martes, 3 de diciembre de 2019

Hoy se inicia la novena a la Virgen de Guadalupe

Hoy se inicia la novena a la Virgen de Guadalupe
El 12 de diciembre la Iglesia celebra la Fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe, Emperatriz de América y Patrona de México, que dejó su imagen desde ese día en una sencilla “tilma” como señal del Amor de Dios para creyentes y no creyentes.
Cercanos a esta gran solemnidad mariana les dejamos una Novena para pedir la intercesión de la Virgen María ante Dios.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Acto de Contrición
"Señor mío, Jesucristo, Dios y Hombre verdadero, creador y redentor mío, por ser vos quien sois, y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón haberos ofendido. Propongo enmendarme y confesarme a su tiempo y ofrezco cuanto hiciere en satisfacción de mis pecados, y confío por vuestra bondad y misericordia infinita, que me perdonaréis y me daréis gracia para nunca más pecar. Así lo espero por intercesión de mi Madre, nuestra Señora la Virgen de Guadalupe. Amén".
Primer Día
"¡Oh Santísima Señora de Guadalupe! Esa corona con que ciñes tus sagradas sienes publica que eres Reina del Universo. Lo eres, Señora, pues como Hija, como Madre y como Esposa del Altísimo tienes absoluto poder y justísimo derecho sobre todas las criaturas.
Siendo esto así, yo también soy tuyo; también pertenezco a ti por mil títulos; pero no me contento con ser tuyo por tan alta jurisdicción que tienes sobre todos; quiero ser tuyo por otro título más, esto es, por elección de mi voluntad.
Ved que, aquí postrado delante del trono de tu Majestad, te elijo por mi Reina y mi Señora, y con este motivo quiero doblar el señorío y dominio que tienes sobre mí; quiero depender de ti y quiero que los designios que tiene de mí la Providencia divina, pasen por tus manos.
Dispón de mí como te agrade; los sucesos y lances de mi vida quiero que todos corran por tu cuenta. Confío en tu benignidad, que todos se enderezarán al bien de mi alma y honra y gloria de aquel Señor que tanto complace al mundo. Amén.
Se dicen las intenciones de la novena y se reza un Padrenuestro, un Ave María y un Gloria.
Oración de San Juan Pablo II a la Virgen de Guadalupe
¡Oh Virgen Inmaculada, Madre del verdadero Dios y Madre de la Iglesia! Tú, que desde este lugar manifiestas tu clemencia y tu compasión a todos los que solicitan tu amparo; escucha la oración que con filial confianza te dirigimos, y preséntala ante tu Hijo Jesús, único Redentor nuestro.

Madre de misericordia, Maestra del sacrificio escondido y silencioso, a ti, que sales al encuentro de nosotros, los pecadores, te consagramos en este día todo nuestro ser y todo nuestro amor. Te consagramos también nuestra vida, nuestros trabajos, nuestras alegrías, nuestras enfermedades y nuestros dolores. Da la paz, la justicia y la prosperidad a nuestros pueblos; ya que todo lo que tenemos y somos lo ponernos bajo tu cuidado, Señora y Madre nuestra. 

Queremos ser totalmente tuyos y recorrer contigo el camino de una plena fidelidad a Jesucristo en su Iglesia: no nos sueltes de tu mano amorosa.

Virgen de Guadalupe, Madre de las Américas, te pedimos por todos los obispos, para que conduzcan a los fieles por senderos de intensa vida cristiana, de amor y de humilde servicio a Dios y a las almas.

Contempla esta inmensa mies, e intercede para que el Señor infunda hambre de santidad en todo el Pueblo de Dios, y otorgue abundantes vocaciones de sacerdotes y religiosos, fuertes en la fe y celosos dispensadores de los misterios de Dios.

Concede a nuestros hogares la gracia de amar y de respetar la vida que comienza, con el mismo amor con el que concebiste en tu seno la vida del Hijo de Dios.

Virgen Santa María, Madre del Amor Hermoso, protege a nuestras familias, para que estén siempre muy unidas, y bendice la educación de nuestros hijos.

