de la Escritura<br />ilumine a los que hoy sufren la tentación<br />de espejismos alienantes.<br /><br />Obtén para ellos la valentía<br />de emprender el camino<br />hacia el "hombre interior",<br />en el que los espera<br />el único que puede dar paz<br />a nuestro corazón inquieto.</span></p><p><span lang="ES">Muchos de nuestros contemporáneos<br />parecen haber perdido<br />la esperanza de poder encontrar,<br />entre las numerosas ideologías opuestas,<br />la verdad, de la que, a pesar de todo,<br />sienten una profunda nostalgia<br />en lo más íntimo de su ser.<br /><br />Enséñales a no dejar nunca de buscarla<br />con la certeza de que, al final,<br />su esfuerzo obtendrá como premio<br />el encuentro, que los saciará,<br />con la Verdad suprema,<br />fuente de toda verdad creada.<br /><br />Por último, ¡oh san Agustín!,<br />transmítenos también a nosotros una chispa<br />de aquel ardiente amor a la Iglesia,<br />la <i>Catholica</i> madre de los santos,<br />que sostuvo y animó<br />los trabajos de tu largo ministerio.<br /><br />Haz que, caminando juntos<br />bajo la guía de los pastores legítimos,<br />lleguemos a la gloria de la patria celestial<br />donde, con todos los bienaventurados,<br />podremos unirnos al cántico nuevo<br />del <i>aleluya</i> sin fin. </span>Amén.</p><p><br /></p><p>Fuente: <a href="https://www.corazones.org/santos/agustin.htm" target="_blank">Corazones.org</a></p></center></span></span></span>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-33845928083140602952023-08-27T16:37:00.003-03:002023-08-27T16:47:49.402-03:00Oraciones por los hijos y la familia a Santa Mónica<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgHwBJRD02DcOG7H1WdWXHgfaDzXhkgEQq-lb5lFfWAbnnS5mMPvIqi8bMAjyojiDsGGiatIgShGhjxG9wfP9rcpMQYr4k55_AEaVWweM6nYLJU3D7D4BkyAT_CV-3LShBXbjwcCT6xoJITmtdyyxy8TPWTy_yJQOc0DxtU9-pKjYQoo3e_GqkksYx8ZlqV" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="900" data-original-width="624" height="382" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgHwBJRD02DcOG7H1WdWXHgfaDzXhkgEQq-lb5lFfWAbnnS5mMPvIqi8bMAjyojiDsGGiatIgShGhjxG9wfP9rcpMQYr4k55_AEaVWweM6nYLJU3D7D4BkyAT_CV-3LShBXbjwcCT6xoJITmtdyyxy8TPWTy_yJQOc0DxtU9-pKjYQoo3e_GqkksYx8ZlqV=w264-h382" width="264" /></a></div><br /><br /></div><br /><p></p><p><span style="background-color: white; color: #990000; font-family: Verdana;"><br /></span></p><p><span style="background-color: white; color: #990000; font-family: Verdana;">ORACIONES A SANTA MÓNICA</span></p><p style="background-color: white; text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Gloriosa Santa Mónica, modelo de madres. Tu vida la admiramos en los vaivenes de tu hogar y sobre todo, siguiendo a tu hijo Agustín. Supiste atraer a tu esposo hacia Dios e igualmente a aquel hijo que había perdido la fe. Le seguías llamándole, orando, llorando... Consíguenos que comprendamos el papel sagrado de las madres y su influencia en el hogar. Confiamos nuestra familia a tu protección.</span></p><p style="background-color: white;"></p><center style="background-color: white; text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">__________</span></center><p style="background-color: white;"></p><p style="background-color: white;"></p><center style="background-color: white; text-align: justify;"> </center><p style="background-color: white;"></p><h4 style="background-color: white;"><center style="text-align: justify;"><span style="color: #990000; font-family: Verdana;">NOVENA BREVE<br /></span></center></h4><p style="background-color: white; text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Querida Santa Mónica, esposa y madre preocupada, muchas tristezas se clavaron en tu corazón durante tu vida. Sin embargo, nunca te desesperaste o perdiste la fe. Con confianza, persistencia y profunda fe rezaste diariamente por la conversión de tu amado esposo, Patricio, y tu amado hijo, Agustín.</span></p><p style="background-color: white; text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Concédeme la misma fortaleza, paciencia y confianza en el Señor. Intercede por mi, querida Santa Mónica, para que Dios pueda escuchar favorablemente mi súplica <i>(mencione aquí su petición)</i> y me conceda la gracia de aceptar su voluntad en todas las cosas, por medio de Jesucristo, nuestro Señor, en la unidad del Espíritu Santo, un solo Dios por los siglos de los siglos. Amén.<br /></span></p><p style="background-color: white;"></p><center style="background-color: white; text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">__________</span></center><p style="background-color: white;"></p><p style="background-color: white;"></p><center style="background-color: white; text-align: justify;"> </center><p style="background-color: white;"></p><h4 style="background-color: white;"><center style="text-align: justify;"><span style="color: #990000; font-family: Verdana;">ORACIÓN PARA PEDIR POR LOS HIJOS<br /></span></center><center style="text-align: justify;"><span style="color: #990000; font-family: Verdana;"><br /></span></center><center style="text-align: justify;"><span style="color: #990000; font-family: Verdana;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEj_ysEQmQ7wlt3ClVctSih31cqyH_2y61--FN2xICfFqJ45aYw-8zhGX6w94gfwKzJNe6c0QWKwHT9iQuvIW_zf7ffGSfJ4WvJSpozCtKJFYB7shpX6McQaKIoWvjHAC4WKZ2kzZMB8hA6Z5GrFuQmZ8AByq_rp-Kut9qRmkCT1UihkXioxCxFNqOMNuP9I" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="500" data-original-width="900" height="178" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEj_ysEQmQ7wlt3ClVctSih31cqyH_2y61--FN2xICfFqJ45aYw-8zhGX6w94gfwKzJNe6c0QWKwHT9iQuvIW_zf7ffGSfJ4WvJSpozCtKJFYB7shpX6McQaKIoWvjHAC4WKZ2kzZMB8hA6Z5GrFuQmZ8AByq_rp-Kut9qRmkCT1UihkXioxCxFNqOMNuP9I" width="320" /></a></div><br /><br /></span></center></h4><p style="background-color: white; text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">A ti recurro por ayuda e instrucciones, Santa Mónica, maravillosa ejemplo de firme oración por los hijos. En tus amorosos brazos yo deposito mi hijo(a) <i>(mencionar aquí los nombres)</i>, para que por medio de tu poderosa intercesión puedan alcanzar una genuina conversión a Cristo Nuestro Señor. A ti también apelo, madre de las madres, para que pidas a nuestro Señor me conceda el mismo espíritu de oración incesante que a ti te concedió. Todo esto te lo pido por medio del mismo Cristo Nuestro Señor. Amén.</span></p><p style="background-color: white;"></p><center style="background-color: white; text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">__________</span></center><p style="background-color: white;"></p><p style="background-color: white;"></p><center style="background-color: white; text-align: justify;"> </center><p style="background-color: white;"></p><h4 style="background-color: white;"><center><div style="text-align: justify;"><span style="color: #990000; font-family: Verdana; text-align: left;">PARA PEDIR POR LA PAZ EN LA FAMILIA</span></div><span style="color: #990000; font-family: Verdana;"><div style="text-align: justify;"><br /></div></span></center></h4><p style="background-color: white; text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Oh santa Mónica, que por medio de tu paciencia y plegarias obtuviste de Dios la conversión de tu marido y la gracia de vivir en paz con él; obtén para nosotros, te suplicamos, la bendición de Dios omnipotente, para que la verdadera armonía y paz reinen en nuestras casas, y que todos los miembros de nuestras familias puedan alcanzar la vida eterna. Amén.</span></p><p style="background-color: white;"></p><center style="background-color: white; text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">__________</span></center><p style="background-color: white;"></p><p style="background-color: white;"></p><center style="background-color: white; text-align: justify;"> </center><p style="background-color: white;"></p><h4 style="background-color: white;"><center style="text-align: justify;"><span style="color: #990000; font-family: Verdana;">POR LAS MADRES<br /></span></center></h4><p style="background-color: white; text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Madre ejemplar del gran Agustín, durante más de 15 años perseguiste de modo perseverante a tu hijo rebelde con amor, afección, perdón, consejo y rezos que clamaban al cielo. Intercede por todas las madres en este nuestro día para que puedan aprender a conducir a sus hijos a Dios y su Santa Iglesia. Enséñalas cómo permanecer cerca de sus hijos, incluso de aquellos hijos e hijas pródigos que tristemente se han extraviado. Amén<br /></span></p><p style="background-color: white;"></p><center style="background-color: white; text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">__________</span></center><p style="background-color: white;"></p><p style="background-color: white;"></p><center style="background-color: white; text-align: justify;"> </center><p style="background-color: white;"></p><h4 style="background-color: white;"><center style="text-align: justify;"><span style="color: #990000; font-family: Verdana;">ORACIÓN DE SÚPLICA<br /></span></center></h4><p style="background-color: white; text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">Oh Dios, que observaste las devotas lágrimas y ruegos de Santa Mónica y le concediste por escuchar sus rezos la conversión de su marido y el regreso penitente de su hijo, Agustín, concédenos la gracia de implorarte también con verdadero celo, para que así podamos obtener como ella, la salvación de nuestra alma y las almas de nuestros allegados. Por Cristo Nuestro Señor. Amén.</span></p><p style="background-color: white; text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;"><br /></span></p><p style="background-color: white; text-align: justify;"><span style="font-family: Verdana;">NOVENAS A SANTA MÓNICA:</span></p><p style="background-color: white; text-align: justify;"><span style="font-size: small; text-align: -webkit-center;"><span style="color: #01ffff;"> </span></span><span style="color: #01ffff; font-size: large;"><a href="https://www.devocionario.com/santos/monica_2.html" style="text-align: -webkit-center;">Novena I</a></span></p><p style="background-color: white; text-align: justify;"></p><div style="text-align: justify;"><span style="color: #01ffff; font-size: large;"><br /></span></div><span style="color: #01ffff;"><span style="font-size: large; text-align: -webkit-center;"><b> Novena II |</b> </span></span><p></p><p style="background-color: white; text-align: justify;"><span style="color: #01ffff; font-size: large;"><a href="https://www.devocionario.com/santos/monica_4.html" style="text-align: -webkit-center;">Novena III</a></span></p><p style="background-color: white; text-align: justify;"><br /></p><p style="background-color: white; text-align: justify;">Fuente: <a href="https://www.devocionario.com/santos/monica_3.html" target="_blank">Devocionario.com</a></p>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-6091851376354349552023-08-27T16:27:00.000-03:002023-08-27T16:27:57.333-03:0027 de agosto: Santa Mónica<p> </p><i><b><span style="font-family: Tahoma;"><div align="center"><table background="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_bars_dividers/Sand2sm.jpg" border="1" id="table8" style="width: 93%;"><tbody><tr><td><p align="left"><span style="background-color: white; color: #5e0000; font-size: xx-small;"><b></b></span></p></td></tr></tbody></table></div></span></b></i><p align="center"><span style="background-color: white;"><img border="0" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/personas/monica3.gif" /><br /><img border="0" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/personas/monica4.gif" /></span></p><blockquote><blockquote><p align="center"><br /></p><p align="center"></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgaAmRrTRHP0hiqCela129oPFCciPZlbYENu_2qZjftop2ZrMUp_Cdc6iiSQaX-zqeAh7qX52oGPNoN_g7tIFE9x5Ii2Egtqt15Bnfq9dAAoChXWfvBk3cAy1SYrlXnRS1qr-d3PLPn23lO7CAZH-qTO3NUfubzN3NH1vfiN5RA0J4RtPs6IUMeMj0vu7gN/s600/nueva-imagen-de-santa-monica-en-la-iglesia-de-los-agustinos-de-valladolid.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="400" data-original-width="600" height="220" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgaAmRrTRHP0hiqCela129oPFCciPZlbYENu_2qZjftop2ZrMUp_Cdc6iiSQaX-zqeAh7qX52oGPNoN_g7tIFE9x5Ii2Egtqt15Bnfq9dAAoChXWfvBk3cAy1SYrlXnRS1qr-d3PLPn23lO7CAZH-qTO3NUfubzN3NH1vfiN5RA0J4RtPs6IUMeMj0vu7gN/w330-h220/nueva-imagen-de-santa-monica-en-la-iglesia-de-los-agustinos-de-valladolid.png" width="330" /></a></div><span style="background-color: white; color: #073763; font-family: Arial;"><br />Mónica significa: "<b>dedicada a la oración y a la vida espiritual".</b><br />Patrona de las mujeres casadas y modelo de las madres cristianas.</span><p></p><hr color="#5E0000" width="86%" /></blockquote><p align="justify"><span style="background-color: white;"><span style="color: #073763;"><span style="font-family: Arial;"><br /></span><span style="font-family: Arial;"><b>Reseña:<br /></b>Nació en Tagaste (África) el año 331, de familia cristiana. Muy joven, fue dada en matrimonio a un hombre llamado Patricio, del que tuvo varios hijos, entre ellos <a href="https://www.corazones.org/santos/agustin.htm">San Agustín</a>, cuya conversión le costó muchas lágrimas y oraciones. Fue un modelo de madres; alimentó su fe con la oración y la embelleció con sus virtudes. Murió en Ostia el año 387.<br /> </span></span></span></p><p align="justify"><span style="background-color: white;"><span style="color: #073763;"><span style="font-family: Arial;"><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/fechas/agosto_27.htm">Alcancemos la sabiduría eterna:</a></span><span style="font-family: Arial;"> San Agustín relata la muerte de Sta. Mónica, su madre.</span></span></span></p></blockquote><hr color="#5E0000" width="86%" /><blockquote><p align="justify"><span style="background-color: white; color: #073763; font-family: Arial;">LA IGLESIA venera a Santa Mónica, esposa y viuda. Su único hijo fue San Agustín, doctor de la Iglesia. Su ejemplo y oraciones por su hijo fueron decisivas. El mismo San Agustín escribe en sus <i>Confesiones: </i>"Ella me engendró sea con su carne para que viniera a la luz del tiempo, sea con su corazón, para que naciera a la luz de la eternidad" Por su parte, San Agustín es la principal fuente sobre la vida de Santa Mónica, en especial sus <em>Confesiones</em>, lib. IX<i>.</i></span></p><p align="justify"><span style="background-color: white; color: #073763; font-family: Arial;">Mónica nació en África del Norte, probablemente en Tagaste, a cien kilómetros de Cartago, en el año 332.</span></p><p align="justify"><span style="background-color: white; color: #073763; font-family: Arial;">Sus padres, que eran cristianos, confiaron la educación de la niña a una institutriz muy estricta. No les permitía beber agua entre comidas para así enseñarles a dominar sus deseos. Mas tarde Mónica hizo caso omiso de aquel entrenamiento y cuando debía traer vino de la bodega tomaba a escondidas. Cierto día un esclavo que la había visto beber y con quien Mónica tuvo un altercado, la llamó "borracha". La joven sintió tal vergüenza, que no volvió a ceder jamás a la tentación. A lo que parece, desde el día de su bautismo, que tuvo lugar poco después de aquel incidente, llevó una vida ejemplar en todos sentidos.</span></p><p align="justify"><span style="background-color: white; color: #073763; font-family: Arial;">Cuando llegó a la edad de contraer matrimonio, sus padres la casaron con un ciudadano de Tagaste, llamado Patricio. Era éste un pagano que no carecía de cualidades, pero era de temperamento muy violento y vida disoluta. Mónica le perdonó muchas cosas y lo soportó con la paciencia de un carácter fuerte y bien disciplinado. Por su parte, Patricio, aunque criticaba la piedad de su esposa y su liberalidad para con los pobres, la respetó y, ni en sus peores explosiones de cólera, levantó la mano contra ella.</span></p><p align="justify"><span style="background-color: white; color: #073763; font-family: Arial;">Mónica explicó su sabiduría sobre la convivencia en el hogar: "Es que cuando mi esposo está de mal genio, yo me esfuerzo por estar de buen genio. Cuando el grita, yo me callo. <b>Y como para pelear se necesitan dos, y yo no acepto la pelea, pues… no peleamos". </b>Esta fórmula se ha hecho célebre en el mundo y ha servido a millones de mujeres para mantener la paz en casa.</span></p><p align="justify"><span style="background-color: white; color: #073763; font-family: Arial;">Mónica recomendaba a otras mujeres casadas, que se quejaban de la conducta de sus maridos, que cuidasen de dominar la lengua por ser esta causante en gran parte de los problemas en la casa. Mónica, por su parte, con su ejemplo y oraciones, logró convertir al cristianismo, no sólo a su esposo, sino también a su suegra, mujer de carácter difícil, cuya presencia constante en el hogar de su hijo había dificultado aún más la vida de Mónica. Patricio murió santamente en 371, al año siguiente de su bautismo.</span></p><p align="justify"><span style="background-color: white; color: #073763; font-family: Arial;">Tres de sus hijos habían sobrevivido, Agustín, Navigio, y una hija cuyo nombre ignoramos. Agustín era extraordinariamente inteligente, por lo que habían decidido darle la mejor educación posible. Pero el carácter caprichoso, egoísta e indolente del joven haba hecho sufrir mucho a su madre. Agustín había sido catecúmeno en la adolescencia y, durante una enfermedad que le había puesto a las puertas de la muerte, estuvo a punto de recibir el bautismo; pero al recuperar rápidamente la salud, propuso el cumplimiento de sus buenos propósitos. Cuando murió su padre, Agustín tenía diecisiete años y estudiaba retórica en Cartago. Dos años más tarde, Mónica tuvo la enorme pena de saber que su hijo llevaba una vida disoluta y había abrazado la herejía maniquea. Cuando Agustín volvió a Tagaste, Mónica le cerró las puertas de su casa, durante algún tiempo, para no oír las blasfemias del joven. Pero una consoladora visión que tuvo, la hizo tratar menos severamente a su hijo. Soñó, en efecto, que se hallaba en el bosque, llorando la caída de Agustín, cuando se le acercó un personaje resplandeciente y le preguntó la causa de su pena. Después de escucharla, le dijo que secase sus lágrimas y añadió: "Tu hijo está contigo". Mónica volvió los ojos hacia el sitio que le señalaba y vio a Agustín a su lado. Cuando Mónica contó a Agustín el sueño, el joven respondió con desenvoltura que Mónica no tenía más que renunciar al cristianismo para estar con él; pero la santa respondió al punto: "No se me dijo que yo estaba contigo, sino que tú estabas conmigo".</span></p><p align="justify"><span style="background-color: white; color: #073763; font-family: Arial;">Esta hábil respuesta impresionó mucho a Agustín, quien más tarde la consideraba como una inspiración del cielo. La escena que acabamos de narrar, tuvo lugar hacia fines del año 337, es decir, casi nueve años antes de la conversión de Agustín. En todo ese tiempo, Mónica no dejó de orar y llorar por su hijo, de ayunar y velar, de rogar a los miembros del clero que discutiesen con él, por más que éstos le aseguraban que era inútil hacerlo, dadas las disposiciones de Agustín. Un obispo, que había sido maniqueo, respondió sabiamente a las súplicas de Mónica: "Vuestro hijo está actualmente obstinado en el error, pero ya vendrá la hora de Dios". Como Mónica siguiese insistiendo, el obispo pronunció las famosas palabras: "Estad tranquila, es imposible que se pierda el hijo de tantas lágrimas". La respuesta del obispo y el recuerdo de la visión eran el único consuelo de Mónica, pues Agustín no daba la menor señal de arrepentimiento.</span></p><p align="justify"><span style="background-color: white; color: #073763; font-family: Arial;">Cuando tenía veintinueve años, el joven decidió ir a Roma a enseñar la retórica. Aunque Mónica se opuso al plan, pues temía que no hiciese sino retardar la conversión de su hijo, estaba dispuesta a acompañarle si era necesario. Fue con él al puerto en que iba a embarcarse; pero Agustín, que estaba determinado a partir solo, recurrió a una vil estratagema. Fingiendo que iba simplemente a despedir a un amigo, dejó a su madre orando en la iglesia de San Cipriano y se embarcó sin ella. Más tarde, escribió en las "Confesiones": "Me atreví a engañarla, precisamente cuando ella lloraba y oraba por mí". Muy afligida por la conducta de su hijo, Mónica no dejó por ello de embarcarse para Roma; pero al llegar a esa ciudad, se enteró de que Agustín había partido ya para Milán. En Milán conoció Agustín al gran obispo San Ambrosio. Cuando Mónica llegó a Milán, tuvo el indecible consuelo de oír de boca de su hijo que había renunciado al maniqueísmo, aunque todavía no abrazaba el cristianismo. La santa, llena de confianza, pensó que lo haría, sin duda, antes de que ella muriese.</span></p><p align="justify"><span style="background-color: white; color: #073763; font-family: Arial;">En San Ambrosio, por quien sentía la gratitud que se puede imaginar, Mónica encontró a un verdadero padre. Siguió fielmente sus consejos, abandonó algunas prácticas a las que estaba acostumbrada, como la de llevar vino, legumbres y pan a las tumbas de los mártires; había empezado a hacerlo así, en Milán, como lo hacía antes en África; pero en cuanto supo que San Ambrosio lo había prohibido porque daba lugar a algunos excesos y recordaba las "parentalias" paganas, renunció a las costumbres. San Agustín hace notar que tal vez no hubiese cedido tan fácilmente de no haberse tratado de San Ambrosio. En Tagaste Mónica observaba el ayuno del sábado, como se acostumbraba en África y en Roma. Viendo que la práctica de Milán era diferente, pidió a Agustín que preguntase a San Ambrosio lo que debía hacer. La respuesta del santo ha sido incorporada al derecho canónico: "Cuando estoy aquí no ayuno los sábados; en cambio, ayuno los sábados cuando estoy en Roma. Haz lo mismo y atente siempre a la costumbre de la iglesia del sitio en que te halles". Por su parte, San Ambrosio tenía a Mónica en gran estima y no se cansaba de alabarla ante su hijo. Lo mismo en Milán que en Tagaste, Mónica se contaba entre las más devotas cristianas; cuando la reina madre, Justina, empezó a perseguir a San Ambrosio, Mónica fue una de las que hicieron largas vigilias por la paz del obispo y se mostró pronta a morir por él.</span></p><p align="justify"><span style="background-color: white; color: #073763; font-family: Arial;">Finalmente, en agosto del año 386, llegó el ansiado momento en que Agustín anunció su completa conversión al catolicismo. Desde algún tiempo antes, Mónica había tratado de arreglarle un matrimonio conveniente, pero Agustín declaró que pensaba permanecer célibe toda su vida. Durante las vacaciones de la época de la cosecha, se retiró con su madre y algunos amigos a la casa de verano de uno de ellos, que se llamaba Verecundo, en Casicíaco. El santo ha dejado escrita en sus "confesiones" algunas de las conversaciones espirituales y filosóficas en que pasó el tiempo de su preparación para el bautismo. Mónica tomaba parte en esas conversaciones, en las que demostraba extraordinaria penetración y buen juicio y un conocimiento poco común de la Sagrada Escritura. En la Pascua del año 387, San Ambrosio bautizó a San Agustín y a varios de sus amigos. El grupo decidió partir al África y con ese propósito, los catecúmenos se trasladaron a Ostia, a esperar un barco. Pero ahí se quedaron, porque la vida de Mónica tocaba a su fin, aunque sólo ella lo sabía. Poco antes de su última enfermedad, había dicho a Agustín: "Hijo, ya nada de este mundo me deleita. Ya no sé cual es mi misión en la tierra ni por qué me deja Dios vivir, pues todas mis esperanzas han sido colmadas. Mi único deseo era vivir hasta verte católico e hijo de Dios. Dios me ha concedido más de lo que yo le había pedido, ahora que has renunciado a la felicidad terrena y te has consagrado a su servicio". </span></p><p align="justify"><span style="background-color: white; color: #073763; font-family: Arial;">En Ostia se registran los últimos coloquios entre madre e hijo, de los que podemos deducir la gran nobleza de alma de esta incomparable mujer, de no común inteligencia ya que podía intercambiar pensamientos tan elevados con Agustín: "Sucedió, escribe en el capítulo noveno de las <i>Confesiones</i>, que ella y yo nos encontramos solos, apoyados en la ventana, que daba hacia el jardín interno de la casa en donde nos hospedábamos, en Ostia. Hablábamos entre nosotros, con infinita dulzura, olvidando el pasado y lanzándonos hacia el futuro, y buscábamos juntos, en presencia de la verdad, cual sería la eterna vida de los santos, vida que ni ojo vio ni oído oyó, y que nunca penetró en el corazón del hombre".</span></p><p align="justify"><span style="background-color: white; color: #073763; font-family: Arial;">Lo último que pidió a sus dos hijos fue que no se olvidaran de rezar por el descanso de su alma.</span></p><p align="justify"><span style="background-color: white; color: #073763; font-family: Arial;">Mónica había querido que la enterrasen junto a su esposo. Por eso, un día en que hablaba con entusiasmo de la felicidad de acercarse a la muerte, alguien le preguntó si no le daba pena pensar que sería sepultada tan lejos de su patria. La santa replicó: "No hay sitio que esté lejos de Dios, de suerte que no tengo por qué temer que Dios no encuentre mi cuerpo para resucitarlo". Cinco días más tarde, cayó gravemente enferma. Al cabo de nueve días de sufrimientos, fue a recibir el premio celestial, a los cincuenta y cinco años de edad. Era el año 387. Agustín le cerró los ojos y contuvo sus lágrimas y las de su hijo Adeodato, pues consideraba como una ofensa llorar por quien había muerto tan santamente. Pero, en cuanto se halló solo y se puso a reflexionar sobre el cariño de su madre, lloró amargamente. El santo escribió: "Si alguien me critica por haber llorado menos de una hora a la madre que lloró muchos años para obtener que yo me consagre a Ti, Señor, no permitas que se burle de mí; y, si es un hombre caritativo, haz que me ayude a llorar mis pecados en Tu presencia". En las "Confesiones", Agustín pide a los lectores que rueguen por Mónica y Patricio. Pero en realidad, son los fieles los que se han encomendado, desde hace muchos siglos, a las oraciones de Mónica, patrona de las mujeres casadas y modelo de las madres cristianas.</span></p><p align="justify"><span style="background-color: white; color: #073763; font-family: Arial;">Se cree que las reliquias de la santa se conservan en la iglesia de S. Agostino.</span></p><p align="justify"><span style="background-color: white; color: #073763; font-family: Arial;"><strong>Bibliografía</strong><br />Butler, <em>Vidas de los Santos.<br /></em>Sálesman, Eliecer, <em>Vidas de Santos </em></span></p></blockquote><p>Fuente: <a href="https://www.corazones.org/santos/monica.htm" target="_blank">Corazones.org</a></p><p> </p>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-2241475720063874102023-08-01T17:39:00.001-03:002023-08-01T17:39:04.122-03:00Indulgencia de la Porciúncula<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEimMFqQKGd1aoz_Rj9eHb_WqUFs-3EckdG5j2mRtE-BP4FhM4MBczFCMr9OKMbeibBCw-DK2jebsEiRV8hEE94IwlnhupBQ2A2Wgih3mgMfB5dgcQLLJgxRMwc3azPASNU1JyeG3HTuSHlox429t-ZFMDY1OVpfpm8pr-DikCbvpgw2IRunDbqy64MHiihL/s720/Indulgencia%20Porci%C3%BAncula.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="717" data-original-width="720" height="430" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEimMFqQKGd1aoz_Rj9eHb_WqUFs-3EckdG5j2mRtE-BP4FhM4MBczFCMr9OKMbeibBCw-DK2jebsEiRV8hEE94IwlnhupBQ2A2Wgih3mgMfB5dgcQLLJgxRMwc3azPASNU1JyeG3HTuSHlox429t-ZFMDY1OVpfpm8pr-DikCbvpgw2IRunDbqy64MHiihL/w431-h430/Indulgencia%20Porci%C3%BAncula.jpg" width="431" /></a></div><br /><p></p>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-2408696607824407772023-07-25T14:07:00.002-03:002023-07-25T14:07:21.998-03:0025 de Julio: fiesta de Santiago Apóstol.<p style="text-align: justify;"> <strong><span style="text-transform: uppercase;"><span style="color: maroon; font-family: Verdana;">SANTIAGO MAYOR, APÓSTOL</span></span></strong></p><p style="text-align: left;"><strong><span style="background-color: white; color: maroon; font-family: Verdana;">Fiesta: 25 de julio</span></strong></p><p style="text-align: left;"><strong></strong></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><strong><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiSrrZ-7EFmpEAW4Tiz-xExnVj3NFLmOyBY6K7BiX68sIT_b6Ii_RMVKE7RGqexgaqjNjw2WDj2ypPk2rQkgOYZgYjnMCeGJCDE3PJWOJY79cNhr-Kzf-N6O90gWPF1WD6OdBGsS-90CDprwLiz9MzEeIFXdsFYrLnr9c6FCSz5RbRms4GadI93ZeNII8j-/s1706/religion-calendario-santo_del_dia_507710476_156403075_1706x960.webp" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="960" data-original-width="1706" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiSrrZ-7EFmpEAW4Tiz-xExnVj3NFLmOyBY6K7BiX68sIT_b6Ii_RMVKE7RGqexgaqjNjw2WDj2ypPk2rQkgOYZgYjnMCeGJCDE3PJWOJY79cNhr-Kzf-N6O90gWPF1WD6OdBGsS-90CDprwLiz9MzEeIFXdsFYrLnr9c6FCSz5RbRms4GadI93ZeNII8j-/w355-h200/religion-calendario-santo_del_dia_507710476_156403075_1706x960.webp" width="355" /></a></strong></div><strong><br /><span style="background-color: white; color: maroon; font-family: Verdana;"><br /></span></strong><p></p><p></p><div style="text-align: justify;"><strong style="background-color: white; font-family: Verdana;">Ver también</strong><b style="background-color: white; font-family: Verdana;">:</b></div><span style="background-color: white;"><div style="text-align: justify;"><img height="9" naturalsizeflag="3" src="http://corazones.org/z_imagenes/a_boton/b_verde_dot.gif" style="font-family: Verdana;" width="9" /><a href="http://corazones.org/maria/pilar.htm" style="font-family: Verdana;">Santiago Apóstol y la Virgen del Pilar</a></div><span style="font-family: Verdana;"><div style="text-align: justify;"><img height="9" naturalsizeflag="3" src="http://corazones.org/z_imagenes/a_boton/b_verde_dot.gif" width="9" /><a href="http://corazones.org/lugares/espana/santiago_compostela/santiago_apostol.htm">Santiago de Compostela</a> -La tumba del Apóstol, centro mundial de peregrinación.</div><div style="text-align: justify;"><img height="9" naturalsizeflag="3" src="http://corazones.org/z_imagenes/a_boton/b_verde_dot.gif" width="9" /><span lang="es"><a href="http://corazones.org/biblia_y_liturgia/textos_bib_liturgia/fiestas/julio25_santiago.htm">Lecturas de la fiesta</a></span></div><div style="text-align: justify;"><img height="9" naturalsizeflag="3" src="http://corazones.org/z_imagenes/a_boton/b_verde_dot.gif" width="9" /><a href="http://corazones.org/santos/santiago_mayor_letania.htm">Letanía de Santiago el Mayor</a></div></span><div style="text-align: justify;"><br /></div><span style="font-family: Verdana;"><div style="text-align: justify;">Oficio de lectura</div></span></span><p></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">Santiago es uno de los doce Apóstoles de Jesús; hijo de Zebedeo. El y su hermano Juan fueron<strong> llamados por Jesús mientras estaban arreglando sus redes de pescar en el lago Genesaret.</strong></span></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">Recibieron de Cristo el nombre "<strong>Boanerges</strong>", significando hijos del trueno, por su impetuosidad.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">En los evangelios se relata que Santiago <strong>tuvo que ver con el milagro de la hija de Jairo</strong>. Fue uno de los tres Apóstoles <strong>testigos de la Transfiguración y luego Jesús le invitó, también con Pedro y Santiago, a compartir mas de cerca Su oración en el Monte de los Olivos.</strong></span></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">Los Hechos de los Apóstoles relatan que éstos se dispersaron por todo el mundo para llevar la Buena Nueva. Según una antigua tradición, <strong>Santiago el Mayor se fue a España</strong>. Primero a Galicia, donde estableció una comunidad cristiana, y luego a la cuidad romana de Cesar Augusto, hoy conocida como Zaragoza. La Leyenda Aurea de Jacobus de Voragine nos cuenta que las enseñanzas del Apóstol no fueron aceptadas y solo siete personas se convirtieron al Cristianismo. Estos eran conocidos como los "Siete Convertidos de Zaragoza". Las cosas cambiaron cuando la Virgen Santísima se apareció al Apóstol en esa ciudad, aparición conocida como la Virgen del Pilar. Desde entonces la intercesión de la Virgen hizo que se abrieran extraordinariamente los corazones a la evangelización de España.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">En los Hechos de los Apóstoles descubrimos fue <strong>el primer apóstol martirizado</strong>. Murió asesinado por el rey Herodes Agripa I, el 25 de marzo de 41 AD (día en que la liturgia actual celebra La Anunciación). Según una leyenda, su acusador se arrepintió antes que mataran a Santiago por lo que también fue decapitado. Santiago es conocido como "el Mayor", distinguiéndolo del otro Apóstol, Santiago el Menor.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">La tradición también relata que los discípulos de Santiago recogieron su cuerpo y lo trasladaron a Galicia (extremo norte-oeste de España). Su restos mortales están en la basílica edificada en su honor en Santiago de Compostela. En España, Santiago es el mas conocido y querido de todos los santos. En América hay numerosas ciudades dedicadas al Apóstol en Chile, República Dominicana, Cuba y otros países.</span></p><p style="text-align: justify;"><strong><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">Santiago y la Virgen María</span></strong></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">Santiago Apóstol preparó el camino para la Virgen María en España y también preparó su llegada al "Nuevo Mundo". El es el Apóstol de la Virgen María, también es conocido como el Apóstol de la Paz.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">En 1519, Cortes llegó a Veracruz, y en Antigua construyó la primera Iglesia dedicada a Santiago Apóstol en el continente Americano. También en 1521, cuando México fue conquistada, Cortes construyó una Iglesia en las ruinas de los Aztecas que al igual fue dedicada a Santiago Apóstol. A esta Iglesia era que Juan Diego se dirigía el 9 de diciembre de 1531, para recibir clases de catecismo y oír la Santa Misa, ya que era la fiesta de la Inmaculada Concepción.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">En 1981, se reportó el comienzo de las apariciones de Nuestra Señora en Medjugorje bajo el titulo "Reina de la Paz". Ya Santiago Apóstol se había hecho presente. Unos años antes, se había construido una Iglesia en ese lugar dedicada a Santiago Apóstol. Santiago siendo el Apóstol de la Paz, lleva en sus manos las llaves para abrir la puerta que traería la paz a Medjugorje. </span><span style="background-color: white; font-family: Verdana;">Santiago Apóstol ha preparado el camino para que el mundo reconozca a la Virgen Santísima como "Pilar" de nuestra Iglesia.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; font-family: Verdana;"><br /></span></p><p class="fecha" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: bold; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: center;"><span style="background-color: white;"><span class="titulos" style="font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal;">Audiencia General de S.S. Benedicto XVI</span><br />21 de junio, 2006</span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;">Queridos hermanos y hermanas: Hoy hablamos del apóstol Santiago. Las listas bíblicas de los Doce mencionan dos personas con este nombre: Santiago, el hijo de Zebedeo, y Santiago, el hijo de Alfe<span class="fecha" style="font-weight: bold; line-height: normal; text-align: center;"><img align="right" border="0" height="176" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/santos/santiago_apostol.jpg" vspace="8" width="291" /></span>o (cf. Mc 3, 17-18; Mt 10, 2-3), que por lo general se distinguen con los apelativos de Santiago el Mayor y Santiago el Menor. Ciertamente, estas designaciones no pretenden medir su santidad, sino sólo constatar la diversa importancia que reciben en los escritos del Nuevo Testamento y, en particular, en el marco de la vida terrena de Jesús. Hoy dedicamos nuestra atención al primero de estos dos personajes homónimos.</span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;">El nombre Santiago es la traducción de Iákobos, trasliteración griega del nombre del célebre patriarca Jacob. El apóstol así llamado es hermano de Juan, y en las listas a las que nos hemos referido ocupa el segundo lugar inmediatamente después de Pedro, como en el evangelio según san Marcos (cf. Mc 3, 17), o el tercer lugar después de Pedro y Andrés en los evangelios según san Mateo (cf. Mt 10, 2) y san Lucas (cf. Lc 6, 14), mientras que en los Hechos de los Apóstoles es mencionado después de Pedro y Juan (cf. Hch 1, 13). Este Santiago, juntamente con Pedro y Juan, pertenece al grupo de los tres discípulos privilegiados que fueron admitidos por Jesús a los momentos importantes de su vida.</span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;"><span class="dorado" style="color: #996600; font-style: italic; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal;">Santiago pudo participar, juntamente con Pedro y Juan, en el momento de la agonía de Jesús en el huerto de Getsemaní y en el acontecimiento de la Transfiguración de Jesús.