Esperanza nuestra, míranos con compasión, enséñanos a ir continuamente a Jesús y, si caemos, ayúdanos a levantarnos, a volver a Él, mediante la confesión de nuestras culpas y pecados en el sacramento de la penitencia, que trae sosiego al alma.

Te suplicamos que nos concedas un amor muy grande a todos los santos sacramentos que son como las huellas que tu Hijo nos dejó en la tierra.

Así, Madre Santísima, con la paz de Dios en la conciencia, con nuestros corazones libres de mal y de odios, podremos llevar a todos la verdadera alegría y la verdadera paz, que vienen de tu Hijo, nuestro Señor Jesucristo, que con Dios Padre y con el Espíritu Santo, vive y reina por los siglos de los siglos. 

Amén.

Fuente: Aciprensa

miércoles, 27 de noviembre de 2019

Hoy es la fiesta de Nuestra Madre de todas las Gracias ¡La Milagrosa!


"Haz que se acuñe una medalla según este modelo. Todos cuantos la lleven puesta recibirán grandes gracias. Las gracias serán más abundantes para los que la lleven con confianza", dijo la Virgen María a Santa Catalina Labouré un 27 de noviembre de 1830.
En la aparición, la Madre de Dios estaba con una túnica blanca y un velo del mismo color que cubría su cabeza hasta los pies. Su rostro era bellísimo. Los pies se posaban sobre un globo blanco y aplastaban una serpiente.
Sus manos, a la altura del corazón, portaban un globo pequeño de oro, coronado con una crucecita. En los dedos aparecieron anillos con piedras preciosas que brillaban y alumbraban en toda dirección.

La Virgen miró a Santa Catalina y le dijo: “este globo que ves (a los pies) representa al mundo entero, especialmente Francia y a cada alma en particular. Estos rayos simbolizan las gracias que yo derramo sobre los que las piden. Las perlas que no emiten rayos son las gracias de las almas que no piden”.

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El globo de oro que tenía la Virgen entre manos se desvaneció y sus brazos se extendieron abiertos, mientras los rayos de luz continuaban cayendo sobre el globo blanco de los pies.
De pronto apareció una forma ovalada en torno a la Virgen con una inscripción en el borde interior que decía: "María sin pecado concebida, ruega por nosotros, que acudimos a ti". 
Las palabras formaban un semicírculo que iniciaba a la altura de la mano derecha, pasaba por arriba de la cabeza de María y terminaba a la altura de la mano izquierda. Es aquí donde la Virgen le pide a Catalina que acuñe una medalla según lo que está viendo.
 La aparición dio media vuelta y en el reverso estaba una “M” con la cruz sobre una barra, la cual atravesaba la letra. Debajo estaban el corazón de Jesús, circundado con una corona de espinas, y el corazón de la Virgen María, traspasado por una espada. Alrededor había doce estrellas.
La manifestación se repitió hacia fines de diciembre de 1830 y a principios de enero de 1831. En un principio la medalla era llamada “de la Inmaculada Concepción”, pero cuando se expandió la devoción y se produjeron muchos milagros, se le llamó “La Medalla Milagrosa”, como es conocida hasta nuestros días. 

Fuente: Aciprensa

Más información (Aciprensa):


jueves, 21 de noviembre de 2019

Presentación de la Virgen María en el Templo

Fiesta: 21 de noviembre


La Virgen es presentada en el Templo de Jerusalén por sus padres Joaquín y Ana. 

De la Liturgia de las Horas: En este día, en que se recuerda la dedicación, el año 543, de la iglesia de Santa María la Nueva, construida cerca del templo de Jerusalén, celebramos, junto con los cristianos de la Iglesia oriental, la "dedicación" que María hizo de sí misma a Dios, ya desde su infancia, movida por el Espíritu Santo, de cuya gracia estaba llena desde su concepción inmaculada.

Los orígenes de esta fiesta hay que buscarlos en una piadosa tradición que surge en el escrito apócrifo llamado el Protoevangelio de Santiago.

Según este documento la Virgen María fue llevada a la edad de tres años por sus padres San Joaquín y Santa Ana. Allí, junto a otras doncellas y piadosas mujeres, fue instruida cuidadosamente respecto la fe de sus padres y sobre los deberes para con Dios.

La memoria de la Presentación de la Santísima Virgen María, tiene una gran importancia, porque en ella se conmemora uno de los “misterios” de la vida de quien fue elegida por Dios como Madre de su Hijo y como Madre de la Iglesia.

En esta Presentación de María se alude también a la presentación de Cristo y de todos nosotros al Padre.

Históricamente, el origen de esta fiesta fue la dedicación de la Iglesia de Santa María la Nueva en Jerusalén , en el año 543.

Todo eso se viene conmemorando en Oriente desde el siglo VI, y hasta habla de ello el emperador Miguel Comeno en una Constitución de 1166.

Propagación de la Fiesta
Un gentil hombre francés, canciller en la corte del Rey de Chipre, habiendo sido enviado a Aviñón en 1372, en calidad de embajador ante el Papa Gregorio XI, le contó la magnificencia con que en Grecia celebraban esta fiesta el 21 de noviembre. El Papa entonces la introdujo en Aviñón, y Sixto V la impuso a toda la Iglesia.

María, según la promesa hecha por sus padres, fue llevada al templo a los tres años, en compañía de un gran número de niñas hebreas que llevaban antorchas encendidas, con la participación de las autoridades de Jerusalén y entre el canto de los ángeles.

Para subir al templo había quince gradas, que María caminó sola a pesar de ser tan pequeña.

María, sin saberlo, se preparaba para recibir a Dios
Los apócrifos dicen también que en el templo María se nutría con un alimento especial que le llevaban los ángeles, y que ella no vivía con las otras niñas sino en el “Sancta Sanctorum”, al cual tenía acceso el Sumo Sacerdote sólo una vez al año.

La realidad de la presentación de María debió ser mucho más modesta y al mismo tiempo más gloriosa.

Por medio de este servicio a Dios en el templo, María preparó su cuerpo, y sobre todo su alma, para recibir al Hijo de Dios, viviendo en sí misma la palabra de Cristo: “Bienaventurados más bien los que escuchan la palabra de Dios y la practican.

Virgen María, la eterna enamorada de Dios
María era una mujer enamorada de Dios. Era una mujer de oración, que tenía una conversación permanente y una comunión íntima con Dios.

Entendiendo y viviendo la vida de oración de María, lograremos vivir una vida de amor rendido al Plan supremo de Dios en nuestra vida

En esta fiesta de la Presentación de María, hagamos la elección de rendirnos al mismo Señor. Así es como podemos llevar esta fiesta a nuestra vida y continuar participando en el plan de Dios para todo el género humano.


Oración


Te rogamos, Señor, que a cuantos hoy honramos la gloriosa memoria de la santísima Virgen María, nos concedas, por su intercesión, participar, como ella, de la plenitud de tu gracia. Por nuestro Señor Jesucristo.


lunes, 11 de noviembre de 2019

Mensajes de la Santísima Virgen en Medjugorje del 25 de octubre y del 2 de noviembre de 2019 - Reflexiones del Padre Fancisco Verar

Mensaje de la Santísima Virgen del 25 de octubre de 2019 en Medjugorje

“Queridos hijos, hoy los invito a la oración. Que la oración sea un bálsamo para su alma, porque el fruto de la oración es la alegría, es dar, es testimoniar a Dios a los demás a través de sus vidas. Hijitos, al entregarse ustedes totalmente a Dios, Él se ocupará de todo y los bendecirá, y sus sacrificios tendrán sentido. Estoy con ustedes y los bendigo a todos con mi bendición maternal. Gracias por haber respondido a mi llamado.”





Mensaje de la Santísima Virgen del 2 de noviembre de 2019 en Medjugorje.