</span> Se trata, por tanto, de situaciones muy diversas entre sí: en un caso, Santiago, con los otros dos Apóstoles, experimenta la gloria del Señor, lo ve conversando con Moisés y Elías, y ve cómo se trasluce el esplendor divino en Jesús; en el otro, se encuentra ante el sufrimiento y la humillación, ve con sus propios ojos cómo el Hijo de Dios se humilla haciéndose obediente hasta la muerte.</span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;">Ciertamente,<span class="dorado" style="color: #996600; font-style: italic; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal;"> la segunda experiencia constituyó para él una ocasión de maduración en la fe, para corregir la interpretación unilateral, triunfalista, de la primera: tuvo que vislumbrar que el Mesías, esperado por el pueblo judío como un triunfador, en realidad no sólo estaba rodeado de honor y de gloria, sino también de sufrimientos y debilidad. La gloria de Cristo se realiza precisamente en la cruz, participando en nuestros sufrimientos.</span></span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;">Esta maduración de la fe fue llevada a cabo en plenitud por el Espíritu Santo en Pentecostés, de forma que Santiago, cuando llegó el momento del testimonio supremo, no se echó atrás. Al inicio de los años 40 del siglo I, el rey Herodes Agripa, nieto de Herodes el Grande, como nos informa san Lucas, "por aquel tiempo echó mano a algunos de la Iglesia para maltratarlos e hizo morir por la espada a Santiago, el hermano de Juan" (Hch 12, 1-2). La concisión de la noticia, que no da ningún detalle narrativo, pone de manifiesto, por una parte, que para los cristianos era normal dar testimonio del Señor con la propia vida; y, por otra, que Santiago ocupaba una posición destacada en la Iglesia de Jerusalén, entre otras causas por el papel que había desempeñado durante la existencia terrena de Jesús.</span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;">Una tradición sucesiva, que se remonta al menos a san Isidoro de Sevilla, habla de una estancia suya en España para evangelizar esa importante región del imperio romano. En cambio, según otra tradición, su cuerpo habría sido trasladado a España, a la ciudad de Santiago de Compostela.</span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;">Como todos sabemos, ese lugar se convirtió en objeto de gran veneración y sigue siendo meta de numerosas peregrinaciones, no sólo procedentes de Europa sino también de todo el mundo. Así se explica la representación iconográfica de <span class="dorado" style="color: #996600; font-style: italic; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal;">Santiago con el bastón del peregrino y el rollo del Evangelio, características del apóstol itinerante y dedicado al anuncio de la "buena nueva", y características de la peregrinación de la vida cristiana. Por consiguiente, de Santiago podemos aprender muchas cosas: la prontitud para acoger la llamada del Señor incluso cuando nos pide que dejemos la "barca" de nuestras seguridades humanas, el entusiasmo al seguirlo por los caminos que él nos señala más allá de nuestra presunción ilusoria, la disponibilidad para dar testimonio de él con valentía, si fuera necesario hasta el sacrificio supremo de la vida. </span>Así, Santiago el Mayor se nos presenta como ejemplo elocuente de adhesión generosa a Cristo. Él, que al inicio había pedido, a través de su madre, sentarse con su hermano junto al Maestro en su reino, fue precisamente el primero en beber el cáliz de la pasión, en compartir con los Apóstoles el martirio.</span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;">Y al final, resumiendo todo, podemos decir que el camino no sólo exterior sino sobre todo interior, desde el monte de la Transfiguración hasta el monte de la agonía, simboliza toda la peregrinación de la vida cristiana, entre las persecuciones del mundo y los consuelos de Dios, como dice el concilio Vaticano II. Siguiendo a Jesús como Santiago, sabemos, incluso en medio de las dificultades, que vamos por el buen camino.<br /></span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;"> </span></p><table align="center" border="0" style="color: black; font-family: Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif; width: 182px;"><tbody><tr><td width="176"><span style="background-color: white;"><img height="51" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/compostela_concha.png" width="58" /><img alt="" height="51" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/compostela_concha.png" width="58" /><img alt="" height="51" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/compostela_concha.png" width="58" /></span></td></tr></tbody></table><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;"> </span></p><p class="titulos" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-weight: bold; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: center;"><span style="background-color: white;"><a id="jp" name="jp"></a>EXTRACTOS DEL DISCURSO DEL B. JUAN PABLO II<br />EN SU VISITA A<br />SANTIAGO DE COMPOSTELA<br /><span class="fecha" style="line-height: normal;">9 de noviembre, 1982</span></span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;">"Por esto, yo, Juan Pablo, hijo de la nación polaca que se ha considerado siempre europea, por sus orígenes, tradiciones,cultura y relaciones vitales; eslava entre los latinos y latina entre los eslavos; Yo, Sucesor de Pedro en la Sede de Roma, una Sede que Cristo quiso colocar en Europa y que ama por su esfuerzo en la difusión del cristianismo en todo el mundo.</span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;"><span class="dorado" style="color: #996600; font-style: italic; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal;">Yo, Obispo d<span class="titulos" style="font-style: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-weight: bold; text-align: center;"><span class="fecha" style="color: black; line-height: normal;"><img align="left" border="0" height="237" hspace="5" src="https://www.corazones.org/santos/jp2.jpg" vspace="8" width="154" /></span></span>e Roma y Pastor de la Iglesia universal, desde Santiago, te lanzo, vieja Europa, un grito lleno de amor: Vuelvea encontrarte. Sé tú misma. Descubre tus orígenes. Aviva tus raíces. Revive aquellos valores auténticos que hicieron gloriosa tu historia y benéfica tu presencia en los demás continentes.</span> Reconstruye tu unidad espiritual, en un clima de pleno respeto a las otras religiones y a las genuinas libertades. Da al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios. No te enorgullezcas por tus conquistas hasta olvidar sus posibles consecuencias negativas. Note deprimas por la pérdida cuantitativa de tu grandeza en el mundo o por las crisis sociales y culturales que te afectan ahora. Tú puedes ser todavía faro de civilización y estímulo de progreso para el mundo. Los demás continentes te miran y esperan también de ti la misma respuesta que Santiago dio a Cristo: «lo puedo».</span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;"> </span></p><table align="center" border="0" style="color: black; font-family: Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif; width: 182px;"><tbody><tr><td width="176"><span style="background-color: white;"><img alt="" height="51" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/compostela_concha.png" width="58" /><img alt="" height="51" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/compostela_concha.png" width="58" /><img alt="" height="51" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/compostela_concha.png" width="58" /></span></td></tr></tbody></table><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;"> </span></p><p class="titulos" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-weight: bold; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: center;"><span style="background-color: white;"><a id="catd" name="catd"></a>CATEDRAL DE SANTIAGO DE COMPOSTELA</span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;">La Catedral de Santiago es la Iglesia madre de la Archidiócesis Compostelana. En ella está la cátedra de su Arzobispo: de ahí el nombre de la Catedral. Su singularidad radica en poseer la tumba del Apóstol Santiago, por lo que la convierte a partir del siglo IX en uno de los más importantes santuarios de toda la cristiandad. En 1884 León XIII promulga la Bula "Deus omnipotens", confirmando la autenticidad de las reliquias del Apóstol Santiago y exhortando a peregrinar a Compostela. En el Año Santo de 1982 el B. Juan Pablo II terminó en Compostela su visita apostólica a España. Entonces se refirió a la Catedral Basílica como "uno de los lugares más célebres de la historia…que encierra la tumba de Santiago, el Apóstol que según la tradición fue el evangelizador de España…"</span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;"> </span></p><table align="center" border="0" style="color: black; font-family: Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif; width: 182px;"><tbody><tr><td width="176"><span style="background-color: white;"><img alt="" height="51" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/compostela_concha.png" width="58" /><img alt="" height="51" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/compostela_concha.png" width="58" /><img alt="" height="51" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/compostela_concha.png" width="58" /></span></td></tr></tbody></table><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;"> </span></p><p class="titulos" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-weight: bold; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: center;"><span style="background-color: white;"><a id="santiago_virgen" name="santiago_virgen"></a>EL APÓSTOL SANTIAGO Y LA SANTÍSIMA VIRGEN<br />Por Madre Adela Galindo,sctjm</span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><img align="left" border="0" height="12" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/compostela.jpg" width="15" /><span style="background-color: white;">Santiago era uno de los 12 Apóstoles de Jesús; hijo de Zebedeo, él y su hermano Juan fueron llamados por Jesús mientras estaban arreglando sus redes de pescar en el lago Genesaret. Recibieron de Cristo el nombre “Boanerges”, significando hijos del trueno, por su impetuosidad. En los evangelios se relata que Santiago tuvo que ver con el milagro de la hija de Jairo, estaba durante la Transfiguración y luego acompañó a Jesús durante la</span><img align="right" border="0" height="268" hspace="5" src="https://www.corazones.org/santos/santiago_virgen.JPG" vspace="8" width="186" /><span style="background-color: white;"> oración en el Monte de los Olivos. En los Acotos de los Apóstoles se relata que estos se dispersaron por diferentes regiones para llevar la Buena Nueva al pueblo de Dios. Por las revelaciones de Jesús a Sor María de Jesús de Agreda, una hermana franciscana, se dio a conocer que Santiago, el Mayor, se fue a España a evangelizar. Primero a Galicia, donde estableció una comunidad cristiana, y luego a la ciudad romana de César Augusto, hoy conocida como Zaragoza.</span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;"><img alt="" border="0" height="12" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/compostela.jpg" width="15" />El 2 de enero del año 40, el Apóstol Santiago y sus discípulos estaban descansando en las orillas del río Egro y oyeron dulce voces que cantaban. Enseguida vieron como el cielo se llenaba de luces y muchos ángeles que se acercaban. Los ángeles cargaban un trono donde estaba sentada la Reina de los Cielos. María, en ese entonces, vivía en Jerusalén y fue bilocada a España. La Virgen le dijo a Santiago que construyera un santuario adonde Dios sería honrado y glorificado, y le dio un pilar con su imagen para que fuese puesto en el santuario. La Virgen también le dijo que el santuario duraría hasta los fines del tiempo y que ella bendeciría todas las oraciones hecha devotamente en ese lugar. Al final de la aparición, la Virgen le dijo a Santiago que cuando estuviera construido el santuario debería regresarse a Palestina a donde iba a morir.</span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;"><img alt="" border="0" height="12" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/compostela.jpg" width="15" />El Apóstol Santiago cumplió los deseos de la Santísima Virgen y construyó la primera iglesia cristiana en el mundo entero. Santiago regresó a Palestina, donde fue decapitado por órdenes de Herodes el 25 de marzo del año 41 D.C. Sus discípulos recobraron su cuerpo y lo trasladaron a Galicia, en un bote milagroso, sin que nadie lo viera, guiado solamente por Dios.</span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;"><img alt="vvvvvvvvvvv" border="0" height="12" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/compostela.jpg" width="15" />En el Antiguo Testamento vemos como Jacob construyó un altar a Dios y lo llamo El Bethel, que significa “Casa de Dios” ( Gen. 35, 7). Jacob es un nombre griego, pero traducido en español es Santiago. Jacob construyó la “Casa de Dios” al igual que Santiago Apóstol construyo la primera “Casa de Dios”, la primera Iglesia en el mundo entero.</span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;"><img alt="" border="0" height="12" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/compostela.jpg" width="15" />La tumba de Santiago Apóstol fue olvidada por más de 800 años. Bajo el reinado de Alfonso II (789-842), un ermitaño llamado Pelagio recibió un visión, en la cual el lugar donde se encontraban los restos del Apóstol se fue revelado. El día 25 de julio de 812, adonde supuestamente estaba la tumba, se llenó de una luz brillante y desde entonces se conoce como Compostela “Campo de Estrellas”. El obispo de Iria Flavia, Theodomir, después de investigaciones declaró que eran verdaderamente los restos y la tumba del Apóstol Santiago. Al igual que el Santo Padre, León XIII, en 1884, en forma de Bula Papal, confirmó que los restos en Santiago de Compostela pertenecían a Santiago Apóstol.</span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;"><img alt="" border="0" height="12" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/compostela.jpg" width="15" />Santiago Apóstol también se conocía como el “Matamoros”, matador de los moros. Se dice que había aparecido en ayuda de su pueblo en varias ocasiones en contra de los Moros. Especialmente en el año 1492 cuando se logró la reconquista de España.</span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;"><img alt="" border="0" height="12" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/compostela.jpg" width="15" />1492 fue también el año en el que Cristóbal Colón y sus conquistadores descubrieron las Américas. Colón y sus conquistadores tenían una devoción muy especial a una estatua de la Virgen que había aparecido en las Montañas de las Extremaduras en España, en ese mismo siglo. Se contaba que esta estatua fue hecha por Lucas, el evangelista. La advocación de la estatua era la “Virgen de Guadalupe” nombrada igual que el pequeño río que atravesaba la montaña, y que significaba “El Río de la Luz”. Los conquistadores, Colon y Cortés, visitaban el santuario de la Virgen de Guadalupe ante de irse a conquistar nuevas tierras.</span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="background-color: white;"><img alt="" border="0" height="12" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_boton/compostela.jpg" width="15" />En 1519, Cortés llegó a Veracruz, hoy en día conocido como Antigua, y construyó la primera Iglesia dedicada a Santiago Apóstol. También en 1521, cuando México fue conquistada de los Aztecas, Cortés construyó una Iglesia en las ruinas de los Aztecas que al igual fue dedicada a Santiago Apóstol. A esta Iglesia era que Juan Diego se dirigía el 9 de diciembre de 1531, para recibir clases de catecismo y oír la Santa Misa, ya que era la fiesta de la Inmaculada Concepción.</span></p><p class="texto" style="font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Fuente: <a href="https://www.corazones.org/santos/santiago_apostol.htm" target="_blank">Corazones.org</a></p><div><br /></div>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-69420010757584819832023-07-16T17:26:00.002-03:002023-07-16T17:26:43.764-03:0016 de julio: Nuestra Señora del Carmen<p style="text-align: center;"> <a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiEBE8AKUdsyo5VwsB34R7-w1EfZ0xm3T_Ikn9_McFRT7te3Nbw-DLBYdJ0SgLe-Cnpfc3VPUZiDcpyJReKzcN0iRqRaA4CHqYaHJgFGJCbLMdL4h_uC75pc6t_R_0f9llVsDqzNC_J3Vb_Z5Ymfj6AZ4xrQl3taMljwmVboVOww-w8dAexr9F73IxQ1JYA/s900/VirgenCarmen-16Julio.webp" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-align: center;"><img border="0" data-original-height="500" data-original-width="900" height="232" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiEBE8AKUdsyo5VwsB34R7-w1EfZ0xm3T_Ikn9_McFRT7te3Nbw-DLBYdJ0SgLe-Cnpfc3VPUZiDcpyJReKzcN0iRqRaA4CHqYaHJgFGJCbLMdL4h_uC75pc6t_R_0f9llVsDqzNC_J3Vb_Z5Ymfj6AZ4xrQl3taMljwmVboVOww-w8dAexr9F73IxQ1JYA/w416-h232/VirgenCarmen-16Julio.webp" width="416" /></a></p><blockquote style="background-color: white; font-family: Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></blockquote><blockquote style="background-color: white; font-family: Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif;"><table align="center" border="0" style="width: 205px;"><tbody><tr><td align="center" width="199"><img height="47" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/a_bars_dividers/cafe.gif" width="133" /></td></tr></tbody></table><h1 class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="font-size: small;"> </span></h1><h1 class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span style="font-size: small;">La Devoción del Monte Carmelo se origina desde el siglo VIII antes de Cristo, cuando el profeta Elías ascendió el monte santo del Carmelo en Palestina, y comenzó la larga tradición de la vida contemplativa, de oración y penitencia.</span></h1><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">De esto surgen los Carmelitas, que eran un grupo de ermitaños que vivían en el Monte Carmelo en Palestina. Ellos se creían ser los hijos espirituales de Elías el profeta, e imitaban su estilo de vida contemplativa. Pero no solo tenían influencia de la espiritualidad de Elías (oración y penitencia), sino que a los Carmelitas se les conocía cuando llegaron a Europa por su devoción a la Madre de Dios, ya que en ella veían el complimiento del ideal de Elías. Llegaron incluso a llamárseles: "Los hermanos de Nuestra Señora del Monte Carmelo".</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Cuando hacían su profesión religiosa ellos se consagraban a Dios y a María, y el hábito que tomaban era en honor a la Virgen y como un recordatorio de que sus vidas le pertenecían a Ella.<img align="right" border="0" height="180" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/carmen/516simon.jpg" vspace="5" width="167" /></p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Por la invasión de los sarracenos los Carmelitas se vieron obligados a irse del Mt. Carmelo. Una antigua tradición nos dice que antes de partir se les apareció la Virgen mientras cantaban el Salve Regina y Ella prometió ser para ellos su Estrella del Mar.</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Los Carmelitas fueron encontrando bastante oposición en los lugares que deseaban fundar. En el año 1246, nombraron a St. Simón Stock como el general de la Orden. Este sabía que si no había una intervención de la Virgen, a la orden le quedaba muy poco tiempo para sobrevivir. Simón fue a María a ponerle la orden bajo su amparo ya que ellos le pertenecían. En su oración la llamo "La flor del Carmelo" y la "Estrella del Mar", le suplico la protección para toda la comunidad. En respuesta a esta ferviente oración, en 1251 se le aparece la Virgen y le da el escapulario para la orden: "Este debe ser un signo y privilegio para ti y para todos los carmelitas: quien muera usando el escapulario no sufrirá el fuego eterno"</p></blockquote><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgQkjb5lPbSutUu8Zhu_l2esoWryUM0NBWwfCz2yPDjWn1XmMNiOy1H818nuWgDPsy7rApM9cvn8lyR_BEPcjf2oHvGaX1LCsiWj3bOjZ-cGa5shsrz_sAWj9ZaxWWNBCTTcyHGHrDPeJ4QsyX35Pr2lj7DRnBDB6hXfmrAfHeu-kElVfCe1h01gPSRJbaR/s259/descarga%20(14).jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="194" data-original-width="259" height="194" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgQkjb5lPbSutUu8Zhu_l2esoWryUM0NBWwfCz2yPDjWn1XmMNiOy1H818nuWgDPsy7rApM9cvn8lyR_BEPcjf2oHvGaX1LCsiWj3bOjZ-cGa5shsrz_sAWj9ZaxWWNBCTTcyHGHrDPeJ4QsyX35Pr2lj7DRnBDB6hXfmrAfHeu-kElVfCe1h01gPSRJbaR/s1600/descarga%20(14).jpg" width="259" /></a></div><br /><p> </p><blockquote style="background-color: white; font-family: Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif;"><p class="textocursiva" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: bold; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">¿QUÉ ES EL ESCAPULARIO CARMELITA?</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Es parte del hábito de los Carmelitas y es una réplica miniatura de ese hábito. Consiste en dos piezas de tela café conectada con unas cintas y que se utiliza bajo la ropa. Una pieza debe colgar por la espalda y la otra por el frente. Junto con el rosario y la medalla milagrosa el escapulario es uno de los más importantes sacramentales marianos.</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Un sacramental es un objeto religioso que la Iglesia haya instituido para motivarnos a una vida más santa, piadosa y para aumentar nuestra devoción. Los sacramentales deben mover nuestros corazones a renunciar a todo pecado incluso al venial.</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Por lo tanto, el escapulario al ser un sacramental, no nos da gracias por sí mismo, sino que las gracias se nos dan por el aumento de amor a Dios, y por la verdadera contrición del pecado, al cual el sacramental nos debe motivar. Si por el uso de un sacramental crecemos en amor a Dios y en santidad, entonces recibimos gracias.</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Aunque el escapulario fue dado a los carmelitas, poco a poco muchos laicos fueron sintiendo el llamado de vivir una vida más comprometida con la espiritualidad carmelita y así se comenzó la cofradía del escapulario, donde se agregaban muchos laicos por medio de la devoción a la Virgen y al uso del escapulario.</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span class="textocursiva" style="font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: bold; line-height: normal;">¿PORQUE LE LLAMAMOS ESCAPULARIO?</span></p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">La palabra escapulario viene del Latín "<i>scapulae"</i> que significa "hombros". Y como el escapulario cae de los hombros es que se le ha dado este nombre.</p><p class="textocursiva" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: bold; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Significado Espiritual del Escapulario:</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Es ev<span class="textocursiva" style="font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: bold; line-height: normal;"><img align="left" border="0" height="265" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/carmen/olc.jpg" vspace="5" width="131" /></span>idente que María quiere revelarnos de manera especial el escapulario. En las apariciones de Fátima, reporta Lucia, hoy Hermana María del Inmaculado Corazón, que en la última, la Virgen se apareció vestida con el hábito carmelita y con el escapulario en la mano. Y recordó que los verdaderos hijos de Ella lo usaran y que lo llevaran con reverencia. También que los que se consagraran a ella lo usaran como signo de dicha consagración.</p><p class="textocursiva" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: bold; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">El escapulario tiene 3 significados:</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span class="textocursiva" style="font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: bold; line-height: normal;">1)</span> El amor y la protección maternal de María: el signo es una tela o manto pequeño. Vemos como María cuando nace Jesús lo envuelve en un manto. La Madre siempre trata de cobijar a sus hijos. Envolver en su manto es una señal muy maternal de protección y cuidado. Señal de que nos envuelve en su amor maternal. Nos hace suyos. Nos cubre de la ignominia de nuestra desnudes espiritual.</p><p class="textocursiva" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: bold; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Vemos en la Biblia:</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">*Dios cubrió con un manto a Adán y Eva después de que pecaron. (Manto signo de perdón)<br />*Jonás le dio su manto a David: símbolo de amistad<br />*Elías dio su manto a Eliseo y lo lleno de su espíritu en su partida.<br />*S. Pablo: revístanse de Cristo: vestirnos con el manto de sus virtudes.</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span class="textocursiva" style="font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: bold; line-height: normal;">2)</span> Le pertenecemos a Ella: Llevamos una marca que nos hace sus hijos escogidos. El escapulario se convierte en el símbolo de nuestra consagración a Maria. Consagración: `pertenecer a Maria'. Reconocer su misión maternal sobre nosotros y entregarnos a ella para dejarnos guiar, ensenar, moldear por Ella y en su corazón. Así podremos ser usados por Ella para la extensión del Reino de su Hijo.</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">En 1950 Papa Pio XII escribió acerca del escapulario: "que sea tu signo de consagración al Inmaculado Corazón de María, lo cual estamos particularmente necesitando en estos tiempos tan peligrosos"</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span class="textocursiva" style="font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: bold; line-height: normal;">3)</span> El suave yugo de Cristo: "Carguen sobre ustedes mi yugo y aprendan de mí, porque soy paciente y humilde de corazón, y así encontraran alivio. Porque mi yugo es suave y mi carga liviana". (Mt 11:29 30)</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">El escapulario simboliza ese yugo que Jesús nos invita a cargar pero que Maria nos ayuda a llevar.</p><p class="textocursiva" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: bold; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">La Promesa:</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">"Este debe ser un signo y privilegio para ti y para todos los carmelitas: quien muera usando el escapulario no sufrirá el fuego eterno".</p><p class="textocursiva" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: bold; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Explicación de la Promesa:</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Muchos Papas, santos y teólogos católicos han explicado que esta promesa significa que quien tenga la devoción al escapulario y lo use, recibirá de ella a la hora de la muerte: la gracia de la perseverancia en el estado de gracia o la gracia de la contrición. O sea que el escapulario no es una barita mágica que nos libra del infierno, sino que María como dispensadora de gracias, nos ayudara a morir en estado de gracia o sea sin pecado grave o morir habiendo tenido un auténtico arrepentimiento.</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span class="textocursiva" style="font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: bold; line-height: normal;">Testimonio</span>: “un sacerdote de Chicago fue llamado para ir a asistir a un moribundo que había estado lejos de su fe y de los sacramentos por muchos anos. El moribundo no quiso recibirlo, ni hablar con él. Pero el sacerdote insistió y le enseñó el escapulario que llevaba. Le pregunto si le permitiría ponérselo. El hombre acepto con tal que el sacerdote lo dejara en paz. Una hora más tarde el moribundo mando a llamar al sacerdote pues deseaba confesarse y morir en gracia y amistad con Dios"</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">El mismo día que S. Simón Stock recibió de María el escapulario y la promesa, él fue llamado a asistir a un moribundo que estaba desesperado. Cuando llego puso el escapulario sobre el hombre, pidiéndole a la Virgen que mantuviera la promesa que le acababa de hacer. Inmediatamente el hombre se arrepintió, se confesó y murió en gracia de Dios"</p><p class="textocursiva" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: bold; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Alerta:</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Los Papas y Santos han muchas veces alertado acerca de no abusar de la promesa de nuestra madre y usar el escapulario como una manera fácil de evadir la conversión. El Papa Pio XI: "aunque es cierto que la Virgen María ama de manera especial a quienes son devotos de ella, aquellos que desean tenerla como auxilio a la hora de la muerte, deben en vida ganarse dicho privilegio con una vida de rechazo al pecado y viviendo para darle honor"</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Es inconcebible que alguien quien deliberadamente comete pecado, contando en la Promesa del Escapulario de salvarlo, moriría usándolo. Vivir en pecado y usar el escapulario como ancla de salvación es cometer pecado de presunción.</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"><span class="textocursiva" style="font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: bold; line-height: normal;">Testimonio:</span> Durante la guerra civil en 1930, siete comunistas fueron sentenciados a muerte por sus crímenes. Un sacerdote Carmelita trato de prepararlos. Ellos se negaron. Después de tratar de hacerlo a través de visitas amistosas, él les pregunto: ¿me dejarían ponerles unos escapularios? seis de ellos aceptaron pero uno no. Los seis fueron a confesión excepto el séptimo que no quiso usarlo. Cuando llego el momento de la ejecución, el séptimo hombre dijo claramente que él no deseaba hablar con ningún sacerdote, aunque andaba colgado el escapulario. Finalmente, dispararon y siete hombres sin vida cayeron al suelo. Misteriosamente, un escapulario fue encontrado aproximadamente a 50 pasos de los cuerpos. Al revisar los cuerpos, seis hombres murieron con el escapulario, menos el séptimo.</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">El Beato Claudio de Colombiére (director de St. Margarita María) nos explica: 'tu preguntas ¿y si yo quisiera morir con mis pecados?, yo te respondo, `entonces morirás en pecado' pero no morirás con tu escapulario".</p><p class="textocursiva" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: bold; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">El Privilegio Sabatino: (sábado)</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Este privilegio se basa en una bula o edicto que fue proclamada por el Papa Juan XXII en Marzo 3, 1322. Este privilegio le fue anunciado en una aparición que el Papa recibió de la Virgen y consiste en la liberación del purgatorio el primer sábado (día que la Iglesia ha dedicado a la Virgen) después de la muerte a través de una intercesión especial de la Virgen.</p><p class="textocursiva" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: bold; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Condiciones: (para que aplique este privilegio)</p><p class="textocursiva" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: bold; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">1) <span class="texto" style="font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: normal; line-height: normal;">que usen el escapulario con fidelidad</span></p><p class="textocursiva" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: bold; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">2) <span class="texto" style="font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: normal; line-height: normal;">observar castidad de acuerdo al estado de vida</span></p><p class="textocursiva" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: bold; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">3) <span class="texto" style="font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: normal; line-height: normal;">rezo del oficio de la Virgen (oraciones y lecturas en honor a la Virgen) o rezar diariamente 5 décadas del rosario.</span></p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">El Papa Pablo V confirmo en una proclamación oficial que se podía ensenar acerca del privilegio sabatino a todos los creyentes.</p><p class="textocursiva" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: bold; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Imposición del Escapulario:</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">El primer escapulario debe ser bendecido por un sacerdote e impuesto por el mientras dice: "recibe este escapulario bendito y pide a la Virgen Santísima<img align="right" border="0" height="186" hspace="5" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/carmen/santos.jpg" vspace="5" width="419" /> que por sus méritos, lo lleves sin ninguna mancha de pecado y que te proteja de todo mal y te lleve a la vida eterna"</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">San Alfonso Liguori: "heréticos modernos se burlan del escapulario como si fuera algo anticuado y sin sentido"</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Pero todos sabemos que muchos Papas lo han aprobado y recomendado. Gregorio X fue enterrado con su escapulario. 600 años más tarde cuando abrieron su tumba, su escapulario estaba intacto.</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">S. Alfonso Liguori y S. Juan Bosco: tenían una especial devoción a la Virgen del Carmen y usaban el escapulario. Cuando murieron los enterraron con sus vestiduras sacerdotales y con su escapulario. Muchos anos después cuando abrieron sus tumbas encontraron que todo era ceniza, excepto sus escapularios, estaban intactos.</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Recordemos si, que el escapulario es un signo del amor y protección maternal de María y de su llamada a una vida de santidad y sin pecado.</p><p class="texto" style="color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;">Usar el escapulario es una respuesta de amor a la Madre que vino a darnos un regalo de su misericordia. Debemos usarlo como recordatorio que le pertenecemos a ella, que deseamos imitarla y vivir en gracia bajo su manto protector.</p></blockquote><p class="texto" style="background-color: white; color: #5f4024; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; line-height: normal; margin-top: 0px; padding-left: 15px; padding-right: 15px; text-align: justify;"> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjJ6wgYRZcbrOkK6WOZPLJt3zDD_BUZgZA7t27Rum-dPiOzNrPgBk2uT-itQSnjr6ORJTrGLXZPlfo9fSHdvaZUeUF9GYLwngYquE1_0GjOcKjsHZsuWgeySYhZ77zi8xCyill2X2BiGwa9CI53ftN4ah23Pq2zMCA2dtBZluEJg7SOtKxHebG9i8vuoxas/s805/lvp.virgen-del-carmen.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="805" data-original-width="630" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjJ6wgYRZcbrOkK6WOZPLJt3zDD_BUZgZA7t27Rum-dPiOzNrPgBk2uT-itQSnjr6ORJTrGLXZPlfo9fSHdvaZUeUF9GYLwngYquE1_0GjOcKjsHZsuWgeySYhZ77zi8xCyill2X2BiGwa9CI53ftN4ah23Pq2zMCA2dtBZluEJg7SOtKxHebG9i8vuoxas/s320/lvp.virgen-del-carmen.jpg" width="250" /></a></div><br /><p></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;"><b>ORACIONES A NUESTRA SEÑORA DEL CARMEN</b></span></p><p style="text-align: justify;"><span style="color: #7f6000;">SÚPLICA PARA TIEMPOS DIFÍCILES</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="color: #7f6000;">"Tengo mil dificultades: ayúdame. De los enemigos del alma: sálvame. En mis desaciertos: ilumíname. En mis dudas y penas: confórtame. En mis enfermedades: fortaléceme. Cuando me desprecien: anímame. En las tentaciones: defiéndeme. En horas difíciles: consuélame. Con tu corazón maternal: ámame. Con tu inmenso poder: protégeme. Y en tus brazos al expirar: recíbeme. Virgen del Carmen, ruega por nosotros. Amén."</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="color: #7f6000;"><br /></span></p><p style="text-align: justify;"><span style="color: #7f6000;">ACCIÓN DE GRACIAS Y OFRECIMIENTO</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="color: #7f6000;">¡Oh Virgen Santa del Carmen! Jamás podremos corresponder dignamente a los favores y gracias que nos has hecho al darnos tu santo Escapulario. Acepta nuestro sencillo, pero hondamente sentido, agradecimiento y, ya que nada te podemos dar que sea digno de Ti y de tus mercedes, ofrecemos nuestro corazón, con todo su amor, y toda nuestra vida, que queremos emplear en el amor y servicio de tu Hijo Señor nuestro, y en propagar tu dulce devoción, procurando que todos nuestros hermanos en la fe, con los cuales la divina Providencia nos hace convivir y relacionar, estimen y agradezcan tu gran don, vistiendo el santo Escapulario, y que todos podamos vivir y morir en tu amor y devoción. Amen.