“Queridos hijos: mi Hijo amado siempre ha orado y glorificado al Padre Celestial. Siempre le ha dicho todo a Él y ha confiado en Su voluntad. Es lo que ustedes, hijos míos, también deberían hacer, porque el Padre Celestial siempre escucha a sus hijos. Un corazón en un corazón – amor, luz y vida. El Padre Celestial se ha donado mediante un rostro humano, y ese rostro es el rostro de mi Hijo. Ustedes, apóstoles de mi amor, siempre deberían llevar el rostro de mi Hijo en sus corazones y en sus pensamientos. Deberían siempre pensar en Su amor y en Su sacrificio. Deberían orar de manera que siempre sientan Su presencia, porque, apóstoles de mi amor, esa es la forma de ayudar a todos aquellos que no conocen a Mi Hijo, que no han conocido Su amor. Hijos míos, lean el Libro del Evangelio que siempre es algo nuevo. Es lo que los une a mi Hijo quien nació para llevar palabras de vida a todos mis hijos y para sacrificarse por todos. Apóstoles de mi amor, guiados por el amor a mi Hijo, lleven amor y paz a todos sus hermanos. No juzguen a nadie. Amen a cada uno mediante el amor de mi Hijo. De esta manera, estarán cuidando su alma: es lo más precioso que les pertenece verdaderamente. Les doy las gracias.”




domingo, 10 de noviembre de 2019

Mensaje de la Santísima Virgen del 2 de octubre de 2019 en Medjugorje

Mensaje de la Santísima Virgen del 2 de octubre de 2019 en Medjugorje.

“Queridos hijos: la voluntad y el amor del Padre Celestial hacen que yo esté aquí, en medio de ustedes, para ayudarlos con amor maternal al crecimiento de la fe en vuestro corazón, para que puedan comprender verdaderamente el propósito de la vida terrenal y la grandeza de la vida celestial. Hijos míos, la vida terrenal es el camino hacia la eternidad, hacia la verdad y la vida, hacia mi Hijo. Quiero llevarlos por ese camino. Ustedes, hijos míos, ustedes que siempre tienen sed de más amor, verdad y fe, sepan que solo existe una fuente de la cual pueden beber: la confianza en el Padre Celestial, la confianza en Su amor. Abandónense completamente a Su voluntad y no teman. Todo lo que sea mejor para ustedes, todo lo que los lleve a la vida eterna, les será dado. Comprenderán que el propósito de la vida no siempre es ansiar y tener, sino amar y dar. Tendrán verdadera paz y verdadero amor, serán apóstoles del amor; con su ejemplo harán que esos hijos míos que no conocen a mi Hijo y Su amor deseen conocerlo. Hijos míos, apóstoles de mi amor, adoren conmigo a mi Hijo y ámenlo por encima de todo. Procuren vivir siempre en Su verdad. Les doy las gracias.”

Fuente: rosasparalagospa.com

Mensaje de la Santísima Virgen en Medjugorje del 25 de septiembre de 2019 - Reflexión del Padre Francisco Verar

Mensaje de la Santísima Virgen del 25 de septiembre de 2019 en Medjugorje
“Queridos hijos, Hoy los invito a orar por mis intenciones a fin de que los pueda ayudar. Hijitos, recen el Rosario y mediten los misterios del Rosario, porque también ustedes en su vida atraviesan por alegrías y tristezas. De ese modo, convierten los misterios en su vida, porque la vida es un misterio hasta que no la ponen en las manos de Dios. Así tendrán la experiencia de la fe, como cuando Pedro encontró a Jesús, y el Espíritu Santo le llenó su corazón. También ustedes, hijitos, están llamados a testimoniar viviendo el amor con que Dios los envuelve día a día con mi presencia. Por eso, hijitos, sean abiertos y oren con el corazón en la fe. Gracias por haber respondido a mi llamado.”

sábado, 9 de noviembre de 2019

Mensajes de la Santísima Virgen del 25 de agosto y del 2 de septiembre de 2019 en Medjugorje

Mensaje de la Santísima Virgen del 25 de agosto de 2019 en Medjugorje. 

“Queridos hijos, oren, trabajen y testimonien con amor el Reino de los Cielos, para que puedan estar bien aquí en la tierra. Hijitos, Dios bendecirá el céntuplo su esfuerzo y serán testigos entre los pueblos, las almas de los no creyentes sentirán la gracia de la conversión y el cielo estará agradecido por sus esfuerzos y sacrificios. Hijitos, testimonien con el Rosario en la mano que son míos y decídanse por la santidad. Gracias por haber respondido a mi llamado.”

Mensaje de la Santísima Virgen del 2 de septiembre de 2019  en Medjugorje. 

“Queridos hijos: ¡Oren! Recen el Rosario cada día, esa corona de flores que me enlaza directamente, como Madre, con sus dolores, sufrimientos, deseos y esperanzas. Apóstoles de mi amor, estoy con ustedes por la gracia y el amor de mi Hijo, y les pido oraciones. El mundo tiene mucha necesidad de sus oraciones para que las almas se conviertan. Abran con total confianza sus corazones a mi Hijo, y Él escribirá en ellos un resumen de Su palabra: eso es el amor. Vivan un vínculo indisoluble con el Sagrado Corazón de Mi Hijo. Hijos míos, como Madre les digo que ya es hora de que se arrodillen ante mi Hijo, que lo reconozcan como su Dios, el centro de su vida. Ofrézcanle dones, lo que Él más ama es el amor al prójimo, la misericordia y un corazón puro. Apóstoles de mi amor, muchos de mis hijos aún no reconocen a mi Hijo como su Dios, aún no han conocido Su amor. Pero ustedes, con su oración pronunciada desde un corazón puro y abierto, con los dones que ofrecen a mi Hijo, harán que se abran incluso los corazones más endurecidos. Apóstoles de mi amor, el poder de la oración, pronunciada desde el corazón – la poderosa oración llena de amor –, cambia el mundo. Por eso, hijos míos, oren, oren, oren. Yo estoy con ustedes. Les doy las gracias.”

sábado, 2 de noviembre de 2019

2 de noviembre: día de los Fieles Difuntos



"Una flor sobre su tumba se marchita, una lágrima sobre 
su recuerdo se evapora. Una oración por su alma, la recibe Dios." 
                                        -San Agustín

"Cada uno se presentará ante el tribunal de Dios para 
darle cuenta de lo que ha hecho, de lo bueno y de lo malo." 
                                     - Santa Biblia


Las tres Iglesias: 

Se llama Iglesia a la asociación de los que creen en Jesucristo. La Iglesia se divide en tres grupos. Iglesia triunfante: los que ya se salvaron y están en el cielo (los que festejamos ayer). Iglesia militante: los que estamos en la tierra luchando por hacer el bien y evitar el mal. E Iglesia sufriente: los que están en el purgatorio purificándose de sus pecados, de las manchas que afean su alma.

El Catecismo de la Iglesia Católica, publicado por el Papa Juan Pablo II en 1992, es un texto de máxima autoridad para todos los católicos del mundo y dice cinco cosas acerca del Purgatorio:

1ª. Los que mueren en gracia y amistad de Dios pero no perfectamente purificados, sufren después de su muerte una purificación, para obtener la completa hermosura de su alma (1030).

2ª. La Iglesia llama Purgatorio a esa purificación, y ha hablado de ella en el Concilio de Florencia y en el Concilio de Trento. La Iglesia para hablar de que será como un fuego purificador, se basa en aquella frase de San Pablo que dice: "La obra de cada uno quedará al descubierto, el día en que pasen por fuego. Las obras que cada cual ha hecho se probarán en el fuego". (1Cor. 3, 14).

3ª. La práctica de orar por los difuntos es sumamente antigua. El libro 2º. de los Macabeos en la S. Biblia dice: "Mandó Juan Macabeo ofrecer sacrificios por los muertos, para que quedaran libres de sus pecados" (2Mac. 12, 46).

4ª. La Iglesia desde los primeros siglos ha tenido la costumbre de orar por los difuntos (Cuenta San Agustín que su madre Santa Mónica lo único que les pidió al morir fue esto: "No se olviden de ofrecer oraciones por mi alma").

5ª. San Gregorio Magno afirma: "Si Jesucristo dijo que hay faltas que no serán perdonadas ni en este mundo ni en el otro, es señal de que hay faltas que sí son perdonadas en el otro mundo. Para que Dios perdone a los difuntos las faltas veniales que tenían sin perdonar en el momento de su muerte, para eso ofrecemos misas, oraciones y limosnas por su eterno descanso".