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="color: #7f6000;"><br /></span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;"> GOZOS A LA VIRGEN DEL CARMEN</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Prodigioso y admirable</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Imán de nuestro desvelo;</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Nubecilla del Carmelo,</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Sednos protectora y Madre. Salve, Reina de los, cielos,</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">De misericordia Madre,</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Vida y dulzura divina;</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Esperanza nuestra, Salve;</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Nubecilla etc. Dios te Salve, Templo hermoso</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Del divino Verbo en carne,</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Sálvete Dios, Madre Virgen,</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Pues eres Virgen y Madre;</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Nubecilla etc. Volvednos, Madre piadosa,</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Vuestros ojos admirables,</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Y mirad por vuestros hijos,</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Pues que sois piadosa Madre;</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Nubecilla etc. Socorrednos, pues escucha</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Que en las penas y combates</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">A ti suspiramos todos</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">En este lloroso valle;</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Nubecilla etc. Mostradnos a vuestro Hijo</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">De Josafat en el Valle,</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Piadoso, pues que nació</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">De ese cristal admirable;</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Nubecilla etc. Rogad por vuestros devotos</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">A la bondad inefable;</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Pues murió para salvarnos,</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Por su clemencia nos salve;</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Nubecilla del Carmelo,</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">Sednos protectora y Madre.</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;"><br /></span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">V. Ruega por nos, santa Madre de Dios.</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;">R. Para que seamos dignos de las promesas de Jesucristo.</span></p><p style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000;"><br /></span></p><p style="text-align: justify;"><span style="color: #7f6000;">ORACIÓN</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="color: #7f6000;">Oh Dios, que adornaste a la Orden de la Beatísima siempre Virgen y Madre tuya María con el singular título del Carmelo: concede propicio que escudados con los auxilios de aquella cuya conmemoración celebramos, seamos dignos de llegar a los gozos eternos. Tu que vives y reinas por los siglos de los siglos. Así sea.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="color: #7f6000;">Concluir cada día con tres avemarías.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="color: #7f6000;">Fuente: <a href="https://www.corazones.org/default.htg/quienes_sctjm/mother_adela/escapulario_carmelita.html" target="_blank">Corazones.org</a></span></p>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-85794426276348375812023-07-08T17:06:00.000-03:002023-07-08T17:06:02.449-03:00Novena a la Virgen del Carmen<p> <span style="background-color: white; color: #38393a; font-family: Roboto, Verdana, Arial, sans-serif; font-size: 26px; text-align: justify;">Novena a la Virgen del Carmen</span></p><div id="puerco" style="background-color: white; box-sizing: border-box; color: #989898; direction: ltr; font-family: "Helvetica Neue", Helvetica, Helvetica, Arial, sans-serif; font-size: 12px; margin: 0px; padding: 0px;"><div id="articulo" style="box-sizing: border-box; direction: ltr; margin: 0px; padding: 0px;"><span class="art_descripcion" style="box-sizing: border-box; color: #38393a; font-family: Roboto, Verdana, Arial, sans-serif; font-size: 16px; line-height: 1.1; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;">Oraciones para cada día de la novena, la puedes hacer tantas veces desees, de manera especial los días previos a la festividad </span><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><span class="art_autor" style="box-sizing: border-box; color: #4f5053; font-family: Roboto, Verdana, Arial, sans-serif; font-size: 14px; line-height: 1.3; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;">Por: Catholic.net | Fuente: Catholic.net</span><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><img src="https://imagenes.catholic.net/imagenes_db/eba915_15503.jpg" style="box-sizing: border-box; clear: left; float: left; height: auto; margin: 0px; max-width: 100%; padding: 0px 10px 0px 0px;" /><div align="justify" id="art_texto" style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto, Verdana, Arial, sans-serif; font-size: 18px; line-height: 1.3; margin: 0px; padding: 0px;"><p style="box-sizing: border-box; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 14px; margin: 0px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-family: verdana, geneva, sans-serif; margin: 0px; padding: 0px;">Por la señal, etc.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">ACTO DE CONTRICIÓN PARA TODOS LOS DÍAS</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Dios mío y Señor mío, postrado delante de vuestra Majestad Soberana, con todo mi ser, con toda mi alma y todo mi corazón te adoro, confieso, bendigo, alabo y glorifico. A ti te reconozco por mi Dios y mi Señor; en Ti creo, en Ti espero y en Ti confío. Me has de perdonar mis culpas y dar tu gracia y perseverancia en ella, y la gloria que tienes ofrecida a los que perseveran en tu amor. A Ti te amo sobre todas las cosas. A Ti confieso mi suma ingratitud y todas mis culpas y pecados, de todo lo cual me arrepiento y te pido me concedas benignamente el perdón. Pésame, Dios mío, de haberos ofendido, por ser Vos quien sois. Propongo firmemente, ayudado con vuestra divina gracia, nunca más pecar, apartarme de las ocasiones de ofenderos, confesarme, satisfacer por mis culpas y procurar en todo serviros y agradaros. Perdóname, Señor, para que con alma limpia y pura alabe a la santísima Virgen, Madre vuestra y Señora mía, y alcance por su poderosa intercesión la gracia especial que en este Novena pido, si ha de ser para mayor honra y gloria vuestra, y provecho de mi alma. Amén.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">ORACIÓN INICIAL PARA TODOS LOS DÍAS</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Oh Virgen María, Madre de Dios y Madre también de los pecadores, y especial Protectora de los que visten tu sagrado Escapulario; por lo que su divina Majestad te engrandeció, escogiéndote para verdadera Madre suya, te suplico me alcances de tu querido Hijo el perdón de mis pecados, la enmienda de mi vida, la salvación de mi alma, el remedio de mis necesidades, el consuelo de mis aflicciones y la gracia especial que pido en esta Novena, si conviene para su mayor honra y gloria, y bien de mi alma: que yo, Señora, para conseguirlo me valgo de vuestra intercesión poderosa, y quisiera tener el espíritu de todos los ángeles, santos y justos a fin de poder alabarte dignamente; y uniendo mis voces con sus afectos, te saludo una y mil veces, diciendo: (rezar tres avemarías)<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">ORACIÓN FINAL PARA TODOS LOS DÍAS</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Virgen santísima del Carmen; yo deseo que todos sin excepción se cobijen bajo la sombra protectora de tu santo Escapulario, que todos estén unidos a Ti, Madre mía, por los estrechos y amorosos lazos de esta tu querida Insignia. ¡Oh hermosura del Carmelo! Míranos postrados reverentes ante tu sagrada imagen, y concédenos benigna tu amorosa protección. Te recomiendo las necesidades de nuestro Santísimo Padre, el Papa, y las de la Iglesia Católica, nuestra Madre, así como las de mi nación y las de todo el mundo, las mías propias y las de mis parientes y amigos. Mira con ojos de compasión a tantos pobres pecadores, herejes y cismáticos, cómo ofenden a tu divino Hijo y a tantos infieles como gimen en las tinieblas del paganismo. Que todos se conviertan y te amen, Madre mía, como yo deseo amarte ahora y por toda la eternidad. Así sea.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">DÍA PRIMERO</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Comenzar con el acto de contrición y la oración.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />ORACIÓN. ¡Oh! Virgen del Carmen, María Santísima, que fuiste figurada en aquella nubecilla que el gran Profeta de Dios, Elías, vio levantarse del Mar, y con su lluvia fecundó copiosamente la tierra, significando la purísima fecundidad con que diste al mundo a tu querido Hijo Jesús, para remedio universal de nuestras almas: te ruego, Señora, me alcances de su majestad copiosas lluvias de auxilios, para que mi alma lleve abundantes frutos de virtudes y buenas obras, a fin de que sirviéndole con perfección en esta, vida, merezca gozarle en la eterna. Así, Señora, te lo suplico humildemente, diciendo: Dios te Salve, Reina y Madre de misericordia, etc.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Pedir la gracia particular que se desee conseguir en esta Novena. Terminar con la oración final.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">DÍA SEGUNDO</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Comenzar con el acto de contrición y la oración.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />ORACIÓN. ¡Oh! Virgen del Carmen, María Santísima, que por tu singular amor a los Carmelitas los favoreciste con tu familiar trato y dulces coloquios, alumbrándolos con las luces de tu enseñanza y ejemplo de que dichosamente gozaron. Te ruego, Señora, me asistas con especial protección, alcanzándome de tu bendito Hijo Jesús luz para conocer su infinita bondad y amarle con toda mi alma; para conocer mis culpas y llorarlas para saber como debo comportarme a fin de servirle con toda perfección; y para que mi trato y conversación sean siempre para su mayor honra y gloria y edificación de mis prójimos. Así, Señora, te lo suplico humildemente, diciendo: Dios te Salve, Reina y Madre de misericordia, etc.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Pedir la gracia particular que se desee conseguir en esta Novena. Terminar con la oración final.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">DÍA TERCERO</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Comenzar con el acto de contrición y la oración.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />ORACIÓN. ¡Oh! Virgen del Carmen, María Santísima, que te dignaste admitir con singular amor el obsequio filial de los Carmelitas, que entre todos los mortales fueron los primeros que en tu honor edificaron un templo en el Monte Carmelo, donde concurrían fervorosos a darte culto y alabanza. Te ruego, Señora, me alcances sea mi alma templo vivo de la Majestad de Dios, adornado de todas las virtudes, donde El habite siempre amado, adorado y alabado por mi, sin que jamás le ocupen los afectos desordenados de lo temporal y terreno. Así, Señora, te lo suplico humildemente, diciendo: Dios te Salve, Reina y Madre de misericordia, etc.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Pedir la gracia particular que se desee conseguir en esta Novena. Terminar con la oración final.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">DÍA CUARTO</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Comenzar con el acto de contrición y la oración.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />ORACIÓN. ¡Oh! Virgen del Carmen, María Santísima, que para mostrar tu especialísimo amor a los Carmelitas les honraste con el dulce nombre de hijos y hermanos tuyos, alentando con tan singular favor su confianza, para buscar en ti, como en amorosa Madre, el remedio, el consuelo y el amparo en todas sus necesidades y aflicciones, moviéndoles a la imitación de tus excelsas virtudes. Te ruego, Señora, me mires, como amorosa Madre y me alcances la gracia de imitarte, de modo que dignamente pueda yo ser llamado también hijo tuyo, y que mi nombre sea inscrito en el libro de la predestinación de los hijos de Dios y hermanos de mi Señor Jesucristo. Así Señora, te lo suplico humildemente, diciendo: Dios te Salve, Reina y Madre de misericordia, etc.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Pedir la gracia particular que se desee conseguir en esta Novena. Terminar con la oración final.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">DÍA QUINTO</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Comenzar con el acto de contrición y la oración.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />ORACIÓN. ¡Oh! Virgen del Carmen, María Santísima, que para defender a los Carmelitas, tus hijos, cuando se intentaba extinguir la sagrada Religión del Carmen, mostrando siempre el amor y singular predilección con que los amparas, mandaste al Sumo Pontífice, Honorio III, los recibiese benignamente y confirmase su instituto, dándole por señal de que esta era tu voluntad y la de tu divino Hijo, la repentina muerte de dos que especialmente la contradecían. Te ruego, Señora, me defiendas de todos mis enemigos de alma y cuerpo, para que con quietud y paz viva siempre en el santo servicio de Dios y tuyo. Así, Señora, te lo suplico humildemente, diciendo: Dios te Salve, Reina y Madre de misericordia, etc.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Pedir la gracia particular que se desee conseguir en esta Novena. Terminar con la oración final.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">SEXTO DÍA</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Comenzar con el acto de contrición y la oración.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />ORACIÓN. ¡Oh! Virgen del Carmen, María Santísima, que para señalar a los Carmelitas por especiales hijos tuyos, los enriqueciste con la singular prenda del santo escapulario, vinculando en él tantas gracias y favores para con los que devotamente lo visten y cumpliendo con sus obligaciones, procuran vivir de manera que imitando tus virtudes, muestran que son tus hijos. Te ruego, Señora, me alcances la gracia de vivir siempre como verdadero cristiano y cofrade amante del santo escapulario, a fin de que merezca lograr los frutos de esta hermosa devoción. Así, Señora, te lo suplico humildemente, diciendo: Dios te Salve, Reina y Madre de misericordia, etc.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Pedir la gracia particular que se desee conseguir en esta Novena. Terminar con la oración final.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">DÍA SÉPTIMO</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Comenzar con el acto de contrición y la oración.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />ORACIÓN. ¡Oh! Virgen del Carmen, María Santísima, que en tu santo Escapulario diste a los que devotamente lo visten, un firmísimo escudo para defenderse de todos los peligros de este mundo y de las asechanzas del demonio, acreditando esta verdad con tantos y tan singulares milagros. Te ruego, Señora, que seas mi defensa poderosa en esta vida mortal, para que en todas las tribulaciones y peligros encuentre la seguridad, y en las tentaciones salga con victoria, logrando siempre tu especial asistencia para conseguirlo. Así, Señora, te lo suplico humildemente, diciendo: Dios te Salve, Reina y Madre de misericordia, etc.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Pedir la gracia particular que se desee conseguir en esta Novena. Terminar con la oración final.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">DÍA OCTAVO</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Comenzar con el acto de contrición y la oración.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />ORACIÓN. ¡Oh! Virgen del Carmen, María Santísima, que ejerces tu especial protección en la hora de la muerte para con los que devotamente visten tu santo escapulario, a fin de que logren por medio de la verdadera penitencia salir de esta vida en gracia de Dios y librarse de las penas del infierno. Te ruego, Señora, me asistas, ampares y consueles en la hora de mi muerte, y me alcances verdadera penitencia, perfecta contrición de todos mis pecados, encendido amor de Dios y ardiente deseo de verle y gozarle, para que mi alma no se pierda ni condene, sino que vaya segura a la felicidad eterna de la gloria. Así, Señora, te lo suplico humildemente, diciendo: Dios te Salve, Reina y Madre de misericordia, etc.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Pedir la gracia particular que se desee conseguir en esta Novena. Terminar con la oración final.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">DÍA NOVENO</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Comenzar con el acto de contrición y la oración.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />ORACIÓN. ¡Oh! Virgen del Carmen, María Santísima, que extendiendo tu amor hacia los Carmelitas, aún después de la muerte, como piadosísima Madre de los que visten tu santo escapulario consuelas sus almas, cuando están en el Purgatorio, y con tus ruegos consigues salgan cuanto antes de aquellas penas, para ir a gozar de Dios, nuestro Señor, en la gloria. Te ruego, Señora, me alcances de su divina Majestad cumpla yo con las obligaciones de cristiano y la devoción del santo escapulario, de modo que logre este singularísimo favor. Así, Señora, te lo suplico humildemente, diciendo: Dios te Salve, Reina y Madre de misericordia, etc.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Pedir la gracia particular que se desee conseguir en esta Novena. Terminar con la oración final.</span></span></p></div></div></div>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-12790306069124115812023-05-31T18:21:00.003-03:002023-05-31T18:21:31.735-03:00La Visitación deMaría: "María se puso en camino y fue aprisa a la montaña..." (Lc 1, 39)<p> </p><span style="text-align: -webkit-center;"><blockquote><blockquote><p align="center" style="font-family: Arial; font-weight: bold;"><span style="color: #0b5394; font-family: Arial;"><span class="date" style="background-color: white; font-family: Tahoma, Geneva, sans-serif;">Fiesta: 31 de mayo</span></span></p><span style="background-color: white;"><span><p align="justify" style="font-family: Arial; font-weight: bold;"><span class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;"><span class="text"><span class="text"><span class="text"><span class="text" style="color: #0b5394;"><b><img align="right" border="0" height="298" hspace="8" src="https://www.corazones.org/maria/ensenanza/la-visitacion-01.jpg" vspace="5" width="240" /></b></span></span></span></span></span></p><p align="justify" class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;"><span class="text" style="color: #0b5394;">La Virgen María (después de la encarnación del Verbo en su seno, visita a su prima Isabel que esperaba un niño (San Juan Bautista). Isabel reconoce a la Virgen como "la madre de mi Señor".</span></p><p align="justify" class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;"><span class="text" style="color: #0b5394;">Lucas 1:39-46<br />En aquellos días, se levantó María y se fue con prontitud a la<br />región montañosa, a una ciudad de Judá; entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel. </span></p><p align="justify" class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;"><span class="text" style="color: #0b5394;">Y sucedió que, en cuanto oyó Isabel el saludo de María, saltó<br />de gozo el niño en su seno, e Isabel quedó llena de Espíritu Santo; y exclamando con gran voz, dijo: «Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu seno; y ¿de dónde a mí que la madre de mi Señor venga a mí? Porque, apenas llegó a mis oídos la voz de tu saludo, saltó de gozo el niño en mi seno. ¡Feliz la que ha creído que se cumplirían las cosas que le fueron dichas de parte del Señor!»</span></p><p align="justify" class="text" style="font-family: Arial;"><span class="text" style="color: #0b5394; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;">Y dijo María: «</span><span style="text-align: -webkit-center;"><span style="color: #0b5394; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">«Proclama mi alma la grandeza del Señor, </span></span><span style="color: #0b5394; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: -webkit-center;">y se alegra mi espíritu en Dios, mi Salvador; </span><span style="color: #0b5394; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: -webkit-center;">porque ha puesto sus ojos en la humildad de su esclava, </span><span style="color: #0b5394; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: -webkit-center;">y por eso desde ahora todas las generaciones me llamarán bienaventurada, </span><span style="color: #0b5394; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: -webkit-center;">porque el Poderoso ha hecho obras grandes en mí: </span><span style="color: #0b5394; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: -webkit-center;">su nombre es Santo, </span><span style="color: #0b5394; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: -webkit-center;">y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación.»</span></p><p align="justify" class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;"><span style="color: #0b5394; text-align: -webkit-center;">La celebración de la fiesta es iniciativa de San Buenaventura, franciscano, en el 1263. El Papa Urbano VI (reinó del 1378-89), la extendió a toda la Iglesia, pidiendo el fin del cisma que sufría la Iglesia.</span></p></span><span style="font-family: Arial; font-weight: bold;"><p align="justify" class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;"><span style="color: #0b5394;"><i>Ver también: <a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/adviento/adviento_dic21.htm">La Visitación</a></i><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/oficio_lectura/adviento/adviento_dic21.htm"> - San Ambrosio</a>, <a href="https://www.corazones.org/maria/ensenanza/maria_cristo.htm">Donde está María, allí está Cristo</a> -Juan Pablo II</span></p><b><hr color="#5E0000" size="1" /><p align="justify"><span style="color: #0b5394;"><span class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;">En el misterio de la Visitación, el preludio de la misión del Salvador</span><span style="font-family: Arial;"><br /><span class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;">Catequesis mariana</span><br /><span class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;">Santo Padre Juan Pablo II</span><br /><i><span class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-style: normal; font-weight: normal;">2 de octubre de 1996</span></i></span></span></p><p align="JUSTIFY" class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;"><span class="text" style="color: #0b5394;">En el relato de la Visitación, san Lucas muestra cómo la gracia de la Encarnación, después de haber inundado a María, lleva salvación y alegría a la casa de Isabel. El Salvador de los hombres oculto en el seno de su Madre, derrama el Espíritu Santo, manifestándose ya desde el comienzo de su venida al mundo.</span></p><p align="JUSTIFY" class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;"><span class="text" style="color: #0b5394;">El evangelista, describiendo la salida de María hacia Judea, use el verbo anístemi, que significa levantarse, ponerse en movimiento. Considerando que este verbo se use en los evangelios pare indicar la resurrección de Jesús (cf. Mc 8, 31; 9, 9. 31; Lc 24, 7.46) o acciones materiales que comportan un impulso espiritual (cf. Lc 5, 27¬28; 15, 18. 20), podemos suponer que Lucas, con esta expresión, quiere subrayar el impulso vigoroso que lleva a María, bajo la inspiración del Espíritu Santo, a dar al mundo el Salvador.</span></p><p align="JUSTIFY" class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;"><span class="text" style="color: #0b5394;">El texto evangélico refiere, además, que María realice el viaje "con prontitud" (Lc 1, 39). También la expresión "a la región montañosa" (Lc 1, 39), en el contexto lucano, es mucho más que una simple indicación topográfica, pues permite pensar en el mensajero de la buena nueva descrito en el libro de Isaías: "¡Qué hermosos son sobre los montes los pies del mensajero que anuncia la paz, que trae buenas nuevas, que anuncia salvación, que dice a Sión: 'Ya reina tu Dios'!" (Is 52, 7).</span></p><p align="JUSTIFY" class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;"><span class="text" style="color: #0b5394;">Así como manifiesta san Pablo, que reconoce el cumplimiento de este texto profético en la predicación del Evangelio (cf. Rom 10, 15), así también san Lucas parece invitar a ver en María a la primera evangelista, que difunde la buena nueva, comenzando los viajes misioneros del Hijo divino.</span></p><p align="JUSTIFY" class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;"><span class="text" style="color: #0b5394;">La dirección del viaje de la Virgen santísima es particularmente significativa: será de Galilea a Judea, como el camino misionero de Jesús (cf. Lc 9, 51).</span></p><p align="JUSTIFY" class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;"><span class="text" style="color: #0b5394;">En efecto, con su visita a Isabel, María realiza el preludio de la misión de Jesús y, colaborando ya desde el comienzo de su maternidad en la obra redentora del Hijo, se transforma en el modelo de quienes en la Iglesia se ponen en camino para llevar la luz y la alegría de Cristo a los hombres de todos los lugares y de todos los tiempos.</span></p><p align="JUSTIFY" class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;"><span class="text" style="color: #0b5394;">El encuentro con Isabel presenta rasgos de un gozoso acontecimiento salvífico, que supera el sentimiento espontáneo de la simpatía familiar. Mientras la turbación por la incredulidad parece reflejarse en el mutismo de Zacarías, María irrumpe con la alegría de su fe pronta y disponible: "Entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel" (Lc 1, 40).</span></p><p align="JUSTIFY" class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;"><span class="text" style="color: #0b5394;">San Lucas refiere que "cuando oyó Isabel el saludo de María, saltó de gozo el niño en su seno" (Lc 1, 41). El saludo de María suscita en el hijo de Isabel un salto de gozo: la entrada de Jesús en la casa de Isabel, gracias a su Madre, transmite al profeta que nacerá la alegría que el Antiguo Testamento anuncia como signo de la presencia del Mesías.</span></p><p align="JUSTIFY" class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;"><span class="text" style="color: #0b5394;">Ante el saludo de María, también Isabel sintió la alegría mesiánica y "quedó llena de Espíritu Santo; y exclamando con gran voz, dijo: 'Bendita tu entre las mujeres y bendito el fruto de tu seno'" (Lc 1, 41¬42).<br />En virtud de una iluminación superior, comprende la grandeza de María que, más que Yael y Judit, quienes la prefiguraron en el Antiguo Testamento, es bendita entre las mujeres por el fruto de su seno, Jesús, el Mesías.</span></p><p align="JUSTIFY" class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;"><span class="text" style="color: #0b5394;">La exclamación de Isabel "con gran voz" manifiesta un verdadero entusiasmo religioso, que la plegaria del Avemaría sigue haciendo resonar en los labios de los creyentes, como cántico de alabanza de la Iglesia por las maravillas que hizo el Poderoso en la Madre de su Hijo.</span></p><p align="JUSTIFY" class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;"><span class="text" style="color: #0b5394;">Isabel, proclamándola "bendita entre las mujeres" indica la razón de la bienaventuranza de María en su fe: "¡Feliz la que ha creído que se cumplirían las cosas que le fueron dichas de parte del Señor!" (Lc 1, 45). La grandeza y la alegría de María tienen origen en el hecho de que ella es la que cree.</span></p><p align="JUSTIFY" class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;"><span class="text" style="color: #0b5394;">Ante la excelencia de María, Isabel comprende también qué honor constituye pare ella su visita: "De dónde a mí que la madre de mi Señor venga a mí?" (Lc 1, 43). Con la expresión "mi Señor", Isabel reconoce la dignidad real, más aun, mesiánica, del Hijo de María. En efecto, en el Antiguo Testamento esta expresión se usaba pare dirigirse al rey (cf. IR 1, 13, 20, 21, etc.) y hablar del rey-mesías (Sal 110, 1). El ángel había dicho de Jesús: "EI Señor Dios le dará el trono de David, su padre" (Lc 1, 32). Isabel, "llena de Espíritu Santo", tiene la misma intuición. Más tarde, la glorificación pascual de Cristo revelará en qué sentido hay que entender este título, es decir, en un sentido trascendente (cf. Jn 20, 28; Hch 2, 34-36).</span></p><p align="JUSTIFY" class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;"><span class="text" style="color: #0b5394;">Isabel, con su exclamación llena de admiración, nos invita a apreciar todo lo que la presencia de la Virgen trae como don a la vida de cada creyente.</span></p><p align="JUSTIFY" class="text" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-weight: normal;"><span class="text" style="color: #0b5394;">En la Visitación, la Virgen lleva a la madre del Bautista el Cristo, que derrama el Espíritu Santo. Las mismas palabras de Isabel expresan bien este papel de mediadora: "Porque, apenas llegó a mis oídos la voz de tu saludo saltó de gozo el niño en mi seno" (Lc 1, 44). La intervención de María produce, junto con el don del Espíritu Santo, como un preludio de Pentecostés, confirmando una cooperación que, habiendo empezado con la Encarnación, esta destinada a manifestarse en toda la obra de la salvación divina.</span></p></b></span></span></blockquote></blockquote><p><span style="background-color: white;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhneN2n3efY-bS60VywCMZHZ8QrWeXL_AlMjnN4rVznsPhmPmitHtIcqUeXAhnz88WS5HcrdQ3ZZ2eVEDG_N7iywClhZc4Lhi2VlfFHFJdsckltvWzuh5bOlH94Ozrcn9YGwP_-rCZTfyfMstaecsIDv9oJifuWtmeAbv04QuJOgB7E2l1_6l0T8a1Kqg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="1251" data-original-width="1879" height="213" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhneN2n3efY-bS60VywCMZHZ8QrWeXL_AlMjnN4rVznsPhmPmitHtIcqUeXAhnz88WS5HcrdQ3ZZ2eVEDG_N7iywClhZc4Lhi2VlfFHFJdsckltvWzuh5bOlH94Ozrcn9YGwP_-rCZTfyfMstaecsIDv9oJifuWtmeAbv04QuJOgB7E2l1_6l0T8a1Kqg" width="320" /></a></div><br /><br /></span><p></p><p><span style="background-color: white;"> <b style="font-family: Verdana; text-align: left;"><span style="color: #0b5394;">Donde está María, allí está Cristo</span></b></span></p><center style="font-family: Arial; font-weight: bold;"><span style="background-color: white; color: #0b5394; font-family: Arial;"><b></b><blockquote><b></b><blockquote><b></b></blockquote></blockquote></span></center><blockquote><p style="text-align: left;"><span style="background-color: white; color: #0b5394; font-family: Verdana;"><b><span lang="es">Santo Padre JPII</span><br /><span lang="es">F</span>iesta de la <a href="https://www.corazones.org/maria/ensenanza/visitacion.htm">Visitación</a> de la Virgen, 31 de mayo<span lang="es"> del 2001</span></b><br /><b><br /></b></span></p><div style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; color: #0b5394; font-family: Verdana;"><b>"María se puso en camino y fue aprisa a la montaña..." (Lc 1, 39)</b></span></div><p></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; color: #0b5394; font-family: Verdana;">Resuenan en nuestro corazón las palabras del evangelista san Lucas: "En<span lang="es"> </span>cuanto oyó Isabel el<span lang="es"> </span>saludo de María, (...) quedó llena de Espíritu Santo"<span lang="es"> </span>(Lc 1, 41). El encuentro entre la Virgen y su<span lang="es"> </span>prima Isabel es una especie de<span lang="es"> </span>"pequeño Pentecostés". Quisiera subrayarlo esta noche,<span lang="es"> </span>prácticamente en la<span lang="es"> </span>víspera de la gran solemnidad del Espíritu Santo. En la narración<span lang="es"> </span>evangélica, la<span lang="es"> </span>Visitación sigue inmediatamente a la Anunciación: la Virgen<span lang="es"> </span>santísima, que lleva en su seno al<span lang="es"> </span>Hijo concebido por obra del Espíritu<span lang="es"> </span>Santo, irradia en torno a sí gracia y gozo espiritual. La<span lang="es"> </span>presencia del<span lang="es"> </span>Espíritu en ella hace saltar de gozo al hijo de Isabel, Juan, destinado a<span lang="es"> </span>preparar el<span lang="es"> </span>camino del Hijo de Dios hecho hombre<span lang="es">.</span></span></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; color: #0b5394; font-family: Verdana;">Donde está María, allí está Cristo; y donde está Cristo, allí está su<span lang="es"> </span>Espíritu Santo, que procede del<span lang="es"> </span>Padre y de él en el misterio sacrosanto de<span lang="es"> </span>la vida trinitaria. Los Hechos de los Apóstoles subrayan<span lang="es"> </span>con razón la<span lang="es"> </span>presencia orante de María en el Cenáculo, junto con los Apóstoles reunidos<span lang="es"> </span>en espera<span lang="es"> </span>de recibir el "poder desde lo alto". El "sí" de la Virgen, "fiat",<span lang="es"> </span>atrae sobre la humanidad el don de<span lang="es"> </span>Dios: como en la Anunciación, también en<span lang="es"> </span>Pentecostés. Así sigue sucediendo en el camino de la<span lang="es"> </span>Iglesia.</span></p><p style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; color: #0b5394; font-family: Verdana;">Reunidos en oración con María, invoquemos una abundante efusión del Espíritu<span lang="es"> </span>Santo sobre la<span lang="es"> </span>Iglesia entera, para que, con velas desplegadas, reme mar<span lang="es"> </span>adentro en el nuevo milenio. De modo<span lang="es"> </span>particular, invoquémoslo sobre cuantos<span lang="es"> </span>trabajan diariamente al servicio de la Sede apostólica, para<span lang="es"> </span>que el trabajo<span lang="es"> </span>de cada uno esté siempre animado por un espíritu de fe y de celo apostólico.<span lang="es"> </span>Es<span lang="es"> </span>muy significativo que en el último día de mayo se celebre la fiesta de la<span lang="es"> </span>Visitación. Con esta<span lang="es"> </span>conclusión es como si quisiéramos decir que cada día de<span lang="es"> </span>este mes ha sido para nosotros una<span lang="es"> </span>especie de visitación. Hemos vivido<span lang="es"> </span>durante el mes de mayo una continua visitación, como la<span lang="es"> </span>vivieron María e<span lang="es"> </span>Isabel. Damos gracias a Dios porque la liturgia nos propone de nuevo hoy<span lang="es"> </span>este<span lang="es"> </span>acontecimiento bíblico .</span></p><p style="text-align: left;"></p><div style="text-align: justify;"><span style="background-color: white; color: #0b5394; font-family: Verdana;">A todos vosotros, aquí reunidos en tan gran número, deseo que la gracia de</span><span lang="es" style="color: #0b5394; font-family: Verdana;"> </span><span style="background-color: white; color: #0b5394; font-family: Verdana;">la visitación mariana,</span><span lang="es" style="color: #0b5394; font-family: Verdana;"> </span><span style="background-color: white; color: #0b5394; font-family: Verdana;">vivida durante el mes de mayo y especialmente en esta</span><span lang="es" style="color: #0b5394; font-family: Verdana;"> </span><span style="background-color: white; color: #0b5394; font-family: Verdana;">última tarde, se prolongue en los días</span><span lang="es" style="color: #0b5394; font-family: Verdana;"> </span><span style="background-color: white; color: #0b5394; font-family: Verdana;">venideros.</span></div><span style="background-color: white; color: #0b5394; font-family: Verdana;"><div style="text-align: justify;"><br /></div>(©L'Osservatore Romano - 8 de junio de 2001)</span><p></p><div><span style="font-family: Verdana;"><span style="font-size: xx-small;"><br /></span></span></div></blockquote>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-17601945520339379792023-05-23T23:16:00.001-03:002023-05-23T23:19:48.866-03:0024 de mayo: María Auxiliadora<p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="background-color: white; color: #0b5394; font-family: Inter; font-size: large; letter-spacing: -0.01em;"><b>Hoy celebramos a Santa María Auxiliadora, </b></span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="background-color: white; color: #0b5394; font-family: Inter; font-size: x-large; letter-spacing: -0.01em;"><b><br /></b></span></div><h1 class="h1 post-title mt-0" style="background-color: white; box-sizing: border-box; font-family: Inter; letter-spacing: -0.01em; line-height: 1.2; margin-bottom: 32px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px !important; margin: 0px 0px 32px; padding: 0px; text-align: center; vertical-align: top; width: 646.8px;"><span style="color: #0b5394; font-size: large;">la Madre que nos protege en las dificultades</span></h1><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"></div><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjBUhtYDEjS8JWshVEGPbxk8fALtvJ36g_fLxK0rh78rSkK_pZxs_rq9QtpzOD_8dugOtJ8D9fGxipseSVOXeiJBYOKWlgIYesG5TgPOsgWknH7zOys4edbJUJbZgi52FS23blue5gXlnl3YaRj_nuL7FiO-g_qTcat1xTDRf5f2ygRijEPm9KjRCD3Zg/s900/MariaAuxiliadora_24Mayo.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="500" data-original-width="900" height="249" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjBUhtYDEjS8JWshVEGPbxk8fALtvJ36g_fLxK0rh78rSkK_pZxs_rq9QtpzOD_8dugOtJ8D9fGxipseSVOXeiJBYOKWlgIYesG5TgPOsgWknH7zOys4edbJUJbZgi52FS23blue5gXlnl3YaRj_nuL7FiO-g_qTcat1xTDRf5f2ygRijEPm9KjRCD3Zg/w448-h249/MariaAuxiliadora_24Mayo.jpg" width="448" /></a></div><br /><div style="text-align: justify;"> Cada 24 de mayo la Iglesia celebra a la Madre de Dios bajo la advocación de “Santa María, Auxilio de los cristianos” (<i>Maria Auxilium Christianorum)</i>, conocida popularmente como Santa María Auxiliadora.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">“En el cielo nos quedaremos gratamente sorprendidos al conocer todo lo que María Auxiliadora ha hecho por nosotros en la tierra”, decía San Juan Bosco, quizás el más grande difusor del amor a la Virgen Auxiliadora. Esta hermosa piedad ha estado presente en la vida de la Iglesia desde antiguo, cada vez que algún cristiano, hijo de María, atraviesa por alguna dificultad.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><u><span style="font-size: medium;">Devoción enraizada profundamente</span></u></div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Los cristianos de los primeros siglos invocaban a la Virgen con el nombre de “Auxiliadora”.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Los dos títulos más frecuentes que podían leerse en las antiguas iglesias o monumentos de Oriente eran: “Madre de Dios” (Theotokos) y “Auxiliadora” (Boeteia). Grandes santos como San Juan Crisóstomo, San Sabas y San Sofronio hicieron uso de ambos títulos para referirse a la Madre de Dios.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Crisóstomo, Patriarca de Constantinopla y Padre de la Iglesia de Oriente, define así a la Virgen María (siglo IV): “Auxilio potentísimo, fuerte y eficaz de los que siguen a Cristo”; por su parte, San Juan Damasceno fue el primero en difundir una jaculatoria dedicada a Ella (siglo VIII): “María Auxiliadora, ruega por nosotros”.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Hacía el año 733, San Germán de Constantinopla escribió un bello texto: "Oh María tú eres poderosa Auxiliadora de los pobres, valiente Auxiliadora contra los enemigos de la fe. Auxiliadora de los ejércitos para que defiendan la patria. Auxiliadora de los gobernantes para que nos consigan el bienestar, Auxiliadora del pueblo humilde que necesita de tu ayuda".</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><u><span style="font-size: medium;">María Auxilio de los cristianos</span></u></div><div style="text-align: justify;"><u><br /></u></div><div style="text-align: justify;">En el siglo XVI, el Papa San Pío V, gran devoto de la Virgen, después de la victoria cristiana sobre los ejércitos musulmanes en la batalla de Lepanto, ordenó que se incluya en el corpus de las letanías marianas la invocación a “María Auxilio de los cristianos”.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">En tiempos de Napoleón, el Papa Pío VII fue apresado por órdenes del emperador francés. El Pontífice pidió el auxilio de María para superar la terrible situación que se había suscitado -una Iglesia secuestrada por el poder imperial-, prometiéndose que, una vez recuperada su libertad, decretaría una nueva fiesta mariana para la Iglesia. Una vez producida la caída de Napoleón, el Santo Padre retorna triunfante a la sede pontificia el 24 de mayo de 1814 y decreta que esa fecha sea destinada para celebrar cada año la fiesta de María Auxiliadora.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><u><span style="font-size: medium;">Don Bosco</span></u></div><div style="text-align: justify;"><u><br /></u></div><div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg6GXww6gXvhKVfllWulSx5_SKb29MTYMNeSB2Gxm9i-CZvj5fcWmNHh9SyOkk_Qaqb8Q_QaR3azNJugud14-Al89P5NOOSUEtkeFWNSSguU0Mvh20x5Uo_yOsVFZE4uqFvNUbLvmpuvaPgnfrVUOSQ7SQ8yM4uXGgYcjr9h2JDd3AI5p_rttdTbHSihg/s305/Don%20Bosco%20y%20Mar%C3%ADa%20Auxiliadora.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="165" data-original-width="305" height="165" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg6GXww6gXvhKVfllWulSx5_SKb29MTYMNeSB2Gxm9i-CZvj5fcWmNHh9SyOkk_Qaqb8Q_QaR3azNJugud14-Al89P5NOOSUEtkeFWNSSguU0Mvh20x5Uo_yOsVFZE4uqFvNUbLvmpuvaPgnfrVUOSQ7SQ8yM4uXGgYcjr9h2JDd3AI5p_rttdTbHSihg/s1600/Don%20Bosco%20y%20Mar%C3%ADa%20Auxiliadora.jpg" width="305" /></a></div><br /><u><br /></u></div><div style="text-align: justify;">Un año después de estos acontecimientos nacía San Juan Bosco, a quien la Virgen se le apareció en sueños para pedirle que construyera un templo en su honor, con el título de “Auxiliadora”.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Es así que el santo italiano iniciaría la construcción de dos “monumentos”: uno físico, que es la Basílica de María Auxiliadora en Turín; y uno “vivo”, conformado por las religiosas Hijas de María Auxiliadora.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><u><span style="font-size: medium;">¡Acógete a la Madre que siempre nos auxilia!</span></u></div><div style="text-align: justify;"><u><br /></u></div><div style="text-align: justify;">Don Bosco solía enseñar a los jóvenes incontables historias en las que él y muchos otros fieles devotos de la Auxiliadora habían obtenido grandes favores del Cielo. Los medios por excelencia para obtener esas gracias -decía el santo- son el rezo de la novena a María Auxiliadora y la repetición constante de la jaculatoria de San Juan Damasceno.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-size: medium;">“Confiad siempre en Jesús Sacramentado y María Auxiliadora y veréis lo que son milagros”,</span> afirmaba, sin reparos, el fundador de los salesianos.</div><div><br /></div><div>Encomiéndate a María Auxiliadora:</div><p></p>