De San Gregorio se narran dos hechos interesantes. El primero, que él ofreció 30 misas por el alma de un difunto, y después el muerto se le apareció en sueños a darle las gracias porque por esas misas había logrado salir del purgatorio. Y el segundo, que un día estando celebrando la Misa, elevó San Gregorio la Santa Hostia y se quedó con ella en lo alto por mucho tiempo. Sus ayudantes le preguntaron después por qué se había quedado tanto tiempo con la hostia elevada en sus manos, y les respondió: "Es que vi que mientras ofrecía la Santa Hostia a Dios, descansaban las benditas almas del purgatorio". Desde tiempos de San Gregorio (año 600) se ha popularizado mucho en la Iglesia Católica la costumbre de ofrecer misas por el descanso de las benditas almas.

La respuesta de San Agustín: a este gran Santo le preguntó uno: "¿Cuánto rezarán por mí cuando yo me haya muerto?", y él le respondió: "Eso depende de cuánto rezas tú por los difuntos. Porque el evangelio dice que la medida que cada uno emplea para dar a los demás, esa medida se empleará para darle a él".

¿Vamos a rezar más por los difuntos? ¿Vamos a ofrecer por ellos misas, comuniones, ayudas a los pobres y otras buenas obras? Los muertos nunca jamás vienen a espantar a nadie, pero sí rezan y obtienen favores a favor de los que rezan por ellos.

Fuente: www.ewtn.com


Indulgencia plenaria en el día de los muertos

Aplicable solamente en favor de las almas del purgatorio




El día 2 de noviembre, cuando la Iglesia conmemora el día de los muertos, los fieles católicos que visiten piadosamente una iglesia o un oratorio podrán solicitar indulgencia plenaria para las almas del purgatorio.


La indulgencia podrá ser obtenida el propio día de los muertos o con el consentimiento de un obispo, en el domingo anterior o posterior, o en la solemnidad de Todos los Santos. Esta indulgencia está incluida en la Constitución apostólica Indulgencia doctrina, en la norma número 15.


Para obtener cualquier indulgencia plenaria son necesarios algunos requisitos: rezar un Padre Nuestro, un credo, un ave maría y un gloria por las intenciones del Santo Padre. Además de estas oraciones por el Sumo Pontífice, debe ser hecha una confesión sacramental y una comunión eucarística.



Con una sola confesión sacramental se pueden ganar muchas indulgencias plenarias; en cambio, con una sola comunión eucarística y con una sola oración por las intenciones del Sumo Pontífice solamente se puede ganar una indulgencia plenaria.



Las tres condiciones pueden cumplirse algunos días antes o después de la ejecución de la obra prescrita; sin embargo, es conveniente que la comunión y la oración por las intenciones del Sumo Pontífice se realicen el mismo día en que se haga la obra.

Cada fiel puede rezar otra oración, según su devoción y piedad por el Romano Pontífice.





Enlaces relacionados: 

Coronilla de las Benditas Almas

 El juicio de Dios particular

La Mansión Eterna

Medios para sacar almas del Purgatorio

Las benditas almas del Purgatorio

viernes, 1 de noviembre de 2019

Solemnidad de Todos los Santos, la fiesta del cielo.


El día de Todos los Santos es una Solemnidad en la que la Iglesia celebra juntos la gloria y el honor de todos los Santos, que contemplan eternamente el rostro de Dios y se regocijan plenamente en esta visión. A nosotros, fieles, este día nos enseña a mirar a aquellos que ya poseen el legado de la gloria eterna.

Roberta Barbi – Ciudad del Vaticano

Algunos la llaman también "Pascua de Otoño", la importante solemnidad que hoy celebramos como miembros activos de una Iglesia que una vez más no se mira a sí misma, sino que mira y aspira el cielo. La santidad, en efecto, es un camino que todos estamos llamados a seguir, siguiendo el ejemplo de nuestros hermanos mayores que nos son propuestos como modelos porque han aceptado dejarse encontrar por Jesús, hacia quien han ido con confianza trayendo sus deseos, sus debilidades y también sus sufrimientos.

El significado de la solemnidad

La memoria litúrgica dedica un día especial [NG1] a todos aquellos que están unidos a Cristo en la gloria y que no sólo son indicados como arquetipos, sino también invocados como protectores de nuestras acciones. Los Santos son los hijos de Dios que han alcanzado la meta de la salvación y que viven en la eternidad esa condición de bienaventuranza bien expresada por Jesús en el discurso de la montaña narrado en el Evangelio (Mt 5, 1-12). Los Santos son también los que nos acompañan en el camino de la imitación de Jesús, que nos conduce a ser la piedra angular en la construcción del Reino de Dios.