<div style="text-align: center;"><iframe allow="accelerometer; autoplay; clipboard-write; encrypted-media; gyroscope; picture-in-picture; web-share" allowfullscreen="" frameborder="0" height="290" src="https://www.youtube.com/embed/HIwcTNlhJAA" title="YouTube video player" width="500"></iframe></div><div style="text-align: center;"><br /></div><div style="text-align: center;"><br /></div><div style="text-align: center;"><span style="color: #e06666; font-size: medium;">Novena a María Auxiliadora</span></div><div style="text-align: center;"><span style="color: #e06666; font-size: medium;"><br /></span></div><div style="text-align: center;"><ul style="background-color: white; box-sizing: border-box; font-family: Inter, sans-serif; font-size: 16px; margin: 0px 0px 0px 24px; padding: 0px; text-align: start;"><li class="mb-1" style="box-sizing: border-box; margin-bottom: 4px !important; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; margin: 0px 0px 4px; padding: 0px;"><h5 class="my-0" style="box-sizing: border-box; font-family: Inter; font-size: 1em; letter-spacing: -0.01em; line-height: 1.45; margin-bottom: 0px !important; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px !important; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: top;"><a class="alternate" href="https://www.aciprensa.com/recursos/primer-dia-de-la-novena-a-maria-auxiliadora-2158" style="background-color: rgba(0, 0, 0, 0); box-sizing: border-box; font-weight: 500; margin: 0px; outline: none; padding: 0px; text-decoration-line: none; transition: all 0.1s ease 0s;"><span style="color: #e06666;">Primer Día de la Novena a María Auxiliadora 2023</span></a></h5></li><li class="mb-1" style="box-sizing: border-box; margin-bottom: 4px !important; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; margin: 0px 0px 4px; padding: 0px;"><h5 class="my-0" style="box-sizing: border-box; font-family: Inter; font-size: 1em; letter-spacing: -0.01em; line-height: 1.45; margin-bottom: 0px !important; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px !important; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: top;"><span style="color: #e06666;"><a class="alternate" href="https://www.aciprensa.com/recursos/segundo-dia-de-la-novena-a-maria-auxiliadora-2159" style="background-color: rgba(0, 0, 0, 0); box-sizing: border-box; font-weight: 500; margin: 0px; outline: none; padding: 0px; text-decoration-line: none; transition: all 0.1s ease 0s;">Segundo Día de la Novena a María Auxiliadora 202</a><a class="alternate" href="https://www.aciprensa.com/recursos/segundo-dia-de-la-novena-a-maria-auxiliadora-2159" style="background-color: rgba(0, 0, 0, 0); box-sizing: border-box; font-size: 1em; font-weight: 500; letter-spacing: -0.01em; margin: 0px; outline: none; padding: 0px; text-decoration-line: none; transition: all 0.1s ease 0s;">3</a></span></h5></li><li class="mb-1" style="box-sizing: border-box; margin-bottom: 4px !important; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; margin: 0px 0px 4px; padding: 0px;"><h5 class="my-0" style="box-sizing: border-box; font-family: Inter; font-size: 1em; letter-spacing: -0.01em; line-height: 1.45; margin-bottom: 0px !important; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px !important; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: top;"><span style="color: #e06666;"><a class="alternate" href="https://www.aciprensa.com/recursos/tercer-dia-de-la-novena-a-maria-auxiliadora-2160" style="background-color: rgba(0, 0, 0, 0); box-sizing: border-box; font-size: 1em; font-weight: 500; letter-spacing: -0.01em; margin: 0px; outline: none; padding: 0px; text-decoration-line: none; transition: all 0.1s ease 0s;">Tercer Día de la Novena a María Auxiliadora 202</a><span style="font-weight: normal;">3</span></span></h5></li><li class="mb-1" style="box-sizing: border-box; margin-bottom: 4px !important; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; margin: 0px 0px 4px; padding: 0px;"><h5 class="my-0" style="box-sizing: border-box; font-family: Inter; font-size: 1em; letter-spacing: -0.01em; line-height: 1.45; margin-bottom: 0px !important; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px !important; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: top;"><span style="color: #e06666;"><a class="alternate" href="https://www.aciprensa.com/recursos/cuarto-dia-de-la-novena-a-maria-auxiliadora-2161" style="background-color: rgba(0, 0, 0, 0); box-sizing: border-box; font-weight: 500; margin: 0px; outline: none; padding: 0px; text-decoration-line: none; transition: all 0.1s ease 0s;">Cuarto Día de la Novena a María Auxiliadora 202</a><span style="font-weight: normal;">3</span></span></h5></li><li class="mb-1" style="box-sizing: border-box; margin-bottom: 4px !important; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; margin: 0px 0px 4px; padding: 0px;"><h5 class="my-0" style="box-sizing: border-box; font-family: Inter; font-size: 1em; letter-spacing: -0.01em; line-height: 1.45; margin-bottom: 0px !important; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px !important; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: top;"><span style="color: #e06666;"><a class="alternate" href="https://www.aciprensa.com/recursos/quinto-dia-de-la-novena-a-maria-auxiliadora-2162" style="background-color: rgba(0, 0, 0, 0); box-sizing: border-box; font-weight: 500; margin: 0px; outline: none; padding: 0px; text-decoration-line: none; transition: all 0.1s ease 0s;">Quinto Día de la Novena a María Auxiliadora 202</a><span style="font-weight: normal;">3</span></span></h5></li><li class="mb-1" style="box-sizing: border-box; margin-bottom: 4px !important; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; margin: 0px 0px 4px; padding: 0px;"><h5 class="my-0" style="box-sizing: border-box; font-family: Inter; font-size: 1em; letter-spacing: -0.01em; line-height: 1.45; margin-bottom: 0px !important; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px !important; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: top;"><span style="color: #e06666;"><a class="alternate" href="https://www.aciprensa.com/recursos/sexto-dia-de-la-novena-a-maria-auxiliadora-2163" style="background-color: rgba(0, 0, 0, 0); box-sizing: border-box; font-weight: 500; margin: 0px; outline: none 0px; padding: 0px; transition: all 0.1s ease 0s;">Sexto Día de la Novena a María Auxiliadora 202</a><span style="font-weight: normal;">3</span></span></h5></li><li class="mb-1" style="box-sizing: border-box; margin-bottom: 4px !important; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; margin: 0px 0px 4px; padding: 0px;"><h5 class="my-0" style="box-sizing: border-box; font-family: Inter; font-size: 1em; letter-spacing: -0.01em; line-height: 1.45; margin-bottom: 0px !important; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px !important; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: top;"><span style="color: #e06666;"><a class="alternate" href="https://www.aciprensa.com/recursos/setimo-dia-de-la-novena-a-maria-auxiliadora-2164" style="background-color: rgba(0, 0, 0, 0); box-sizing: border-box; font-weight: 500; margin: 0px; outline: none; padding: 0px; text-decoration-line: none; transition: all 0.1s ease 0s;">Séptimo Día de la Novena a María Auxiliadora 202</a><span style="font-weight: normal;">3</span></span></h5></li><li class="mb-1" style="box-sizing: border-box; margin-bottom: 4px !important; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; margin: 0px 0px 4px; padding: 0px;"><h5 class="my-0" style="box-sizing: border-box; font-family: Inter; font-size: 1em; letter-spacing: -0.01em; line-height: 1.45; margin-bottom: 0px !important; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px !important; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: top;"><span style="color: #e06666;"><a class="alternate" href="https://www.aciprensa.com/recursos/octavo-dia-de-la-novena-a-maria-auxiliadora-2165" style="background-color: rgba(0, 0, 0, 0); box-sizing: border-box; font-weight: 500; margin: 0px; outline: none; padding: 0px; text-decoration-line: none; transition: all 0.1s ease 0s;">Octavo Día de la Novena a María Auxiliadora 202</a><span style="font-weight: normal;">3</span></span></h5></li><li class="mb-1" style="box-sizing: border-box; margin-bottom: 4px !important; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; margin: 0px 0px 4px; padding: 0px;"><h5 class="my-0" style="box-sizing: border-box; font-family: Inter; font-size: 1em; letter-spacing: -0.01em; line-height: 1.45; margin-bottom: 0px !important; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px !important; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: top;"><span style="color: #e06666;"><a class="alternate" href="https://www.aciprensa.com/recursos/noveno-dia-de-la-novena-a-maria-auxiliadora-2166" style="background-color: rgba(0, 0, 0, 0); box-sizing: border-box; font-weight: 500; margin: 0px; outline: none; padding: 0px; text-decoration-line: none; transition: all 0.1s ease 0s;">Noveno Día de la Novena a María Auxiliadora 202</a><span style="font-weight: normal;">3</span></span></h5></li><li class="mb-1" style="box-sizing: border-box; margin-bottom: 4px !important; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px; margin: 0px 0px 4px; padding: 0px;"><div><span style="color: #e06666;"><span style="font-weight: normal;"><br /></span></span></div></li></ul><p style="background-color: white; box-sizing: border-box; color: #2f222a; font-family: Inter, sans-serif; font-size: 16px; margin: 0px 0px 16px; padding: 0px; text-align: start;"> </p></div><div style="text-align: center;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhd0jM5rQlUEMQKEh6j4Y21LAcdSFbCn-i38lDdc8D7IZTPz8PhgiwbeLDXgfbZObaYr8dkGA_5kyH4elk0XQ7xEZpg6orDy9w8SeJ8E5pc2G2C3zDJzbcE3T3JvYEHX4ybcqf848gE6vxovwtj8P9hleKfGwDHj9kr8JJJ2vj6whcn7-RNQjUKsl5qHw/s1280/maxresdefault%20(3).jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="720" data-original-width="1280" height="198" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhd0jM5rQlUEMQKEh6j4Y21LAcdSFbCn-i38lDdc8D7IZTPz8PhgiwbeLDXgfbZObaYr8dkGA_5kyH4elk0XQ7xEZpg6orDy9w8SeJ8E5pc2G2C3zDJzbcE3T3JvYEHX4ybcqf848gE6vxovwtj8P9hleKfGwDHj9kr8JJJ2vj6whcn7-RNQjUKsl5qHw/w352-h198/maxresdefault%20(3).jpg" width="352" /></a></div><br /></div>Fuente: <a href="https://www.aciprensa.com/noticias/video-hoy-celebramos-a-maria-auxiliadora-la-que-sostiene-en-tiempos-dificiles-45054" target="_blank">Aciprensa</a><div><br /><div style="text-align: center;"><p style="background-color: white; border: 0px; font-family: Verdana, sans-serif; font-size: small; line-height: 1.71429; margin: 13px 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;"><strong style="border: 0px; font-size: 13px; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">NOVENA DE MARÍA AUXILIADORA PROPAGADA POR SAN JUAN BOSCO</strong></p><p style="background-color: white; border: 0px; font-family: Verdana, sans-serif; font-size: small; line-height: 1.71429; margin: 13px 0px; padding: 0px; text-align: justify; vertical-align: baseline;">1. Rezad durante nueve días seguidos tres Padrenuestros, Avemarías y Glorias con la jaculatoria <strong style="border: 0px; font-size: 13px; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">“Sea alabado en todo momento el Santísimo Sacramento”</strong>, y tres salves con la jaculatoria <strong style="border: 0px; font-size: 13px; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">“María Auxiliadora de los cristianos, ruega por nosotros”.</strong></p><p style="background-color: white; border: 0px; font-family: Verdana, sans-serif; font-size: small; line-height: 1.71429; margin: 13px 0px; padding: 0px; text-align: justify; vertical-align: baseline;">El cristiano ora al Señor y también a la que es su Auxiliadora</p><p style="background-color: white; border: 0px; font-family: Verdana, sans-serif; font-size: small; line-height: 1.71429; margin: 13px 0px; padding: 0px; text-align: justify; vertical-align: baseline;">2. Recibid los Sacramentos de la Reconciliación y de la Eucaristía.</p><p style="background-color: white; border: 0px; font-family: Verdana, sans-serif; font-size: small; line-height: 1.71429; margin: 13px 0px; padding: 0px; text-align: justify; vertical-align: baseline;">El cristiano vive unido a Cristo, a la Auxiliadora de los cristianos y a la Iglesia por los Sacramentos.</p><p style="background-color: white; border: 0px; font-family: Verdana, sans-serif; font-size: small; line-height: 1.71429; margin: 13px 0px; padding: 0px; text-align: justify; vertical-align: baseline;">3. Os recomiendo que prometáis vuestro donativo o vuestro trabajo personal para sostener obras de apostolado, preferentemente salesianas.</p><p style="background-color: white; border: 0px; font-family: Verdana, sans-serif; font-size: small; line-height: 1.71429; margin: 13px 0px; padding: 0px; text-align: justify; vertical-align: baseline;">El cristiano, siente que la Auxiliadora le anima a ser apóstol y a sostener las obras de apostolado de la Iglesia de Cristo.</p><p style="background-color: white; border: 0px; font-family: Verdana, sans-serif; font-size: small; line-height: 1.71429; margin: 13px 0px; padding: 0px; text-align: justify; vertical-align: baseline;"><br /></p><p style="background-color: white; border: 0px; font-family: Verdana, sans-serif; font-size: small; line-height: 1.71429; margin: 13px 0px; padding: 0px; text-align: center; vertical-align: baseline;"></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjZZdOZKMZn0AXAAfP41PNF0dK1dR8VvxUFYMjUd9uC26Lt9bbl6ZCZHUOtx7y_dXH9lA_6OhBWtZJIp3X008w11UXgqZ0TNyso6lesLrdCSxbEiYwkMPaRG0vHd0NmbXJzNURLDjQHbOnnVecLmVBdgwB7lSygpCsLLUjMp-ag_qgOJgtKCBNSSg2C0g" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="189" data-original-width="267" height="227" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEjZZdOZKMZn0AXAAfP41PNF0dK1dR8VvxUFYMjUd9uC26Lt9bbl6ZCZHUOtx7y_dXH9lA_6OhBWtZJIp3X008w11UXgqZ0TNyso6lesLrdCSxbEiYwkMPaRG0vHd0NmbXJzNURLDjQHbOnnVecLmVBdgwB7lSygpCsLLUjMp-ag_qgOJgtKCBNSSg2C0g" width="320" /></a></div><br /><br /><p></p></div></div>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-70723679922582895982023-05-13T20:23:00.037-03:002023-05-13T20:45:41.391-03:0013 de mayo: Nuestra Señora de Fátima - Novena<p style="text-align: center;"><span style="font-size: large;"> Nuestra Señora de Fátima </span></p><p style="text-align: center;"><span style="font-size: large;">13 de mayo</span></p><p style="text-align: center;"><span style="font-size: large;"> Portugal</span></p><p style="text-align: center;"><span style="font-size: large;"><br /></span></p><p style="text-align: center;"></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi_mYRXTCOvUf6IRoROE_USN3KGV5BNmcTTfaRZl3PNIm3B_Wrb3VNcoZYkh741SAlI97hKmSTP1aLvUxZaEDzm4pB4DGrKoPnDU7TuIkbk8aKw5f-cRHLnZmRjp_WYoVr5cKuUY5CLeV0ET9SzdouYZPpPruYZmGmA2koSPKwZOF9MpeKZZbFVMqhPng/s1600/Nuestra%20Se%C3%B1ora%20de%20Fatima.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1600" data-original-width="1071" height="366" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi_mYRXTCOvUf6IRoROE_USN3KGV5BNmcTTfaRZl3PNIm3B_Wrb3VNcoZYkh741SAlI97hKmSTP1aLvUxZaEDzm4pB4DGrKoPnDU7TuIkbk8aKw5f-cRHLnZmRjp_WYoVr5cKuUY5CLeV0ET9SzdouYZPpPruYZmGmA2koSPKwZOF9MpeKZZbFVMqhPng/w245-h366/Nuestra%20Se%C3%B1ora%20de%20Fatima.jpg" width="245" /></a></div><span style="font-size: x-large;"><p style="text-align: center;"><span style="text-align: left;">Virgen de Fátima</span></p></span><p></p><p style="text-align: center;"><span style="font-size: x-large;">(1917)</span></p><p style="text-align: justify;"><br /></p><p style="text-align: justify;">Desde el 13 de mayo de 1917 la Sma. Virgen María se apareció por seis veces en Fátima (Portugal) a tres pastorcitos: Lucía, Francisco y Jacinta. En un hermoso libro titulado "Memorias de Lucía" (cuya lectura recomendamos) la que vio a la Virgen cuenta todos los detalles de esas apariciones.</p><p style="text-align: justify;"><br /></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhkJVb9JBQFeZKg9bVchdSC8zt20QuXAu1_UYJXYwjJihY1fPPNdM6LlIrdKjqCRoA26ujQLI53mhWTqDsAIGmX2zCg0SVeW2LpXG4_uQ2-IOOTnJ70v1AhQjApSiumHlc0LDm0rKIXN16Q-r94fvv9wyM9UOY_g9ZoNIdBgI4_h_Ie7IZXGgAtjeqxRA/s1280/fatima-prayers-2-700x438-1280x720.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="720" data-original-width="1280" height="180" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhkJVb9JBQFeZKg9bVchdSC8zt20QuXAu1_UYJXYwjJihY1fPPNdM6LlIrdKjqCRoA26ujQLI53mhWTqDsAIGmX2zCg0SVeW2LpXG4_uQ2-IOOTnJ70v1AhQjApSiumHlc0LDm0rKIXN16Q-r94fvv9wyM9UOY_g9ZoNIdBgI4_h_Ie7IZXGgAtjeqxRA/s320/fatima-prayers-2-700x438-1280x720.jpg" width="320" /></a></div><br /><p style="text-align: justify;"><br /></p><p style="text-align: justify;"><b>El 13 de mayo se produjo el siguiente diálogo:</b></p><p style="text-align: justify;">- ¿De dónde es su merced?</p><p style="text-align: justify;">- Mi patria es el cielo.</p><p style="text-align: justify;">- ¿Y qué desea de nosotros?</p><p style="text-align: justify;">- Vengo a pedirles que vengan el 13 de cada mes a esta hora (mediodía). En octubre les diré quién soy y qué es lo que quiero.</p><p style="text-align: justify;">- ¿Y nosotros también iremos al cielo?</p><p style="text-align: justify;">- Lucía y Jacinta sí.</p><p style="text-align: justify;">- ¿Y Francisco?</p><p style="text-align: justify;">Los ojos de la aparición se vuelven hacia el jovencito y lo miran con expresión de bondad y de maternal reproche mientras va diciendo:</p><p style="text-align: justify;">- El también irá al cielo, pero antes tendrá que rezar muchos rosarios.</p><p style="text-align: justify;">Y la Sma. continuó diciéndoles:</p><p style="text-align: justify;">- ¿Quieren ofrecerse al Señor y estar prontos para aceptar con generosidad los sufrimientos que Dios permita que les lleguen y ofreciéndolo todo en desagravio por las ofensas que se hacen a Nuestro Señor?</p><p style="text-align: justify;">- Sí, Señora, queremos y aceptamos.</p><p style="text-align: justify;">Con un gesto de amable alegría, al ver su generosidad, les dijo:</p><p style="text-align: justify;">- Tendrán ocasión de padecer y sufrir, pero la gracia de Dios los fortalecerá y asistirá.</p><p style="text-align: justify;"><br /></p><p style="text-align: justify;"><b>Segunda aparición: 13 de Junio de 1917</b></p><p style="text-align: justify;">La Sma. Virgen le dice a los tres niños: "Es necesario que recen el rosario y aprendan a leer".</p><p style="text-align: justify;">Lucía le pide la curación de un enfermo y la Virgen le dice: "Que se convierta y el año entrante recuperará la salud".</p><p style="text-align: justify;">Lucía le suplica: "Señora: ¿quiere llevarnos a los tres al cielo?".</p><p style="text-align: justify;">- Sí a Jacinta y a Francisco los llevaré muy pronto, pero tú debes quedarte aquí abajo, porque Jesús quiere valerse de ti para hacerme amar y conocer. El desea propagar por el mundo la devoción al Inmaculado Corazón de María.</p><p style="text-align: justify;">- ¿Y voy a quedarme solita en este mundo?</p><p style="text-align: justify;">- ¡No hijita! ¿Sufres mucho? Pero no te desanimes, que yo no te abandonaré. Mi corazón inmaculado será tu refugio y yo seré el camino que te conduzca a Dios.</p><p style="text-align: justify;"><br /></p><p style="text-align: justify;"><b>Tercera aparición: 13 de julio de 1917</b></p><p style="text-align: justify;">Ya hay 4,000 personas. Nuestra Señora les dice a los videntes: "Es necesario rezar el rosario para que se termine la guerra. Con la oración a la Virgen se puede obtener la paz. Cuando sufran algo digan: 'Oh Jesús, es por tu amor y por la conversión de los pecadores'".</p><p style="text-align: justify;">La Virgen abrió sus manos y un haz de luz penetró en la tierra y apareció un enorme horno lleno de fuego, y en él muchísimas personas semejantes a brasas encendidas, que levantadas hacia lo alto por las llamas volvían a caer gritando entre lamentos de dolor. Lucía dio un grito de susto. Los niños levantaron los ojos hacia la Virgen como pidiendo socorro y Ella les dijo:</p><p style="text-align: justify;">- ¿Han visto el infierno donde van a caer tantos pecadores? Para salvarlos, el Señor quiere establecer en el mundo la devoción al Corazón Inmaculado de María. Si se reza y se hace penitencia, muchas almas se salvarán y vendrá la paz. Pero si no se reza y no se deja de pecar tanto, vendrá otra guerra peor que las anteriores, y el castigo del mundo por sus pecados será la guerra, la escasez de alimentos y la persecución a la Santa Iglesia y al Santo Padre. Vengo a pedir la Consagración del mundo al Corazón de María y la Comunión de los Primeros Sábados, en desagravio y reparación por tantos pecados. Si se acepta lo que yo pido, Rusia se convertirá y vendrá la paz. Pero si no una propaganda impía difundirá por el mundo sus errores y habrá guerras y persecuciones a la Iglesia. Muchos buenos serán martirizados y el Santo Padre tendrá que sufrir mucho. Varias naciones quedarán aniquiladas. Pero al fin mi Inmaculado Corazón triunfará.</p><p style="text-align: justify;">Y añadió Nuestra Señora: Cuando recen el Rosario, después de cada misterio digan: "Oh Jesús, perdónanos nuestros pecados, líbranos del fuego del infierno y lleva al cielo a todas las almas, especialmente a las más necesitadas de tu misericordia".</p><p style="text-align: justify;"><br /></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiVfHw075bBXQ9_Mpor5jifialx2_EhYJA9cqOKqhFpjm4uZhavquCS5JkZ4sNVf2WLYgHdKUnFk-M3JBXfQcLC5uCWvFoohMRXC8ZLj5S4YP3jSG7dDbNTBjJo4bqI3-u_4gJkD0QOlmkgzxMB5HYPa3SvTPkOSCVZVdO1sQtjb3DKgaJYC8vOMRZUUQ/s1280/virgen%20rezad.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1024" data-original-width="1280" height="281" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiVfHw075bBXQ9_Mpor5jifialx2_EhYJA9cqOKqhFpjm4uZhavquCS5JkZ4sNVf2WLYgHdKUnFk-M3JBXfQcLC5uCWvFoohMRXC8ZLj5S4YP3jSG7dDbNTBjJo4bqI3-u_4gJkD0QOlmkgzxMB5HYPa3SvTPkOSCVZVdO1sQtjb3DKgaJYC8vOMRZUUQ/w352-h281/virgen%20rezad.jpg" width="352" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><p style="text-align: justify;"><b>Cuarta aparición: Agosto 1917</b></p><p style="text-align: justify;">La 4ª. Aparición no fue posible el 13 de agosto, porque en este día el alcalde tenía prisioneros a los 3 niños para tratar de hacerlos decir que ellos no habían visto a la Virgen. Aunque no lo logró. La aparición sucedió unos días después.</p><p style="text-align: justify;">La Sma. Virgen les dijo en la 4ª. Aparición: "Recen, recen mucho y hagan sacrificios por los pecadores. Tienen que recordar que muchas almas se condenan porque no hay quién rece y haga sacrificios por ellas". (El Papa Pío XII decía que esta frase era la que más le impresionaba del mensaje de Fátima y exclamaba: "Misterio tremendo: que la salvación de muchas almas dependa de las oraciones y sacrificios que se hagan por los pecadores).</p><p style="text-align: justify;">Desde esta aparición los tres niños se dedicaron a ofrecer todos los sacrificios posibles por la conversión de los pecadores y a rezar con más fervor el Rosario.</p><p style="text-align: justify;"><br /></p><p style="text-align: justify;"><b>Quinto aparición: 13 de Septiembre 1917</b></p><p style="text-align: justify;">Ya hay unas 12,000 personas. Nuestra Señora les recomienda a los videntes que sigan rezando el Rosario y anuncia el fin de la guerra. Lucía le pide por varios enfermos. La Virgen le responde que algunos sí curarán, pero que otros no, porque Dios no se confía de ellos, y porque para la santificación de algunas personas es más conveniente la enfermedad que la buena salud. E invita a todos a presenciar un gran milagro el próximo 13 de octubre.</p><p style="text-align: justify;"><br /></p><p style="text-align: justify;"><b>Sexta y última aparición. 13 de octubre de 1917</b></p><p style="text-align: justify;">En este día hay 70,000 personas. La aparición dice a los tres niños: "Yo soy la Virgen del Rosario. Deseo que en este sitio me construyan un templo y que recen todos los días el Santo Rosario".</p><p style="text-align: justify;">Lucía les dice los nombres de bastantes personas que quieren conseguir salud y otros favores muy importantes. Nuestra Señora le responde que algunos de esos favores serán concedidos y otros serán reemplazados por favores mejores. Y añade: "Pero es muy importante que se enmienden y que pidan perdón por sus pecados".</p><p style="text-align: justify;">Y tomando un aire de tristeza la Sma. Virgen dijo estas sus últimas palabras de las apariciones: QUE NO OFENDAN MAS A DIOS QUE YA ESTA MUY OFENDIDO (Lucía afirma que de todas las frases oídas en Fátima, esta fue la que más le impresionó).</p><p style="text-align: justify;">La Sma. Virgen antes de despedirse señaló con sus manos hacia el sol y entonces los 70.000 espectadores presenciaron un milagro conmovedor, un espectáculo maravilloso, nunca visto: la lluvia cesó instantáneamente (había llovido desde el amanecer y era mediodía) las nubes se alejaron y el sol apareció como un inmenso globo de plata o de nieve, que empezó a dar vueltas a gran velocidad, esparciendo hacia todas partes luces amarillas, rojas, verdes, azules y moradas, y coloreando de una manera hermosísima las lejanas nubes, los árboles, las rocas y los rostros de la muchedumbre que allí estaba presente. De pronto el sol se detiene y empieza a girar hacia la izquierda despidiendo luces tan bellas que parece una explosión de juegos pirotécnicos, y luego la multitud ve algo que la llena de terror y espanto.</p><p style="text-align: justify;">Ven que el sol se viene hacia abajo, como si fuera a caer encima de todos ellos y a carbonizarlos, y un grito inmenso de terror se desprende de todas las gargantas. "Perdón, Señor, perdón", fue un acto de contrición dicho por muchos miles de pecadores. Este fenómeno natural se repitió tres veces y duró diez minutos. No fue registrado por ningún observatorio astronómico porque era un milagro absolutamente sobrenatural.</p><p style="text-align: justify;">Luego el sol volvió a su sitio y los miles de peregrinos que tenían sus ropas totalmente empapadas por tanta lluvia, quedaron con sus vestidos instantáneamente secos. Y aquel día se produjeron maravillosos milagros de sanaciones y conversiones.</p><p style="text-align: justify;">Y nosotros queremos recordar y obedecer los mensajes de la Sma. Virgen en Fátima: "Rezar el Rosario. Hacer oración y sacrificios por la conversión de los pecadores y NO ofender más a Dios, que ya esta muy ofendido".</p><p style="text-align: justify;"><br /></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiqaejy6XHuAyzm9ixFwDvzphOpIHPToX-IJDDYbkksI_d6KTmB95RSqAoJALNC8-wEpv3Oh5ULl2fMXTt32q0yjQ_SlmFoFXmdPC9sgLRse6fyYNkvH_WjU0PDyknZfKXAQ2XnWzM8P1ET4v3rv6V_uqHrYCFbp_SzDtwESK312DxRQQ5ru8S7bteoCw/s1280/al%20final%20miUnmaculado.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="720" data-original-width="1280" height="217" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiqaejy6XHuAyzm9ixFwDvzphOpIHPToX-IJDDYbkksI_d6KTmB95RSqAoJALNC8-wEpv3Oh5ULl2fMXTt32q0yjQ_SlmFoFXmdPC9sgLRse6fyYNkvH_WjU0PDyknZfKXAQ2XnWzM8P1ET4v3rv6V_uqHrYCFbp_SzDtwESK312DxRQQ5ru8S7bteoCw/w386-h217/al%20final%20miUnmaculado.jpg" width="386" /></a></div><p></p><br /><p style="text-align: justify;"><span style="font-size: x-small;">Fuente: <a href="https://www.ewtn.com/es/catolicismo/santos/nuestra-senora-de-fatima-14863" target="_blank">EWTN</a></span></p><h3 class="post-title entry-title" itemprop="name" style="font-family: Allerta; font-feature-settings: normal; font-kerning: auto; font-optical-sizing: auto; font-stretch: normal; font-variant-alternates: normal; font-variant-east-asian: normal; font-variant-numeric: normal; font-variation-settings: normal; font-weight: normal; line-height: normal; margin: 0px; position: relative; text-align: center;"><span style="color: #0b5394; font-size: large;">Novena a la Virgen de Fátima</span></h3><div class="post-header" style="color: #a2a2a2; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 1.5em;"><div class="post-header-line-1"></div></div><div class="post-body entry-content" id="post-body-2176531167598617089" itemprop="description articleBody" style="font-size: 15.84px; line-height: 1.4; position: relative; width: 528.4px;"><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">NUESTRA SEÑORA DE FÁTIMA</span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"> <a href="http://universoliterario.net/aivirgen_fatima.jpg" style="color: #3c8db4; margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-decoration-line: none;"><img border="0" height="289" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/proxy/AVvXsEjwD8vIUO_k-dROoYH2R4IS7mpgVkl5lAXE1PTT0_ugLhZZ0lbDxNSsaPWTJ6VLVnZclwCPc_8wcjN7TZmIzsEb3ecyWWBylvcViPMrx5eMbEcpS7bNDOE46bx0HuOn9qMj1sHGAIBa12z5MPAWeliY=w344-h289" style="border: none; position: relative;" width="344" /></a></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">NOVENA </span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><i style="text-align: justify;"><b><span style="color: #0b5394;">Empieza el 5 de cada mes para terminar el día 13. </span></b></i></div><b style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta;"><span style="color: #0b5394;"> <span class="Apple-tab-span" style="white-space: pre;"> </span></span></b><br style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta;" /><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><span style="color: #0b5394; font-size: x-small;"><b>ORACIONES PARA TODOS LOS DÍAS</b></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><span style="color: #0b5394; text-align: justify;">OFRECIMIENTO</span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><span style="color: #0b5394; text-align: justify;">¡Oh, Dios mío! Yo creo, adoro, espero y os amo. Os pido perdón por los que no creen, no adoran, no esperan y no os aman.</span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;"><br /></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;">¡Oh santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo! Yo os adoro profundamente y os ofrezco el preciosísimo cuerpo, sangre, alma y divinidad de Nuestro Señor Jesucristo, presente en todos los tabernáculos del mundo, en reparación de los ultrajes con que El es ofendido; y por los méritos infinitos de su Santísimo Corazón e intercesión del Inmaculado Corazón de María, os pido la conversión de los pecadores.</span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;"><br /></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;"> <span class="Apple-tab-span" style="white-space: pre;"> </span> </span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><span style="color: #0b5394;">ORACIÓN PREPARATORIA</span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;">Oh santísima Virgen María, Reina del Rosario y Madre de misericordia, que te dignaste manifestar en Fátima la ternura de vuestro Inmaculado Corazón trayéndonos mensajes de salvación y de paz. Confiados en vuestra misericordia maternal y agradecidos a las bondades de vuestro amantísimo Corazón, venimos a vuestras plantas para rendiros el tributo de nuestra veneración y amor. Concédenos las gracias que necesitamos para cumplir fielmente vuestro mensaje de amor, y la que os pedimos en esta Novena, si ha de ser para mayor gloria de Dios, honra vuestra y provecho de nuestras almas. Así sea.</span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;"><br /></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><i><span style="color: #0b5394;">Rezar la oración del día correspondiente... </span></i></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><i><span style="color: #0b5394;"><br /></span></i></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><span style="color: #0b5394;">ORACIÓN FINAL</span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;">¡Oh Dios, cuyo Unigénito, con su vida, muerte y resurrección, nos mereció el premio de la salvación eterna! Os suplicamos nos concedas que, meditando los misterios del santísimo rosario de la bienaventurada Virgen María, imitemos los ejemplos que nos enseñan y alcancemos el premio que prometen. Por el mismo Jesucristo nuestro Señor. Amén.