La Comunión de los santos

En nuestra Profesión de Fe afirmamos que creemos en la Comunión de los Santos: con esto queremos decir tanto la vida como la contemplación eterna de Dios, que es la razón y el propósito de esta comunión, pero también queremos decir la comunión con las "cosas" santas. Si, en efecto, los bienes terrenales, en cuanto son limitados, dividen a las personas en el espacio y en el tiempo, las gracias, los dones que Dios hace son infinitos [NG2] y de ellos todos pueden participar. Especialmente el don de la Eucaristía nos permite vivir ya ahora la anticipación de esa liturgia que el Señor celebra en el santuario celestial con todos los santos. La grandeza de la redención se mide por el fruto, es decir, por los que han sido redimidos y han madurado en la santidad. La Iglesia contempla en sus rostros su vocación, la condición de humanidad transfigurada en el camino hacia el Reino.

Orígenes e historia de la fiesta

Esta fiesta de la esperanza, que nos recuerda el objetivo de nuestra vida, tiene raíces antiguas: en el siglo IV comienza a celebrarse la conmemoración de los mártires, común a varias Iglesias. Los primeros vestigios de esta celebración se encontraron en Antioquía el domingo siguiente a Pentecostés y San Juan Crisóstomo ya hablaba de ello. Entre los siglos VIII y IX, la fiesta comenzó a extenderse por toda Europa, y en Roma específicamente en el siglo IX: aquí el Papa Gregorio III (731-741) eligió como fecha del 1 de noviembre para coincidir con la consagración de una capilla en San Pedro dedicada a las reliquias "de los santos apóstoles y de todos los santos mártires y confesores, y de todos los justos perfeccionados que descansan en paz en todo el mundo". En la época de Carlomagno, esta fiesta ya era ampliamente conocida como la ocasión en que la Iglesia, que todavía peregrina y sufre en la Tierra, miraba al cielo, donde residen sus hermanos y hermanas más gloriosos.

Fuente: Vaticanews.va

miércoles, 30 de octubre de 2019

Halloween: una cultura de muerte



EXALTACIÓN DE UNA «CULTURA DE LA MUERTE»

«Halloween es el truco del diablo»

«Quienes piensan que el fenómeno se trata únicamente de aspectos divertidos y de moda, de máscaras y tiempo libre, deberían saber que detrás de este pseudo-carnaval, se esconde el mundo oscuro del ocultismo y del satanismo».



(Portaluz) Halloween es para muchos un gran negocio y no sólo de dinero. Millones de dólares que genera una estudiada publicidad para explotar emociones y sensibilidades de niños o adultos, quienes consumen productos vinculados a la fecha, movilizando a que otros participen de una festividad cuya identidad real fue y es hasta nuestros días un signo de la liturgia satánica.
El exorcista italiano, padre Aldo Buonaiuto, sacerdote coordinador del servicio anti-sectas de la Comunidad Papa Juan XXIII fundada por Don Oreste Benzi, advierte a los católicos que Halloween no es una inocua festividad, sino «El truco del diablo»… frase que utiliza también como título de su último libro (ediciones Siempre Comunicaciones). Desde el portal italiano Interris que dirige, padre Aldo nos da los argumentos de esa afirmación.

Padre Aldo ¿por qué un sacerdote escribe acerca de Halloween?

Es un libro para informar, educar y prevenir los peligros, un apoyo para padres, educadores, catequistas y sacerdotes, así como para los chicos, de manera que exista conciencia sobre los significados de los símbolos satánicos y del ocultismo en este carnaval del horror; que no deben ser trivializados. Quienes piensan que el fenómeno se trata únicamente de aspectos divertidos y de moda, de máscaras y tiempo libre, deberían saber que detrás de este pseudo-carnaval, se esconde el mundo oscuro del ocultismo y del satanismo. Se trata de una celebración mágica-esotérica y es una oportunidad que utilizan las sectas para atraer a sus víctimas.

¿Cuáles son los significados ocultos?