</span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">DÍA PRIMERO </span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">Penitencia y reparación</span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiz2pGDPE3j-hjRDXVwRbmqH3bQJzJPuahQ3msT0xwFL8BwlRE2kFOdkrDzCquyu69rktq1TfhoJm5RY5jImlffrbA7dEERChcPZnpvvMYBU_qFKynKdZTc0AVyereMQ-g05CR8GP9PnYY/s320/penitenc.jpg" style="color: #3c8db4; margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-decoration-line: none;"><b><span style="color: #0b5394;"><img border="0" height="180" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiz2pGDPE3j-hjRDXVwRbmqH3bQJzJPuahQ3msT0xwFL8BwlRE2kFOdkrDzCquyu69rktq1TfhoJm5RY5jImlffrbA7dEERChcPZnpvvMYBU_qFKynKdZTc0AVyereMQ-g05CR8GP9PnYY/w253-h180/penitenc.jpg" style="border: none; position: relative;" width="253" /></span></b></a></div><div style="text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><i><span style="color: #0b5394;">Comenzar con el Ofrecimiento y la Oración Preparatoria.</span></i></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;"><br /></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">Oración</span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;">¡Oh santísima Virgen María, Madre de los pobres pecadores!, que apareciendo en Fátima, dejaste transparentar en vuestro rostro celestial una leve sombra de tristeza para indicar el dolor que os causan los pecados de los hombres y que con maternal compasión exhortaste a no afligir más a vuestro Hijo con la culpa y a reparar los pecados con la mortificación y la penitencia. Dadnos la gracia de un sincero dolor de los pecados cometidos y la resolución generosa de reparar con obras de penitencia y mortificación todas las ofensas que se infieren a vuestro Divino Hijo y a vuestro Corazón Inmaculado.</span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;"><br /></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><i><span style="color: #0b5394;">Meditar y rezar la Oración Final.</span></i></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;"><br /></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">DÍA SEGUNDO </span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">Santidad de vida</span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><div class="separator" style="clear: both;"><a href="http://infocatolica.com/files/15/05/pastfatim.jpg" style="color: #3c8db4; margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-decoration-line: none;"><b><span style="color: #0b5394;"><img border="0" height="148" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/proxy/AVvXsEh9Yoh_QIu2zvHxmaDSmJqU8qwOM4Y4vjQA0hiTW6HtgSCLB1u7dF4YUBo7BCj99klvhAUDeU3FZ9Hboy_FQ2mNxv_wvYdHM6wr7V0flT_BRiy-pAMD9Ta0JIYvyJyjh7NSOKpD-vFInAgjtD3wXkY7Pg=w231-h148" style="border: none; position: relative;" width="231" /></span></b></a></div><div style="text-align: left;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="text-align: left;"><i style="text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;">Comenzar con el Ofrecimiento y la Oración Preparatoria.</span></i></div></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">Oración</span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;">¡Oh santísima Virgen María, Madre de la divina gracia, que vestida de nívea blancura te apareciste a unos pastorcitos sencillos e inocentes, enseñándonos así cuánto debemos amar y procurar la inocencia del alma, y que pediste por medio de ellos la enmienda de las costumbres y la santidad de una vida cristiana perfecta. Concédenos misericordiosamente la gracia de saber apreciar la dignidad de nuestra condición de cristianos y de llevar una vida en todo conforme a las promesas bautismales.</span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;"><br /></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><i><span style="color: #0b5394;">Meditar y rezar la Oración Final.</span></i></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">DÍA TERCERO </span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">Amor a la oración</span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://www.aciprensa.com/Maria/Fatima/images/juanpablo2fatima.jpg" style="color: #3c8db4; margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-decoration-line: none;"><b><span style="color: #0b5394;"><img border="0" height="207" src="https://www.aciprensa.com/Maria/Fatima/images/juanpablo2fatima.jpg" style="border: none; position: relative;" width="235" /></span></b></a></div><span style="color: #0b5394;"><br /><i>Comenzar con el Ofrecimiento y la Oración Preparatoria.</i></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">Oración</span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;">¡Oh santísima Virgen María, vaso insigne de devoción!, que te apareciste en Fátima teniendo pendiente de vuestras manos el santo Rosario, y que insistentemente repetías: «Orad, orad mucho», para alejar por medio de la oración los males que nos amenazan. Concédenos el don y el espíritu de oración, la gracia de ser fieles en el cumplimiento del gran precepto de orar, haciéndolo todos los días, para así poder observar bien los santos mandamientos, vencer las tentaciones y llegar al conocimiento y amor de Jesucristo en esta vida y a la unión feliz con Él en la otra.</span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;"><br /></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><i><span style="color: #0b5394;">Meditar y rezar la Oración Final.</span></i></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;"><br /></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">DÍA CUARTO </span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">Amor a la Iglesia</span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgt39znZOjTUAREM2RpGtlkpvBt30uP9FD6D8cfQt4LTq5CP1pBQhB5tjzVsLjZ6BNtlcRsSi9CthW3Ct4OmX_fQiHF-WGGY5FULU4uQM8BtheFXDc0c88viw2CWA-SIghkhwHSZdi_mzlrzbuneIzVnBJ44vi8_Ri9C4QcxZEgzEzPlAe2ImQkMhWAUA/s3000/F%C3%A1tima.jpeg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="2000" data-original-width="3000" height="213" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgt39znZOjTUAREM2RpGtlkpvBt30uP9FD6D8cfQt4LTq5CP1pBQhB5tjzVsLjZ6BNtlcRsSi9CthW3Ct4OmX_fQiHF-WGGY5FULU4uQM8BtheFXDc0c88viw2CWA-SIghkhwHSZdi_mzlrzbuneIzVnBJ44vi8_Ri9C4QcxZEgzEzPlAe2ImQkMhWAUA/s320/F%C3%A1tima.jpeg" width="320" /></a></div><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><i><span style="color: #0b5394;">Comenzar con el Ofrecimiento y la Oración Preparatoria.</span></i></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">Oración</span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;">¡Oh santísima Virgen María, Reina de la Iglesia!, que exhortaste a los pastorcitos de Fátima a rogar por el Papa, e infundiste en sus almas sencillas una gran veneración y amor hacia él, como Vicario de vuestro Hijo y su representante en la tierra. Infunde también a nosotros el espíritu de veneración y docilidad hacia la autoridad del Romano Pontífice, de adhesión inquebrantable a sus enseñanzas, y en él y con él un gran amor y respeto a todos los ministros de la santa Iglesia, por medio de los cuales participamos la vida de la gracia en los sacramentos.</span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;"><br /></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><i><span style="color: #0b5394;">Meditar y rezar la Oración Final.</span></i></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;"><br /></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;"><br /></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">DÍA QUINTO </span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">María, salud de los enfermos</span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjdBz5c1tvLMqvxpYYDa_avQww2WswkQz76sS_LN0uiwC_HgCg9Qsw3xHgjaf2T1LlPdvSS6MwKNPBZ1WIeb0HtgAuo2hUQAmkw01eA0K2lRY01Wxip1rhqYYrdYt3WbBKmVi5lmdMsi_So/s1600/apariciones-de-la-virgen-de-fatima-4.jpg" style="color: #3c8db4; margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-decoration-line: none;"><b><span style="color: #0b5394;"><img border="0" height="177" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjdBz5c1tvLMqvxpYYDa_avQww2WswkQz76sS_LN0uiwC_HgCg9Qsw3xHgjaf2T1LlPdvSS6MwKNPBZ1WIeb0HtgAuo2hUQAmkw01eA0K2lRY01Wxip1rhqYYrdYt3WbBKmVi5lmdMsi_So/w218-h177/apariciones-de-la-virgen-de-fatima-4.jpg" style="border: none; position: relative;" width="218" /></span></b></a></div><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><i><span style="color: #0b5394;">Comenzar con el Ofrecimiento y la Oración Preparatoria.</span></i></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">Oración</span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;">¡Oh santísima Virgen María, salud de los enfermos y consoladora de los afligidos!, que movida por el ruego de los pastorcitos, obraste ya curaciones en vuestras apariciones en Fátima, y habéis convertido este lugar, santificado por vuestra presencia, en oficina de vuestras misericordias maternales en favor de todos los afligidos. A vuestro Corazón maternal acudimos llenos de filial confianza, mostrando las enfermedades de nuestras almas y las aflicciones y dolencias todas de nuestra vida. Echad sobre ellas una mirada de compasión y remediadlas con la ternura de vuestras manos, para que así podamos serviros y amaros con todo nuestro corazón y con todo nuestro ser.</span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;"><br /></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><i><span style="color: #0b5394;">Meditar y rezar la Oración Final.</span></i></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;"><br /></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;"><br /></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">DÍA SEXTO </span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">María, refugio de los pecadores</span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><div class="separator" style="clear: both;"><a href="http://forosdelavirgen.org/wp-content/uploads/2013/11/milagro-del-sol-en-fatima.jpg" style="color: #3c8db4; margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-decoration-line: none;"><b><span style="color: #0b5394;"><img border="0" height="150" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/proxy/AVvXsEgtndDXVok_2r3pUt4T0iZI9_5uYsM3cHlZAsG8BNCIyJdAFRHQ_nUBFUIjYtPzXZSWGzY79QwknddOpJ9f0v1C6NjzTNk8wZprYWMoVAVFnEzhxhyp8gs7a0oSsAZ1ILTegHaVvsR9DK0jWR66hveNY7Xucai5ncocYmo6apUXU2QyyQnyX9oQb8t0mxwvXBQzVQ0=w250-h150" style="border: none; position: relative;" width="250" /></span></b></a></div><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><i><span style="color: #0b5394;">Comenzar con el Ofrecimiento y la Oración Preparatoria.</span></i></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">Oración</span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;">¡Oh santísima Virgen María, refugio de los pecadores!, que enseñaste a los pastorcitos de Fátima a rogar incesantemente al Señor para que esos desgraciados no caigan en las penas eternas del infierno, y que manifestaste a uno de los tres que los pecados de la carne son los que más almas arrastran a aquellas terribles llamas. Infundid en nuestras almas un gran horror al pecado y el temor santo de la justicia divina, y al mismo tiempo despertad en ellas la compasión por la suerte de los pobres pecadores y un santo celo para trabajar con nuestras oraciones, ejemplos y palabras por su conversión.</span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;"><br /></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;"><i>Meditar y rezar la Oración Final.</i></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">DÍA SÉPTIMO </span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">María, alivio de las almas del purgatorio</span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><div class="separator" style="clear: both;"><a href="http://public.bay.livefilestore.com/y1pE_16npE6lRkZhorFQWXCV8vKNwWoh3ouXT9L2XcjwsDHSlBS3HCzMPCGTIcBzHEL8PY3m2i8v1fDWLLANyMekw/VirgendeFatima.jpg" style="color: #3c8db4; margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-decoration-line: none;"><b><span style="color: #0b5394;"><img border="0" height="168" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/proxy/AVvXsEiSOANGFmCtbY0_5C9E8VtIBgCeR-XymR6ynJJk1mFIfEfukC4BStmG_LSWrs2iQEVPKzzjelQPD09ctVzexQAzk2Ai33KBK77IEq-RxmP6Dkc737WNJhp6EhaHTlmAoTpMWTBf7Gq88bGR7e5FmXhC-e5V0he4ALRaQMrKK19-j6DOV31g5jcHKbrxg8-kA0G0twiBwZPf-LdF1_ZXf-eOPGd4FdQZme9fmdIlxkuqP6Cs9pTg2oBiqK1HmHzX6XEzGZflxUK0h4V4p5n2syJpyjQ=w224-h168" style="border: none; position: relative;" width="224" /></span></b></a></div><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><i><span style="color: #0b5394;">Comenzar con el Ofrecimiento y la Oración Preparatoria.</span></i></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">Oración</span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;">¡Oh santísima Virgen María, Reina del purgatorio!, que enseñaste a los pastorcitos de Fátima a rogar a Dios por las almas del purgatorio, especialmente por las más abandonadas. Encomendamos a la inagotable ternura de vuestro maternal Corazón todas las almas que padecen en aquel lugar de purificación, en particular las de todos nuestros allegados y familiares y las más abandonadas y necesitadas; alíviales sus penas y llévalas pronto a la región de la luz y de la paz, para cantar allí perpetuamente vuestras misericordias.</span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;"><br /></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><i><span style="color: #0b5394;">Meditar y rezar la Oración Final.</span></i></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">DÍA OCTAVO </span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">María, Reina del Rosario</span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><div class="separator" style="clear: both;"><a href="http://monsignorepuenteochoa.files.wordpress.com/2012/02/aparicion-de-fatima-300.jpg" style="color: #3c8db4; margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-decoration-line: none;"><b><span style="color: #0b5394;"><img border="0" height="257" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/proxy/AVvXsEh8T_-CUcGhMNnAARaWBZEDDKEG_V8ZWWk2ZDxXCdFO1zi242B2Z2_kGw7yOAL2F0cbHFPq5H_227RdL2dpRulAngesMDDwAmRHLFKubkMvcjJZZqjoyScQPVGmUbONZRyj83kPr1_OHJ7oEgpchycyDoEJtJDF7nDFbYDivHUN23m1hrsfjFhnjZZKQHkeTEP8XJ1C=w176-h257" style="border: none; position: relative;" width="176" /></span></b></a></div><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><i><span style="color: #0b5394;">Comenzar con el Ofrecimiento y la Oración Preparatoria.</span></i></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">Oración</span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;">¡Oh santísima Virgen María!, que en vuestra última aparición te diste a conocer como la Reina del Santísimo Rosario, y en todas ellas recomendaste el rezo de esta devoción como el remedio más seguro y eficaz para todos los males y calamidades que nos afligen, tanto del alma como del cuerpo, así públicas como privadas. Infundid en nuestras almas una profunda estima de los misterios de nuestra Redención que se conmemoran en el rezo del Rosario, para así vivir siempre de sus frutos. Concédenos la gracia de ser siempre fieles a la práctica de rezarlo diariamente para honraros a Vos, acompañando vuestros gozos, dolores y glorias, y así merecer vuestra maternal protección y asistencia en todos los momentos de la vida, pero especialmente en la hora de la muerte.</span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;"><br /></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><i><span style="color: #0b5394;">Meditar y rezar la Oración Final.</span></i></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><i><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></i></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">DÍA NOVENO </span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">El Inmaculado Corazón de María</span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><div class="separator" style="clear: both;"><a href="https://peqalmachile.files.wordpress.com/2014/05/fatima.jpg" style="color: #3c8db4; margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-decoration-line: none;"><b><span style="color: #0b5394;"><img border="0" height="247" src="https://peqalmachile.files.wordpress.com/2014/05/fatima.jpg" style="border: none; position: relative;" width="164" /></span></b></a></div><span style="color: #0b5394;"><br /></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta;"><i><span style="color: #0b5394;">Comenzar con el Ofrecimiento y la Oración Preparatoria.</span></i></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><b><span style="color: #0b5394;"><br /></span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: center;"><b><span style="color: #0b5394;">Oración</span></b></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;">¡Oh santísima Virgen María, Madre nuestra dulcísima!, que escogiste a los pastorcitos de Fátima para mostrar al mundo las ternuras de vuestro Corazón misericordioso, y les propusiste la devoción al mismo como el medio con el cual Dios quiere dar la paz al mundo, como el camino para llevar las almas a Dios, y como una prenda suprema de salvación. Haced, ¡oh Corazón de la más tierna de las madres!, que sepamos comprender vuestro mensaje de amor y de misericordia, que lo abracemos con filial adhesión y que lo practiquemos siempre con fervor; y así sea vuestro Corazón nuestro refugio, nuestro consuelo y el camino que nos conduzca al amor y a la unión con vuestro Hijo Jesús.</span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><span style="color: #0b5394;"><br /></span></div><div style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta; text-align: justify;"><i><span style="color: #0b5394;">Meditar y rezar la Oración Final.</span></i></div><br style="background-color: white; color: #0c343d; font-family: Allerta;" /></div>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-15328845957910139732023-05-07T18:05:00.004-03:002023-05-07T18:05:56.259-03:008 de mayo: Fiesta de Nuestra Señora de Luján <div class="header" style="background-attachment: scroll; background-color: #f4eee3; background-image: url("gran_basilica_lujan1.gif"); background-position: center top; background-repeat: no-repeat; color: #2b59a8; font-family: Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px;"><blockquote><blockquote><blockquote><blockquote><blockquote><blockquote><blockquote><p class="fuente" style="color: #002d59; font-family: Tahoma, Geneva, sans-serif; font-size: 12px; font-weight: bold; text-align: center;"><br /></p></blockquote></blockquote></blockquote></blockquote></blockquote></blockquote></blockquote></div><div class="content" style="padding: 10px 0px;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh9UaR3nSHqXp3jrcM3vrAIUngCn7JHkhTSWLHa_0thF6a89cUXxR8kfxucO6Jgt_HDZkuiSXPzMDZ0Dnrf-KjkbEuwaIFfKh61sinDLiBboLNS4hMOhs-egBzWqHEOZpRTKQcxZiy4hyZrt9bSTCX1p8gFaS4BQI6QXNF7zZB_NFpgVLX8HHsPVdxgAg/s567/Virgen_de_Luj%C3%A1n-imagen_original.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="567" data-original-width="383" height="449" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh9UaR3nSHqXp3jrcM3vrAIUngCn7JHkhTSWLHa_0thF6a89cUXxR8kfxucO6Jgt_HDZkuiSXPzMDZ0Dnrf-KjkbEuwaIFfKh61sinDLiBboLNS4hMOhs-egBzWqHEOZpRTKQcxZiy4hyZrt9bSTCX1p8gFaS4BQI6QXNF7zZB_NFpgVLX8HHsPVdxgAg/w303-h449/Virgen_de_Luj%C3%A1n-imagen_original.jpg" width="303" /></a></div><br /><table align="center" border="0" style="color: #2b59a8; font-family: Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; width: 603px;"><tbody><tr><td width="113"><br /></td><td width="113"><br /></td><td width="113"><br /></td><td width="113"></td><td width="113"></td><td width="113"></td></tr></tbody></table><h1 class="subtitulos" style="color: #003366; font-family: "Palatino Linotype", "Book Antiqua", Palatino, serif; font-size: 20px; font-weight: bolder; text-align: center;"><a id="historia" name="historia"></a>Historia de Nuestra Señora de Luján</h1><blockquote style="color: #2b59a8; font-family: Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif;"><table align="left" border="0" style="font-size: 16px; width: 200px;"><tbody><tr><td><img height="291" hspace="10" src="https://www.corazones.org/maria/lujan/virgen1.jpg" vspace="10" width="205" /></td></tr></tbody></table><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">Hacia el año 1630, un cierto portugués, de nombre Antonio Faría de Sá, hacendado de Sumampa, jurisdicción de Córdoba del Tucumán, pidió a un amigo suyo, Juan Andrea, marino, que le trajese del Brasil una imagen de la Concepción de María Santísima con el propósito de venerarla en la Capilla que estaba fabricando en su estancia. Juan Andrea cumplió el encargo y le trajo no una, sino dos imágenes de Nuestra Señora, que llegaron al puerto de Buenos Aires. Una, según el pedido, era de la Purísima Concepción; la otra, del título de la Madre de Dios con el niño Jesús dormido entre los brazos. Desde luego entendieron los arrieros tal disposición del Cielo de que la imagen de la Virgen encerrada en tal cajón debía quedarse en aquel paraje y así siguieron con la otra a su destino.</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">Ambas imágenes fueron colocadas en dos cajoncillos y subidas a una carreta. Al llegar a las orillas del Río Luján, en la estancia de Rosendo, los troperos se detuvieron allí para pasar la noche. Al día siguiente, una clara mañana de Mayo, queriendo proseguir el camino no pudieron mover la carreta. Admirados de la novedad pasaron a individualizar la causa y declaró el conductor del convoy: “Aquí vienen dos cajones con dos bultos de la Virgen, que traigo recomendados para una capilla de Sumampa”. Cuando abrieron el cajón, hallaron una bella imagen de Nuestra Señora de la Concepción, de media vara de alto y con las manos juntas ante el pecho. Luego de venerar la Santa Imagen la llevaron en procesión a la casa de Rosendo y sus dueños le levantaron un humilde altar. Fue entonces cuando un joven negro llamado Manuel- dijo: “Sáquese de la carreta uno de los cajones y observemos si camina”. Así se hizo, pero en vano. “Truéquense los cajones”, replicó él mismo. Entonces ocurrió que al cambiar los cajones y al tirar los bueyes la carreta se movió sin dificultad.</p><p class="subtitulos" style="color: #003366; font-family: "Palatino Linotype", "Book Antiqua", Palatino, serif; font-size: 20px; font-weight: bolder; text-align: center;"><a id="ermita" name="ermita"></a>La Ermita de la Virgen</p><table align="right" border="0" style="font-size: 16px; width: 200px;"><tbody><tr><th height="8" scope="row" width="2"><img height="253" hspace="10" src="https://www.corazones.org/maria/lujan/ERMITA.jpg" vspace="10" width="341" /></th></tr></tbody></table><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">La Imagen de Nuestra Señora estuvo por algún tiempo guardada y venerada en la pequeña habitación de la casa de campo del Rosendo, adornada ahí con todo el decoro y respeto posible. Pero muy pronto los dueños de la estancia quisieron levantar a la milagrosa Imagen una Capilla que estaría lista hacia mediados de 1633. Fue abierta a los numerosos peregrinos que allí acudían, atraídos por las gracias que la Virgen Santísima dispensaba a sus devotos. Su construcción sería muy rústica y no pasaría de un modesto rancho, con paredes de barro, techo de paja y piso natural de tierra y por todo lujo un revoque de blanqueo; y el pequeño altar tendría una sencillez primitiva y un poco arriba del mismo estaría colocada la Santa Imagen. La Capilla o Ermita de los Rosendo no tendría más de cinco varas de largo por tres de ancho.</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: justify;">El mercedario Pedro de Santa María relata: “la Santa Imagen estuvo en lo de dicho Rosendo, en un Oratorio muy corto y muy venerada la Imagen de todo el Pago. Y dicho Rosendo dedicó un negro llamado Manuel al culto de la Imagen, quien cuidaba de la lámpara de dicha Señora, que incesantemente ardía”.</p><p class="subtitulos" style="color: #003366; font-family: "Palatino Linotype", "Book Antiqua", Palatino, serif; font-weight: bolder; text-align: center;"><a id="ana" name="ana"></a>Ana de Matos</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">Hacia el año 1671, Ana de Matos, mujer acaudalada de Buenos Aires, que conocía de cerca el milagro deLuján, dolorida por el abandono en que quedaba la Santa Imagen, se acercó al Cura de la Catedral, Presbítero Juan de Oramas, medio hermano del Pbro. Diego Rosendo de Trigueros, para pedírsela o comprársela. Debido a la soledad de los campos y sin materiales convenientes no fue fácil construir una Capilla por lo que se procuró un modesto Oratorio, junto a la casa de Doña Matos. Al cuidado del culto fue puesto el Negro Manuel, su fiel servidor. Hacia el año 1677 empezó la obra de la Nueva Capilla construida con material de ladrillos cocidos y se concluyó hacia 1685 celebrando la colocación de la Imagen en su nicho.</p><table align="right" border="0" style="font-size: 16px; width: 200px;"><tbody><tr><td><img height="189" hspace="10" src="https://www.corazones.org/maria/lujan/ana_matos_foto.gif" vspace="10" width="316" /></td></tr></tbody></table><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">El traslado, desde la antigua ermita hasta la casa de doña Matos se cumplió cerca del 8 de diciembre, como preparación a una nueva celebración de la Purísima Concepción. Participaron el Obispo de Buenos Aires Cristóbal de la Mancha y Velazco (1646-1673) y el Gobernador Martínez de Salazar. El 2 de octubre de 1682 doña Ana dona tierras a la Santa Imagen de Luján en estos términos: “Porque tengo mucho amor a la advocación de Nuestra Señora de la Limpia Concepción y a su Santa Imagen hago gracia y donación a dicha Imagen de todo el sitio que necesitare para la fábrica de su capilla…”. Hace la donación con la condición de que la Imagen ha de estar perpetuamente en dichas tierras; así se convertía en oficial y pública la Capilla de Nuestra Señora al pasar al dominio de la Iglesia la posesión de ese lugar sagrado y también daba origen y fundamento a la verdadera fundación de la actual ciudad de Luján.<br /><br />Doña Ana de Matos murió el 25 de enero de 1698</p><p class="subtitulos" style="color: #003366; font-family: "Palatino Linotype", "Book Antiqua", Palatino, serif; font-size: 20px; font-weight: bolder; text-align: center;"><a id="manuel" name="manuel"></a>El Negro Manuel</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">Rosendo dedicó a un negro llamado Manuel al culto de la Imagen quien había sido testigo del milagro. Hacia el año 1638 contrae matrimonio con una mujer criolla, llamada Beatriz, esclava de la familia González Filiano. El matrimonio fue celebrado en la humilde Ermita de la Concepción del río Luján. Beatriz fue una fiel compañera del negro Manuel y lo secundó plenamente en el empeño por mantener vivo el culto a la Santísima Virgen en la apartada Ermita de Rosendo. Beatriz falleció antes de 1670.</p><table align="left" border="0" style="font-size: 16px; width: 200px;"><tbody><tr><th scope="row"><img height="185" hspace="10" src="https://www.corazones.org/maria/lujan/manuel_foto.gif" vspace="10" width="288" /></th></tr></tbody></table><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">Del Negro Manuel, dicen las crónicas hacia el año 1648, que era de “una rara calidez y simplicidad” y que cumplió fielmente el encargo que recibiera de su primitivo amo, el conductor de las Santas Imágenes, al decirle “que era de la Virgen y que no tenía otro amo a quien servir que a la Virgen Santísima”. Por su fe en Dios el negro Manuel “con el sebo de las velas que ardían en presencia de la Santa Imagen de María</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">Santísima obraba prodigiosas curaciones en varios enfermos que de partes diferentes concurrían a la Capilla”: Tales curaciones las cumplía el negro esclavo sin llamar la atención de nadie, más que de la gente sencilla y devota de la Santa Virgen.</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">Hacia 1681, cuando todavía la Santa Imagen de la Virgen se hallaba en el Oratorio de Doña Matos y se estaba levantando la Capilla, ocurren hechos milagrosos sobre el negro Manuel que hallaba a la Virgen Santísima llena de rocío muchas mañanas, y con abrojos en el vestuario, y que empezaba él a decirle que qué necesidad tenía de salirse de su nicho, siendo poderosa para obrar cualquier maravilla, sin salirse de él. Y también esta otra frase que se le apropia “¿Cómo es que sos tan amiga de los pecadores, que salís en busca de ellos, cuando ves que te tratan tan mal?</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">Su muerte acaeció probablemente en 1686. “Murió el Negro Manuel en santidad, por cuyo mérito es tradición que logró su cuerpo sepultura detrás del Altar Mayor del Santuario, descansando a los pies de su bien amada Imagen de Nuestra Señora de Luján."</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">“El negro Manuel vestido de un costal a raíz de las carnes, y criando barba larga a manera de ermitaño, ayudó no poco a la prosecución de la obra de la Capilla, y después continuó en servicio de la gran Señora hasta la ancianidad decrépita. Hallándose en la última enfermedad dijo un día que su Ama le había revelado que había de Morir en viernes y que el Sábado siguiente lo llevaría a la gloria. En efecto, su muerte aconteció el día mismo que había dicho.”</p><p class="subtitulos" style="color: #003366; font-family: "Palatino Linotype", "Book Antiqua", Palatino, serif; font-size: 20px; font-weight: bolder; text-align: center;"><a id="padre" name="padre"></a>El Padre Montalbo</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">Por los años 1684 sucedió que el Padre Pedro Montalbo enfermó gravemente de unos ahogos asmáticos que en poco tiempo le redujeron a tísico confirmado. Fue entonces cuando decidió ir a visitar a Nuestra Señora con ánimo de vivir o morir en su compañía.</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">Poco antes de llegar a la vivienda de doña Matos, era tan mal el estado en el que se encontraba que lo dieron por muerto.Lo llevaron como pudieron y el negro Manuel le ungió en el pecho con el sebo de la</p><table align="right" border="0" style="font-size: 16px; width: 200px;"><tbody><tr><td><img height="210" hspace="10" src="https://www.corazones.org/maria/lujan/p_montalbo.gif" vspace="10" width="322" /></td></tr></tbody></table><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">lámpara y de esa manera volvió en sí. Luego le dijo que creyese que se iba a sanar perfectamente de su enfermedad, porque su Ama (así llamaba a la Virgen) lo quería como su primer Capellán, y que así había de suceder.</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">Luego, Manuel, tomó de los abrojos que solía guardar al despearlos del vestuario de la Imagen los mezcló con un poca de barro que sacudía de sus fimbrias, y realizó un cocimiento. Se lo dio de beber al Padre Pedro en nombre de la Santísima Virgen y con solo este remedio quedó libre de sus ahogos y enteramente sano. En agradecimiento don Pedro se quedó como Capellán de la Virgen y la sirvió diez años continuos con singular devoción y esmero, asumiendo la construcción de la capilla.</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">El nuevo Capellán prosiguió la obra con tal empeño que en 1685 la Imagen fue colocada en la nueva Capilla, conocida como la Capilla de Montalbo, ubicada en lo que es hoy la intersección de las calles San Martin y 9 de julio, a metros de la actual Basílica. Murió el 1 de febrero de 1701. En sede vacante, el Cabildo Eclesiástico de Buenos Aires creó el 23 de octubre de 1730, la parroquia de Nuestra Señora de Luján. Como primer párroco fue nombrado el doctor José de Andújar, quien ya actuaba como colaborador en esta Capellanía. Permaneció hasta 1738, año en que pasó a la Catedral de Buenos Aires.</p></blockquote><p> <span class="mw-headline" id="Nuestra_Señora_de_Luján_en_la_Historia_argentina" style="font-family: sans-serif; font-size: 1.2em;">Nuestra Señora de Luján en la Historia argentina</span></p><p style="background-color: white; color: #202122; font-size: 14px; margin: 0.5em 0px; text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">El primer santuario dedicado a Nuestra Señora de Luján se inauguró el 8 de diciembre de 1763 y en él hicieron profesión de fe y se encomendaron buena parte de los próceres argentinos durante la época de la emancipación: <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Manuel_Belgrano" style="background: none; color: #3366cc; overflow-wrap: break-word; text-decoration-line: none;" title="Manuel Belgrano">Manuel Belgrano</a>, <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Jos%C3%A9_de_San_Mart%C3%ADn" style="background: none; color: #3366cc; overflow-wrap: break-word; text-decoration-line: none;" title="José de San Martín">José de San Martín</a>, <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Cornelio_Saavedra" style="background: none; color: #3366cc; overflow-wrap: break-word; text-decoration-line: none;" title="Cornelio Saavedra">Cornelio Saavedra</a>, <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Domingo_French" style="background: none; color: #3366cc; overflow-wrap: break-word; text-decoration-line: none;" title="Domingo French">Domingo French</a>, <a class="mw-redirect" href="https://es.wikipedia.org/wiki/Nicol%C3%A1s_de_la_Quintana" style="background: none; color: #3366cc; overflow-wrap: break-word; text-decoration-line: none;" title="Nicolás de la Quintana">Nicolás de la Quintana</a> y otros líderes y caudillos de la independencia le tributaron el homenaje de su reconocimiento.</span></p><p style="background-color: white; color: #202122; font-size: 14px; margin: 0.5em 0px; text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">Al dirigirse al <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Expedici%C3%B3n_de_Belgrano_al_Paraguay" style="background: none; color: #3366cc; overflow-wrap: break-word; text-decoration-line: none;" title="Expedición de Belgrano al Paraguay">Paraguay al mando de una expedición</a>, Manuel Belgrano se detuvo en Luján varios días, mandó celebrar una misa cantada el 27 de septiembre de 1810 e hizo varias visitas a Nuestra Señora en el camarín.</span></p><p style="background-color: white; color: #202122; font-size: 14px; margin: 0.5em 0px; text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">Además de rendirle homenaje por su participación en la <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Guerra_de_la_Independencia_Argentina" style="background: none; color: #3366cc; overflow-wrap: break-word; text-decoration-line: none;" title="Guerra de la Independencia Argentina">gesta de la independencia</a>, Belgrano era recordado con especial afecto por haber residido en Luján durante 1814 y haber consagrado trofeos de guerra a la Virgen de la villa. Entre ellos se cuentan las dos banderas de división realistas arrebatadas por el <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Ej%C3%A9rcito_del_Norte_(Provincias_Unidas_del_R%C3%ADo_de_la_Plata)" style="background: none; color: #3366cc; overflow-wrap: break-word; text-decoration-line: none;" title="Ejército del Norte (Provincias Unidas del Río de la Plata)">Ejército del Norte</a> al ejército del general <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/P%C3%ADo_Trist%C3%A1n" style="background: none; color: #3366cc; overflow-wrap: break-word; text-decoration-line: none;" title="Pío Tristán">Pío Tristán</a> en la <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Batalla_de_Salta" style="background: none; color: #3366cc; overflow-wrap: break-word; text-decoration-line: none;" title="Batalla de Salta">Batalla de Salta</a>, y que Belgrano destinó a Nuestra Señora de Luján en acción de gracias por su protección.</span></p><blockquote class="flexquote" style="background-color: #f9f9f9; border-left: 3px solid rgb(200, 204, 209); color: #202122; display: flex; flex-direction: column; font-size: 12.6px; margin: 1em 4em; padding: 0.4em 0.8em;"><div class="flex" style="display: flex; flex-direction: row; margin-top: 0px;"><div class="quote" style="width: 633.45px;"><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">Por la patria al señor presidente y demás señores del I. C. J. y R. de la villa de Luján / General del Ejército Auxiliador del Perú/</span></div><p style="margin: 0.5em 0px; text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">...<br /></span></p><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">Remito a V. S. dos banderas de división, que en la acción del 20 de febrero se arrancaron de la mano del enemigo, a fin de que sirva presentarlas a los pies de Nuestra Señora, a nombre del ejército de mi mando en el templo de ésa, para que se haga notorio el reconocimiento que mis hermanos de armas y yo estamos a los beneficios que el Todopoderoso nos ha dispensado por su mediación, y exciten con su vista la devoción de los fieles para que siga concediéndonos su gracia. Dios guarde V. S. muchos años.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">Jujuy, 3 de mayo de 1813.</span></div></div></div><div class="cite" style="margin-bottom: 0px; text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">Manuel Belgrano</span></div></blockquote><p style="background-color: white; color: #202122; font-size: 14px; margin: 0.5em 0px; text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">También el coronel Domingo French fue gran devoto de la Virgen de Luján: la nombró patrona de su Regimiento N.º 3 de Infantería, y le donó dos de las banderas conquistadas en el <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Sitio_de_Montevideo_(1812-1814)" style="background: none; color: #3366cc; overflow-wrap: break-word; text-decoration-line: none;" title="Sitio de Montevideo (1812-1814)">segundo sitio de Montevideo</a>.</span></p><p style="background-color: white; color: #202122; font-size: 14px; margin: 0.5em 0px; text-align: justify;"><span style="font-family: arial;">En 1816, luego del <a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Cruce_de_los_Andes" style="background: none; color: #3366cc; overflow-wrap: break-word; text-decoration-line: none;" title="Cruce de los Andes">cruce de los Andes</a> y de liberar al pueblo chileno, y antes de embarcarse para iniciar su campaña al Perú, el general José de San Martín visitó el Santuario de Luján para encomendarse a Nuestra Señora. En 1823, de regreso de la gesta libertadora volvió a visitar el Santuario de Luján y dedicó a la Virgen María una de sus espadas.</span></p><p class="subtitulos" style="color: #003366; font-family: "Palatino Linotype", "Book Antiqua", Palatino, serif; font-size: 20px; font-weight: bolder; text-align: center;"><a id="juan" name="juan"></a>Don Juan De Lezica y Torrezuri</p><blockquote><table align="right" border="0" style="color: #2b59a8; font-family: Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; width: 200px;"><tbody><tr><td><img height="343" hspace="10" src="https://www.corazones.org/maria/lujan/don_juan.jpg" vspace="5" width="194" /></td></tr></tbody></table><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">El Alférez real Don Juan de Lezica y Torrezuri, toda una personalidad. Desde 1750, en que ejerció el cargo de Regidor del Cabildo de Buenos Aires, hasta 1776 en que desempeñó las funciones de Juez Comisario de la Real Audiencia, Lezica había ejercido empleos de dignidad. Habiendo recorrido casi toda América, se radicó finalmente en La Paz (Bolivia). Después de haber sido feliz en sus negocios y expediciones, enfermó y se vino a Buenos Aires. Desahuciado por los médicos, recordó los prodigios de la Virgen de Luján. A Ella acudió con confianza. Recuperó su salud (1737). Curado ya, Lezica volvió a sus negocios. Once años después, nuevamente enfermo, retornó a Luján. Otra vez la Virgen lo curó. Comprendió ahora que tenía una misión de gratitud que cumplir. El entonces Capellán Pbro. Carlos Vejarano le expuso la necesidad de erigir un templo a la Santa Imagen, la que en ese momento se encontraba en un galpón que reemplazaba la Capilla de Montalbo, venida abajo. Lezica se ofreció para ello.</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">Enterado el Obispo de Buenos Aires, Mons. Marcelino y Agramonte de las cualidades y habilidades de este Alférez Real, lo nombró Director Administrador de la obra del nuevo templo, con el título, los honores y preeminencias que las Bulas pontificias y las leyes españolas le acordaban como Fundador, bienhechor y síndico del Santuario de Nuestra Señora de Luján. Luego de vencer inmunerables dificultades de orden legal, Lezica, asesorado por los arquitectos D. Antonio Mazella y D. Joaquín Marini, comenzó la construcción del nuevo Santuario el 24 de agosto de 1754, cavándose sus cimientos hasta la tosca, y fue argamasado en su mayor parte con cal de Córdoba y una arena gruesa y especial que la tradición atribuye a un milagro de la Virgen que fuese encontrada en las inmediaciones, cuando los maestros de obra se hubieron convencido de que era imposible hacer la mezcla con la tierra de esos parajes.</p><p class="subtitulos" style="color: #003366; font-family: "Palatino Linotype", "Book Antiqua", Palatino, serif; font-size: 20px; font-weight: bolder; text-align: center;"><a id="basilica" name="basilica"></a>Construcción de la gran Basílica</p><table align="left" border="0" style="color: #2b59a8; font-family: Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; width: 200px;"><tbody><tr><th scope="row"><img height="245" hspace="10" src="https://www.corazones.org/maria/lujan/construccion_lujan.jpg" vspace="5" width="358" /></th></tr></tbody></table><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">El 25 de mayo de 1889, el P. Jorge María Salvaire tomaba posesión como Párroco de Luján y Capellán de la Virgen. Después de vencer muchas dificultades, el 4 de mayo de 1890, trazados ya los planos y elegido el estilo gótico, dieron comienzo las obras de la actual Basílica.</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">La aprobación alentadora del Arzobispo, que asumió toda la responsabilidad, lo orientaba a no gastar en la construcción, más de lo que entrara. El entusiasmo creado, propalado por la revista La Perla del Plata-, que había sido fundada el 6 de enero de ese mismo año, fue tal que, sin aportes estatales, con la sola contribución de los fieles, los cimientos se hundieron en la tierra y los nuevos muros empezaron a aflorar y crecer.</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">Planos, dependencias varias -hornos de ladrillos, herrerías, taller de piedras, carpintería, etc. Todo fue previsto y montado. Cuando la Comisión objetó los planos por lo grandioso de la construcción, dijo el Arzobispo Aneiros.</p><table align="right" border="0" style="color: #2b59a8; font-family: Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; width: 200px;"><tbody><tr><td><img height="229" hspace="10" src="https://www.corazones.org/maria/lujan/foto_basilica.jpg" width="387" /></td></tr></tbody></table><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">La Virgen quiere este templo. Y el Pueblo argentino, cuando sabe de qué se trata, es muy generoso. Sabiendo que se trata de elevar a su Madre del Cielo una iglesia digna de Ella, se mostrará generoso. Tres años después, en 1897, León XIII creó el Obispado de La Plata -Monseñores Espinosa y Terrero- continuaron estimulando la colosal empresa. En 1904, en un marco de fervorosa solemnidad, la Sagrada Imagen de Luján fue trasladada desde el Santuario de Lezica al nuevo Camarín. En 1910, Mons. Terrero bendijo solemnemente las naves de la Basílica, habilitándolas para las celebraciones culturales mientras se continuaba la construcción del resto. El grandioso órgano de la Basílica, construido en la casa Cavaillé-Coll de París, de 49 registros reales, fue inaugurado a mediados de 1911.</p><p class="subtitulos" style="color: #003366; font-family: "Palatino Linotype", "Book Antiqua", Palatino, serif; font-size: 20px; font-weight: bolder; text-align: center;">Tricentenario del milagro</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">La aprobación alentadora del Arzobispo, que asumió toda la responsabilidad, lo orientaba a no<br />gastar en la construcción, más de lo que entrara. El entusiasmo creado, propalado por la revista -La Perla del Plata-, que había sido fundada el 6 de enero de ese mismo año, fue tal que, sin aportes estatales, con la sola contribución de los fieles, los cimientos se hundieron en la tierra y los nuevos muros empezaron a aflorar y crecer.</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">Con entusiasmo inigualable y en un clima indescriptible de fervor y devoción marianos en todos los niveles, fueron celebrados los trescientos años del Milagro de Luján. Todo el año 1930 fue dedicado a rememorar y agradecer el evento religioso de 1630.</p><table align="right" border="0" style="color: #2b59a8; font-family: Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; width: 200px;"><tbody><tr><td><img height="160" src="https://www.corazones.org/maria/lujan/milagro_foto.gif" width="248" /></td></tr></tbody></table><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">Pero se eligió mes de octubre como tiempo más apropiado. Se consagró una semana entera de solemnidades y celebraciones.</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">Las notas y tañidos del sonoro campanario constantemente invitaban a fiesta. Se abrió la -Gran Semana Lujanense del Tricentenario-, domingo 5 de octubre, con la proclamación de Nuestra Señora de Luján como Patrona de las tres Repúblicas del Plata: Argentina, Paraguay y Uruguay.</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">A principios de 1930, Monseñor Francisco Alberti, Obispo diocesano de La Plata y de Luján, había solicitado en nombre de todo el Episcopado Argentino, Uruguayo y Paraguayo al Papa Pío XI, que se dignara declarar oficialmente a la Virgen de Luján Patrona de las tres Repúblicas. El 5 de octubre el mismo Obispo platense, en ausencia del Arzobispo de Buenos Aires, Monseñor Bottaro, postrado por la enfermedad, asumió la representación de todos los Arzobispos, Obispos de los tres países y proclamó ( por bula de Pío XI, del 8 de setiembre de 1930), a la Virgen de Luján como Patrona Celestial ante Dios. </p></blockquote><p> </p><blockquote><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; text-align: justify;">Enfrente de la Basílica, colmando la Plaza Belgrano, Monseñor De Andrea, Obispo Titular de Temnos, enardeció a la multitud con su verbo cálido y vibrante y luego, Monseñor Dionisio Napal, tomó el juramento multitudinario, aceptando a María de Luján como Patrona y Celestial Protectora del Pueblo Argentino. Imponente fue el gesto y el grito. A indicación de Mons. Napal, con la mirada fija en la Basílica y con el brazo derecho en alto, resonó por tres veces el sí juramos de fidelidad a Dios y a la Virgen. Las campanas (fabricadas en Milán), se echaron a vuelo, y la banda entonó los himnos patrios de las tres Repúblicas. Junto al trono de la Madre, los venerables Pastores de las Iglesias Argentina, Uruguaya y Paraguaya, para depositar allí los anhelos y votos de sus pueblos. El Nuncio Apostólico, Mons. Felipe Cortesi, Delegado Papal para estas solemnidades, celebró el Pontifical. Mons. Aragone, Arzobispo de Montevideo, ocupó la Cátedra Sagrada. Actuó en la parte coral la Sociedad Polifónica Romana, bajo la dirección de Monseñor Rafael Casimiro Casimiri.</p><p><span class="tipodeletra" style="text-align: justify;"></span></p><div style="text-align: justify;"><span style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div><span style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif;"><div style="text-align: justify;">La visita del Legado Pontificio a Luján, el 15 de octubre de 1934, Cardenal Eugenio Pacelli, rubricó un día glorioso en los anales de preclaros peregrinos. "Nuestra Señora de Luján fue declarada Patrona Oficial del XXXII Congreso Eucarístico Internacional". A la Virgen de Luján le fue dedicado el sábado 13 de octubre.</div></span><p></p></blockquote><p class="subtitulos" style="color: #003366; font-family: "Palatino Linotype", "Book Antiqua", Palatino, serif; font-size: 20px; font-weight: bolder; text-align: justify;">Misión de Buenos Aires</p><blockquote style="color: #2b59a8; font-family: Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px;"><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: justify;">En 1960 la Capital Federal, con el Gran Buenos Aires, vivieron días extraordinarios de gracia y misericordia celestiales. Dos mil misioneros argentinos y extranjeros, por mandato de los Obispos se lanzaron con entusiasmo a sembrar la semilla del Evangelio. Pero no fueron solos.<br /></p><table align="left" border="0" style="width: 200px;"><tbody><tr><td><img height="219" hspace="10" src="https://www.corazones.org/maria/lujan/pueblo_argentino.jpg" width="306" /></td></tr></tbody></table><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: justify;">El 28 de septiembre salió de la Basílica de Luján la auténtica Imagen de Nuestra Señora en plan de Misionera. Rodríguez, Morón, Lomas de Zamora, Avellaneda, Quilmes la recibieron con entusiasmo exultante entre aplausos, cantos, bandas de música, lágrimas de emoción... Era la primera vez que llegaba por esos pueblos, semejante Misionera que convocaba multitudes y las dirigía al encuentro y reconciliación con Jesucristo Redentor y Salvador de los hombres.<br /></p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: justify;">De la periferia, saliendo de Avellaneda, la Santa Imagen se dirigió lentamente en blanco carruaje a la Capital Federal. Imponentes eran las multitudes que en cada barriada la aguardaban.</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: justify;">Según los diarios de entonces en algunos momentos del paso de la Virgen por los barrios, pareció que las casas quedaban deshabitadas. Sus moradores se habían volcado prácticamente en los balconesy aceras. Por un momento, estuvieron suspendidas todas las actividades. Peluquerías, bares, talleres mecánicos y carnicerías estaban desiertos. Sus dependientes, clientes y servidores, con sus ropas de trabajo, quisieron verla pasar y se ubicaron en el borde de las aceras.<br /></p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: justify;">Otra multitud que colmaba la Plaza de Mayo esperaba a la Virgen cuando llegaba a la Catedral Metropolitana . Monseñor Serafini hizo entrega de la S. Imagen al Cardenal Caggiano, Arzobispo de Buenos Aires. El Intendente de la Ciudad pronunció un discurso de bienvenida. Con este acto empezó propiamente la gran Misión llamada de Buenos Aires.</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: justify;">La Imagen continuó después visitando parroquias, estratégicamente elegidas, hasta el mes de noviembre. El poder de convocación que tiene la Virgen es verdaderamente asombroso. Así se manifestó en todas partes. Terminada la Gran Misión se pasó a vivir las jornadas del 1º Congreso Mariano Internacional. En los jardines de Palermo se levantó un altar, que fue el epicentro de los principales actos del Congreso.<br /></p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: justify;">El 14 de noviembre la S. Imagen de Luján, recibida por una inusitada multitud de su propia Ciudad, reingresaba a su querida Basílica.</p></blockquote><p class="subtitulos" style="color: #003366; font-family: "Palatino Linotype", "Book Antiqua", Palatino, serif; font-size: 20px; font-weight: bolder; text-align: center;"><a id="juanpablo" name="juanpablo"></a>Visita del Beato Juan Pablo II a la Basílica de Luján</p><blockquote style="color: #2b59a8; font-family: Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px;"><table align="right" border="0" style="width: 166px;"><tbody><tr><td><img height="274" hspace="10" src="https://www.corazones.org/maria/lujan/jpii.jpg" vspace="5" width="182" /></td></tr></tbody></table><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: justify;">"Vengo a orar por todos aquellos que han perdido la vida: por las víctimas de ambas partes; por las familias que sufren, como lo hice igualmente en Gran Bretaña. Vengo a orar por la paz, por una digna y justasolución del conflicto armado"</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: justify;">En la estación de ferrocarril, el Santo Padre fue recibido por el Obispo de Mercedes, Mons. Emilio Ogñenovich. Al aparecer el Santo Padre sobre la Avenida Ntra. Sra. De Luján se estremeció la multitud y comenzaron a agitarse las banderas y banderines entre vítores y aplausos. Luego, Juan Pablo II fue a postrarse ante la Sagrada Imagen de Luján, bajada expresamente desde su Templete dorado para ser colocada al lado del altar Papal.</p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: justify;">Su Santidad oró ante Ella. Luego se acercó a la bendita Imagen y le colocó el estuche abierto que contenía la Rosa de Oro que, con admiración inesperada de todos, como obsequio y distinción excepcional el Santo Padre ofrendaba a Nuestra Señora de Luján.</p><p class="subtitulos" style="color: #003366; font-family: "Palatino Linotype", "Book Antiqua", Palatino, serif; font-size: 20px; font-weight: bolder; text-align: center;"><a href="https://www.corazones.org/maria/lujan/pagina_principal_lujan.html#oracion" style="font-family: Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; font-weight: 400; text-align: start;"><img height="45" src="https://www.corazones.org/maria/lujan/boton_tesdt/oracion.gif" style="border: none;" width="113" /></a><span style="font-weight: bolder;"><br />Oración a Nuestra Señora de Luján</span><a id="papa" name="papa"></a></p><p class="subtitulos" style="color: #003366; font-family: "Palatino Linotype", "Book Antiqua", Palatino, serif; font-size: 20px; font-weight: bolder; text-align: center;"><a id="oracion" name="oracion"></a></p><p class="tipodeletra" style="color: #415863; font-family: "Trebuchet MS", Arial, Helvetica, sans-serif; text-align: justify;">Virgen María, Madre de Dios y Madre nuestra. Nuestra Señora de Luján, Patrona de nuestra Patria; hoy alzamos nuestros ojos y nuestros brazos hacia tí... Madre de la Esperanza, de los pobres y de los peregrinos, escúchanos...<br /><br />Hoy te pedimos por Argentina, por nuestro pueblo. Ilumina nuestra patria con el sol de justicia, con la luz de una mañana nueva, que es la luz de Jesús. Enciende el fuego nuevo del amor entre hermanos.<br />Unidos estamos bajo la celeste y blanca de nuestra bandera, y los colores de tu manto, para contarte que: hoy falta el pan material en muchas, muchas casas, pero también falta el pan de la verdad y la justicia en muchas mentes. Falta el pan del amor entre hermanos y falta el pan de Jesús en los corazones.<br /><br />Te pedimos madre, que extingas el odio, que ahogues las ambiciones desmedidas, que arranques el ansia febril de solamente los bienes materiales y derrama sobre nuestro suelo, la semilla de la humildad, de la comprensión. Ahoga la mala hierba de la soberbia, que ningún Caín pueda plantar su tienda sobre nuestro suelo, pero tampoco que ningún Abel inocente bañe con su sangre nuestras calles.<br />Haz madre que comprendamos que somos hermanos, nacidos bajo un mismo cielo, y bajo una misma bandera. Que sufrimos todos juntos las mismas penas y las mismas alegrías. Ilumina nuestra esperanza, alivia nuestra pobreza material y espiritual y que tomados de tu mano digamos más fuerte que nunca: ¡ARGENTINA! ¡ARGENTINA, CANTA Y CAMINA!</p><table align="center" style="width: 100px;"><tbody><tr><td><img height="253" src="https://www.corazones.org/z_imagenes/virgen_maria/lujan/lujan_image.jpg" width="167" /><br /><br /></td></tr></tbody></table></blockquote></div>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-45801413387809585392023-04-09T01:00:00.001-03:002023-04-09T01:00:00.257-03:00Domingo de Resurrección del Señor<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjo-iV9ksQVcCMMcJ6k_R0WVMbSZV6Zex1qFeC-BQ7XVi9MyngB-5nuT4JAbM8JQC90U69UF1KIedEb-HCn4CvefCLm7u6g3sRlM9NV57UVhnMqNR91Q-0bcrasr9VWxi_i80KW5fhGtmujmkwF_YN2OL8j7rW60g-veAZGw3_17aC3-0iVqr5Dp1Fc6Q/s900/Resucitado_RaffaellinoDelGarbo.webp" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="500" data-original-width="900" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjo-iV9ksQVcCMMcJ6k_R0WVMbSZV6Zex1qFeC-BQ7XVi9MyngB-5nuT4JAbM8JQC90U69UF1KIedEb-HCn4CvefCLm7u6g3sRlM9NV57UVhnMqNR91Q-0bcrasr9VWxi_i80KW5fhGtmujmkwF_YN2OL8j7rW60g-veAZGw3_17aC3-0iVqr5Dp1Fc6Q/w432-h240/Resucitado_RaffaellinoDelGarbo.webp" width="432" /></a></div><br /><p style="text-align: justify;"><br /></p><div style="text-align: center;"><div style="text-align: center;"><table bgcolor="#A28A76" border="1" bordercolor="#6C4084" bordercolordark="#6C4084" bordercolorlight="#000000" style="text-align: justify; width: 93%px;"><tbody><tr><td><table cellpadding="0" cellspacing="0" style="height: 100%px; width: 100%px;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><p style="text-align: left;"><span style="background-color: white;"><span style="color: #0b5394;"><span style="font-family: Arial;"><b>† </b> </span><b><span style="font-family: Arial;"><span lang="es">Sagrada Liturgia-</span></span></b><b><span style="font-family: Arial;">Domingo de Resurrección</span></b></span></span></p></td></tr></tbody></table></td></tr></tbody></table></div></div><div style="text-align: justify;"><span style="background-color: white;"><span style="color: white; font-family: Arial;"><br /></span><b><span style="text-transform: uppercase;"><span style="color: #5e0000; font-family: Arial;">DOMINGO DE RESURRECCIÓN<br /></span></span></b><a href="http://www.aciprensa.com/" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: #5e0000; font-family: Arial;">Aciprensa</span></a></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="background-color: white;"> </span></div><div style="text-align: justify;"><blockquote><p><span style="background-color: white; color: #5e0000; font-family: Arial;">El Domingo de Resurrección o Vigilia Pascual es el día en que incluso la iglesia más pobre se reviste de sus mejores ornamentos, es la cima del año litúrgico. Es el aniversario del triunfo de Cristo. Es la feliz conclusión del drama de la Pasión y la alegría inmensa que sigue al dolor. Y un dolor y gozo que se funden pues se refieren en la historia al acontecimiento más importante de la humanidad: la redención y liberación del pecado de la humanidad por el Hijo de Dios.<br /><br />Nos dice San Pablo: "Aquel que ha resucitado a Jesucristo devolverá asimismo la vida a nuestros cuerpos mortales". No se puede comprender ni explicar la grandeza de las Pascuas cristianas sin evocar la Pascua Judía, que Israel festejaba, y que los judíos festejan todavía, como lo festejaron los hebreos hace tres mil años, la víspera de su partida de Egipto, por orden de Moisés. El mismo Jesús celebró la Pascua todos los años durante su vida terrena, según el ritual en vigor entre el pueblo de Dios, hasta el último año de su vida, en cuya Pascua tuvo efecto la cena y la institución de la Eucaristía.<br /><br />Cristo, al celebrar la Pascua en la Cena, dio a la conmemoración tradicional de la liberación del pueblo judío un sentido nuevo y mucho más amplio. No es a un pueblo, una nación aislada a quien Él libera sino al mundo entero, al que prepara para el Reino de los Cielos. Las pascuas cristianas -llenas de profundas simbologías- celebran la protección que Cristo no ha cesado ni cesará de dispensar a la Iglesia hasta que Él abra las puertas de la Jerusalén celestial. La fiesta de Pascua es, ante todo la representación del acontecimiento clave de la humanidad, la Resurrección de Jesús después de su muerte consentida por Él para el rescate y la rehabilitación del hombre caído. Este acontecimiento es un hecho histórico innegable. Además de que todos los evangelistas lo han referido, San Pablo lo confirma como el historiador que se apoya, no solamente en pruebas, sino en testimonios.<br /><br />Pascua es victoria, es el hombre llamado a su dignidad más grande. ¿Cómo no alegrarse por la victoria de Aquel que tan injustamente fue condenado a la pasión más terrible y a la muerte en la cruz?, ¿por la victoria de Aquel que anteriormente fue flagelado, abofeteado, ensuciado con salivazos, con tanta inhumana crueldad?<br /><br />Este es el día de la esperanza universal, el día en que en torno al resucitado, se unen y se asocian todos los sufrimientos humanos, las desilusiones, las humillaciones, las cruces, la dignidad humana violada, la vida humana no respetada.<br /><br />La Resurrección nos descubre nuestra vocación cristiana y nuestra misión: acercarla a todos los hombres. El hombre no puede perder jamás la esperanza en la victoria del bien sobre el mal. ¿Creo en la Resurrección?, ¿la proclamo?; ¿creo en mi vocación y misión cristiana?, ¿la vivo?; ¿creo en la resurrección futura?, ¿me alienta en esta vida?, son preguntas que cabe preguntarse.<br /><br />El mensaje redentor de la Pascua no es otra cosa que la purificación total del hombre, la liberación de sus egoísmos, de su sensualidad, de sus complejos; purificación que , aunque implica una fase de limpieza y saneamiento interior, sin embargo se realiza de manera positiva con dones de plenitud, como es la iluminación del Espíritu , la vitalización del ser por una vida nueva, que desborda gozo y paz -suma de todos los bienes mesiánicos-, en una palabra, la presencia del Señor resucitado. San Pablo lo expresó con incontenible emoción en este texto : "Si habéis resucitado con Cristo vuestra vida, entonces os manifestaréis gloriosos con Él" (Col. 3 1-4).<br /><br /><span style="font-size: x-small;">Fuente: <a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/temporadas/semana_santa/domingo_resurreccion.htm" target="_blank">Corazones.org</a></span><br /> </span></p></blockquote></div>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-46071316695471901872023-04-08T04:00:00.004-03:002023-04-08T04:00:00.249-03:00Sábado Santo: la soledad de María<p style="text-align: justify;"> </p><div style="text-align: center;"><div style="text-align: center;"><table bgcolor="#A28A76" border="1" bordercolor="#6C4084" bordercolordark="#6C4084" bordercolorlight="#000000" style="text-align: justify; width: 93%px;"><tbody><tr><td><table cellpadding="0" cellspacing="0" style="height: 100%px; width: 100%px;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><p style="text-align: left;"><span style="background-color: white;"><span style="color: #741b47;"><span style="font-family: Arial;"><b>† </b> </span><b><span style="font-family: Arial;"><span lang="es">Sagrada Liturgia-Sábado Santo</span></span></b></span></span></p></td></tr></tbody></table></td></tr></tbody></table></div></div><div style="text-align: justify;"><span style="background-color: white;"><span style="color: white; font-family: Arial;"><br /></span><b><span style="text-transform: uppercase;"><span style="color: #5e0000; font-family: Arial;">SABADO</span></span></b><span style="text-transform: uppercase;"><b><span style="color: #5e0000; font-family: Arial;"> SANTO<br /></span></b></span><a href="http://www.aciprensa.com/" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: #5e0000; font-family: Arial;">Aciprensa</span></a></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="background-color: white;"> </span></div><div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgkFC2Nsf41RYB14SlOWtHKeK-oZ6DpsjMO2__3ugIDrs4elNXzQFq1DkP9620XLjyNw1uNJXHcxyU2CNxCWgutPRaSum1DaMwiagOkm3YD3F0IKfV56osRcGSd_EcnGd7RjqcIP69byBfWb8OJAtgyxiHI6-QsYqlgEx4SwxgU16ceGApUfP4gxYGs-Q/s630/michelangelo-s-pieta-.webp" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="630" data-original-width="630" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgkFC2Nsf41RYB14SlOWtHKeK-oZ6DpsjMO2__3ugIDrs4elNXzQFq1DkP9620XLjyNw1uNJXHcxyU2CNxCWgutPRaSum1DaMwiagOkm3YD3F0IKfV56osRcGSd_EcnGd7RjqcIP69byBfWb8OJAtgyxiHI6-QsYqlgEx4SwxgU16ceGApUfP4gxYGs-Q/s320/michelangelo-s-pieta-.webp" width="320" /></a></div><br /><span style="background-color: white;"><br /></span></div><div style="text-align: justify;"><blockquote><p><span style="background-color: white; color: #5e0000; font-family: Arial;">"Durante el Sábado santo la Iglesia permanece junto al sepulcro del Señor, meditando su pasión y su muerte, su descenso a los infiernos y esperando en oración y ayuno su resurrección (Circ 73).</span></p><p><span style="background-color: white; color: #5e0000; font-family: Arial;">Es el día del silencio: la comunidad cristiana vela junto al sepulcro. Callan las campanas y los instrumentos. Se ensaya el aleluya, pero en voz baja. Es día para profundizar. Para contemplar. El altar está despojado. El sagrario, abierto y vacío.<br /><br />La Cruz sigue entronizada desde ayer. Central, iluminada, con un paño rojo, con un laurel de victoria. Dios ha muerto. Ha querido vencer con su propio dolor el mal de la humanidad.<br /><br />Es el día de la ausencia. El Esposo nos ha sido arrebatado. Día de dolor, de reposo, de esperanza, de soledad. El mismo Cristo está callado. Él, que es el Verbo, la Palabra, está callado. Después de su último grito de la cruz "¿por qué me has abandonado"?- ahora él calla en el sepulcro.Descansa: "consummatum est", "todo se ha cumplido".<br /><br />Pero este silencio se puede llamar plenitud de la palabra. El anonadamiento, es elocuente. "Fulget crucis mysterium": "resplandece el misterio de la Cruz."<br /><br />El Sábado es el día en que experimentamos el vacío. Si la fe, ungida de esperanza, no viera el horizonte último de esta realidad, caeríamos en el desaliento: "nosotros esperábamos... ", decían los discípulos de Emaús.<br /><br />Es un día de meditación y silencio. Algo parecido a la escena que nos describe el libro de Job, cuando los amigos que fueron a visitarlo, al ver su estado, se quedaron mudos, atónitos ante su inmenso dolor: "se sentaron en el suelo junto a él, durante siete días y siete noches. Y ninguno le dijo una palabra, porque veían que el dolor era muy grande" (Job. 2, 13).<br /><br />Eso sí, no es un día vacío en el que "no pasa nada". Ni un duplicado del Viernes. La gran lección es ésta: Cristo está en el sepulcro, ha bajado al lugar de los muertos, a lo más profundo a donde puede bajar una persona. Y junto a Él, como su Madre María, está la Iglesia, la esposa. Callada, como él.<br /><br />El Sábado está en el corazón mismo del Triduo Pascual. Entre la muerte del Viernes y la resurrección del Domingo nos detenemos en el sepulcro. Un día puente, pero con personalidad. Son tres aspectos - no tanto momentos cronológicos - de un mismo y único misterio, el misterio de la Pascua de Jesús: muerto, sepultado, resucitado:<br /><br />"...se despojó de su rango y tomó la condición de esclavo...se rebajó hasta someterse incluso a la muerte, es decir conociese el estado de muerte, el estado de separación entre su alma y su cuerpo, durante el tiempo comprendido entre el momento en que Él expiró en la cruz y el momento en que resucitó. Este estado de Cristo muerto es el misterio del sepulcro y del descenso a los infiernos. Es el misterio del Sábado Santo en el que Cristo depositado en la tumba manifiesta el gran reposo sabático de Dios después de realizar la salvación de los hombres, que establece en la paz al universo entero".<br /><br /><b>Vigilia Pascual<br /></b><br />La celebración es el sábado por la noche, es una Vigilia en honor del Señor, según una antiquísima tradición (Ex. 12, 42), de manera que los fieles, siguiendo la exhortación del Evangelio (Lc. 12, 35 ss), tengan encendidas las lámparas como los que aguardan a su Señor cuando vuelva, para que, al llegar, los encuentre en vela y los haga sentar a su mesa.<br /><br />La Vigilia Pascual se desarrolla en este orden:<br /><br /><br /><b>Breve Lucernario<br /></b><br />Se bendice el fuego. Se prepara el cirio en el cual el sacerdote con un punzón traza una cruz. Luego marca en la parte superior la letra Alfa y en la inferior omega, entre los brazos de la cruz marca las cifras del año en curso. A continuación se anuncia el Pregón Pascual.<br /><br /><b>Liturgia de la Palabra<br /></b><br />En ella la Iglesia confiada en la Palabra y la promesa del Señor, media las maravillas que desde los comienzos realizó Dios con su pueblo.<br /><br /><b>Liturgia Bautismal<br /></b><br />Se llama a los catecúmenos, quienes son presentados ante el pueblo por sus padrinos: si son niños serán llevados por sus padres y padrinos. Se hace la renovación de los compromisos bautismales.<br /><br /><b>Liturgia de la Eucaristía<br /></b><br />Al acercarse ya el día de la Resurrección, la Iglesia es invitada a participar en el banquete eucarístico, que por su Muerte y Resurrección, el Señor preparó para su pueblo. En él participan por primera vez los neófitos.<br /><br />Toda la celebración de la Vigilia pascual se realiza durante la noche, de tal manera que no se vaya a comenzar antes de iniciarse la noche, o se termine la aurora del Domingo.<br /><br />La Misa, aunque se celebre antes de la media noche, es la Misa Pascual del Domingo de Resurrección. Los que participan en esta misa, pueden volver a comulgar en la segunda Misa de Pascua.<br /><br />El sacerdote y los ministros se revisten de blanco para Misa. Prepárense cirios para todos los que participan en la Vigilia.<br /><br /><br /></span></p><p><i><b style="background-color: white;"><span style="color: #5e0000; font-family: Arial;"><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/temporadas/semana_santa/semana_santa.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: #663300;">Regresar a la página de Semana Santa</span></a></span><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/temporadas/semana_santa/semana_santa.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: #663300; font-family: Verdana;">»»</span></a></b></i></p></blockquote><p>Fuente: <a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/temporadas/semana_santa/sabado_santo.htm" target="_blank">Corazones.org </a></p></div>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-89842712901245068572023-04-07T15:00:00.019-03:002023-04-07T15:00:00.235-03:00Pasión de Jesús meditada<div style="text-align: center;"><iframe allow="accelerometer; autoplay; clipboard-write; encrypted-media; gyroscope; picture-in-picture; web-share" allowfullscreen="" frameborder="0" height="290" src="https://www.youtube.com/embed/0nDCq3tYi2g" title="YouTube video player" width="500"></iframe></div><div style="text-align: center;"><br /></div><div style="text-align: center;"><span style="background-color: white; color: #050505; font-family: "Segoe UI Historic", "Segoe UI", Helvetica, Arial, sans-serif; text-align: start; white-space: pre-wrap;"><span style="font-size: medium;">La Pasión de Cristo de la Sagrada Familia </span></span></div><div style="text-align: center;"><span style="background-color: white; color: #050505; font-family: "Segoe UI Historic", "Segoe UI", Helvetica, Arial, sans-serif; text-align: start; white-space: pre-wrap;"><span style="font-size: medium;"><br /></span></span></div>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-7499264943466409602023-04-07T11:45:00.008-03:002023-04-07T22:40:49.822-03:00Hoy inicia la Novena a la Divina Misericordia <div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjvTq8kZ-e4yTnUXB-h2mjDDWEOXRY7fzdz3xj1dbD6Lsafgu-NAex9BK47bd0iLuFfL53zkCslPhm7li69f-zzokpeOmOGHnAgc7o6mjWpHSksOrmtRSLZQtLqNxzFtn17wrgyLf4IgDhAFKUzEKk6Y4Jl4HPvmxlShGVxlZ74UdnnNpS8du36pegQDQ/s900/NovenaDivinaMisericordia.webp" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-align: center;"><img border="0" data-original-height="500" data-original-width="900" height="217" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjvTq8kZ-e4yTnUXB-h2mjDDWEOXRY7fzdz3xj1dbD6Lsafgu-NAex9BK47bd0iLuFfL53zkCslPhm7li69f-zzokpeOmOGHnAgc7o6mjWpHSksOrmtRSLZQtLqNxzFtn17wrgyLf4IgDhAFKUzEKk6Y4Jl4HPvmxlShGVxlZ74UdnnNpS8du36pegQDQ/w391-h217/NovenaDivinaMisericordia.webp" width="391" /></a></div><p> </p><br /><p></p><h1 class="titulointerior" style="background-color: white; color: #2c5164; font-family: "Open Sans", Verdana, Helvetica, sans-serif; line-height: 1.2; margin: 0px; padding: 1px 5px 2px 0px;"><div class="responsive-wrapper" style="color: black; font-weight: 400; margin-right: 320px;"><div id="maincolumn" style="float: left; overflow: hidden; padding: 5px 0px; width: 736.8px;"><div class="noticia_imagen_contenedor" style="clear: both; margin-bottom: 15px; overflow: hidden; text-align: center;"><p style="margin: 0px 0px 15px; padding: 0px; text-align: justify;"><span style="font-size: small;">El próximo 16 de abril, Segundo Domingo de Pascua, </span></p><p style="margin: 0px 0px 15px; padding: 0px; text-align: justify;"><span style="font-size: small;">la Iglesia celebrará la Fiesta de la Divina Misericordia, </span></p><p style="margin: 0px 0px 15px; padding: 0px; text-align: justify;"><span style="font-size: small;">que tiene como objetivo principal hacer llegar </span></p><p style="margin: 0px 0px 15px; padding: 0px; text-align: justify;"><span style="font-size: small;">a los corazones de las personas el mensaje de que </span></p><p style="margin: 0px 0px 15px; padding: 0px; text-align: justify;"><span style="font-size: small;">Dios es Misericordioso.</span></p><p style="margin: 15px 0px; padding: 0px; text-align: justify;"><span style="font-size: small;">Eso quiere decir que siempre está dispuesto a perdonar </span></p><p style="margin: 15px 0px; padding: 0px; text-align: justify;"><span style="font-size: small;">y ama a todos: </span></p><p style="margin: 15px 0px; padding: 0px; text-align: justify;"><em><span style="font-size: small;">"y cuanto más grande es el pecador, tanto más grande </span></em></p><p style="margin: 15px 0px; padding: 0px; text-align: justify;"><span style="font-size: small;"><em>es el derecho que tiene a Mi misericordia" (Diario, 723)</em>.</span></p><div style="text-align: justify;"><span style="font-size: small;">“Deseo que la Fiesta de la Misericordia sea un refugio </span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-size: small;">y amparo para todas las almas y, especialmente, </span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-size: small;">para los pobres pecadores”, le dijo Jesús </span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-size: small;">a Santa Faustina Kowalska,</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-size: small;">la Apóstol de la Divina Misericordia.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-size: small;"> </span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-size: small;">“Las almas mueren a pesar de mi amarga Pasión. </span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-size: small;">Les ofrezco la última tabla de salvación, es decir, </span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-size: small;">la Fiesta de mi Misericordia. Si no adoran mi misericordia </span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-size: small;">morirán para siempre”, le dijo Cristo </span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-size: small;">a la santa en otra ocasión.