La expresión tradicional: ‘Dulce o Truco’ esconde algo mucho más serio y preocupante de lo que se ve en las apariencias. El trick or treat deriva del antiguo culto pagano de los druidas, quienes ante el altar pedían ‘Maldición o Sacrificio’. Era la obligación de ofrecer regalos a los sacerdotes del dios de la muerte, para evitar las venganzas del más allá, enseñaban. Hoy, a través de esta conocida moda festiva, se difunde el placer por el horror como normal, la seducción de lo macabro, la atracción por la muerte más que por la vida. Se está profanando el significado de la muerte. Como escribí en el libro, el truco del diablo es un dulce mortal para el alma. En Halloween, los jóvenes (figurativamente) inician el adorar a monstruos que gotean sangre, muertos que vagan en la tierra sin paz, y cometen sacrilegios en forma de juego. Mientras que los siervos del príncipe del mal, realizan crímenes terribles como homicidios -incluso de recién nacidos-, violencias físicas y morales. Los cristianos no pueden ser cómplices, ni siquiera indirectos, de esta operación comercial de rasgos neo-paganos y anticristianos.

También es un asunto comercial…

Ciertamente está el aspecto del negocio. Una operación perfectamente llevada al éxito, gracias a la publicidad y los medios de comunicación serviles a intereses de las multinacionales, que se doblegan a difundir para vender productos. Gracias a Internet y la globalización, se ha convertido en uno de los eventos de masa más seguidos, sobre todo por los jóvenes. En Europa, los ingresos de la «Noche de brujas» superan los 400 millones de Euro. Pero no es este el aspecto principal. Para los satanistas Halloween es como celebrar el cumpleaños al príncipe del mal. (Por ello) practican ritos tenebrosos y cometen delitos. Pero incluso si esto no se llevara a cabo, y de hecho, prevaleciera el interés económico, sería de todas formas pretender la victoria de las riquezas sobre Dios. Es un fenómeno dañino en el plano social, antropológico y cultural: una propuesta de valores negativos, vinculados a una visión materialista y utilitarista de la vida y el placer. Además profana la fiesta cristiana del culto a los Santos, que celebra la devoción de hombres y mujeres que han tratado de imitar el ejemplo perfecto de Jesús en el amor al prójimo y el respeto a los mandamientos divinos.

¿Qué valores de la tradición cristiana se intenta opacar?

Para muchos, el Halloween significa ventanas decoradas alegremente, máscaras y monstruos humanos. Pero es algo mucho más peligroso que un simple evento folclórico. Es un fenómeno anti-cristiano, que oscurece nuestra tradición litúrgica. Exalta una «cultura de la muerte», muestra del horror y lo macabro. Rostros deformados, ensangrentados, toman el lugar de las caras resplandeciente de los santos. Los Zombies, muertos que deambulan sin paz, atrapados entre dos mundos, el de los vivos y de los muertos, sustituye a los queridos familiares y amigos, personas verdaderas, que nos han precedido en el más allá y esperan la Resurrección. Hago un llamado por lo tanto, a los catequistas, a los sacerdotes, a los maestros de religión: ¡debemos comprometernos a celebrar adecuadamente a nuestros Santos! Hagamos conocer a los chicos el hermoso rostro de los héroes de Dios.

¿Cómo celebrar dignamente el primero y el segundo de noviembre, entonces?

En la alegría de la liturgia cristiana, con ceremonias de preparación a la fiesta de Todos los Santos… rezar juntos como una familia, rezar el rosario, participar en la Santa Misa, redescubrir las vidas ejemplares de los Santos y el amor triunfante de Dios; experimentando activamente la celebración eucarística y visitando a los seres queridos en el cementerio. ¿Qué evento mejor que el leer juntos y meditar la vida de los Santos, contemplando el rostro resplandeciente de Jesús? En vez de las caras monstruosas de esqueletos, zombies, almas condenadas que no exorcizan la muerte sino que la exaltan mediante el patrocinio del dolor, el sufrimiento, la ansiedad, la violencia, la muerte. No necesitamos máscaras feas y horribles, sino testigos del Amor de Dios, de la belleza, de la Verdad.

Fuente: Infocatólica