</span></div><p style="margin: 15px 0px; padding: 0px; text-align: justify;"><span style="font-size: small;">A pocos días de esta gran fiesta, aquí una novena en su honor:</span></p><ul style="font-size: 18px; padding-left: 20px; text-align: start;"><li><a href="https://www.aciprensa.com/recursos/primer-dia-de-la-novena-a-la-divina-misericordia-2077/" style="color: #006699; text-decoration-line: none;">Primer día de la Novena a la Divina Misericordia</a></li><li><a href="https://www.aciprensa.com/recursos/segundo-dia-de-la-novena-a-la-divina-misericordia-2078/" style="color: #006699; text-decoration-line: none;">Segundo día de la Novena a la Divina Misericordia</a></li><li><a href="https://www.aciprensa.com/recursos/tercer-dia-de-la-novena-a-la-divina-misericordia-2079/" style="color: #006699; text-decoration-line: none;">Tercer día de la Novena a la Divina Misericordia</a></li><li><a href="https://www.aciprensa.com/recursos/cuarto-dia-de-la-novena-a-la-divina-misericordia-2080/" style="color: #006699; text-decoration-line: none;">Cuarto día de la Novena a la Divina Misericordia</a></li><li><a href="https://www.aciprensa.com/recursos/quinto-dia-de-la-novena-a-la-divina-misericordia-2081/" style="color: #006699; text-decoration-line: none;">Quinto día de la Novena a la Divina Misericordia</a></li><li><a href="https://www.aciprensa.com/recursos/sexto-dia-de-la-novena-a-la-divina-misericordia-2082/" style="color: #006699; text-decoration-line: none;">Sexto día de la Novena a la Divina Misericordia</a></li><li><a href="https://www.aciprensa.com/recursos/septimo-dia-de-la-novena-a-la-divina-misericordia-2083/" style="color: #006699; text-decoration-line: none;">Séptimo día de la Novena a la Divina Misericordia</a></li><li><a href="https://www.aciprensa.com/recursos/octavo-dia-de-la-novena-a-la-divina-misericordia-2084/" style="color: #006699; text-decoration-line: none;">Octavo día de la Novena a la Divina Misericordia</a></li><li><a href="https://www.aciprensa.com/recursos/noveno-dia-de-la-novena-a-la-divina-misericordia-2085/" style="color: #006699; text-decoration-line: none;">Noveno día de la Novena a la Divina Misericordia</a></li></ul><span style="font-size: 18px; text-align: left;">Fuente: </span><a href="https://www.aciprensa.com/noticias/hoy-inicia-la-novena-a-la-divina-misericordia-60685" style="font-size: 18px; text-align: left;" target="_blank">Aciprensa</a></div></div></div></h1>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-40148706084207521482023-04-07T03:00:00.017-03:002023-04-07T03:05:11.860-03:00Viernes Santo<div style="text-align: center;"><header class="entry-header" style="background-color: white; box-sizing: border-box; color: #444444; font-family: Lato, sans-serif; margin-bottom: 1.7em; text-align: start;"><h1 class="entry-title" style="border: 0px; box-sizing: border-box; clear: both; color: #2d2d2d; font-style: inherit; line-height: 1.2; margin: 0px; outline: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;"><span style="font-size: medium;">El Getsemaní interior</span></h1><div><span style="font-size: medium;"><br /></span></div><div><span style="font-size: medium;">Hora Santa</span></div><br /></header><div class="entry-content" style="background-color: white; border: 0px; box-sizing: border-box; color: #444444; font-family: Lato, sans-serif; margin: 0px 0px 1.7em; outline: 0px; padding: 0px; text-align: start; vertical-align: baseline;"><p style="border: 0px; box-sizing: border-box; font-family: inherit; font-style: inherit; font-weight: inherit; margin: 0px 0px 1.7em; outline: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;"></p><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: inherit; font-style: inherit; font-weight: inherit;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgeSStqy72-rmyR7bic_pzjGOny9fYt0Nw5NOltm4LOmj9eTQtcim_IcViPySWGwkc7s4LsF_dqopituNWCekJtN8YYUYAdkD2M1MQeb76XWrPU_S9RXIKL9aTS9nevqj3bpcjIXV1eVuNLhfrqEv23HJpiEgZNhOuH0zBSMtqWToQyGLtCT0UGwSIfGA" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="825" data-original-width="550" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEgeSStqy72-rmyR7bic_pzjGOny9fYt0Nw5NOltm4LOmj9eTQtcim_IcViPySWGwkc7s4LsF_dqopituNWCekJtN8YYUYAdkD2M1MQeb76XWrPU_S9RXIKL9aTS9nevqj3bpcjIXV1eVuNLhfrqEv23HJpiEgZNhOuH0zBSMtqWToQyGLtCT0UGwSIfGA" width="160" /></a></div>Como Jesús también uno acude regularmente a ese lugar llamado Getsemaní, ese lugar en que Él se encontraba con el Padre. Un lugar para orar ante las situaciones difíciles en las que necesitas una especial comunión con Dios.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: inherit; font-style: inherit; font-weight: inherit;">Jesús tomó consigo a Pedro, a Santiago y a Juan y comenzó a entristecerse y angustiarse. Estaba triste, sintiendo una tristeza mortal. Les invita a permanecer allí y a no dormirse. La situación se estaba volviendo cada vez más difícil, como nos sucede tantas veces a nosotros, cuando el panorama se ennegrece y no vemos la luz al final del túnel.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: inherit; font-style: inherit; font-weight: inherit;">Jesús se postró en tierra y oraba para que no tuviera que vivir aquel calvario siendo consciente de que por encima está la voluntad del Padre.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: inherit; font-style: inherit; font-weight: inherit;">Jesús abría su corazón en presencia de Dios consciente de que Él tiene para cada uno un plan, un propósito y que lo importante es cumplir esa voluntad en la propia vida.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: inherit; font-style: inherit; font-weight: inherit;">La respuesta de Dios pasó por encima de la voluntad de Cristo. Pero como las victorias se alcanzan con la oración, Dios le permitió a Jesús soportar la prueba porque Dios está siempre con el hombre en medio de la dificultad para sostenerlo y ayudarlo.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: inherit; font-style: inherit; font-weight: inherit;">Después de esa oración intensa, profunda y dolorosa Jesús se encontró a los discípulos dormidos. En el momento más complicado de su vida, en el sufrimiento más intenso, en la hora de la verdad, en la soledad más grande Jesús contaba solo con la presencia del Padre y el soplo del Espíritu.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: inherit; font-style: inherit; font-weight: inherit;">Todos, detrás de nuestras máscaras, de nuestras aparentes alegrías, de nuestras sonrisas de dentífrico, de nuestro mostrarnos como triunfadores tenemos nuestro propio Getsemaní interior en forma preocupación, de desengaño, de desencuentro, de dolor que vivimos sin poder comunicar. Y estamos anestesiados por ese dolor que duerme en nuestro corazón.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: inherit; font-style: inherit; font-weight: inherit;">Pero como Cristo en Getsemaní no estamos solos. La oración nos sostiene, el amor del Padre nos sostiene, el soplo del Espíritu nos sostiene, la esperanza nos sostiene.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: inherit; font-style: inherit; font-weight: inherit;">Cuando uno tiene un Getsemaní donde acudir para entregar sus cargas al Padre y tiene que enfrentarte a cargas difíciles que soportar cuenta con la oración de entrega al Padre. Es una plegaria que te permite orar sin desfallecer, orar para amar lo que Dios te envía. Dios la toma con sus manos y en su fidelidad ofrece una salida.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: inherit; font-style: inherit; font-weight: inherit;">Cuando reflexionas sobre tu propio Getsemaní comprendes cual es tu misión, llevar como Cristo tu sufrimiento y tu pobreza transformándola según la voluntad de Dios. Es la manera de abrir las puertas del cielo, esas puertas que tantas veces uno cierra a Dios en su corazón.</span></div><p></p><p style="border: 0px; box-sizing: border-box; font-family: inherit; font-style: inherit; font-weight: inherit; margin: 0px 0px 1.7em; outline: 0px; padding: 0px; text-align: justify; vertical-align: baseline;"><span style="font-family: inherit; font-style: inherit; font-weight: inherit;">¡Señor, quiero permanecer despierto contigo en el huerto de los olivos! ¡Quiero, Señor, entrar en comunión contigo en estas horas que todo se pone a prueba y el sufrimiento es tan tremendo! ¡Quiero unirme a Ti, Señor, en espíritu y en oración para ser capaz de comprender la grandeza de tu amor! ¡Necesito, Señor, que limpies mi corazón para que sea capaz de ver tu rostro afligido! ¡Quiero, Señor, sentirme cerca de Ti para velar contigo, para sentir tu amor, para amarte más, para aprender a sufrir, para alabar a Dios, para agradecer tantas cosas buenas que me suceden y comprender aquellas que no entiendo, para suplicar la voluntad del Padre, para escuchar el susurro del Espíritu, para no decir nada simplemente acompañándote! ¡Toca, Señor, ligeramente mi pobre corazón y llénalo de vida! ¡Te pido también, Señor, perdón porque no estuve en Getsemaní! ¡Soy de los que con frecuencia te abandonan, de los que les cuesta tomar decisiones, de los que la debilidad agrieta su vida, de los que no encuentran respuestas, de los que buscan y se tornan tristes si no encuentran, de los que la tentación les hace desertar, de los que a veces esperan de la oración y desesperan cuando no hay respuesta a sus palabras, de los que fracasan con frecuencia! ¡Pero hoy quiero mirarte, Jesús, sentarme a tu lado en Getsemaní, rezar contigo, acompañarte, arroparte, cuidarte! ¡No permitas que el miedo me aleje de Ti!</span></p><p style="border: 0px; box-sizing: border-box; font-family: inherit; font-style: inherit; font-weight: inherit; margin: 0px 0px 1.7em; outline: 0px; padding: 0px; text-align: justify; vertical-align: baseline;"><span style="font-family: inherit; font-style: inherit; font-weight: inherit;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="font-family: inherit; font-style: inherit; font-weight: inherit;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhwhmyY6yQ9B8izK0WTbDFtb0jQUGWhJ7cbFv7cseIxb6ya0EOl50TC6-U5Y5aii8gxfJL5cd10THoW2MGIc7k6cFK-M3s0QeuXSgzr2bZ9RFWmycGFSey0oDcEJF-n5HYIYgAceE9RCr_jrmzOkVEa7cNaMFiLhBbRRzVVtCsnfSeq7c8xRAyszzXwCQ" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" data-original-height="1200" data-original-width="1547" height="287" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEhwhmyY6yQ9B8izK0WTbDFtb0jQUGWhJ7cbFv7cseIxb6ya0EOl50TC6-U5Y5aii8gxfJL5cd10THoW2MGIc7k6cFK-M3s0QeuXSgzr2bZ9RFWmycGFSey0oDcEJF-n5HYIYgAceE9RCr_jrmzOkVEa7cNaMFiLhBbRRzVVtCsnfSeq7c8xRAyszzXwCQ=w370-h287" width="370" /></a></span></div><span style="font-family: inherit; font-style: inherit; font-weight: inherit;"><br /><span style="font-family: inherit; font-size: small; font-style: inherit; font-weight: inherit;">Fuente: </span><a href="https://orarconelcorazonabierto.wordpress.com/2018/01/23/el-getsemani-interior/" style="font-family: inherit; font-size: small; font-style: inherit; font-weight: inherit;" target="_blank">Orar con el corazón abierto</a></span><p></p></div></div><div style="text-align: center;"><br /></div><div style="text-align: center;"><iframe allow="accelerometer; autoplay; clipboard-write; encrypted-media; gyroscope; picture-in-picture; web-share" allowfullscreen="" frameborder="0" height="290" src="https://www.youtube.com/embed/9QsNcPCikLQ" title="YouTube video player" width="500"></iframe></div><p> </p><p><br /></p><div align="center" style="text-align: -webkit-center;"><div align="center"><table bgcolor="#A28A76" border="1" bordercolor="#6C4084" bordercolordark="#6C4084" bordercolorlight="#000000" style="width: 93%px;"><tbody><tr><td><table cellpadding="0" cellspacing="0" style="height: 100%px; width: 100%px;"><tbody><tr><td align="center"><p align="left"><span style="background-color: white;"><span style="color: #741b47;"><span style="font-family: Arial;"><b>† </b> </span><b><span style="font-family: Arial;"><span lang="es">Sagrada Liturgia-Viernes Santo</span></span></b></span></span></p></td></tr></tbody></table></td></tr></tbody></table><br /></div></div><div align="justify"><span style="background-color: white;"><span style="color: white; font-family: Arial;"><br /></span><span style="text-transform: uppercase;"><b><span style="color: #5e0000; font-family: Arial;">VIERNES</span></b></span><span style="text-transform: uppercase;"><b><span style="color: #5e0000; font-family: Arial;"> SANTO<br /></span></b></span><a href="http://www.aciprensa.com/" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: #5e0000; font-family: Arial;">Aciprensa</span></a></span></div><div align="justify"><span style="background-color: white;"> </span></div><div align="justify"><blockquote><p><span style="background-color: white; color: #5e0000; font-family: Arial;"><img align="left" border="0" height="266" hspace="8" src="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/temporadas/semana_santa/passionofthechrist.jpg" vspace="5" width="200" />La tarde del Viernes Santo presenta el drama inmenso de la muerte de Cristo en el Calvario. La cruz erguida sobre el mundo sigue en pie como signo de salvación y de esperanza.<br /><br />Con la Pasión de Jesús según el Evangelio de Juan contemplamos el misterio del Crucificado, con el corazón del discípulo Amado, de la Madre, del soldado que le traspasó el costado.<br /><br />San Juan, teólogo y cronista de la pasión nos lleva a contemplar el misterio de la cruz de Cristo como una solemne liturgia. Todo es digno, solemne, simbólico en su narración: cada palabra, cada gesto. La densidad de su Evangelio se hace ahora más elocuente.<br /><br />Y los títulos de Jesús componen una hermosa Cristología. Jesús es Rey. Lo dice el título de la cruz, y el patíbulo es trono desde donde el reina. Es sacerdote y templo a la vez, con la túnica inconsútil que los soldados echan a suertes. Es el nuevo Adán junto a la Madre, nueva Eva, Hijo de María y Esposo de la Iglesia. Es el sediento de Dios, el ejecutor del testamento de la Escritura. El Dador del Espíritu. Es el Cordero inmaculado e inmolado al que no le rompen los huesos. Es el Exaltado en la cruz que todo lo atrae a sí, por amor, cuando los hombres vuelven hacia él la mirada.<br /><br />La Madre estaba allí, junto a la Cruz. No llegó de repente al Gólgota, desde que el discípulo amado la recordó en Caná, sin haber seguido paso a paso, con su corazón de Madre el camino de Jesús. Y ahora está allí como madre y discípula que ha seguido en todo la suerte de su Hijo, signo de contradicción como El, totalmente de su parte. Pero solemne y majestuosa como una Madre, la madre de todos, la nueva Eva, la madre de los hijos dispersos que ella reúne junto a la cruz de su Hijo. Maternidad del corazón, que se ensancha con la espada de dolor que la fecunda.<br /><br />La palabra de su Hijo que alarga su maternidad hasta los confines infinitos de todos los hombres. Madre de los discípulos, de los hermanos de su Hijo. La maternidad de María tiene el mismo alcance de la redención de Jesús. María contempla y vive el misterio con la majestad de una Esposa, aunque con el inmenso dolor de una Madre. Juan la glorifica con el recuerdo de esa maternidad. Ultimo testamento de Jesús. Ultima dádiva. Seguridad de una presencia materna en nuestra vida, en la de todos. Porque María es fiel a la palabra: He ahí a tu hijo.<br /><br />El soldado que traspasó el costado de Cristo de la parte del corazón, no se dio cuenta que cumplía una profecía y realizaba un último, estupendo gesto litúrgico. Del corazón de Cristo brota sangre y agua. La sangre de la redención, el agua de la salvación. La sangre es signo de aquel amor más grande, la vida entregada por nosotros, el agua es signo del Espíritu, la vida misma de Jesús que ahora, como en una nueva creación derrama sobre nosotros.<br /><br /><b>LA CELEBRACIÓN<br /></b><br />Hoy no se celebra la Eucaristía en todo el mundo. El altar luce sin mantel, sin cruz, sin velas ni adornos. Recordamos la muerte de Jesús. Los ministros se postran en el suelo ante el altar al comienzo de la ceremonia. Son la imagen de la humanidad hundida y oprimida, y al tiempo penitente que implora perdón por sus pecados.<br />Van vestidos de rojo, el color de los mártires: de Jesús, el primer testigo del amor del Padre y de todos aquellos que, como él, dieron y siguen dando su vida por proclamar la liberación que Dios nos ofrece.<br /><br /><b>ACCIÓN LITÚRGICA EN LA MUERTE DEL SEÑOR<br /><br />1. LA ENTRADA<br /></b><br />La impresionante celebración litúrgica del Viernes empieza con un rito de entrada diferente de otros días: los ministros entran en silencio, sin canto, vestidos de color rojo, el color de la sangre, del martirio, se postran en el suelo, mientras la comunidad se arrodilla, y después de un espacio de silencio, dice la oración del dia.<br /><br /><b>2. CELEBRACION DE LA PALABRA<br /></b><br /><u>Primera Lectura<br /></u><br />Espectacular realismo en esta profecía hecha 800 años antes de Cristo, llamada por muchos el 5º Evangelio. Que nos mete en el alma sufriente de Cristo, durante toda su vida y ahora en la hora real de su muerte. Dispongámonos a vivirla con Él.<br /><br /><b><i>Lectura del Profeta Isaías 52, 13-53, 12<br /></i></b><br />Mirad, mi siervo tendrá éxito, subirá y crecerá mucho.<br />Como muchos se espantaron de Él, porque desfigurado no parecía hombre, ni tenía aspecto humano; así asombrará a muchos pueblos: ante Él los reyes cerrarán la boca, al ver algo inenarrable y contemplar algo inaudito.<br />¿Quién creyó nuestro anuncio? ¿A quién se reveló el brazo del Señor? Creció en su presencia como un brote, como raíz en tierra árida, sin figura, sin belleza.<br />Lo vimos sin aspecto atrayente, despreciado y evitado por los hombres, como un hombre de dolores, acostumbrado a sufrimientos; ante el cual se ocultan los rostros, despreciado y desestimado.<br />Él soportó nuestros sufrimientos y aguantó nuestros dolores; nosotros lo estimamos leproso, herido de Dios y humillado, traspasado por nuestras rebeliones, triturado por nuestro crímenes. Nuestro castigo saludable vino sobre Él, sus cicatrices nos curaron. Todos errábamos como ovejas, cada uno siguiendo su camino, y el Señor cargó sobre Él todos nuestros crímenes.<br />Maltratado, voluntariamente se humillaba y no abría la boca, como un cordero llevado al matadero, como oveja ante el esquilador, enmudecía y no abría la boca.<br />Sin defensa, sin justicia, se lo llevaron.<br />¿Quién meditó en su destino? Lo arrancaron de la tierra de los vivos, por los pecados de mi pueblo lo hirieron.<br />Le dieron sepultura con los malhechores, porque murió con los malvados, aunque no había cometido crímenes, ni hubo engaño en su boca.<br /><br />El Señor quiso triturarlo con el sufrimiento. Cuando entregue su vida como expiación, verá su descendencia, prolongará sus años; lo que el Señor quiere prosperará por sus manos. A causa de los trabajos de su alma, verá y se hartará, Con lo aprendido mi Siervo justificará a muchos, cargando con los crímenes de ellos.<br />Por eso le daré una parte entre los grandes, con los poderosos tendrá parte en los despojos, porque expuso su vida a la muerte y fue contado entre los pecadores, y Él tomó el pecado de muchos e intercedió por los pecadores.<br /><br /><i>Palabra de Dios<br /></i><br /><u>Salmo Responsorial<br /></u><br /><i>En este Salmo, recitado por Jesús en la cruz, se entrecruzan la confianza, el dolor, la soledad y la súplica: con el Varón de dolores, hagamos nuestra esta oración.<br /></i><br />Sal 30, 2 y 6. 12-13. 15-16. 17 y 25.<br /><b><i>Padre, a tus manos encomiendo mi espíritu.<br /></i></b><br />A Ti, Señor, me acojo: no quede Yo nunca defraudado; Tú que eres justo, ponme a salvo. A tus manos encomiendo mi espíritu: Tú, el Dios leal, me librarás.<br /><br />Soy la burla de todos mis enemigos, la irrisión de mis vecinos, el espanto de mis conocidos: me ven por la calle y escapan de Mí. Me han olvidado como a un muerto, me han desechado como a un cacharro inútil.<br /><br />Pero Yo confío en Ti, Señor, te digo: "Tú eres mi Dios". En tu mano están mis azares: líbrame de los enemigos que me persiguen.<br /><br />Haz brillar tu Rostro sobre tu Siervo, sálvame por tu misericordia. Sed fuertes y valientes de corazón, los que esperáis en el Señor.<br /><br /><u>Segunda lectura<br /></u><br />El Sacerdote es el que une a Dios con el hombre y a los hombres con Dios... Por eso Cristo es el perfecto Sacerdote: Dios y Hombre. El Único y Sumo y Eterno Sacerdote. Del cual el Sacerdocio: el Papa, los Obispos, los sacerdotes y los Diáconos, unidos a Él, son ministros, servidores, ayudantes...<br /><br /><i><b>Lectura de la carta a los Hebreos 4, 14-16; 5, 7-9.<br /></b></i><br />Tenemos un Sumo Sacerdote que penetró los Cielos -Jesús el Hijo de Dios-. Mantengamos firmes la fe que profesamos. Pues no tenemos un Sumo Sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras flaquezas, sino probado en todo igual que nosotros, excepto en el pecado. Acerquémonos, por tanto, confiadamente al trono de gracia, al fin de alcanzar misericordia y hallar gracia para ser socorridos en el tiempo oportuno.<br /><br />Pues Cristo, habiendo ofrecido en los días de su vida mortal ruego y súplicas, con poderoso clamor y lágrimas, al que podía salvarle de la muerte, fue escuchado por su actitud reverente, y aun siendo Hijo, con lo que padeció experimentó la obediencia; y llegado a la perfección se convirtió en causa de salvación eterna para todos los que le obedecen.<br /><br /><i>Palabra de Dios<br /></i><br /><u>Versículo antes del Evangelio (Flp 2, 8-9)<br /></u><br />Cristo, por nosotros, se sometió incluso a la muerte, y una muerte de cruz. Por eso Dios lo levantó sobre todo, y le concedió el "Nombre-sobre-todo-nombre".<br /><br />Como siempre, la celebración de la Palabra, después de la homilía, se concluye con una ORACIÓN UNIVERSAL, que hoy tiene más sentido que nunca: precisamente porque contemplamos a Cristo entregado en la Cruz como Redentor de la humanidad, pedimos a Dios la salvación de todos, los creyentes y los no creyentes.<br /><br /><b>3. ADORACIÓN DE LA CRUZ<br /></b><br />Después de las palabras pasamos a una acción simbólica muy expresiva y propia de este dia: la veneración de la Santa Cruz es presentada solemnemente la Cruz a la comunidad, cantando tres veces la aclamación:<br /><br />Mirad el árbol de la Cruz, donde estuvo clavada la salvación del mundo. VENID AADORARLO", y todos nos arrodillamos unos momentos cada vez; y entonces vamos, en procesión, a venerar la Cruz personalmente, con una genuflexión (o inclinación profunda) y un beso (o tocándola con la mano y santiguándonos); mientras cantamos las alabanzas a ese Cristo de la Cruz:<br />"Pueblo mío, ¿qué te he hecho...?" "Oh Cruz fiel, árbol único en nobleza..." "Victoria, tú reinarás..."<br /><br /><b>4. LA COMUNIÓN<br /></b><br />Desde 1955, cuando lo decidió Pío Xll en la reforma que hizo de la Semana Santa, no sólo el sacerdote -como hasta entonces - sino también los fieles pueden comulgar con el Cuerpo de Cristo.<br /><br />Aunque hoy no hay propiamente Eucaristía, pero comulgando del Pan consagrado en la celebración de ayer, Jueves Santo, expresamos nuestra participación en la muerte salvadora de Cristo, recibiendo su "Cuerpo entregado por nosotros".<br /><br /></span><i style="text-align: left;"><b style="background-color: white;"><span style="color: #5e0000; font-family: Arial;"><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/temporadas/semana_santa/semana_santa.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: #663300;">Regresar a la página de Semana Santa</span></a></span><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/temporadas/semana_santa/semana_santa.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: #663300; font-family: Verdana;">»»</span></a></b></i></p></blockquote><p>Fuente: <a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/temporadas/semana_santa/viernes_santo.htm" target="_blank">Corazones.org </a></p><p><br /></p><p><br /></p></div>
<div style="text-align: center;"><iframe allow="accelerometer; autoplay; clipboard-write; encrypted-media; gyroscope; picture-in-picture; web-share" allowfullscreen="" frameborder="0" height="290" src="https://www.youtube.com/embed/4gbqVAyUXs0" title="YouTube video player" width="500"></iframe></div>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-62138563119778323292023-04-06T05:30:00.002-03:002023-04-06T05:30:00.241-03:00Jesús en el Jueves Santo: La institución de la Eucaristía y del Sacerdocio y la oración de Jesús en el Huerto de Getsemaní<div style="text-align: center;"><iframe allow="accelerometer; autoplay; clipboard-write; encrypted-media; gyroscope; picture-in-picture; web-share" allowfullscreen="" frameborder="0" height="290" src="https://www.youtube.com/embed/W5jDlAuOqhE" title="YouTube video player" width="500"></iframe></div><p style="text-align: center;"> </p><p><br /></p><div align="center" style="text-align: -webkit-center;"><div align="center"><table bgcolor="#A28A76" border="1" bordercolor="#6C4084" bordercolordark="#6C4084" bordercolorlight="#000000" style="width: 93%px;"><tbody><tr><td><table bgcolor="#A28A76" cellpadding="0" cellspacing="0" style="height: 100%px; width: 100%px;"><tbody><tr><td align="center"><p align="left"><span style="background-color: white;"><span style="color: #741b47;"><span style="font-family: Arial;"><b>† </b> </span><b><span style="font-family: Arial;"><span lang="es">Sagrada Liturgia-Jueves Santo</span></span></b></span></span></p></td></tr></tbody></table></td></tr></tbody></table><br /></div><div align="center"><br /></div><div align="center"><div id="articulo" style="background-color: white; box-sizing: border-box; color: #989898; direction: ltr; font-family: "Helvetica Neue", Helvetica, Helvetica, Arial, sans-serif; font-size: 12px; margin: 0px; padding: 0px; text-align: start;"><br /></div></div></div><div align="justify"><span style="background-color: white;"><b><span style="text-transform: uppercase;"><span style="color: #5e0000; font-family: Arial;">JUEVES SANTO</span></span></b></span></div><div align="justify"><span style="background-color: white;"><b><span style="text-transform: uppercase;"><span style="color: #5e0000; font-family: Arial;"><br /></span></span></b></span></div><div align="justify"><span class="art_descripcion" face="Roboto, Verdana, Arial, sans-serif" style="box-sizing: border-box; color: #38393a; font-size: 16px; line-height: 1.1; margin: 0px; padding: 0px;">El Jueves Santo se celebra: La Última Cena; El Lavatorio de los pies; La institución de la Eucaristía y del Sacerdocio y la oración de Jesús en el Huerto de Getsemaní</span></div><div align="justify"><div style="text-align: justify;"><span face="Roboto, Verdana, Arial, sans-serif" style="color: #38393a;"><br /></span></div><div style="text-align: justify;"><span face="Roboto, Verdana, Arial, sans-serif" style="color: #38393a;"><br /></span></div><br /></div><div style="text-align: center;"><span style="background-color: white;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjKlIRshaB0sPd5hUqcaNVS-TqrbseZf_SnN00UamSeWFQ8nbmaZ92IQQ3hhbKjGF-9swXWxrbJfa69WP0WlD6gr6sNh5hGP2--VrrbZPGfnISU22GuU_BNQcTJS7Ijnokq7BoEVZbv4cHh0xMYKMiIYxbIQqwarjfL7OTUbUPTDxeKDwuIEuz4U2_HcA/s1400/jueves-santo-jes%C3%BAs-ora-en-Xjm-5kf9yCI-tvXbNrPImok.webp" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1400" data-original-width="1400" height="358" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjKlIRshaB0sPd5hUqcaNVS-TqrbseZf_SnN00UamSeWFQ8nbmaZ92IQQ3hhbKjGF-9swXWxrbJfa69WP0WlD6gr6sNh5hGP2--VrrbZPGfnISU22GuU_BNQcTJS7Ijnokq7BoEVZbv4cHh0xMYKMiIYxbIQqwarjfL7OTUbUPTDxeKDwuIEuz4U2_HcA/w358-h358/jueves-santo-jes%C3%BAs-ora-en-Xjm-5kf9yCI-tvXbNrPImok.webp" width="358" /></a></div><br /> </span></div><div align="justify"><blockquote><p align="center"><span style="background-color: white; color: #5e0000; font-family: Arial;"> </span></p><p><span style="background-color: white; color: #5e0000; font-family: Arial;">La liturgia del Jueves Santo es una invitación a profundizar concretamente en el misterio de la Pasión de Cristo, ya que quien desee seguirle tiene que sentarse a su mesa y, con máximo recogimiento, ser espectador de todo lo que aconteció 'en la noche en que iban a entregarlo'. Y por otro lado, el mismo Señor Jesús nos da un testimonio idóneo de la vocación al servicio del mundo y de la Iglesia que tenemos todos los fieles cuando decide lavarle los pies a sus discípulos.<br /><br />En este sentido, el Evangelio de San Juan presenta a Jesús 'sabiendo que el Padre había puesto todo en sus manos, que venía de Dios y a Dios volvía' pero que, ante cada hombre, siente tal amor que, igual que hizo con sus discípulos, se arrodilla y le lava los pies, como gesto inquietante de una acogida incansable.<br /><br />San Pablo completa el retablo recordando a todas las comunidades cristianas lo que él mismo recibió: que aquella memorable noche la entrega de Cristo llegó a hacerse sacramento permanente en un pan y en un vino que convierten en alimento su Cuerpo y Sangre para todos los que quieran recordarle y esperar su venida al final de los tiempos, quedando instituida la Eucaristía.<br /><br />La Santa Misa es entonces la celebración de la Cena del Señor en la cuál Jesús, un día como hoy, la víspera de su pasión, "mientras cenaba con sus discípulos tomó pan..." (Mt 28, 26).<br /><br />Él quiso que, como en su última Cena, sus discípulos nos reuniéramos y nos acordáramos de Él bendiciendo el pan y el vino: "Hagan esto en memoria mía" (Lc 22,19).<br /><br />Antes de ser entregado, Cristo se entrega como alimento. Sin embargo, en esa Cena, el Señor Jesús celebra su muerte: lo que hizo, lo hizo como anuncio profético y ofrecimiento anticipado y real de su muerte antes de su Pasión. Por eso "cuando comemos de ese pan y bebemos de esa copa, proclamamos la muerte del Señor hasta que vuelva" (1 Cor 11, 26).<br /><br />De aquí que podamos decir que la Eucaristía es memorial no tanto de la Ultima Cena, sino de la Muerte de Cristo que es Señor, y "Señor de la Muerte", es decir, el Resucitado cuyo regreso esperamos según lo prometió Él mismo en su despedida: " un poco y ya no me veréis y otro poco y me volveréis a ver" (Jn 16,16).<br /><br />Como dice el prefacio de este día: "Cristo verdadero y único sacerdote, se ofreció como víctima de salvación y nos mandó perpetuar esta ofrenda en conmemoración suya". Pero esta Eucaristía debe celebrarse con características propias: como Misa "en la Cena del Señor".<br /><br />En esta Misa, de manera distinta a todas las demás Eucaristías, no celebramos "directamente" ni la muerte ni la Resurrección de Cristo. No nos adelantamos al Viernes Santo ni a la Noche de Pascua.<br /><br />Hoy celebramos la alegría de saber que esa muerte del Señor, que no terminó en el fracaso sino en el éxito, tuvo un por qué y para qué: fue una "entrega", un "darse", fue "por algo" o, mejor dicho, "por alguien" y nada menos que por "nosotros y por nuestra salvación" (Credo). "Nadie me quita la vida, había dicho Jesús, sino que Yo la entrego libremente. Yo tengo poder para entregarla." (Jn 10,16), y hoy nos dice que fue para "remisión de los pecados" (Mt 26,28).<br /><br />Por eso esta Eucaristía debe celebrarse lo más solemnemente posible, pero, en los cantos, en el mensaje, en los signos, no debe ser ni tan festiva ni tan jubilosamente explosiva como la Noche de Pascua, noche en que celebramos el desenlace glorioso de esta entrega, sin el cual hubiera sido inútil; hubiera sido la entrega de uno más que muere por los pobre y no los libera. Pero tampoco esta Misa está llena de la solemne y contrita tristeza del Viernes Santo, porque lo que nos interesa "subrayar"; en este momento, es que "el Padre nos entregó a su Hijo para que tengamos vida eterna" (Jn 3, 16) y que el Hijo se entregó voluntariamente a nosotros independientemente de que se haya tenido que ser o no, muriendo en una cruz ignominiosa.<br /><br />Hoy hay alegría y la iglesia rompe la austeridad cuaresmal cantando él "gloria": es la alegría del que se sabe amado por Dios, pero al mismo tiempo es sobria y dolorida, porque conocemos el precio que le costamos a Cristo.<br /><br />Podríamos decir que la alegría es por nosotros y el dolor por Él. Sin embargo predomina el gozo porque en el amor nunca podemos hablar estrictamente de tristeza, porque el que da y se da con amor y por amor lo hace con alegría y para dar alegría.<br /><br />Podemos decir que hoy celebramos con la liturgia (1a Lectura). La Pascua, pero la de la Noche del Éxodo (Ex 12) y no la de la llegada a la Tierra Prometida (Jos. 5, 10-ss).<br /><br />Hoy inicia la fiesta de la "crisis pascual", es decir de la lucha entre la muerte y la vida, ya que la vida nunca fue absorbida por la muerte pero si combatida por ella. La noche del sábado de Gloria es el canto a la victoria pero teñida de sangre y hoy es el himno a la lucha pero de quien lleva la victoria porque su arma es el amor.<br /><br /><br /> </span></p><p><i><b style="background-color: white;"><span style="color: #5e0000; font-family: Arial;"><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/temporadas/semana_santa/semana_santa.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: #663300;">Regresar a la página de Semana Santa</span></a></span><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/temporadas/semana_santa/semana_santa.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: #663300; font-family: Verdana;">»»</span></a></b></i></p></blockquote><p><br /></p><p>Fuente: <a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/temporadas/semana_santa/jueves_santo.htm" target="_blank">Corazones.org </a></p></div>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-29786508191785943502023-04-06T01:00:00.002-03:002023-04-06T18:06:34.825-03:00Triduo Pascual<p> </p><div align="center" style="text-align: -webkit-center;"><div align="center"><table bgcolor="#A28A76" border="1" bordercolor="#6C4084" bordercolordark="#6C4084" bordercolorlight="#000000" style="width: 93%px;"><tbody><tr><td><table cellpadding="0" cellspacing="0" style="height: 100%px; width: 100%px;"><tbody><tr><td align="center"><p align="left"><span style="background-color: white;"><span style="color: #741b47;"><span style="font-family: Arial;"><b>† </b> </span><b><span style="font-family: Arial;"><span lang="es">Sagrada Liturgia-</span></span></b><b><span style="font-family: Arial;">Triduo Pascual</span></b></span></span></p></td></tr></tbody></table></td></tr></tbody></table></div></div><div align="justify"><span style="background-color: white;"><span style="color: white; font-family: Arial;"><br /></span><b><span style="text-transform: uppercase;"><span style="color: #5e0000; font-family: Arial;">TRIDUO PASCUAL<br /></span></span></b><a href="http://www.aciprensa.com/" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: #5e0000; font-family: Arial;">Aciprensa</span></a></span></div><div align="justify"><span style="background-color: white;"> </span></div><div align="justify"><span style="background-color: white;"> </span></div><div align="justify"><blockquote><p><span style="background-color: white; color: #5e0000; font-family: Arial;"><img align="left" border="0" height="280" hspace="8" src="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/temporadas/semana_santa/En%20la%20cruz.jpg" vspace="5" width="200" />La palabra triduo en la práctica devocional católica sugiere la idea de preparación. A veces nos preparamos para la fiesta de un santo con tres días de oración en su honor, o bien pedimos una gracia especial mediante un triduo de plegarias de intercesión.<br /><br />El triduo pascual se consideraba como tres días de preparación a la fiesta de pascua; comprendía el jueves, el viernes y el sábado de la semana santa. Era un triduo de la pasión.<br /><br />En el nuevo calendario y en las normas litúrgicas para la semana santa, el enfoque es diferente. El triduo se presenta no como un tiempo de preparación, sino como una sola cosa con la pascua. Es un triduo de la pasión y resurrección, que abarca la totalidad del misterio pascual. Así se expresa en el calendario:<br /><br />Cristo redimió al género humano y dio perfecta gloria a Dios principalmente a través de su misterio pascual: muriendo destruyó la muerte y resucitando restauró la vida. El triduo pascual de la pasión y resurrección de Cristo es, por tanto, la culminación de todo el año litúrgico.<br /><br />Luego establece la duración exacta del triduo:<br /><br />El triduo comienza con la misa vespertina de la cena del Señor, alcanza su cima en la vigilia pascual y se cierra con las vísperas del domingo de pascua.<br /><br />Esta unificación de la celebración pascual es más acorde con el espíritu del Nuevo Testamento y con la tradición cristiana primitiva. El mismo Cristo, cuando aludía a su pasión y muerte, nunca las disociaba de su resurrección. En el evangelio del miércoles de la segunda semana de cuaresma (Mt 20,17-28) habla de ellas en conjunto: "Lo condenarán a muerte y lo entregarán a los gentiles para que se burlen de él, lo azoten y lo crucifiquen, y al tercer día resucitará".<br /><br />Es significativo que los padres de la Iglesia, tanto san Ambrosio como san Agustín, conciban el triduo pascual como un todo que incluye el sufrimiento de Jesús y también su glorificación. El obispo de Milán, en uno de sus escritos, se refiere a los tres santos días (<i>triduum illud sacrum</i>) como a los tres días en los cuales sufrió, estuvo en la tumba y resucitó, los tres días a los que se refirió cuando dijo: "Destruid este templo y en tres días lo reedificaré". San Agustín, en una de sus cartas, se refiere a ellos como "los tres sacratísimos días de la crucifixión, sepultura y resurrección de Cristo".<br /><br />Esos tres días, que comienzan con la misa vespertina del jueves santo y concluyen con la oración de vísperas del domingo de pascua, forman una unidad, y como tal deben ser considerados. Por consiguiente, la pascua cristiana consiste esencialmente en una celebración de tres días, que comprende las partes sombrías y las facetas brillantes del misterio salvífico de Cristo. Las diferentes fases del misterio pascual se extienden a lo largo de los tres días como en un tríptico: cada uno de los tres cuadros ilustra una parte de la escena; juntos forman un todo. Cada cuadro es en sí completo, pero debe ser visto en relación con los otros dos.<br /><br />Interesa saber que tanto el viernes como el sábado santo, oficialmente, no forman parte de la cuaresma. Según el nuevo calendario, la cuaresma comienza el miércoles de ceniza y concluye el jueves santo, excluyendo la misa de la cena del Señor 1. El viernes y el sábado de la semana santa no son los últimos dos días de cuaresma, sino los primeros dos días del "sagrado triduo".<br /></span></p></blockquote><p><br /></p><p><span style="background-color: white;"> <b style="text-align: left;"><span style="text-transform: uppercase;"><span style="color: #5e0000; font-family: Arial;">EL SANTO TRIDUO PASCUAL Y LA INDULGENCIA PLENARIA</span></span></b></span></p><div align="justify"><a href="http://www.aciprensa.com/" style="text-decoration-line: none;"><span style="background-color: white; color: #5e0000; font-family: Arial;">Aciprensa</span></a></div><div align="justify"><span style="background-color: white;"> </span></div><div align="justify"><span style="background-color: white;"> </span></div><div align="justify"><blockquote><p><span style="color: #5e0000; font-family: Arial;"><img align="right" border="0" height="167" hspace="8" src="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/temporadas/semana_santa/shiny_cross.jpg" vspace="5" width="121" /><span style="background-color: white;">Durante la Semana Santa podemos ganar para nosotros o para los difuntos el don de la Indulgencia Plenaria si realizamos algunas de las siguientes obras establecidas por la Santa Sede.<br /><br />Obras que gozan del don de la Indulgencia Plenaria en Semana Santa:<br /><br /><b>Jueves Santo<br /></b><br />1. Si durante la solemne reserva del Santísimo Sacramento, que sigue a la Misa de la Cena del Señor, recitamos o cantamos el himno eucarístico del "Tantum Ergo" ("Adorad Postrados").<br /><br />2. Si visitamos por espacio de media hora el Santísimo Sacramento reservado en el Monumento para adorarlo.<br /><br /><b>Viernes Santo<br /></b><br />1. Si el Viernes Santo asistimos piadosamente a la Adoración de la Cruz en la solemne celebración de la Pasión del Señor.<br /><br /><b>Sábado Santo<br /></b><br />1. Si rezamos juntos el rezo del Santo Rosario.<br /><br /><b>Vigilia Pascual<br /></b><br />1. Si asistimos a la celebración de la Vigilia Pascual (Sábado Santo por la noche) y en ella renovamos las promesas de nuestro Santo Bautismo.<br /><br /><br /><u><b>Condiciones:<br /></b></u><br />Para ganar la Indulgencia Plenaria además de haber realizado la obra enriquecida se requiere el cumplimiento de las siguientes condiciones:<br /><br /><b>a</b>. Exclusión de todo afecto hacia cualquier pecado, incluso venial.<br /><br /><b>b</b>. Confesión sacramental, Comunión eucarística y Oración por las intenciones del Sumo Pontífice. Estas tres condiciones pueden cumplirse unos días antes o después de la ejecución de la obra enriquecida con la Indulgencia Plenaria; pero conviene que la comunión y la oración por las intenciones del Sumo Pontífice se realicen el mismo día en que se cumple la obra.<br /><br />Es oportuno señalar que con una sola confesión sacramental pueden ganarse varias indulgencias. Conviene, no obstante, que se reciba frecuentemente la gracia del sacramento de la Penitencia, para ahondar en la conversión y en la pureza de corazón. En cambio, con una sola comunión eucarística y una sola oración por las intenciones del Santo Padre sólo se gana una Indulgencia Plenaria.<br /><br />La condición de orar por las intenciones del Sumo Pontífice se cumple si se reza a su intención un solo Padrenuestro y Avemaría; pero se concede a cada fiel cristiano la facultad de rezar cualquier otra fórmula, según su piedad y devoción.<br /></span><br /></span></p></blockquote></div><blockquote><p><span style="background-color: white; color: #5e0000; font-family: Arial;"><br /> </span></p><p><i><b style="background-color: white;"><span style="color: #5e0000; font-family: Arial;"><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/temporadas/semana_santa/semana_santa.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: #663300;">Regresar a la página de Semana Santa</span></a></span><a href="https://www.corazones.org/biblia_y_liturgia/temporadas/semana_santa/semana_santa.htm" style="text-decoration-line: none;"><span style="color: #663300; font-family: Verdana;">»»</span></a></b></i></p></blockquote></div>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-75012045624180297602023-04-05T05:00:00.012-03:002023-04-05T05:00:00.230-03:00Jesús en el Miércoles Santo: la reunión del sanedrín y la traición de Judas<div style="text-align: center;"><iframe allow="accelerometer; autoplay; clipboard-write; encrypted-media; gyroscope; picture-in-picture; web-share" allowfullscreen="" frameborder="0" height="290" src="https://www.youtube.com/embed/HwJwcbGSa20" title="YouTube video player" width="500"></iframe></div><p> <span face="Roboto, Verdana, Arial, sans-serif" style="background-color: white; color: #38393a; font-size: 14px; font-style: italic; text-align: justify;">La Pasión de Jesús</span></p><br style="background-color: white; box-sizing: border-box; color: #989898; font-family: "Helvetica Neue", Helvetica, Helvetica, Arial, sans-serif; font-size: 12px; margin: 0px; padding: 0px;" /><span class="art_titulo" face="Roboto, Verdana, Arial, sans-serif" style="background-color: white; box-sizing: border-box; color: #38393a; font-size: 26px; line-height: 1.3; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;">El miércoles santo. La verdad de Judas</span><div id="articulo" style="background-color: white; box-sizing: border-box; color: #989898; direction: ltr; font-family: "Helvetica Neue", Helvetica, Helvetica, Arial, sans-serif; font-size: 12px; margin: 0px; padding: 0px;"><span class="art_descripcion" face="Roboto, Verdana, Arial, sans-serif" style="box-sizing: border-box; color: #38393a; font-size: 16px; line-height: 1.1; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;">La Pasión de Jesús. El miércoles Jesús no acudió al Templo. Permaneció en Betania en una vigilia de oración.</span><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><span class="art_autor" face="Roboto, Verdana, Arial, sans-serif" style="box-sizing: border-box; color: #4f5053; font-size: 14px; line-height: 1.3; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;">Por: P. Enrique Cases | Fuente: Catholic.net</span><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><img src="https://imagenes.catholic.net/imagenes_db/58928b_jesus-judas-iscariote.jpg" style="box-sizing: border-box; clear: left; float: left; height: auto; margin: 0px; max-width: 100%; padding: 0px 10px 0px 0px;" /><div align="justify" id="art_texto" style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto, Verdana, Arial, sans-serif; font-size: 18px; line-height: 1.3; margin: 0px; padding: 0px;"><p style="box-sizing: border-box; direction: ltr; font-size: 16px; line-height: 1.3; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;">El miércoles santo Jesús no acudió al Templo. Permaneció en Betania en una vigilia de oración. Todo lo que había de decir, lo ha dicho. La revelación de su identidad es clara. La denuncia del pecado también. Las posiciones de los importantes también están definidas.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Cristo les dice: <em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"Sabéis que de aquí a dos días será la Pascua, y el Hijo del Hombre será entregado para ser crucificado"</em>(Mt). Hay presciencia en Jesús. Sabe lo que va suceder, sabe el día y la hora. No le será ahorrado el desconocimiento previo, o la esperanza de que el dolor va ser menor. Lo sabe todo. Es consciente de que los clavos van a atravesar su carne, sabe que su cuerpo va ser flagelado, escupido, deshonrado y, por fin, llegará una muerte cruel. Lo sabe, y no huye, porque esa afrenta va a ser convertida en un sacrificio en el que Él va a ser sacerdote y víctima. Va a pedir al Padre el perdón para todos, pero lo va a pedir pagando el precio de justicia de todos los pecados. Va ser un verdadero sacrificio expiatorio, como lo simbolizaba el animal que soltaban los sacerdotes que llevaba sobre sí los pecados del pueblo. Pero ahora no va ser un símbolo, sino una realidad. El peso de todos nuestros pecados va a caer sobre Él. Jesús va a ser el inocente que paga por los pecados de aquellos a quienes ama. De esta manera se manifiesta una misericordia que tiene en cuenta la justicia.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Ya había sido profetizado mucho sobre el siervo de Yavé que padecerá para librar al pueblo de sus pecados. Se cumplirá todo hasta el mínimo detalle. El amor no es sólo la satisfacción por el gozo con la persona amada. Es también querer tanto al otro -en este caso todos los hombres- que se busca librarlos de todo mal, se busca liberarlos de las garras del diablo, de las redes del pecado, de la muerte primera, y de la muerte segunda que es el infierno. Ese amor le lleva a no poder soportar que se pierda ninguno. Que todo el que quiera salvarse lo pueda hacer. Por eso no rechaza el sacrificio. Se puede decir que lo ama, aunque el corazón tiemble y la carne se resista. Pero la voluntad es firme. Y el miércoles santo es un día de oración intensa y sin descanso, rodeado del cariño de los suyos, aunque no todos, pues Judas le odia.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">La reunión del sanedrín</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Aquel día se reunieron las tres clases del sanedrín: los príncipes de los sacerdotes, los escribas, y los ancianos notables. Preside el Sumo sacerdote Caifás. No es una reunión oficial, pero están casi todos. Los acontecimientos del día anterior hacen que lo ya decidido se ponga por obra. Ya habían decidido matarle antes; pero nada han conseguido. Ahora les mueve la furia de hacerlo cuanto antes, pero con astucia, con una frialdad y un odio que encuentran su motor en el mismo Satanás. Son implacables <em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"Entonces se reunieron los príncipes de los sacerdotes y los ancianos del pueblo en el palacio del Sumo Sacerdote, llamado Caifás, y acordaron apoderarse con engaño de Jesús y hacerle morir. Pero decían: No sea en la fiesta, para que no se produzca alboroto entre el pueblo"</em>(Mt). Las deliberaciones fueron duras. Hablan más los que más le odian, es decir, los que tienen una mayor pecado según las denuncias públicas y privadas de Jesús. No pueden esperar, pero no quieren alboroto. Saben que los partidarios de Jesús son muchos. Saben que en una situación de guerra civil, los romanos intervendrían y liberarían a Jesús, pues su conducta es intachable y nada enemigo de ellos. Por otra parte quieren comprometer a los romanos para que ellos sean responsables de la muerte de Cristo ante el pueblo. Deben calcular las cosas hasta el mínimo detalle. No pueden fallar. Alguno habla de Judas que ya ha entrado en tratos, pero poco saben de él.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">La traición de Judas</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"Se acercaba la fiesta de los Azimos, que se llama Pascua, y los príncipes de los sacerdotes y los escribas buscaban cómo acabar con él, pero temían al pueblo. Entró Satanás en Judas, llamado Iscariote, uno de los doce. Fue y habló con los príncipes de los sacerdotes y los magistrados sobre el modo de entregárselo"</em>(Lc).<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">Satanás se aprovecha</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Satanás sólo entra si se le deja entrar. Puede tentar y tienta como lo hizo con Jesús y lo hace con todos. Pero para entrar necesita una puerta abierta. Satanás es soberbio, pero es lúcidamente inteligente. Conoce las debilidades de los hombres y las prueba. Odia a Dios, y sabe que el mayor daño que le puede hacer es destruir a los hombres. Conoce la debilidad de Judas, su amor por el dinero, y lo que el dinero lleva consigo. Ha seguido su comportamiento a lo largo de los tres años. Ha podido observar sus trampas. Y sobre todo su resentimiento por no entender el modo como Jesús lleva las cosas adelante. Judas no puede entender un amor tan grande que le lleve a la pobreza, a decir las verdades a los poderosos, contra las juiciosas políticas de los hábiles. Su vida de fraternidad es difícil con los demás, pues ellos han dejado todo para seguir a Jesús, y les ve decididos a hacer lo que les pida, por loco que parezca. Las peleas y los reproches no faltan. No en vano ellos no tienen tanta paciencia como Jesús, que siempre le disculpa y le apoya. La misma paciencia y el amor de Jesús le llenan de odio, pues son un reproche cuando él ya no quiere saber nada de ese reinado que no parece de este mundo.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">Judas se decide</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Entonces Judas Iscariote <em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"fue donde los príncipes de los sacerdotes, y dijo: ¿Qué me queréis dar a cambio de que os lo entregue? Ellos le ofrecieron treinta monedas de plata. Desde entonces buscaba una oportunidad para entregarlo"</em>(Mt)<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">La verdad de Judas</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />El precio había sido profetizado. Es muy posible que ellos, o alguno de ellos, se acordase de la profecía con burla y cinismo. Es muy posible que, en su astucia, la utilizasen para acallar la conciencia de Judas diciéndole que si verdaderamente Jesús era el Mesías se aclararía todo, pues se manifestaría con poder. Era un engaño, pero cuando se peca, cualquier excusa puede servir de justificación. El hecho es que él era traidor de quien más le había querido, del Mesías, del Amigo, del Hijo de Dios Altísimo. Esa es la verdad de Judas. Estaba cometiendo el peor de los pecados con una lucidez que la compañía con Jesús agravaría por minutos.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">Las treinta monedas de plata</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />La cantidad de treinta siclos de plata era también el precio del daño por un esclavo que hubiese sido muerto por un animal. Era el precio de un pequeño campo. Era el precio de un cordero pascual. Simbolizaba, sin quererlo, a Jesús que se entrega como un esclavo de amor, del cordero pascual que libera de la muerte a los primogénitos. Para Judas era sólo el símbolo del poder que alcanzaría cuando venciesen sus nuevos amigos frente al. Poco sabía cuál iba a ser la paga de los traidores, pues lo que es lucidez para la traición es oscuridad para el propio conocimiento.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">Ignoran el juicio de Dios</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Los reunidos en el Sanedrín se alegraron. Judas hierve de actividad. Se separan, preparando todo para el desenlace inminente, aunque un cierto temor de que Jesús se escapase de nuevo de sus manos les deja intranquilos, pues lo ha hecho muchas veces. Menos les intranquilizaba lo más importante: el juicio de Dios.</p><p style="box-sizing: border-box; direction: ltr; font-size: 16px; line-height: 1.3; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; color: firebrick; margin: 0px; padding: 0px;">Te recomendamos: </span><a href="http://es.catholic.net/op/articulos/12394/especial-de-semana-santa-2019.html#modal" style="box-sizing: border-box; color: #376d9b; font-family: Roboto, Arial, sans-serif; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px; text-decoration-line: none;" target="_blank">Especial de Semana Santa</a></strong></p><p style="box-sizing: border-box; direction: ltr; font-size: 16px; line-height: 1.3; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;">Fuente: <a href="https://es.catholic.net/op/articulos/17755/cat/725/el-miercoles-santo-la-verdad-de-judas.html#modal" target="_blank">Catholic.net</a></p><p style="box-sizing: border-box; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"></p><p style="box-sizing: border-box; direction: ltr; font-family: Roboto; font-size: 13px; line-height: 1.6; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"></p><a style="box-sizing: border-box; color: #376d9b; font-family: Roboto, Arial, sans-serif; font-size: 16px; line-height: 1.2; margin: 0px; padding: 0px;"></a></div></div><br style="background-color: white; box-sizing: border-box; color: #989898; font-family: "Helvetica Neue", Helvetica, Helvetica, Arial, sans-serif; font-size: 12px; margin: 0px; padding: 0px;" />Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-6586015564351980062.post-44178814967633550832023-04-04T01:55:00.003-03:002023-04-04T01:55:22.336-03:00Jesús en el Martes Santo<div style="text-align: center;"><iframe allow="accelerometer; autoplay; clipboard-write; encrypted-media; gyroscope; picture-in-picture; web-share" allowfullscreen="" frameborder="0" height="290" src="https://www.youtube.com/embed/hHmlxPOnl3U" title="YouTube video player" width="500"></iframe></div><p> <span face="Roboto, Verdana, Arial, sans-serif" style="background-color: white; color: #38393a; font-size: 14px; font-style: italic; text-align: justify;">La Pasión de Jesús</span></p><br style="background-color: white; box-sizing: border-box; color: #989898; font-family: "Helvetica Neue", Helvetica, Helvetica, Arial, sans-serif; font-size: 12px; margin: 0px; padding: 0px;" /><span class="art_titulo" face="Roboto, Verdana, Arial, sans-serif" style="background-color: white; box-sizing: border-box; color: #38393a; font-size: 26px; line-height: 1.3; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;">El martes santo</span><div id="articulo" style="background-color: white; box-sizing: border-box; color: #989898; direction: ltr; font-family: "Helvetica Neue", Helvetica, Helvetica, Arial, sans-serif; font-size: 12px; margin: 0px; padding: 0px;"><span class="art_descripcion" face="Roboto, Verdana, Arial, sans-serif" style="box-sizing: border-box; color: #38393a; font-size: 16px; line-height: 1.1; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;">La Pasión de Jesús. El martes acude al Templo por el camino tantas veces recorrido.</span><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><span class="art_autor" face="Roboto, Verdana, Arial, sans-serif" style="box-sizing: border-box; color: #4f5053; font-size: 14px; line-height: 1.3; margin: 0px; padding: 0px; text-align: justify;">Por: P. Enrique Cases | Fuente: Catholic.net</span><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><img src="https://imagenes.catholic.net/imagenes_db/417445_56297.jpg" style="box-sizing: border-box; clear: left; float: left; height: auto; margin: 0px; max-width: 100%; padding: 0px 10px 0px 0px;" /><div align="justify" id="art_texto" style="box-sizing: border-box; color: #36383d; direction: ltr; font-family: Roboto, Verdana, Arial, sans-serif; font-size: 18px; line-height: 1.3; margin: 0px; padding: 0px;"><p style="box-sizing: border-box; direction: ltr; font-size: 16px; line-height: 1.3; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 14px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;"><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">El día de las grandes controversias</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />La noche del lunes fue como la del domingo: enseñanzas a los discípulos y mucha oración. Jesús está en máxima tensión. El ambiente de paz de Betania ayuda a relajar los espíritus, pero Jesús no cede en su lucha y necesita rezar.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />El martes acude al Templo por el camino tantas veces recorrido. Los rostros de los que le acompañan están serios; ya no hay vítores de los acampados alrededor de Jerusalén, ni en la misma ciudad. Pero muchos quieren oír y ver al Maestro, al Hijo de David, al que resucitó a Lázaro, al que se ha proclamado Hijo del Padre eterno. Este día todos los grupos que se oponen a Jesús se van a unir y emplear sus armas dialécticas para destruirle. <em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"Siguieron observando y le enviaron espías que simulaban ser justos para cogerle en alguna palabra y entregarlo al poder y jurisdicción del gobernador"</em>(Lc). Muchas cosas van a quedar claras en este día y mucha va a ser la luz para los de mente y corazón abiertos.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">El pago del tributo al César</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Los fariseos se habían enfrentado con Jesús tanto el domingo como el lunes y estaban avergonzados. Ahora van a enviar discípulos camuflados para cogerle en una palabra comprometida; le preparan una pregunta que creen sin solución, o mejor, con todas las soluciones posibles negativas para Jesús: es la cuestión de la relación de la esfera religiosa con la autoridad política, gran tema de todos los tiempos y que tantos problemas ha llevado consigo. Acuden con retorcimiento mental, con adulación y falsedad y acompañados de los herodianos, que eran partidarios del poder de los romanos y de Herodes.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />La cuestión se plantea así: <em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"Entonces los fariseos se retiraron y tuvieron consejo para ver cómo podían cazarle en alguna palabra. Y le enviaron sus discípulos, junto a los herodianos, a preguntarle: Maestro, sabemos que eres veraz y que enseñas de verdad el camino de Dios, y que no te dejas llevar de nadie, pues no haces acepción de personas"</em>(Mt). La suavidad de las palabras esconde la malicia. Ciertamente Jesús es veraz, pero a ellos no les interesa la verdad, sino atraparle y entregarlo como prisionero. Por eso plantean la cuestión que les parece insoluble. <em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"Dinos, por tanto, qué te parece: ¿es lícito dar tributo al César, o no?"</em>. El tema aparente es sólo el del impuesto, pero detrás lleva mucha más carga. Si responde que no se pague tributo al Cesar se hace reo de rebelión y puede ser tomado preso por los herodianos o los romanos. Si dice que se pague el tributo se hace colaboracionista, y acepta el yugo gentil sobre el pueblo elegido, algo intolerable para muchos. No parece haber más salidas. El nivel más profundo del tema es el de la relación de lo religioso y lo político. ¿Tiene que regirse el pueblo por las leyes de Dios y ser gobernando por los sacerdotes? ¿O acaso debe tomar la dirección de lo religioso el poder político? En la historia se han dado las dos soluciones con malos frutos casi siempre. Ciertamente la cuestión es compleja.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Jesús no rehuye el problema del momento, ni el más profundo, y va a dar una solución que recorrerá la historia a partir de entonces. <em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"Conociendo Jesús su malicia, respondió: ¿Por qué me tentáis, hipócritas? Enseñadme la moneda del tributo. Y ellos le mostraron un denario. Jesús les preguntó: ¿De quién es esta imagen y esta inscripción? Le respondieron: Del César. Entonces les dijo: Dad, pues, al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios"</em>(Mt). La solución sorprende a todos. Toda autoridad viene de Dios, pues la sociedad necesita de la autoridad para no caer en el caos y en la anarquía. Se debe obedecer a esa autoridad en sus mandatos justos y en las leyes que no sean inmorales; pero lo político es autónomo de lo religioso. Por tanto es lícito pagarle el tributo al César que lo necesita para su función, pero siempre dando a Dios todo el corazón que es lo suyo propio. <em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"Al oírlo se quedaron admirados y dejándole se marcharon"(Mt</em>). <em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"Y no pudieron acusarle por sus palabras ante el pueblo y, admirados de su respuesta se callaron"</em>(Lc). Los siglos siguientes contemplan esta respuesta como un giro importante en una cuestión difícil, y casi nunca bien resuelta.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">El primer mandamiento de la ley</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />En el movimiento de los grupos surge una pregunta de uno que ha quedado cautivado por las palabras del Señor. <em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"Se acercó uno de los escribas, que había oído la discusión y, al ver lo bien que les había respondido, le preguntó: ¿Cuál es el primero de todos los mandamientos?"</em>(Mc). Muchos eran los preceptos que se atribuían a la Ley. Unidos los de la sagrada Escritura y los de las diversas tradiciones rabínicas eran más de seiscientos. Su cumplimiento parecía imposible para los hombres de buena voluntad. Por otra parte parecía difícil, si no imposible, ordenarlos según su importancia. La luz de las palabras de Jesús ante las cuestiones anteriores ilumina el alma del escriba de buena voluntad, y sin consultarlo con otros, se lanza a preguntar con auténtico deseo de saber, no para atacar al Señor con astucias.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Jesús respondió con palabras conocidas por todos los israelitas, con palabras del <em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">“shemá Israel”</em> que recitaban todos los días tres veces.</span></span></p><p style="box-sizing: border-box; direction: ltr; font-size: 16px; line-height: 1.3; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 14px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;"><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">Jesús descubre el pecado de los fariseos y los escribas</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />El ambiente es tenso y expectante. Jesús vive con intensidad el momento. Quiere dejar algo muy importante a los que le escuchan. No se trata sólo de sus discusiones con los escribas, los fariseos y los saduceos. Se trata de denunciar la raíz del pecado en los corazones de los hombres. Sólo cuando se descubre el rostro de la soberbia, se puede vencer y vivir la vida de amor tantas veces anunciada, pero siempre lejana. Por eso Jesús manda que se reúnan los más posibles, también sus enemigos. Cuando, de pronto, Jesús eleva la voz para ser oído por todos, y con fuerza expresa de modo fuerte verdades que pueden doler, pero que pueden curar. Va denunciar el pecado interno de los escribas y de los fariseos que es actuar <em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"para ser vistos"</em>, no guiados por el amor. La soberbia espiritual lleva al engreimiento ante la propia perfección y su primer fruto es hacer las cosas para ser alabados por los hombres. La gloria y el amor de Dios se desdibujan, la humildad se hace imposible y, en una pendiente difícil de controlar, se deslizan una serie de abusos cada vez más notorios. No denuncia Jesús la doctrina de los escribas y fariseos pues dice "haced lo que dicen" sino las motivaciones de sus corazones. Sus palabras, sus gritos más bien, van a resonar en el templo como latigazos que intentan convertir a los duros de corazón. La cólera de Dios se hace manifiesta como en el Sinaí.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">El ataque inicial es contra los escribas</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"Guardaos de los escribas, que les gusta pasear con vestidos lujosos y que los saluden en las plazas, y ocupar los primeros asientos en las sinagogas y los primeros puestos en los banquetes; que devoran las casas de las viudas mientras fingen largas oraciones. Estos recibirán un juicio más severo"</em>(Mc).<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Después reúne en su crítica a fariseos y escribas; es decir, a los que presumen de cumplir la ley, tanto si son doctos como si no lo son. <em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"En la cátedra de Moisés se han sentado los escribas y fariseos. Haced y cumplid todo cuanto os digan; pero no hagáis según sus obras, pues dicen pero no hacen. Atan cargas pesadas e insoportables y las ponen sobre los hombros de los demás, pero ellos ni con un dedo quieren moverlas. Hacen todas sus obras para ser vistos por los hombres; ensanchan sus filacterias y alargan sus franjas. Apetecen los primeros puestos en los banquetes, los primeros asientos en las sinagogas y los saludos en las plazas, y que la gente les llame Rabí. Vosotros, al contrario, no os hagáis llamar Rabí, porque sólo uno es vuestro Maestro y todos vosotros sois hermanos. A nadie llaméis padre vuestro sobre la tierra, porque sólo uno es vuestro Padre, el celestial. Tampoco os hagáis llamar doctores, porque vuestro Doctor es uno sólo: Cristo. El mayor entre vosotros sea vuestro servidor. El que se ensalce a sí mismo será humillado, y el que se humille a sí mismo será ensalzado"</em>(Mt)<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />No niega la autoridad de unos y de otros; desvela el fondo de sus intenciones que se manifiesta en vanidades que alcanzan el ridículo. El amor verdadero es humilde, y busca servir más que servirse. La humildad no tiene fuerzas para decir que es humilde, pues sería orgullo espiritual, pero se advierte en que sirve a todos; entonces Dios da gloria en lo más íntimo del alma y cuando conviene en lo exterior, pues ya nada puede hacer daño al que nada busca en las vanidades humanas.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">Invectivas contra los escribas y fariseos</strong><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Hasta este momento el Señor se ha dirigido a discípulos suyos para que corrijan la soberbia que corrompe hasta lo religioso si entra en el alma. Los escribas y fariseos se agitan molestos. No aceptan la corrección. Murmuran. Jesús los mira con indignación; sus ojos llamean, el tono de su voz se eleva, golpea aquellas almas para que se les abran los ojos. El látigo de su lengua se agita en el aire, golpea las conciencias, y surgen otros siete ayes parecidos a los que en un pequeño grupo ya había dicho Jesús. Pero ahora la denuncia va a ser dicha en público y en el Templo de Dios. La justicia se hace voz que denuncia.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas, que cerráis el Reino de los Cielos a los hombres! Porque ni vosotros entráis, ni dejáis entrar a los que entrarían"</em>(Mt)<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />La palabra hipócritas llena el ambiente. Hombres de dos caras y de sentimientos retorcidos. Y ataca la actitud de cerrar el reino de los cielos a los humildes. Ni entran, ni dejan entrar. Han perdido la llave de la salvación al perder el sentido del amor que todo lo ilumina. Los cumplimientos externos no bastan si falta esa actitud del corazón, de la voluntad y de la mente.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas!, que vais dando vueltas por mar y tierra para hacer un solo prosélito y, una vez convertido, le hacéis hijo del infierno dos veces más que vosotros"</em>(Mt).<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />El proselitismo para acercar almas a Dios es bueno, y se debe vivir con celo. Pero una vez dentro ¿que se les da? lo mismo que ellos viven. Su celo es movido por falta de rectitud de intención y los que entran se encuentran con desorientación y con pecado. De poco valió el proselitismo.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"Ay de vosotros, guías de ciegos!, que decís: El jurar por el Templo no es nada; pero si uno jura por el oro del Templo, queda obligado. ¡Necios y ciegos! ¿Qué es más: el oro o el Templo que santifica al oro? Y el jurar por el altar no es nada; pero si uno jura por la ofrenda que está sobre él, queda obligado. ¡Ciegos! ¿Qué es más: la ofrenda o el altar que santifica la ofrenda? Por tanto, quien ha jurado por el altar, jura por él y por todo lo que hay sobre él. Y quien ha jurado por el Templo, jura por él y por Aquel que en él habita. Y quien ha jurado por el Cielo, jura por el trono de Dios y por Aquel que en él está sentado"(Mt).</em><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Pervierten el sentido de lo sagrado. Usan a Dios y abusan de su santo nombre. Por eso son ciegos que no ven que la santidad del juramento la da Dios mismo con su grandeza y poder.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas!, que pagáis el diezmo de la menta, del eneldo y del comino, pero habéis abandonado lo más importante de la Ley: la justicia, la misericordia y la fidelidad. estas últimas había que hacer, sin omitir aquéllas. ¡Guías de ciegos!, que coláis un mosquito y os tragáis un camello"</em>(Mt).<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Cuidan cosas pequeñas e insignificantes, y descuidan las grandes. Bueno es cuidar lo mínimo, pero a condición de que lo grande sea tratado con esmero y delicadeza. Esa es la verdadera piedad.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas!, que limpiáis por fuera la copa y el plato, mientras por dentro quedan llenos de carroña e inmundicia. Fariseo ciego, limpia primero el interior de la copa, para que luego llegue a estar limpio también el exterior"</em>(Mt).<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Las apariencias pueden llevara pensar en que son santos y perfectos. Pero a Dios nadie le puede engañar. Los malos deseos y los pensamientos desbordados es lo que deben cuidar, después vendrá lo exterior como fruto que nace de buena raíz.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas!, que sois semejantes a sepulcros blanqueados, que por fuera aparecen hermosos, pero por dentro están llenos de huesos de muertos y de toda podredumbre. Así también vosotros por fuera aparecéis justos ante los hombres, pero por dentro estáis llenos de hipocresía e indignidad"</em>(Mt).<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />La imagen del sepulcro blanqueado ha cristalizado como señal de la hipocresía, la verdad y la sinceridad ante Dios puede llevar a superar esa corrupción.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas!, que edificáis los sepulcros de los profetas y adornáis las tumbas de los justos, y decís: Si hubiéramos vivido en los días de nuestros padres, no habríamos sido sus cómplices en la sangre de los profetas. Así, pues, atestiguáis contra vosotros mismos que sois hijos de los que mataron a los profetas. Y vosotros, colmad la medida de vuestros padres"</em>(Mt).<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />Esta es la denuncia fundamental. Jesús revela lo que en aquellos momentos está en sus corazones: el odio hasta la muerte contra toda justicia. Quieren matar al inocente, porque no aman a Dios. Son hijos de Caín que odia al inocente Abel porque sus obras eran malas y la vida del justo es un reproche inocente. Jesús advierte su irritación, pero no cede.<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><em style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;">"¡Serpientes, raza de víboras! ¿Cómo podréis escapar de la condenación del infierno? Por eso he aquí que voy a enviar a vuestros profetas, sabios y escribas; a unos mataréis y crucificaréis, y a otros los flagelaréis en vuestras sinagogas y perseguiréis de ciudad en ciudad, para que caiga sobre vosotros toda sangre inocente que ha sido derramada sobre la tierra, desde la sangre del justo Abel hasta la sangre de Zacarías, hijo de Baraquías, al que matasteis entre el Templo y el altar. En verdad os digo: todo esto caerá sobre esta generación"</em>(Mt).<br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" /><br style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;" />El enfrentamiento cada vez es más total. Jesús quiere enderezar a aquellos hombres de su conducta desviada con la fuerza del profeta. Pero lo que consigue es que su odio llegue al máximo y pongan todos los medios para matarle.</span></span></p><p style="box-sizing: border-box; direction: ltr; font-size: 16px; line-height: 1.3; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 14px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;"><strong style="box-sizing: border-box; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; color: firebrick; margin: 0px; padding: 0px;">Te recomendamos: </span><a href="http://es.catholic.net/op/articulos/12394/especial-de-semana-santa-2019.html#modal" style="box-sizing: border-box; color: #376d9b; font-family: Roboto, Arial, sans-serif; font-size: 16px; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px; text-decoration-line: none;" target="_blank">Especial de Semana Santa</a></strong></span></span></p><p style="box-sizing: border-box; direction: ltr; font-size: 16px; line-height: 1.3; margin: 0px 0px 17px; padding: 0px;"><span style="box-sizing: border-box; font-size: 14px; margin: 0px; padding: 0px;"><span face="arial, helvetica, sans-serif" style="box-sizing: border-box; margin: 0px; padding: 0px;">Fuente: <a href="https://es.catholic.net/op/articulos/17753/cat/709/el-martes-santo.html#modal" target="_blank">Catholic.net</a></span></span></p></div></div>Del Rosariohttp://www.blogger.com/profile/09244946965622220218noreply@blogger.com0